En buena compañía

Las comedias actuales son como son y me esperaba una película así. Y es que a las comedias actuales, salvo honrosas excepciones, son productos perecederos, se ven y ya las puedes olvidar. ¿Dónde está el espíritu de Historias de Filadelfia? Yo creo que se ha perdido. Me imagino que sí guardaré en la retina y en la memoria esta película será por la presencia de unas siempre bellísimas Scarlett Johansson y de la eficaz actriz del CSI Marg Helgenberger. Ciento diez minutos de cine, rodado de una forma amable con una agradable historia de amor y desagradable relación laboral y, poco más. 

La película que pude ver anoche es In Good Company ( que parece ser se difundió en España o en el mundo hispano como Algo más que un jefe). Se trata de una comedia americana del año 2004 escrita y dirigida por Paul Weitz.

La película fue producida y distribuida por la Universal Pictures- en España será labor de Aurum Producciones para el 2005- , contando con la producción del mismo director, A Paul Weitz Film de los hermanos Paul y Chris Weitz, y Depth of Field Production mediante Lawrence Pressman. Contó con unos quince millones de dólares ($) de presupuesto, que fue recuperado con creces dado el éxito de público y taquilla que superaba los 61 millones de dólares recaudados desde su estreno en diciembre de 2004. 

En el apartado técnico contó con la música de Damien Rice y Stephen Trask , y con la fotografía de Remi Adefarasin. En otras cuestiones técnicas se encontraban Myron I. Kerstein (montaje).

La película está protagonizada por Dennis Quaid como Dan Foreman, Topher Grace como Carter Duryea y Scarlett Johansson como Alex Foreman en sus principales papeles. Están acompañados de Marg Helgenberger como Ann Foreman, Clark Gregg como Mark Steckle, David Paymer como Morty Wexler, Selma Blair como Kimberly, Ty Burrell como Enrique Colon, Frankie Faison como Corwin, Philip Baker Hall como Eugene Kalb, Amy Aquino como Alicia, Lauren Tom como Obstetra, Zena Grey como Jana Foreman, John Cho como Petey y Malcolm McDowell (sin acreditar) como Teddy K, Globecom CEO.

La película trata sobre Dan Foreman ( Dennis Quaid) un ejecutivo de publicidad de mediana edad - tiene 51 años- y jefe de ventas para Sports America , una importante revista deportiva, cuya compañía es comprada por una gran corporación internacional , Globecom, que promueve el concepto corporativo de "sinergia".

Está felizmente casado con Ann (Marg Helgenberger) y tiene dos hijas, Alex y Jana. Se trata de un veterano jefe de ventas de publicidad, que ha formado un interesante grupo de trabajo a su alrededor, y que trabajan en el semanario "Sports America", y que acaba de celebrar el mejor año de la revista, gracias en gran medida a la cálida, honesta y amistosa forma de negociar de Dan y al espíritu de equipo del departamento que él encabeza. Incluso las inesperadas noticias del embarazo tardío de su esposa, Ann, y de la admisión de su hija mayor, Alex, en la exclusiva (por no mencionar cara) Universidad de Nueva York, hacen feliz a Dan, aunque le dejan ligeramente preocupado por la economía familiar, pues, como siempre ha hecho, se las arreglará. 

El cambio en la dirección de la corporación provoca que Dan deje de ser el jefe de publicidad, dejándolo con un nuevo jefe que es casi la mitad de su edad. Carter Duryea (Topher Grace) tiene 26 años y piensa que su vida es formidable, en su mayor parte. El joven prodigio ha progresado firmemente a en la multinacional Globecom. Los directivos incluso le conocen por su nombre. Carter está siendo preparado para su próximo peldaño en la escalera corporativa: dirigir la venta de publicidad en una de las principales publicaciones recientemente adquiridas por Globecom en su última operación, la revista Sports America. Desafortunadamente para Carter, su ascenso coincide con el final de sus siete meses de matrimonio y no tiene a nadie, salvo un pez, con quien compartir su felicidad. Pero sabe que está en el buen camino profesional y se las arreglará.

Carter Duryea inicia su jefatura tomando decisiones complicadas en la revista. Viéndose obligado a despedir a varios de sus colegas desde hace mucho tiempo, lo cual desagrada a Dan , pero no le impide que se convierta en el "copiloto" de su nuevo jefe, Carter Duryea ( Topher Grace ), este joven de 26 años de edad, prodigio de la escuela de negocios. 

Mientras Dan desarrolla clientes a través de acuerdos de palabra y relaciones, Carter defiende la filosofía de empresa de la sinergia, a través del fomento de la revista con la división celular o por partes y de "Krispity Krunch", un producto alimenticio también propiedad de Globecom. 

Dan y Carter se tendrán que enfrentar a retos en su vida personal. Dan se siente apoyando por su mujer y sus dos hijas- Jana de 16 años de edad y Alex ( Scarlett Johansson ) de 18 años de edad-, que se está preparando para entrar en la universidad. Igualmente en este complejo momento personal Dan se entera de que su esposa está embarazada de su tercer hijo. Mientras tanto, Carter es abandonado por su esposa con la que lleva siete meses casado y se centra toda su energía en el trabajo. 

Como Dan hace frente a las realidades financieras de una hipoteca, sumados a los gastos de educación, y un nuevo hijo, y con Carter que necesita la experiencia práctica de Dan en la vida real en el campo de la publicidad, los dos forman una amistad incómoda, pero complementaria.

Su vida se complica aún más cuando su jefe tiene un interés romántico en su hija. Un día, Carter, que ha estado luchando con la soledad después de la ruptura de su matrimonio, invita a cenar a la casa de Dan, donde se encuentra con Alex, la hija de Dan y que ya conocía de su día de entrada a la empresa, aunque desconociendo que era hija de Dan,  y los dos se siente atraídos. Su amistad inicial permite a Carter olvidar su soledad, y Alex, que ahora asiste a la Universidad de Nueva York, es capaz de escapar de su propia soledad y del aburrimiento. 

Pasados unos días, Carter y Alex pasan cada vez más tiempo juntos e inician una relación sentimental. Temerosos de ofender a su padre, mantienen su relación en secreto por el momento. Su amistad, sin embargo, toma un giro para peor, cuando Dan descubre – el día de su 52 cumpleaños- que Carter y Alex se han estado viendo, y los sorprende a ambos en un restaurante hindú, y golpea a su jefe en la cara. El enfrentamiento con su padre convence a Alex a romper la relación con Carter, que tiene el roto el corazón.

Poco después, tras la renuncia de un importante cliente, Carter comienza a pensar que es mejor el enfoque personal de Dan, que termina salvando la cuenta de resultados. 

La llegada del jefe supremo de la propiedad de Globecom y las críticas en público de Dan a éste, provocan el enfrentamiento con el jefe de ambos que expulsa de inmediato a Dan y llama a capítulo a Carter. 

Sin embargo, Carter reacciona comentando que entre los dos van a firmar un importante contrato publicitario con un importantísimo cliente, amigo personal de Dan. El jefe le da 24 horas para conseguirlo y Dan lo consigue. Sobre todo cuando se entera el empresario que Dan había golpeado a Carter.

Cuando retornan al despacho de su jefe, éste los recibe abrumado , pues se enteran de que hay una nueva reorganización corporativa, y que Sports America se ha vendido a otro grupo. Y que Carter es cesado de inmediato y cesa en el trabajo. Igualmente informan que Dan regresa a su antigua posición como jefe de ventas.

Después de haber desarrollado sentimientos paternales hacia Carter, le ofrece un puesto en su nuevo departamento como su "copiloto", pero Carter se niega, admitiendo que tiene que tomarse un tiempo libre y examinar lo que realmente quiere hacer en su vida, y la de dos partes se van como amigos. En la última escena vemos a carter haciendo "footing" por una playa y hablando amablemente, no ya con su antiguo compañero, sino casi con su nuevo mentor.

La película se rodó en cuatro escenarios de Los Ángeles y Nueva York. La 7th & Hope Streets en el Downtown de Los Ángeles (Manhattan Street) y en la una Playa de Los Ángeles (final de la película), así como en New York y New York University, Greenwich Village. 

La música, de Stephen Trask, es brillante ajustándola a los contendios de las escenas y añade temas de Peter Gabriel ("Solsbury Hill"), David Byrne ("Glass"), la canción "Bésame mucho", o la balada "The Trapeze Swinger" (créditos finales) y otras. 

La fotografía, de Remi Adefarasin muestra preferencia por los tonos claros, colores fríos para realzar la belleza de una actriz que iba en ascenso, la Johansson. 

La película fue un éxito crítico y financiero, recibiendo críticas positivas ganando 61 millones en la taquilla mundial. 

Las críticas en positivo fueron generales en la prensa estadounidense, destacando entre ellas las realizadas por Peter Travers en Rolling Stone; Allison Benedik en el Chicago Tribune; David Ansen en Newsweek; Kenneth Turan en Los Angeles Times ; Lou Lumenick en New York Post ; Olly Richards en Empire ; y Roger Ebert en Chicago Sun-Times , diciendo éste último que "In Good Company es una especie rara: una película agradable sobre grandes negocios. Trata de una cultura empresarial que intenta ser mala y fracasa. (...). 

En Rolling Stone Peter Travers afirmaba "Weitz consigue que su película sea sexualmente provocativa y subversivamente divertida. (...). Por su parte en el Chicago Tribune Allison Benedik dejó escrito que "Grace y Quaid es imbuyen en sus papeles (que bien podían haber resultado meras caricaturas) con corazón, inteligencia y una gran vis cómica (...). 

Por su parte, David Ansen en Newsweek afirmaba "Una suave mezcla de sátira y sentimentalismo que tiene una deuda obvia con "El apartamento", por no decir con "Jerry Maguire", mientras que Kenneth Turan en Los Angeles Times afirmaba lacónicamente que era "Infaliblemente entretenida." Lou Lumenick en New York Post y Olly Richards en Empire escribieron en sus respectivos periódiucos "Ha nacido una estrella en "In Good Company": un escaparate para Topher Grace. (...); mientras que el segundo afirmaba que la película era “Inteligente y original".

Menos generosa fue la crítica de Ann Hornaday en el The Washington Post al dejar por escrito que "Independientemente de sus aciertos, 'In Good Company' es un blando pastiche de cliches y sosos encuentros". 

En España , que posiblemente somos más heavy y no gustan tanto estas comedias pasteleras M. Torreiro criticó en el Diario El País "Todo muy dentro de los límites esperables en un producto de masas estadounidense (...). Esta película rutinaria y sin alma (...) quedará en los anales, no obstante, por un hecho imprevisto: la presencia de un actor desconocido, el joven Christopher Topher Grace." 

En el Diario El Mundo Francisco Marinero se mostraba más generoso al afirmar que era "Un elogio de la madurez intelectual y emocional que aburre partiendo de una situación propicia para la sátira (...) Evitar los tópicos y tener una factura por encima de la media son sus virtudes. (..). 

Javier Cortijo en el Diario ABC escribió "Con un calibrado balanceo romántico-laboral, y aunque no falten los tópicos del subgénero como soflamas de autoayuda o esquematismo de los personajes secundarios, "In good company" hace honor a su título y logra que queramos tomarnos unas cervezas con ella. (...). 

El film se presentó en la Sección oficial de largometrajes en el Festival de Berlín de 2005, aunque se preestreno fue el 6 de diciembre de 2004 en Hollywood. 

En fin, el film es una suma de pequeño drama, amable comedia y curioso romance. Explora no sólo el salto generacional entre padres e hijos, sino el profesional entre compañeros de trabajo, así como las diferencias que se dan entre el estilo clásico de gestión empresarial de los recursos humanos en el que prima el contacto personal entre cliente y empresa y el estilo de las nuevas corporaciones empresariales de grandes dimensiones donde la motivación queda desplazada por la ambición el sometimiento continuado a la competencia con los compañeros de dentro y de fuera de la empresa. Explora, además, la diferente concepción de la fuerza de ventas en las empresas convencionales (equipo y gestión de ventas) y la que practican los conglomerados empresariales (aprovechamiento de sinergias del grupo). 

Como comedia de costumbres investiga las relaciones entre modelos de gestión de personas, historias personales (currículos), conceptos de éxito y fracaso, tipos de liderazgo, etc. Como comedia familiar investiga la interacción entre empresa, relaciones padres/hijos, relación de los cónyuges, concepto de familia, etc.

El trato amable del relato se ve potenciado por el humor ( el golpe al Porsche, la caída de los macarrones, la autoinvitación de Carter, el encuentro de los tres protagonistas en el restaurante, el partido de baloncesto entre compañeros / rivales o algunos giros de los diálogos). 

El problema del mundo empresarial y de sus derivadas laborales como el despido a los cincuenta se contempla bajo el género de la comedia. Estamos ante una comedia ligera y llevadera, que te hace pasar bien el rato, pero no se atreve o no quiere profundizar, por lo que nunca pasa de la superficialidad mediante unos buenos diálogos, algunas inteligentes réplicas y todo envuelto en una buena fotografía, bonitas canciones, y una elegancia formal con impecable decoración de interiores. 

Tan entretenida y agradable como intrascendente , quien vea esta película lo hará con una historia del mundo financiero sobre el despido laboral, mezclada con un toque familiar y sentimental,y  entenderá que no es más que una sencilla película y como mucho, correcta, que no busca las lágrimas ni sufrimiento alguno. 

Con todo, la película es amena, está bien hecha, no aburre y deja un aceptable sabor de boca, sobre todo porque su final (sus últimos cinco minutos) es creíble (al joven lo despiden, la chica le hace caso al padre y no a su novio rompiendo definitivamente con él) y se aleja de lo trillado en este tipo de filmes. No es una comedia que quede imborrable en el recuerdo, pero parece dejarte en buena compañía.