jueves, 16 de octubre de 2014

El cuarto protocolo


Puede ser la tercera o cuarta vez que veo esta película contextualizada en la Guerra fría. Igualmente he leído la novela en un par de ocasiones. Y , en este caso, debe reconocer que las novela es más, - mucho más- , interesante que el libro. Y hablamos de una buena, bueno, más bien, correcta película la dirigida por John Mackenzie e interpretada por Michael Caine y Pierce Brosnan. 
El cuarto protocolo se basa la novela homónima escrita por Frederick Forsyth y publicado en agosto de 1984, en los estertores casi de la guerra fría. El título se refiere al Tratado de No Proliferación Nuclear del año 1968 , que – según la novela- contenía cuatro protocolos secretos. El cuarto artículo de dicho Tratado era la prohibición de diseñar armas nucleares no convencionales que pudieran ser lanzados por un medio distinto al tradicional (lanzada desde un avión o en una lanzadera de misiles balísticos. 
La novela, como gran parte de lo escrito por Frederick Forsyth fue un éxito, que – ciertamente- no alcanzó los niveles de Chacal u Odessa, pero que se planteó ser llevado al cine tres años más tarde, en 1987. 
La película se centra en la labor de espionaje de los servicios secretos británicos y su intento por impedir la entrega postal o el montaje de un arma nuclear casera que está montado un espía soviético instalado en suelo británico. El propio Forsyth escribió el guión y participó en la película como productor y ayudante en la dirección colaborando por tanto con John Mackenzie. Además de Frederick Forsyth en la producción se encontró en la misma Timothy Burrill por parte de la Lorimar Motion Pictures empleando en ella 7 millones de libras esterlinas. La propia Lorimar distribuyó su producto obteniendo unos beneficios de cerca de 12 millones y medio de dólares. 
En el apartado técnico señalar que la música recayó en Lalo Schifrin, mientras que la fotografía fue de Phil Meheux y el montaje de Graham Walker. 
El reparto está encabezado por Michael Caine que asume el papel protagonista de John Preston, cuya misión principal es abortar la labor de Valeri Petrofsky / James Ross en este caso interpretado por Pierce Brosnan. Le acompañan en el film Ned Beatty como el camarada Borisov, Joanna Cassidy como la ingeniero y espía Irina Vassilievna, Julian Glover como el jefe del MI5 Brian Harcourt-Smith, acompañado de Michael Gough como Sir Bernard Hemmings. Otros actores con peso son Ray McAnally como el General Karpov, Ian Richardson como Sir Nigel Irvine, Anton Rodgers el pasante diplomático George Berenson, Caroline Blakiston, su mujer Angela Berenson, y , en papeles, mucho más secundarios los de Joseph Brady (Carmichael), Matt Frewer (Tom McWhirter), Alan North (Govershin), Ronald Pickup (Wynne-Evans) y Michael Bilton (Kim Philby). 



La película comienza explicando lo que es el cuarto protocolo y así nos informamos que en 1968 se estableció un acuerdo entre bloques, el Occidental y el del Este, para frenar la proliferación nuclear .Una de las cláusulas, el Cuarto Protocolo, prohíbe el suministro no convencional de un arma nuclear a un objetivo. Tras ello vemos como aparece en escena el gran desertor Kim Philby (Michael Bilton) que es llamado por agentes vinculados con el general Govorshin, cabeza de la KGB, persona que pone en marcha el Plan Aurora, un terrible complot que viola el Cuarto Protocolo y cuyo fin es destruir a la OTAN. 
Philby ha planeado la operación, y sabe demasiado. Antes de entrar en la reunión en una dacha perdida del campo Philby es asesinado por su alto grado de implicación. Casi de inmediato se nos informa de la existencia de un agente muy preparado de hoja de servicio impecables que ha sido designado para una misión en Occidente. Se trata del comandante Petrofsky, agente número uno del KGB. Tiene como misión introducirse en Inglaterra y montar pieza a pieza una devastadora bomba atómica que explotará junto a una base militar estadounidense de bombarderos. 

Mientras en Gran Bretaña conocemos como hay agentes que trabajan en el mismo día de fin de año. Entre ellos está John Preston (Michael Caine ) agente del MI5 que irrumpe en la residencia de George Berenson ( Anton Rodgers ), un funcionario de alto rango del gobierno británico en la víspera de Año Nuevo. 
Aprovechando las campañadas y el jolgorio posterior encuentra una serie de documentos secretos de la OTAN archivos que no deberían estar en la caja fuerte de Berenson. 
Tras desenmascarar a Berenson que estaba pasando información de la OTAN a la KGB, pensando que ayuda al sector occidental a través de un representante sudafricano, su posición en la agencia de espionaje británica se presenta con futuro. 

Preston es un agente del Gobierno inglés que no cae bien a sus jefes, que es viudo y tiene un hijo. Va al trabajo en metro. Es implacable con los abusos tal y como vemos en la escena de la chica negra indefensa frente a los hooligans. 
Él informa sus hallazgos al alto rango del servicio secreto británico, el oficial Sir Nigel Irvine ( Ian Richardson ), que se ocupa del caso. El acceso no autorizado de Preston a estos documentos restringidos avergüenza irrita al director del MI5, Brian Harcourt-Smith (Julian Glover) dado que Preston no tenía autorización. 

Como castigo por su insubordinación, Preston es relegado a la sección de "Aeropuertos y puertos". Mientras esto ocurre el el agente Valeri Petrofsky de la KGB ( Pierce Brosnan ) es enviado en una misión al Reino Unido por el general Govershin ( Alan North), el jefe de la KGB . Un subordinada de Govershin, y amigo personal del mismo, Borisov ( Ned Beatty ), se queja a su viejo amigo, el general Karpov ( Ray McAnally ), acerca de que su departamento de espionaje está siendo despojado de los más valiosos recursos y del personal más preparado, especialmente su agente estrella Petrofsky. 

A Karpov le sorprende desconocer todo esto y en silencio, investiga y se entera de que es una misión no autorizada de Petrofsky para violar el Cuarto Protocolo dado el montaje casi artesanal y la detonación de un artefacto atómico de manera que pudiera parecer más un accidente nuclear en una base militar norteamericana que un atentado. El objetivo del mismo está en tensar las relaciones británico-estadounidenses y fortalecer el movimiento anti-nuclear favoreciendo así la posición de la Unión Soviética a nivel internacional. 
La llegada de Petrofsky a suelo británico se produce sin problemas. Las piezas van llegando despacio, pero seguras. 
Sin embargo, en Glasgow , un marinero soviético es atropellado por un camión mientras huía de un guardia de puerto. Entre las posesiones del muerto, Preston se encuentra un disco de polonio , que sólo podría ser útil como un componente de un detonador de una bomba. 
Preston informa a Harcourt-Smith, pero Harcourt-Smith no le hace caso, y cree que es un invento de Preston para regresar al MI5. Por suerte Preston tiene la confianza de Sir Bernard Hemmings ( Michael Gough ), el director de MI5, que está de baja por padecer una grave enfermedad, así como Irvine, que está dispuesto a dejar de lado las directivas de Harcourt-Smith. Estos dos dan luz verde a Preston, quien se pone a trabajar y a vigilar la entrada de aeropuertos y puertos para saber si entra algún agente más. 
Finalmente la suerte se alía con ellos cuando un espía de poco rango es descubierto entrando a Gran Bretaña por un aeropuerto, haciéndose pasar por austriaco. Se trata del agente Winkler (Jiri Stanislav), un agente de la KGB Checa, un viejo conocido del MI5.
Mientras tanto, Petrofsky se encuentra con otra agente de la KGB, Irina Vassilievna ( Joanna Cassidy), una experto en bombas que se hace pasar por su esposa. 

Bajo su dirección, se reúnen el dispositivo de elementos aparentemente inofensivos-y ella lo deja en un retraso de dos horas dadas sus instrucciones. Sin el conocimiento de Petrofsky, Vassilievna sigue sus propias órdenes, restablecer el retardo a cero. Después de retozar fogosamente con Petrofsky, el encuentra su propio orden secreta. La misma es eliminarla a ella. Ella trata de advertirle acerca de la traición, pero él la mata antes de que ella pueda defenderse. 
Después, un motorizado Petrofsky se pone en contacto con Winkler. Preston lo sigue a Ipswich, pero lo pierde, entonces lo encuentra de nuevo. Preston finalmente se da cuenta de que el objetivo de Petrofsky es la base aérea de Baywaters, y localiza la casa de Petrofsky, que se encuentra justo al lado de la base. 

Cuando Petrofsky comienza a activar la bomba, en un impulso, comprueba el temporizador de la bomba y se da cuenta de que ha sido traicionado. En ese momento, un miembro de la fuerzas especiales del Ejército británico , el SAS, entra junto con otros en la casa. 
Después de una lucha, Preston somete y desactiva al camarada Valeri Alexeievich Petrofsky. Para indignación de Preston, un miembro del SAS ejecuta Petrofsky a sangre fría equipo, explicando después que tenía órdenes de hacerlo. 
En el funeral de Hemming, Preston se sorprende al encontrar a Irvine reunido en secreto con el general Karpov. Lo cierto es que Preston sospechaba al detectar la presencia del agente Winkler de la KGB, un espía quemado como un servicio de mensajería, por lo que era fácil que se le siguiera, y también cuando Petrofsky fue asesinado en lugar de ser capturados para ser interrogado. 
Preston supone que Karpov quiso desacreditar a Govershin, algo que le beneficiaría tanto a Irvine como al mismo Karpov. Preston no ve ningún punto objetivo ni leal en la actitud de ambos y se aleja tras expresar su desprecio por ser víctima de juego de poder tan cínico. En la última imagen vemos a Preston disfrutando de su hijo. 

La historia de la producción comienza cuando Michael Caine leyó el borrador del manuscrito de la novela, y sugirió a Forsythe que produjeran una película juntos. Ambos ejercen como productores ejecutivos. Contrataron para ello a George Axelrod para escribir un guión y a John Frankenheimer para dirigir, pero no fueron capaces de obtener financiación. Axelrod y Frankenheimer, finalmente, abandonaron el proyecto, cuando el mismo en manos de Forsythe y Timothy Burrill, con intervención de la Lorimar. 
Gran parte de la película fue filmada en el barrio Heelands o las habitaciones de Kings College de Londres, aunque algunas escenas se rodaron en Londres, en concreto las del metro de Londres se rodaron en Charing Cross , Green Park, y Aldwych. 

Las escenas de "RAF Baywaters" fueron filmadas en la ya desaparecida RAF Upper Heyford como la base de Bentwaters o la persecución de coches en Ipswich se realizó en Chelmsford. El rodaje, especialmente nevado, tuvo lugar en Finlandia, lugar donde comenzó el rodaje, lugar donde se desplazaron los equipos técnico y artístico en la primavera de 1986. Tras una semana de filmación en exteriores, todo el equipo regresó de nuevo a Inglaterra, donde proseguiría el trabajo en las citadas Londres, Milton Keynes, Essex y East Anglia. . 

La película tuvo cierto éxito en los ochenta, visible en su taquilla. El crítico de cine Jay de Scott del The Globe and Mail dijo que "la película es entretenida aunque muy rudimentaria en sus planteamientos”. Destaca el papel de Pierce Brosnan por su eficacia como asesino y el excelente rendimiento de Michael Caine. 
El resultado es una de las películas más interesantes sobre la guerra fría de los años ochenta que se han hecho sin lugar a dudas. A destaca la labor interpretativa de Brosnan como un duro y perverso agente, así como de Michael Caine y otros secundarios del nivel de Ian Richardson. Gracias a la historia y al planteamiento la película llega a ser un buen thriller de espías de la guerra fría, aunque este periodo haya envejecido muy mal. 

No obstante, debemos que técnicamente es muy buena desde el maquillaje hasta la cuidada música de Lalo Schifrin, o la fotografía de exteriores e interiores de Phil Meheux. que se recrea en ambientes con sus luces y claroscuros, de las nevadas o de los seguimientos desde una furgoneta, o los detalles de los planos centrados en la bañera con Joanna Cassidy o el detalle de montar esa bomba atómica, destacando la precisión de los planos, la puesta en escena de Mackenzie o la meticulosidad del guión con sus críticas hacia la jerarquía en unas zonas y en otras o a la falta absoluta de libertades, que dan opciones al chantaje , al confinamiento en los gulags o a la extorsión.

Por último señalar que leí no hace mucho la novela. Existen muchas diferencias entre la misma y la película. Entre las más significativas está el papel de Kim Philby que ha se mantiene con vida hasta el final y quién presenta un interesante informe sobre la posibilidad de desestabilizar la Gran Bretaña de Margaret Thacher por medido de una corriente radical dentro del laborismo. 
Igualmente destaca el papel limitado de Preston , ya que él no irrumpir en la casa de Berenson sino que es Jim Rawlings, un ladrón profesional, quien roba a la casa de Berenson y sin querer descubre los documentos robados, el envío de forma anónima al MI5 para que pudieran encontrar al traidor. Destaca sobre manera el complot político del libro para que el Partido Laborista pudiera ganar las elecciones generales y permitir una toma del poder por su ala izquierda. 
La película elimina una gran parte del libro en lo que respecta a la investigación de John Preston en busca del auténtico Marais en Sudáfrica o desubica otros espacios como el café griego es en Chesterfield, no Colchester, y la casa de Petrosfy que está en Ipswich o como la base aérea es la de "Bentwaters", y no la de "Baywaters" en la película. Igualmente no existe una chica guapa como ensambladora, sino un hombre. 
En definitiva, un buen filme ochentero de los que se llevaban en esta década y en la anterior con sus buenos toques de thriller y tensión bajo el temor de la temible amenaza nuclear que tanto pánico nos daba.

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