lunes, 23 de noviembre de 2015

La profecía y Discolibro




En mi casa , como en otras muchas casas durante los 70 y los 80, se recibía una revista mensual con el título de Discolibro - realmente era un catálogo de venta de libros y disco por correspondencia- y que , en ocasiones surtía las estanterías y la fonoteca de mi casa con discos y con libros de todo pelaje. De aquel catálogo llegaron a casa libros como los de Harold Robbins y su miedo a volar o discos como los de Breakfast in America de Supertramp o el Bandido de La Bionda, entre otros. De entre la oferta del catálogo reconozco que yo con diez o doce años había algunos que me daban miedo sólo con ver las portadas. De ellos recuerdo dos especialmente. El primero era la obra literaria en la que se basaba la película de El exorcista, cuyo libro lo firmaba de William Peter Blatty. La segunda, creo que me aterrorizaba aún más llevada por título el de La profecía cuyo autor era de David Seltzer y presentaba en su portada a un chico, el protagonista clave, interpretado por Harvey Stephens como Damien Thorn. Recuerdo que tuvo que pasar mucho tiempo para que yo viese una otra. La primera aún no la olvido ni con quién la vi, ni dónde en aquel año de 1983. Bastantes años más tarde vi la segunda, que he visto por segunda vez en el día de ayer. 

La profecía (cuyo título original en inglés es The Omen) es una película de terror del año 1976 dirigida por Richard Donner. La trama está basada en una idea original del productor Harvey Bernhard, quien contrató al guionista David Seltzer, autor del libro que mencioné, para preparar el guión. 

La productora fue la 20th Century Fox y la Mace Neufeld Productions y contó con un presupuesto de $2.800.000. la película contó con la música Jerry Goldsmith, cuyo imponente tema musical de Ave Satani ganó su único Óscar de la Academia por su trabajo en la banda sonora. Para la fotografía se contó con la labor de Gilbert Taylor y para el montaje el de de Stuart Baird.

Está protagonizada por Gregory Peck como Robert Thorn, Lee Remick como Katherine Thorn, David Warner como Keith Jennings, Harvey Stephens como Damien Thorn, Billie Whitelaw como Sra. Baylock, Patrick Troughton como el Padre Brennan, Martin Benson como el Padre Spiletto y Leo McKern. El reparto está formado por Gregory Peck, Lee Remick, David Warner, Billie Whitelaw, Harvey Stephens, Leo McKern, Patrick Troughton, Robert Rietty, Martin Benson como Carl Bugenhagen. Junto a ellos aparecen Robert Rietti como el Monje, Tommy Duggan como Sacerdote, John Stride como Psiquiatra, Anthony Nicholls como Dr. Becker, Holly Palance como la niñera, Roy Boyd como un Reportero, Freda Dowie como la Monja, Sheila Raynor como la Sra. Horton, Robert MacLeod como Horton y Bruce Boa como el ayudante de Thorn.

La película se inicia un día 6 del mes 6, a las 6 de una madrugada cuando un responsable del cuerpo diplomático norteamericano y amigo íntimo del presidente americano, el señor Robert Thorn (Gregory Peck) se mete en un taxi romano de camino al hospital de San Patricio, donde su mujer va a dar a luz...

El hijo de Katherine (Lee Remick) y Robert Thorn (Gregory Peck) muere en Roma poco tiempo después de haber nacido. Como Kathy Thorn da a luz a un bebé muerto, Robert, su marido, es convencido por el padre Spiletto (Martin Benson) para sustituir a su hijo fallecido por un huérfano cuya madre murió al dar a luz, sin decirle nada a Katherine. Por lo tanto su esposo Robert le oculta la verdad y sustituye a su hijo por un niño huérfano, ignorando su origen satánico.

Los padres nombran a su nuevo hijo Damien (Harvey Stephens) y viven amorosamente mientras tanto cuidando de su adorado hijo. Tiempo después, Robert es nombrado embajador de los Estados Unidos en Gran Bretaña.

Mientras la familia vive en Inglaterra son testigos de varios eventos misteriosos. El horror empieza abiertamente cuando, en el quinto cumpleaños de Damien, inesperadamente, su niñera se suicida. tras ser visitada por un perro negro. Mientras el chico está recibiendo sus regalos la chica se suicida ahorcándose dedicándolo como un regalo al niño.

Tras esto es contratada una nueva niñera que se presenta en la casa, la Sra. Baylock (Billie Whitelaw),  cuando todavía ellos no han iniciado una nueva búsqueda. Ella llega con un perro (el mismo que viera la joven antes de morir).

Mientras tanto un sacerdote trata de advertir a Robert del peligro que corre. Se trata del padre Brennan (Patrick Troughton), quien conoce el origen de Damien y  le dice a Robert que su esposa está embarazada advirtiéndole que Damien intentará matar a su hermano. Sin embargo no es tomado en serio por Robert.

Posteriormente el sacerdote logra entrevistarse en un parque , pero tras la entrevista un inesperado cambio de tiempo que da lugar a un fuerte viento provoca el espanto en el mismo , pero no impide que muera atravesado por un pararrayos.

La forma brutal de morir alerta a un fotógrafo, Keith Jennings (David Warner), que ya estuvo presente en el suicidio de la chica y que sabía de la existencia del sacerdote y su insistencia en entrevistarse con el embajador norteamericano en el Reino Unido.

Sin saber nada de lo acontenido, Robert llega a casa y , de inmediato, Katherine le informa a Robert que está embarazada. Pocos días después Katherine va a sufrir un aborto espontáneo tras caer desde un balcón por culpa de Damien, que instigado por la Sra. Baylock golpea con su triciclo la escalera en la que ella estaba montada en el piso superior.

Tras la muerte del padre Brennan, el fotógrafo Keith Jennings (David Warner), quien estuvo presente en el cumpleaños, comienza a investigar a Damien cuando descubre unas marcas en las fotografías de las personas fallecidas recientemente. Las marcas asemejan la forma en que cada uno murió, una marca en el cuello de la niñera y otra atravesando el cuerpo del sacerdote.

Para su incomodidad, descubre que cuando se fotografía a sí mismo aparece con una marca similar en su cuello, por lo que se pone en contacto con Robert. Keith se dedica a investigar sobre la base de lo que dijo Brennan antes de morir y descubre una profecía sobre el nacimiento del anticristo, la cual se puede interpretar como que será el hijo de un dignatario poderoso, como Robert y que crecerá para convertirse en un líder mundial de gran influencia.

Al trasmitir esto a Robert, éste se muestra incrédulo ante semejante tesis, pero decide investigar el origen de su hijo y junto a Keith viaja a Roma para recoger antecedentes del nacimiento de Damien. Ambos llegan al hospital de Roma donde nació, pero descubren que los archivos de maternidad y guardería fueron destruidos en un incendio.

Robert y Keith visitan al padre Spiletto tras enterarse que ahora vive en un monasterio, este se encuentra mudo y con la mitad de su cuerpo quemado ya que sobrevivió al incendio; aún así logra darse a entender y revela el lugar donde fueron enterrados la madre de Damien y el hijo de Robert por lo que ambos hombres viajan al cementerio.

Al exhumar la tumba del niño descubren los huesos de su legitimo hijo con señales de haber sido asesinado intencionalmente y en la tumba de la madre descubren el esqueleto de un chacal hembra.

Las pistas reunidas los llevan a creer que Damien es el Anticristo. Mientras Robert está de viaje, Katherine se recupera en el hospital de sus heridas. Sin embargo, Robert la pone en alerta. Sin embargo, no sabe que la Sra Baylock está rondando y la empuja por la ventana del hospital cayendo sobre una ambulancia por mano de la Sra. Baylock, quien en realidad siempre ha sido una seguidora del demonio enviada a proteger al niño.

Robert viaja con Keith a Israel para hablar con Bugenhagen, un arqueólogo que trabaja en un yacimiento en la ciudad de Mejido, antigua Jezrael (cuna del cristianismo) y que sabe cómo detener al Anticristo. Bugenhagen les informa que Damien será el Anticristo si tiene una marca de nacimiento que se asemeja a tres seis. Sin embargo, Robert alega que él ha bañado al niño de pequeño y que jamás ha visto la marca.

Posteriormente Robert descubre que la única forma de matar a Damien es llevarlo a tierra consagrada y apuñalarlo con las siete dagas de Megido. A pesar de todo rehúsa asesinarlo ya que va contra su naturaleza matar a un niño y no es capaz de condenarlo por actos que no lleva a cabo todavía, por lo que se deshace de las dagas. Esto provoca una discusión con el fotógrafo Keith quien decide recogerlas y ser quien asesine a Damien antes que también lo mate a él. Sin embargo, mientras las recupera, un cristal para una cristalera cae sobre él desde un camión y lo decapita.

El creciente número de muertes hace que Robert, por fin, se dé cuenta de que el niño que han adoptado es el Anticristo y que hay que eliminarlo para impedir que se cumpla una terrible profecía. Horrorizado por las muertes de Keith y Katherine, Robert recupera las dagas y viaja a Inglaterra decidido a salir de dudas antes de tomar una decisión.

Antes de sacrificarlo comprueba si en la cabeza de Damien hay marca alguna y descubre bajo su cabello la marca de la bestia, el 666.

En ese momento la Sra. Baylock intenta matar a Robert, pero éste la apuñala en el cuello con un tenedor.

Robert abandona su casa con Damien para matarlo en tierra santa, mientras es perseguido por un grupo de seguridad. Cuando está a punto de asesinar a Damien en una iglesia, Robert recibe un disparo y muere.

Tras esto, Damien es puesto bajo el cuidado del presidente de Estados Unidos, quien era amigo de Robert. Mientras está en el funeral de Robert y Katherine, Damien mira a la cámara y sonríe, acabando con esta malévola sonrisa la película.





Junto con La semilla del diablo de Roman Polansky -  Rosemary's Baby-  y El exorcista, es una de las pocas producciones cuya calidad trascendió el género de terror sobrenatural. Años después tuvo tres secuelas, con las que forma una especie de tetralogía, y tres décadas después se produjo un remake. Pero ya era un subproducto, alegado de esta fantástica película.

La película fue estrenada el 6 de junio del 1976, en medio de una sonora campaña de marketing por coincidir con la "fecha del Anticristo". La profecía estrenada en ese junio de 1976 en Estados Unidos, recaudó más de cuatro millones de dólares en su primer fin de semana. La película recaudó un total de $60.922.980 en aquel país. En España se estrenó ese año, pero en noviembre.

La película se rodó en Italia (Roma), Israel (Jerusalem), Reino Unido (Londres, Fulham, Berkshire, Guilford, Windsor, Harrow y en los Shepperton Studios)  y Estados Unidos (Chicago)

La película estuvo presente en los premios Oscar de 1976 con dos nominaciones en lo musical, siendo premiado Jerry Goldsmith con el Oscar a la mejor banda sonora original, premio en la nominación que se repitió en los Grammy de ese año.  En los Globos de Oro la película será nominada al mejor actor revelación el chico Harvey Stephens.

En Inglaterra la película conseguirá un Bafta , en concreto , la actriz Billie Whitelaw como mejor actriz de reparto - premio que recibiría igualmente por la Evening Standard British Films- , al igual que la British Society of Cinematographers para Gilbert Taylor. En los Saturn obtuvo también una nominación Golden Scroll  . Por su parte el escritor y guionista David Seltzer fue reconocido con dos nominaciones en el Premio Edgar Allam Poe y el de los Writers Guilds of American en ese año 1977.

La película recibió una buena acogida por parte de la crítica cinematográfica, siendo incluida dentro de las mejores películas de 1976. y todavía posee un 84% de comentarios "frescos" en el sitio web Rotten Tomatoes. La Chicago Film Critics Association la ubicó en el puesto número 31 de "las películas más aterradoras"

La revista fotogramas dijo de ella que era "Uno de los innumerables films surgidos a raiz del espectacular éxito de "El exorcista", protagonizado por fuerzas diabólicas que intentan entronizar a un Anticristo. Como en la mayoría de sus congéneres, la historia se desliza por unos vericuetos poco creíbles, recurriendo periódicamente a aparatosos golpes de efecto para hacerla avanzar. La habilidad de su director no consiguió que se remontara el bajo listón de lo narrado".

La película una vez superado el terror inicial que me dió durante tantísimos años al verlo en esa revista es un buen ejemplo del cine de los setenta en el que todavía estaba presenten los grandes de Holliwood, en este clásico todo un actor como Gregory Peck, bien acompañado de una actriz menor, pero importante en los sesenta como Lee Remick..

La película cuenta con algunas escenas que se guardan en mi memoria desde la primera visión de la película como es la muerte del fotógrafo Kit Jennings ( ese secundario que es David Warner) o el final con la puñetera mirada del niño en la mano del presidente estadounidense, o las fotografías vaticinadoras. También hay otras que impactan como esa de Damien con el triciclo o el desenlace de los otros protagonistas como son el Padre Brenan, la cuidadora o la escena en el cementerio etrusco a 50 kilómetros al sur de Roma.

Un papel digno de recordar es, sin lugar a dudas el de la señora Baylock, una de las malvadas más crueles de la historia del cine, y con una cara más adaptada a su maligno papel.

Todas las películas se terror se rodean de un toque maldito. Lo cierto es que como recoge el diario La República de Uruguay está película tiene alguno de esos toques. Entre los mismos destaca que durante el viaje de parte del equipo desde EE.UU. a Inglaterra, el avión donde volaba su protagonista, Gregory Peck fue alcanzado por un rayo, algo que también le ocurrió a su productor ejecutivo, Mace Neufeld, en pleno vuelo. Igualmente. el productor del film, Harvey Bernhard sufrió un incidente similar en Roma.

Igualmente, a destacar que el restaurante inglés donde Peck y Neufeld cenaban en Londres fue víctima de una explosión provocada por un atentado del IRA.

Durante el rodaje en Israel , un avión contratado para tomar fotografías aéreas  fue cambiado en el último momento para realizar un vuelo regular y durante el despegue, el avión tuvo un fallo indeterminado que le hizo estrellarse muriendo en el accidente todos sus ocupantes.

También este diario uruguayo señala que los rottweiler utilizados durante la filmación atacaron, sin explicación aparente, a su adiestrador durante el rodaje.

La maldición de “La Profecia” pareció perseguir a algunos miembros del rodaje una vez que el mismo había terminado. Dos de los miembros del staff encargado de los efectos especiales de “La Profecia” fueron contratados para trabajar en la cinta “A Bridge too far”: Alf Joint y John Richardson.

Alf Joint fue el especialista contratado en “La Profecia” para hacer de “doble” en algunas escenas peligrosas. Durante el rodaje de “A bridge too far”, o sea, Un puente muy lejano, Joint tenía que realizar un sencillo y rutinario trabajo: saltar desde un tejado a una bolsa de aire. Sin embargo, algo salió mal durante el efecto y Joint pareció caer en un momento no programado; se había precipitado demasiado pronto. Terminó lesionado en el Hospital sin mayores consecuencias, cuando despertó aseguró que había sentido como si “alguien” le hubiera empujado.

Más dramático fue el desenlace del jefe de efectos especiales John Richardson que había trabajado en “La Profecia” y también se encontraba involucrado en el rodaje de “A bigde too far”. El viernes 13 de agosto de 1976, se encontraba viajando junto a su asistente Lizz Moore por una carretera de Holanda cuando sufrieron un grave accidente de tráfico en el que perdió el control del coche. Lizz Moore murió decapitada y cortada por la mitad cuando la rueda delantera atravesó el chasis y se hundió en el asiento del copiloto. Algunos vieron en esta muerte una macabra similitud con la muerte de David Warner (decapitado por un gran pedazo de vidrio) que Richardson diseñó para “La Profecia”. Para dar más morbo a la historia se dice que, en el lugar del accidente, se encontraba un cartel que señalaba que Richardson y Moore se encontraban, exactamente, a 66,6 kilómetros de una localidad llamada Ommen.

La película igualmente juega con la angustia de un hombre, un padre, incapaz de matar a un hijo- salvo algún maltratador hijoputa, no cabe esa posibilidad- , con el deseo de satisfacer a su mujer, con las mentiras piadosas que encierran grandes crímenes, o grandes aberraciones o con el peso de la religión y la lucha permanente en ellas en esos discursos sobre el Bien y el Mal que genera en torno a la historia una atmosfera angustiosa y que se acentúa con la premiada banda sonora y el Ave Satani. Y ante todo un número con sentido de Marketing, el 666 que presenta la maldita trinidad del diablo, el anticristo y el falso profeta,... es el principio básico de la tentación primigenia.

Por último, una mención a Discolibro y su propia maldición. Discolibro cerró en 1986. La empresa que tenía su sede en Barcelona y que pertenecía al grupo editorial Georg Von Hotzbrinck -por medio de otra empresa subsidiaria, la Deutsche Bücherbund- señaló que la decisión de cierre había sido tomada por la central alemana, "ante las peculiaridades estructurales del mercado editorial español". "Pese a todos los esfuerzos y a la inyección periódica de dinero, el mercado español de venta de libros por correspondencia es muy limitado y hay una fuerte competencia de los quioscos, con lo cual es cierto que estábamos bastante por debajo de la cantidad de socios mínima para ser rentables". Unas pérdidas anuales que alcanzaban 100 millones de pesetas y de un número de socios situable en 150.000 impedía la pervivencia de la entidad.


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