En 2011 una película francesa revitalizó el cine , no sólo en blanco y negro, sino la estética e incluso el modo de proceder cinematográfico que dominaba en el cine hasta el triunfo de la película The Jazz Singer (El cantante de jazz o El cantor de jazz) el primer largometraje comercial con sonido sincronizado. La obra dirigida por Alan Crosland y estrenada el 6 de octubre de 1927 no acabó con el cine mudo, pero marcó el inicio de su declive. La apuesta por el blanco y negro siguió, pero este tipo de cine basado en el gesto y en la intencionalidad fotográfica sí que fue poco a poco menguando casi hasta llegar a la nada. Sin embargo, en 2011 una película ‘The Artist‘ del director francés Michel Hazanavicius, recuperó este tipo de cine tanto en sus aspectos técnicos aunque menos en contenido.por lo previsible, la historia de la relación entre una vieja estrella del cine mudo y una exitosa actriz joven en ese tránsito que hay entre el cine mudo y el sonoro. La película fue multipremiada y elogiada por la crítica. Sin embargo, años antes un director Sin embargo, siete años antes un director bilbaino, de nombre Pablo Berger, había ido de productor en productora buscando a un valienteo "s", que se atrevieran a rodar un cuento de hadas que popularizó primero los hermanos Grimm y luego la producción animada de Walt Disney. A esto se unía , no sólo ya que quería que se rodara en banco y negro, sino que fuese muda y en el estilo anterior al de 1927. Demasiado reto para un país tan conservador como éste. ¿Cómo competir con esta historia que en 2012 ya había sido revitalizada tanto por Rupert Sander con su ‘Blancanieves y la leyenda del cazador‘ (Snow White and the huntsman), o T con Tarsem Singh con su ‘Blancanieves – Mirror Mirror -’ con la eternamente bella Julia Roberts.
Había que echarle valor a una propuesta así, un auténtico Miura, el "astado" cinematográfico de Berger, pero que Ibon Cormenzana, Jérôme Vidal y el mismo Pablo Berger por medio de sus productoras Arcadia Motion Pictures, Nix Films, Sisifo Films, Noodles Production y The Kraken Films lo hicieron. El resultado fue Blancanieves , la película española más laureada en los Goyas de 2012 dirigida por el mismo Pablo Berger que imitaba los modos de narrar del cine mudo, con fotografía en blanco y negro y la música como elemento conductor. Para elo había que contar con una dirección artística como la de Alain Bainée, un guión como el de Pablo, el peinado de Fermín Galán, la encargada del maquillaje Sylvie Imbert y unos grandes en la dirección de producción como Josep Amorós, en la ayudantía a la dirección como Carlos Gras, en la dirección de Cásting como Rosa Estévez y , por supuesto, en el reparto.
En el mismo destacan Macarena García como Carmen / Blancanieves, Maribel Verdú como Encarna / La Madrastra , Sofía Oria como Carmencita, Daniel Giménez Cacho como Antonio Villalta / El Padre, Ángela Molina como Doña Concha / La Abuela, Pere Ponce como Genaro / El Chófer, Josep María Pou como Don Carlos / El Apoderado de la chica, Inma Cuesta Carmen de Triana / La Madre, Ramón Barea como Don Martín, el apoderado de Antonio Villalta, Emilio Gavira como Jesusín, Sergio Donado como Rafita, Oriol Vila como el Joven arrogante y Asier Salinas como el Enano torero Gruñon.
/ La Madrastra
Macarena García...Carmen / Blancanieves
...Antonio Villalta / El Padre
Ángela Molina...
Sofía Oria...Carmencita
Pere Ponce...
/ El Apoderado
...Carmen de Triana / La Madre
La historia es un cuento triste que comienza con una serie de eventos fortuitos, la película comienza relatando el trágico accidente que sufre el torero Antonio Villalta (Daniel Giménez Cacho) en la plaza de toros de Sevilla, en La Colosal pues será corneado por "Lucifer", el sexto toro de la corrida del día, en el día de su retirada. Este accidente lo deja lisiado al mismo tiempo que su esposa, la cantante de copla Carmen de Triana (Inma Cuesta), que está en las gradas junto a su madre Doña Concha (Angela Molina) muere desangrada al dar a luz a su hija, la pequeña Carmen.
Mientras está convaleciente en el hospital es atendido por una ambiciosa enfermera Encarna (Maribel Verdú) que sante la noticia de que es millonario decide atenderlo con exclusividad y con los fines más espureos que existen.
Antonio Villalta, derrumbado por las tristes noticias, al llegar a casa da de lado a su hija, quien termina bajo el cuidado de su abuela materna, doña Concha. Mientras tanto Encarna, la enfermera del hospital, comienza a cuidar de Antonio, quien agradecido por sus cuidados y su afecto, se casa con ella.
Pasan los años y observamos como Carmen, la hija de Antonio, crece apartada de su padre con su abuela, doña Concha y que únicamente recibe las visitas de Don Martín (Ramón Barea). Sin embargo, esta fallece inesperadamente de un ataque durante la celebración de la primera comunión de la niña.
Ante la situación, Encarna decide que Carmen se vaya a vivir con su padre y con ella, pero cuando Carmen llega, descubre que trabajará de criada haciendo los peores trabajos de la casa y que tendrá totalmente prohibido subir a la primera planta y ver allí a su padre. Todos la maltratan, y solo encuentra cariño en su mascota, el gallo Pepe con el que convivía con Doña Concha.
Sin embargo, un día Pepe se cuela en la casa y sube a una habitación. Persiguiéndolo, Carmen entra y allí encuentra a su padre, al que Encarna tiene totalmente sometido aprovechando su paraplejia. Padre e hija se reconocen y forjan un fuerte vínculo; los dos se reúnen en secreto cuando Encarna está ausente o engañando a Antonio con Genaro, su chófer y antiguo fotógrafo, en gran medida responsable del accidente de Antonio al cegarlo con su flash, y Antonio aprovecha los encuentros para enseñarle a su hija todos los secretos de la tauromaquia.
Pero todo acaba cuando Encarna se da cuenta de que Carmen la ha desobedecido y, como castigo, prepara un comida en la que Pepe es el gran protagonista.
Varios años después, Carmen se ha convertido en una hermosa chica. Encarna, celosa de la belleza de Carmen y deseosa de quedarse con toda la fortuna de Antonio, asesina a éste y manda a Genaro que la mate a ella.
Pese a ello, Carmen sobrevive, aunque pierde la memoria en el percance.
Afortunadamente, la chica es encontrada por un grupo de artistas enanos, conocidos como los "Enanitos Toreros", la encuentran y deciden cuidarla mientras se recupera. Entre ellos está Rafita (Sergio Dorado), Jesusín (Emilio Gavira) y wel torero enano Gruñon (Asier Salinas).En una de sus actuaciones, se produce un percance con una vaquilla que pone en peligro la vida de uno de ellos, a gruñó en concreto, lo que hace que Carmen salga a su rescate , recuperando sus habilidades de torero.
Los enanos (excepto Gruñón) quedan admirados de su habilidad y deciden que forme parte de su espectáculo con el nombre de "Blancanieves".
Blancanieves se hace cada vez más famosa, hasta el punto de ser contratada por un empresario Don Carlos (Josep Maria Pou) que se convierte en su apoderado y que aprovechando que es analfabeta le hace firmar un contrato de por vida aprovechando que la chica no sabe leer.
Por otro lado, Encarna se entera que Carmen sigue viva al verla en la portada de una revista. Furiosa, se pelea con Genaro y termina matándolo. Mientras tanto, uno de los enanos se enamora perdidamente de Carmen, mientras que Gruñón, celoso de ella, busca una forma de matarla.
Finalmente, Blancanieves y sus compañeros llegan a la plaza de toros donde Antonio sufrió su accidente, la Colosal. Mientras reza, recupera la memoria y recuerda su verdadera identidad, confirmada cuando don Carlos, el apoderado de Antonio, la reconoce tan pronto como la ve.
Por otro lado, Gruñón decide cambiar los toros del sorteo y le hace corresponder a Carmen el toro más bravo de la plaza (llamado "Satanás") en lugar de la vaquilla para acabar con Carmen. Ella, aterrada al recordar su pasado, intenta alejarse del toro, pero recuerda los consejos de su padre y hace una faena inolvidable, que le hace ganarse los aplausos del público y el indulto del animal.
Sin embargo, Encarna, que ha asistido a la corrida con un velo para no ser reconocida, en el paseíllo tras el triunfo le entrega a Carmen una manzana inyectada con veneno que provoca la muerte de Carmen cuando se la come.
Gruñón, quien había visto a Encarna accidentalmente antes, decide redimirse y guía a los demás enanos para acabar con Encarna, a la que encierran con un toro bravo que presumiblemente la mata.
El empresario con el que Carmen firmó el contrato decide usar su cadáver como una atracción de feria para que los curiosos intenten despertarla por unas cuantas monedas mediante un beso. Hombres y alguna mujer lo intentan, pero todo es inútil. Junto a ella permanece el enano enamorado, cuidándola y durmiendo a su lado. Al final se percibe que, probablemente, no esté del todo muerta. Y así acaba la historia.
Pablo Berger, director de ‘Torremolinos 73‘ (2003), no había dudado en su intención de sorprender al espectador con su trabajos. Durante 7 años intentó colocar este proyecto, pero no hubo suerte. Su intención era complicada: intentar emular el cine mudo europeo de los años 20 al mismo tiempo que dotar de unos rasgos muy españoles a una historia tan universal como la de Blancanieves.
Berger, también guionista de la película, acierta de pleno al buscar una mayor empatía del público con ella y para ello enmarca la historia en una aventura taurina, con artistas de copla de por medio, toreros, apoderados y una mala malísima. El fondo taurino de la película fue la primera inspiración y el propio director relató que todo surge cuando vio fotografías de Cristina García Rodero de enanos toreros en el libro "España oculta". Yo completé las fotos imaginándome una Blancanieves vestida de luces entre ellos. También quería hacer una Blancanieves popular, no que fuera la hija de Rey de España o de un terrateniente, y a principios del siglo XX las únicas personalidades con cortijos así y famosas eran los toreros. Así que al rey le convertí en torero y a la reina en cantaora.
La película fue rodada entre el 16 de junio de 2011 y el 12 de agosto de 2011 en localizaciones de Sevilla, en "la Colosal" de Aranjuez, en Pedraza, en el Palau Muñoz-Ramonet, de la calle Muntaner , en Vilanova i la Geltrú, Barcelona, en Mataró, en Sant Esteve Sesrovires, de Barcelona y en La Cellera de Ter, en Girona.
La polémica fueron nueve toros que se necesitaron para grabar su película. El propio director señaló que no tenía constancia de ninguna denuncia, ya la película se rodó bajo supervisión veterinaria y acatando en todo momento la legislación vigente. En la película no muere ni es maltratado ningún toro ni vaquilla. Un técnico del rodaje les confirmó que los toros fueron sometidos al tercio de varas (picador) y al de banderillas, y que finalmente fueron sacrificados en los chiqueros de la plaza. Las asociaciones protectoras de animales lograron que se instaurara, en contra de Arcadia Motion Pictures, la promotora de la película, un expediente sancionador, por incumplir la Ley de Protección Animal 1/1990 de 1 de febrero, artículo 24.3.g, que considera "infracción muy grave la filmación de escenas con animales para cine o televisión que conlleven crueldad, maltrato o sufrimiento cuando éstos no sean simulados".
Sin embargo, la Plataforma Estrategia Animalista denunció a la Dirección General de Medio Ambiente de Madrid para que le abriese un expediente sancionador para dilucidar si en la filmación de la obra de Pablo Berger se lidiaron toros de forma ilegal. Las escenas de toreo se rodaron a puerta cerrada en la plaza de toros de Aranjuez entre el 27 y el 28 de junio de 2011. La Plataforma Estrategia Animalista denunció que la muerte de toros sin la correspondiente autorización administrativa para la celebración pública de espectáculos taurinos constituía una infracción muy grave de acuerdo con la Ley 1/1990 de Protección de los Animales Domésticos y la Ley 32/2007 para el Cuidado de los Animales en su Explotación, Transporte, Experimentación y Sacrificio.El hecho de que durante la lidia a puerta cerrada se cumplieran con las disposiciones de la legislación taurina –presencia de veterinario, observancia del reglamento taurino, y demás- no es un argumento válido para el archivo de la denuncia que hizo la Comunidad de Madrid, según el tribunal.
Fue presentada el 21 de septiembre de 2012 en la Sección Oficial del Festival Internacional de Cine de San Sebastián y obtuvo el Premio Especial del Jurado), además de ser la película seleccionada por España para los Premios Óscar en la categoría de Mejor película de habla no inglesa (finalmente no fue nominada por la Academia) en una decisión polémica y sorprendente, no fue tomada en cuenta para competir por Mejor Película de habla no Inglesa en la edición número 85 de los Premios Oscar y para los Premios Ariel (sí obtuvo este galardón).
Fue estrenada de forma regular el 28 de septiembre. En su primer fin de semana recaudó entre 166.000 y los 169.000€ en España. En Estados Unidos el primer fin de semana de su estreno recaudó 25,264 $.3
La película ha sido bien acogida en numerosos países del mundo como Bolivia, Alemania, Portugal, Francia, incluso en Japón, que según Pablo Berger fue un acontecimiento inesperado, la historia encontró sentido "al saber que es una historia que conecta, que habla de acciones, de sensaciones. Las pasiones no son tan lejanas entre nosotros", dijo el director de la película.
La película ha sido ampliamente elogiada por la crítica. El gran Roger Ebert del Chicago Sun-Times comentó sobre Blancanieves "Película muda visualmente impresionante del tipo que podría haber sido hecha por los más grandes directores de la década de 1920".Y concluye contundentemente con " una maravilla"
David Rooney en The Hollywood Reporter comenta que es "Un afectuoso homenaje al cine mudo europeo de los años veinte (...) una original reinvención andaluza de Blancanieves"
En el Reino Unido Peter Bradshaw en The Guardian comenta que es "Una película muda maravillosamente misteriosa y erótica (...) "
En España Carlos Boyero en el Diario El País nos dice que es "Una película con estética poderosa (...) insólita en su planteamiento, audaz, sentida y bonita"
En ese mismo diario, Gregorio Belinchon en El País “Veo esta noche muy en blanco y negro". La frase no era de Pablo Berger, el director de Blancanieves, sino de Juan Antonio Bayona, el responsable de Lo imposible. Bayona se fue de la ceremonia premiado como mejor director, pero mucho antes, a su llegada, supo ver el triunfo de la joya de Berger. Blancanieves es una revisitación con alma taurina, garcíaroderizada y gutierrezsolenizada, un canto al cine mudo europeo que hace siete años germinó en el corazón de un director bilbaíno, al que le ha costado demasiado tiempo sacar adelante una película que ahora parece fundamental para el cine español.
Luis Martínez en el Diario El Mundo sostiene que "Pablo Berger firma una obra maestra con 'Blancanieves'. (...) Un milagro silencioso."
Oti Rodríguez Marchante en el Diario ABC nos dice que "Blancanieves, ha causado, como era de esperar, un enorme golpe de amor y admiración entre los presentes. (...) gran película."
Lluís Bonet Mojica en el Diario La Vanguardia coemnta que “Podía ser un disparate, más penoso que hilarante, pero aparte de su fascinante poder visual, la película combina maravillosamente el humor negro, la sátira social y un tono cercano al gran cine expresionista alemán (...)
Pere Vall en Fotogramas nos dice que "Era complicado que, nueve años después de 'Torremolinos 73', Pablo Berger hiciera algo todavía más sorprendente, exquisito, deslumbrante. La buenísima noticia es que lo ha conseguido (...) "
Irene Crespo en Cinemanía afirma que es "Muda, en blanco y negro… y obra maestra. (...) No, no es 'The Artist'. Es mejor"
Mikel Zorrilla editor en blog de cine nis dice que ‘Blancanieves’ brilla con luz propia en los apartados técnicos, pero procede profundizar un poco más en ello. En la banda sonora ya queda clara la fusión cine mudo-españolidad (no se me ocurre ningún otro caso en el que esté tan justificado usar corridas de toros en la gran pantalla), ya que, por regla general, se tira de temas musicales que nos retrotraen directamente a esa época, pero ocasionalmente surgen canciones con letra que refuerzan la peculiaridad de la propuesta. El uso de las luces también es particularmente estimulante, en especial cuando toca echar mano de ciertas sombras para matizar, complementar o dar cierre a lo que vemos en pantalla. Por lo demás, un gran trabajo de reconstrucción histórica (los hechos se ambientan en los años entre 1910 y 1929) tanto en decorados como en vestuario, todo ello al servicio del notable trabajo tras las cámaras de un Berger que sabe cuándo procede ser más cómico, dramático o incluso rozar lo terrorífico. Bravo.
Maribel Verdú sea la gran estrella del cartel de la película, ya que su trabajo como la temible madrastra de la protagonista roza la perfección. Inma Cuesta la que sale peor parada, ya que es uno de los personajes clave en ese comienzo quizá un tanto excesivo, mientras que por el lado positivo me gustaría destacar la breve aparición como José María Pou, ya que es el que mejor sabe representar la tendencia al exceso de expresividad que se hacía gala en no pocas cintas del cine mudo. En definitiva, ‘Blancanieves’ es una grandísima película y una muy estimulante reinvención del cuento tradicional, contando además con un prodigioso acabado técnico que consigue emular las constantes del cine mudo sin por ello descuidar los gustos del público contemporáneo. Un pequeño milagro en blanco y negro en el que la guinda del pastel la pone un reparto que borda sus papeles, en especial Maribel Verdú como la madrastra de la protagoniza, la cual casi me atrevería a decir que hasta supera a la mítica villana de la versión Disney. Imprescindible.
En Argentina Fernando López en el Diario La Nación afirma que es "Todo menos un cuento de hadas para niños: un melodrama teñido de humor negro, con acentos trágicos, un drama de celos y envidias, una historia de desdichas y amores que abreva en otros viejos cuentos."
Pablo O. Scholz en Clarín dice que "Blancanieves es una película atosigada de riesgos, de los que sale bien parada en la mayoría de las oportunidades."
En México Lucero Solórzano en el Diario Excélsior dice que "'Blancanieves' es todo un viaje por la magia de las imágenes de un cine que se acerca a su estado más puro, y que en pleno 2013 nos sorprende reformulando un cuento clásico de manera brillante."
Por su parte, en la prensa de este mismo país Josué Flores Corro en Cine Premiere dice que es "La mejor película silente que se ha realizado en los últimos años.
La película fue multipremiada y ha recibido muchos premios. Tuvo 18 nominaciones consiguiendo 10 Premios Goya, incluyendo mejor película y actriz (Verdú). En el Festival de San Sebastián de 2012 fue el Premio Especial del Jurado, a la Mejor Actriz (Macarena García) Obtuvo 4 Premios Gaudí en ese mismo año incluyendo Mejor película y música, además de tener 12 nominaciones.
En los americanos Premios Ariel fue premiada como la Mejor película iberoamericana. En los Premios del Cine Europeo tuvo 3 nominaciones y consiguió el premio al mejor vestuario.
En los franceses Premios César de 2013 fue Nominada a Mejor película extranjera
Lo cierto es que no hay problema alguno por la falta de diálogos, ya que la utilización de los intertítulos y las bellas imágenes en blanco y negro nos permiten seguir la historia , además de ser el decorado formal de esta historia que está llena de guiños al cine en muchos momentos como El Crepúsculo de los dioses o al toro Ferdinando de Disney. Una auténtica y valiente joyita de nuestro cine esta Carmenieves, nombre más apropiado que Blancanieves.
No hay comentarios:
Publicar un comentario