No
había reparado en ello. Pero es cierto que cuando veo cine en
televisión o a través de mi ordenador lo veo en una pantalla oscura. Es
un espejo o un cristal oscuro lo que me trasmite imágenes frente a la
pantalla blanca del cine. Pero ¿qué es un espejo o cristal oscuro? No es
sólo una pantalla, ese “Black Mirror” pudiera ser en lo que no queremos vernos reflejados.
Esa parece la idea de esta miniserie del Channel 4 británico. La idea
de la que parte es que en la actualidad somos unos auténticos adictos
a la tecnología, a las redes sociales. Como les digo a algunos de mis
sobrinos/as tienen en la mano un apéndice, llámese blackberry, llámese
Galaxy desde donde están conectados permanentemente con el mundo, sus
amistades o en el que vuelcan lo que hacen en cada minuto de su vida. Es
desde esas pantallas de ordenador o desde esas redes sociales desde
donde opinamos sobre los demás o el lugar que ha servido de nueva plaza
pública para insultar aparentemente desde el anonimato, - aunque eso no
sea cierto. ¡Cuántos problemas tenemos los centros con el ciberbuylling!
Lo cierto es que desde ese “black mirror” somos voyeurs de unas vidas que muchas veces no son las nuestras, aunque a veces sí. Ese papel que juegan las nuevas tecnologías es el punto de partida de los tres capítulos de Black Mirror .
Esta
miniserie británica es un magnífico producto audiovisual, pero no va a
cambiar la historia de la comunicación. Son sólo tres entregas, pero
están llenas de cargas de profundidad. Se tratan de tres independientes
que concluyen en sí mismas. Unas divididas en cuatro partes, la segunda y
la tercera, otra- la primera- aterradora ante la angustia pública de
ese mediático primer ministro. Todos los capítulos de esta miniserie son
diferentes, tanto en temática como en calidad.
El Himno nacional es el gancho mediático de la serie: una
princesa inglesa es secuestrada. Su captor dice que la matará si el
Primer Ministro inglés no tiene relaciones sexuales con un cerdo en
televisión. ¿Qué debería hacer el mandatario? Es un excelente reflejo de lo que disfruta la gente con el “linchamiento” televisado de una figura pública.
La serie Black Mirror refleja lo más oscuro de nuestro futuro inmediato.
Es
España fue estrenada recientemente en español en el canal de pago TNT.
Tiene tan solo tres capítulos y los tres son absolutamente distintos. La
serie nos un mazazo a nuestras convicciones ante el papel de las nuevas
tecnologías. Ese mazazo rompe en los títulos de crédito un cristal negro, terriblemente similar a cualquier pantalla. Son capítulos de 45 minutos.
La
idea de Black Mirror ha salido de la mente de Charlie Booker, un
reconocido comunicador británico. Aunque ha sido capaz de dar forma en
cuarenta y cinco minutos de provocación tecnológica.
La serie es producida por Zeppotron para Endemol. En cuanto al
contenido del programa y la estructura, Brooker ha señalado, "cada
episodio tiene un tono diferente, un entorno diferente, incluso una
realidad diferente, pero todos son acerca de la forma en que vivimos
ahora". Un comunicado de prensa de Endemol describe la serie como "un
híbrido entre The Twilight Zone y Tales of the Unexpected que se nutre
de nuestro malestar contemporáneo sobre nuestro mundo moderno", con las
historias que tiene un sentido "tecnoparanoico". Espejo Negro fue lanzado en DVD el 27 de febrero de 2012. Se anunció el 12 de julio 2012 que una segunda temporada.
Charlie
Brooker explica el título de la serie 'The Guardian, y señaló: "Si la
tecnología es una droga - y se siente como una droga – tenemos que
conocer sus efectos secundarios que oscilan entre el placer y el
malestar que proporciona esa pantalla fría y brillante de un televisor,
del un monitor, o de un teléfono inteligente”.
En el primer capítulo, El Himno nacional ,
está escrito por Charlie Brooker y dirigido por Otto Bathurst. Está
interpretado por Rory Kinnear, Lindsay Duncan, Tom Goodman-Hill, Donald
Sumpter, Lydia Wilson, Leech Allen y Anna Wilson-Jones. En sólo dos
minutos está planteado un dilema: alguien ha secuestrado una princesa
inglesa y exige que, para liberarla, el primer ministro tenga sexo en
directo con un cerdo por la televisión. No se exige dinero, ni
liberación de rehenes, lo que se pide es el honor de un hombre, su
humillación mediante nuestra potente tecnología de telecomunicaciones
al mundo entero. De ahí se desprende un nuevo paradigma moral con
infinidad de matices, como en el resto de los capítulos.
El
programa de apertura de la serie es un thriller de 44 minutos de
ficción política en la que el Primer Ministro británico, Michael Callow,
se enfrenta a un dilema enorme e
impactante cuando la ficticia Princesa Susannah, miembro muy querido de
la familia real, es secuestrada. Para su regreso, el Primer Ministro
debe tener relaciones sexuales con un cerdo en la televisión nacional.
Callow
rotundamente se opone a la demanda y hace todo lo posible para detener
al secuestrador antes de la fecha límite. Callow también exige que las
noticias no llegan al público, pero el vídeo de socorro ha sido
previamente publicado en YouTube y, a pesar de que sólo ha estado
funcionando durante nueve minutos, ya ha sido visto y descargado por
miles de usuarios británicos. Aunque los medios de comunicación del
Reino Unido, inicialmente se comprometen a no divulgar la historia,
pronto llega a las televisiones y agencias de noticias extranjeras, que
inmediatamente comienzan a informar. Después de esto, los medios de
comunicación del Reino Unido harán lo mismo.
Cuando
el video fue recibido por primera vez por el gobierno británico, uno de
los ayudantes del Primer Ministro empezó a dar información para su
difusión. Incluso se prepara una ficción con un actor porno. Pero debido
a la filtración el secuestrador descubre la treta y envía dedo el
Princesa Susannah a una estación de noticias del Reino Unido como
respuesta. La historia provoca que la opinión pública británica se
vuelva bruscamente contra Callow. Esto lleva a Callow a ordenar una
operación de rescate inmediata desde el edificio donde creen que
Susannah se encuentra. El edificio se revela como un señuelo y un
reportera qaue recibe la información de un colaborador del Gobierno –
gracias al intercambio de imágenes posiblemente sexuales de la
periodista – para ello se oculta en el cuarto de baño- es herida durante
la operación. Callow va perdiendo aún más apoyo.
Después
de haber sido informado del fracaso, y presionado por la opinión
pública y posr alguno de sus colaboradores, Callow se ve obligado a
realizar el acto indecente frente a una audiencia global en vivo.
Mientras realiza esa cerdada – literalmente- la princesa es descubierta
ilesa en las calles, el dedo al parecer era del secuestrador. Se sabe
que fue puesta en libertad antes de la fecha límite, pero pasó
desapercibida pues todo el mundo estaba distraído por la difusión
televisiva. Se desprende que los hechos fueron planeados por el ganador
del Premio Turner Carlton Bloom, que pretendía hacer un montaje
artístico, mostrando que los acontecimientos de importancia se había
deslizado por debajo de las narices de los ciudadanos y el gobierno, ya
que estaban "en otra parte, observando las pantallas" y no centraría su
atención en el mundo real. Bloom se suicida , aunque no se le dé
difusión.
Un
año después de la emisión, Callow parece mantener una buena imagen
política que se ha mantenido intacta y ha obtenido una mayor aprobación
pública debido a su voluntad de sacrificar su dignidad. Por su parte, la Princesa Susannah
se ha recuperado del secuestro y está esperando un hijo, mientras que
el público en general sabe de la organización de Bloom sobre el asunto.
La puesta en libertad anticipada de la princesa se mantuvo en secreto, a
fin de conservar el valor de la acción de Callow. Mientras que la
reputación de Callow se ha planteado indeleble ante los ojos de la
opinión pública, se da a entender que su matrimonio no ha sobrevivido a
la terrible experiencia. En un lento y repetitivo desarrollo nos representa
el aislamiento que produce la era digital materializándolo en los
pequeños cubículos con pantallas en vez de paredes en los que viven los
protagonistas.
La segunda de nombre 15 millones de méritos está escrita
por Charlie Brooker y Konnie Huq y dirigido por Euros Lyn. Su reparto
incluye a Daniel Kaluuya, Jessica Brown Findlay, Paul Popplewell, Rupert
Everett, Julia Davis y Thomas Ashley.
Este
segundo capítulo es quizá el más apocalíptico. Sin ver el cielo ni un
segundo, asistimos a una realidad que sus habitantes alimentan con el
sudor de su frente. Pasan horas cada día generando energía para el
sistema pedaleando en unas bicicletas. Su pedaleo les aporta méritos o
una especie de moneda digital con la que se pueden comprar comida pero
también infinidad de objetos absurdos para complementar sus avatares
digitales o en comprar películas de porno.
Se trata de una sátira de los programas de entretenimiento y nuestra sed la insaciable por la distracción encontrando en
una versión sarcástica de una realidad futura. En este mundo, todo el
mundo debe generar la energía por medio de bicicletas de spinning,
organizados en células, con el fin de poder crear su entorno virtual y
generar divisas para ellos llamados fondos. Todo el mundo vive en
estrechas celdas, está vestido con un chándal gris y tiene un "doppel", o
avatar virtual que la gente pueda personalizar con la ropa, con un
costo de méritos para ello. Las actividades cotidianas son
constantemente interrumpidas por anuncios que no se pueden omitir o
pasar por alto sin sanción económica. Las personas obesas son
consideradas como ciudadanos de segunda clase, y el trabajo, para ellos
se centra en la limpieza alrededor de las máquinas (donde reciben
maltrato verbal) o se les humilla en los concursos.
Uno
de los productores de energía es Bingham "Bing" Madsen , un ciudadano
de la instalación que ha conseguido más de 15.000.000 méritos y se da el
lujo de saltarse los anuncios. En el baño se oye a Abi, una mujer cuya
voz encuentra bella, cantando una canción desde la instalación. Él la
anima a entrar en el concurso similar a X-Factor de nombre Hot Shots,
que ofrece una oportunidad para que la gente de salir del mundo similar a
la esclavitud que les rodea. Abi, sin embargo, no quiere hacer esto ya
que no tiene méritos suficientes y se siente que ella sería incapaz de
actuar bajo la presión. Bing le convence y, sintiendo que no hay nada
"real" vale la pena comprar, compra el boleto para ella, que se había
levantado gastando los 15 millones de su fondo.
Cuando entra a competir, los jueces y el público disfrutan de su canto, pero afirman que no hay lugar para un “Cantante
Media "y en lugar de darle la oportunidad de convertirse en cantante,
le ofrecen ser una actriz porno en Chicas Wraith, el programa de
televisión pornográfico, o bien volver a las máquinas de bicicletas.
Después de ser incitada por los jueces y la multitud, y drogada por una
sustancia llamada "Cuppliance", Abi acepta a regañadientes y Bing se
queda con el corazón roto.
Bing
regresa a su celda sin Abi y sin ningún vitalidad. Cuando una
demostración de Chicas Wraith aparece en la pantalla, él no es capaz de
saltar la publicidad y se ve obligado a mirar Abi realizar un acto
sexual. Trata desesperadamente de escapar de su celda, embistiendo la
puerta hasta que el cristal oscuro se rompe. Esconde un trozo de cristal
debajo de la cama y empieza a ganar otros 15.000.000 méritos para
entrar en el concurso. No gasta nada para ahorrar. Come de las sobras
que los demás ciudadanos dejan detrás y pedalea durante meses hasta que
conseguir los 15 millones de otro boleto.
Elegido
por étnico para entrar en Hot Shots. Mientras se acerca es obligado a
tomar una dosis de Cuppliance, como Abi hizo, pero presenta la caja de
cartón vacía que él preservó de la actuación de Abi, evitando tomar el
medicamento. Cuando se pone en el escenario comienza a bailar, pero
interrumpe su espectáculo, y con un pedazo de vidrio se amenaza con
matarse en vivo en el show. Entre lágrimas y un discurso acerca de lo
injusto que es el sistema y expresar su enojo por cómo los jueces le
quitaron lo único que quería los jueces, en lugar de tomar en cuenta sus
palabras, están impresionados por su "actuación" y le ofrecen su propio
show, donde se puede despotricar sobre el sistema.
Bajo
una presión similar a la que está situada en Abi antes, él acepta, y se
le ve terminar uno de sus programas en su ático, poniendo su cristal en
una caja de seda. Bing está mirando a una pared de vidrio del panel
enorme, más allá de lo que es un bosque verde que se extiende hasta el
horizonte. El público se pregunta si él está mirando a través de una
ventana o en otra pantalla de ordenador generado. Parece que ha pasado a
una celda mayor. ¿o no?
La
tercera obra de nombre "Toda tu historia" está escrita por Jesse
Armstrong y dirigida por Brian Welsh. En su reparto incluye a Toby
Kebbell, Whittaker Jodie, Tom Cullen y Jimi Mistry.
Situado
en una realidad alternativa donde la mayoría de la gente tiene un
"chip" implantado detrás de la oreja, que registra todo lo que hacen,
ven o escuchan. Esto permite que los recuerdos que van a reproducirse ya
sea delante de los ojos de la persona o en una pantalla, un proceso
conocido como "rehacer".
Liam
Foxwell, un joven abogado, asiste a una evaluación del trabajo que él
siente que no va bien. Después de salir de la reunión que reproduce su
memoria de él y se detiene en una frase aparentemente sincera utilizado
por su empleador.
Desde
allí en taxi se desplaza a una cena organizada por algunos de los
amigos de su esposa, y ve a su esposa Ffion hablando con un hombre al
que no reconoce, y quien es presentado como Jonas. Algunos de los amigos
de Ffion a preguntarle cómo fue la evaluación y sugerir repitiendo como
un "rehacer" para que todos puedan dar su opinión sobre el mismo, pero
Jonas se opone para salvar a Liam de la vergüenza.
En
la cena, Jonas habla cada vez más francamente sobre su vida personal, y
habla de la masturbación y que para ello usa las imágenes de sexo de
sus relaciones anteriores que recupera de su aparato. Durante toda la
comida, Liam comienza a sospechar de cómo entre Ffion y Jonas ha podido
haber algo. Sobre todo porque ella parece estar mirando a Jonas, y es
especialmente sospechoso cuando ella se ríe de broma de mal gusto de
Jonas.
Ya en el hogar, Liam y Ffion intercambian sus impresiones pues
tiene muchas sospechas. Resulta que Ffion había tenido una relación
anterior con Jonas hace muchos años que ella no le había dicho acerca de
Liam. Al principio ella dice que fue en Marrakesh y duró una semana,
luego de un mes, y luego admite que fue de seis meses. Estas mentiras
iniciales provocan que Liam se haga aún más paranoico e insiste en
reproducir imágenes de la noche y exigiendo explicaciones de por qué
Ffion dijo e hizo las cosas que hizo. Ffion se encuentra cada vez más
incómoda con su interrogatorio implacable y la conversación se convierte
en una acusación.
Liam
se disculpa y tienen relaciones sexuales, pero ambos están viendo
reviviendo los grabado de más sexo apasionado anteriores a su relación.
Después de terminar, Liam baja y estudiana una y otra vez las
confesiones de Jonas durante la cena, mientras beber en exceso. Sigue
toda la noche, ya la mañana siguiente discute con Ffion por haberse
reído de la broma de Jonas. Vuelve a la cama y él borracho conduce hasta
la casa de Jonas casa, donde se enfrenta a él sobre su relación con
Ffion, y amenaza con quitarle a Jonas
el “grano” de su cuello si no elimina todas las imágenes que tiene
almacenada en él. Jonas cumple, y Liam se va de la casa. Minutos después
se estrella su coche contra un árbol y se desmaya.
Cuando él despierta, él rebobina de nuevo sus últimos recuerdos con creciente horror, y se va a casa para enfrentarse a Fion.
Ha descubiero en el material de Jonas un material de archivo de Fion en
la pantalla de la pared antes de eliminarlo, Liam notó que había un
archivo de la prueba de la relación entre Jonas y Ffion, de su última
relación sexual dieciocho meses atrás, en la época en que Fion habían
concebido a su hija Jodie. Fion admite haber engañado a Liam, diciendo
que era cuando Liam se había había separado temporalmente de ella tras
una pelea, pero insiste en que ella y Jonas hizo uso de un condón y que
Liam es el padre del bebé. Liam se niega a creer en su palabra y exige
que repetir el de volver a hacerlo para probarlo. Se trata de borrar la
memoria, pero él la detiene, y ve las imágenes, mientras sollozaba y sin
poder mirar a la pantalla. No está claro si el vídeo prueba o refuta
las sospechas de Liam, aunque es muy dado a entender que eran correctas.
En
las escenas finales, Liam se muestra deambulando por la casa, que ahora
está desordenada y medio vacío. Parece que Fion y Jodie se han ido.
Recuerdos felices de su esposa e hija aparecen a medida que camina a
través de cada habitación, hasta que, atormentado por estas se corta el
grano de su cuello con una navaja.
Este tercero capítulo podría tener lugar en un futuro no muy lejano. Nos habla de cómo se puede quedar reflejado en unas memorias digitales incorporadas a nosotros detrás
de nuestra oreja, en un mecanismo de almacenamiento de nuestras
vivencias que recuerda mucho a momento. Aunque la posibilidad de
recordarlo todo pueda parecer deseable, tiene muchos puntos negativos,
como lo demuestra esta historia. Consigue contar la historia más cotidiana, la que más implica al espectador. Transforma al ser humano en un Gran Hermano de
su propia vida, deseoso de que los demás contemplen sus vivencias y
ávido de presenciar las del resto sin importar las consecuencias.
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