Estoy como niño con zapatos nuevos con mi Fusión de MoviStar que me ha supuesto tener un montón de canales en HD en mi televisor. No sólo son canales, sino que me han puesto a mi disposición en buen número de series y películas, una clásicas y otras actuales, de las que algunas ya he hecho uso. De entre las películas he seleccionado una por remitirme a una ciudad en la que he estado recientemente como es San Francisco.
Mientras estaba en la ciudad californiana, viendo
sus calles en pendiente me acordé de una persecución, posiblemente la
persecución más famosa en la historia del cine, que dura 10 minutos y 53
segundos. La película es Bullitt del año 1968, dirigida por Peter Yates, y con
Steve McQueen en el papel principal. La famosa persecución en coche .
La escena principal de Bullit tiene como vehículo
protagonista a un Ford Mustang GT-390 largo de color verde oscuro, persiguiendo
a dos asesinos a sueldo en un Dodge Charger R/T negro. Se trató de la primera
película producida bajo la productora de Steve McQueen, Solar Productions,
aunque participan igualmente Philip D'Antoni conjuntamente con la Warner Brothers y
Seven Arts. En la película se invirtieron 5’5 millones de dólares.
El guión, de Alan Trustman y Harry Kleiner,
aunque está basado en la novela de 1963 Mute Witness (Testimonio mudo), de
Robert L. Fish (también conocido como Robert L. Pike). Lalo Schifrin compuso la
música, de carácter jazzístico. William A. Fraker fue el encargado de la
fotografía y Frank P. Keller en el montaje.
El elenco lo encabeza Steve McQueen como el
teniente Frank Bullitt, y aparece acompañado por una jovencísima y guapísima
Jacqueline Bisset como su novia Cathy – papel que había rechazado Katharine
Ross , Robert Vaughn como Walter Chalmers , Don Gordon como el sargento Don
Delgetti, compañero de Bullit, Robert Duvall como el taxista, Simon Oakland,
Carl Reindel, Norman Fell, Suzanne Sommers.
La película comienza en Chicago donde un hombre
está cometiendo un robo, aunque es sorprendido por la policía. Momentos ese mismo
personaje , aparentemente, llega a la ciudad de san Francisco y pide protección
a un político ambicioso de California, Walter Chalmers, (Robert Vaughn) quien
dirige una audiencia que busca denunciar a la mafia estadounidense. Walter
quiere contar con ese hombre como testigo. Este hombre, Johnny Ross (Felice
Orlandi), un ex miembro de la mafia de Chicago, al cual espera utilizar tanto
para escalar en su carrera política, como para combatir a la mafia.
Johnny Ross es un ex mafioso que ha robado 2 millones
de dólares a la misma organización, y tras sufrir dos intentos de asesinato,
habría negociado con el senador Chalmers la entrega de información a cambio de
protección judicial, lo que fue aceptado, y esa es la razón por la cual viaja a
San Francisco. Es viernes.
Al llegar, se dirige en taxi a un hotel para
preguntar en la recepción si hay algún mensaje para él; al no haberlo, continúa
su viaje. Al subir al taxi, el portero del hotel le abre la puerta de éste, y
luego cuando el vehículo se aleja, hace una llamada telefónica confirmando la
presencia de Ross en San Francisco.
El mafioso se detiene en el camino para hacer
unas llamadas desde un teléfono público y luego se dirige, según unas
instrucciones que lleva consigo, a un hotel barato, donde se aloja.
La audiencia se realizará el lunes siguiente, por
lo que el mafioso prófugo queda bajo la custodia del departamento de Policía de
San Francisco, asignado a la unidad del teniente Frank Bullitt (Steve McQueen),
a petición del senador Chalmers que ese mismo viernes tarde está celebrando una
recepción en su casa en la zona de Russian Hill. La unidad del teniente Bullitt
está compuesta por el inspector Carl Stanton (Carl Reindel) y el sargento Don
Delgetti (Don Gordon).
El sábado por la mañana, Bullitt es despertado
por el sargento Delgetti, quien viene a recogerlo para llevarlo a la mansión
del senador Chalmers. Después de entrevistarse con el senador, que le explica
la situación de Ross y le da la dirección del hotel donde se encuentra, los tres
policías viajan al hotel barato donde éste se aloja.
Allí los recibe Ross en su habitación. Bullitt
llama por teléfono a su jefe, el capitán Samuel Bennett (Simon Oakland), que le
confirma que era el senador quien había elegido el hotel barato, y a él, por
ser un policía popular en la prensa de San Francisco. Bullitt decide mantener
al mafioso en el mismo hotel, a pesar de la falta de seguridad del mismo, hasta
el lunes próximo, bajo vigilancia las 24 horas, para lo cual los tres policías
se reparten en turnos. Delgetti, el primero, luego Stanton en segundo lugar y
Bullitt en tercero. Este último decide pasar a buscar a su novia Cathy
(Jacqueline Bisset) a su trabajo para invitarla a salir a comer.
Durante el turno del inspector Stanton, una
llamada del recepcionista del hotel a la 1 de la madrugada, le avisa de que el
senador Chalmers y un acompañante desean subir a la habitación. Stanton duda de
la situación y llama al teniente Bullitt. Éste, que se encontraba en compañía
de su novia, le dice que haga esperar a los visitantes durante 5 minutos y que
sale inmediatamente al hotel.
Durante el transcurso de la llamada, Ross se
dirige a la puerta y le quita el cerrojo de seguridad. Stanton alcanza a notar
que Ross había quitado el cerrojo, cuando sorpresivamente dos hombres, Mike y
Phil (John Aprea y Bill Hickman) entran violentamente en la habitación.
Uno de ellos está armado con una escopeta.
Stanton recibe un escopetazo en una pierna y una patada en el rostro. El
inspector se desmaya. Ross cree que los asaltantes lo vienen a rescatar y
comienza a ponerse la americana, cuando ve sorprendido que lo apuntan con la
escopeta y recibe también un disparo en el pecho y la cara. Al poco rato llega
Delgetti, y unas ambulancias, seguido de Bullitt.
En el camino al hospital, Stanton le informa a
Bullitt del ataque y le da una descripción física de los asesinos, del arma
utilizada y de la acción de Ross de quitar la cadena de la puerta. El teniente
queda muy sorprendido por la información y decide investigar a fondo el asunto.
Ya en el hospital, Stanton comienza a recuperarse de su herida, pero Ross está
agonizante. Durante el trayecto son seguidos a distancia por los
asaltantes.
Al hospital llega el jefe de Bullitt, el capitán
Samuel Bennett, anunciando que había informado al senador Chalmers del
atentado, y éste, al enterarse de la situación, había hecho patente su
intención de culpar al departamento de Policía, y a Bullitt en particular, por
su fracaso en la custodia de Ross. Más tarde, llega el senador y se entabla un
tenso diálogo entre Chalmers y Bullitt.
El policía se defiende preguntando sobre el trato
que existía entre el senador y Ross, pero solo recibe amenazas sobre el destino
de su carrera policial, además de cambiar el senador al médico responsable, el
doctor Willard (Georg Stanford Brown), aduciendo inexperiencia y juventud.
Bullitt no se deja amedrentar, y junto con Delgetti y varios policías, decide
quedarse en el hospital para custodiar al agonizante Ross.
En el momento en que el senador Chalmers abandona
el hospital, uno de los pistoleros, Mike, ingresa por la puerta del mismo y
luego de preguntar por Ross a un médico, diciendo que se trata de un amigo
suyo, el doctor le dice en qué sector se encuentra, pero sospecha y le avisa a
Bullitt de la visita. Una enfermera del hospital descubre a Mike en una
escalera, mientras se quitaba un picahielos que llevaba adherido a su pierna, y
grita. Bullitt comienza a perseguirlo, pero el homicida logra escapar.
De regreso en el hospital, el doctor Willard le
comunica que Ross ha muerto. Resuelto a aclarar el crimen, Bullitt decide
ocultar la muerte de Ross, y convence al doctor de enviar el cuerpo al depósito
de cadáveres, bajo otro nombre, y además traspapelar los informes médicos de
Ross, para ganar tiempo en su investigación. El médico accede a hacerlo.
En la mañana siguiente, ya domingo, el senador
Chalmers acompañado de otro capitán de Policía, Baker, (Norman Fell) y sus
hombres, llegan al hospital y se enteran de la desaparición de Ross. Buscan al
médico para que les informe, pero éste no está de turno; piden el archivo de
Ross, y tampoco lo encuentran. Indignado, Chalmers llama a Bullitt por
teléfono, éste le dice que tiene a Ross y se niega a entregar más información.
El senador le pasa el auricular al capitán Baker, pero Bullitt corta la
comunicación.
Al sentirse ignorado, le ordena al capitán Baker
que saque a Bullitt del caso, y sale en busca del capitán Bennett,
encontrándolo en la puerta de una iglesia, ya entrando al servicio dominical.
Le entrega un informe, que lo obliga a presentar a Ross en la mañana del día
siguiente. Bullitt regresa a la habitación del hotel, buscando alguna evidencia
para resolver el caso.
Más tarde, junto a Delguetti presionan al
recepcionista del hotel para que entregue más información, siguiendo la técnica
del "policía bueno" y el "policía malo"; el recepcionista,
que había sido golpeado y dejado inconsciente por los asesinos, solo puede
recordar que Ross había llegado al hotel la primera vez, en un taxi de una
empresa en particular.
Bullitt decide buscar al taxista (Robert Duvall),
lo encuentra y realiza en su taxi el mismo recorrido que había hecho Ross,
cuando había llegado a San Francisco.
En el trayecto, decide llamar a un informante,
Eddy (Justin Tarr), para ver si existe información en el bajo mundo, sobre el
caso de Ross. El taxista al verlo hacer la llamada, recuerda que Ross había
hecho dos llamadas, de las cuales una había sido de larga distancia, por la
cantidad de monedas usadas.
Bullitt se encuentra al rato con su informante,
que le cuenta sobre el robo de los 2 millones a la mafia, que existe un
contrato para asesinarlo; que ya habían intentado asesinarlo el viernes en
Chicago, y que la mafia tiene controladas las salidas de San Francisco.
Durante todo el recorrido son seguidos por la
pareja de asesinos, sin advertirlo. Bullitt regresa a donde había estacionado
su automóvil y observa que otro automóvil, semioculto, parece esperar su
partida.
Efectivamente, a los pocos minutos de marcha, Bullitt se da cuenta que es seguido y realiza una rápida maniobra evasiva. El policía consigue posicionarse detrás de sus perseguidores. Phil, el homicida profesional que conduce el coche, al darse cuenta, emprende la huida. Comienza entonces una persecución automovilística a alta velocidad por las empinadas calles de San Francisco. El policía los persigue inflexiblemente y la carrera continúa en las afueras de la ciudad. Al aproximarse, Bullitt los reconoce como los que habían matado a Ross, y uno de ellos, Mike, le dispara con su escopeta. El policía comienza a estrellar su vehículo contra el de los delincuentes, con la intención de sacarlos del camino, pero de repente la carretera se divide y el coche de los pistoleros va a estrellarse en una estación de gasolina, muriendo quemados. Con su automóvil maltrecho, Bullitt va a dar a una zanja.
Efectivamente, a los pocos minutos de marcha, Bullitt se da cuenta que es seguido y realiza una rápida maniobra evasiva. El policía consigue posicionarse detrás de sus perseguidores. Phil, el homicida profesional que conduce el coche, al darse cuenta, emprende la huida. Comienza entonces una persecución automovilística a alta velocidad por las empinadas calles de San Francisco. El policía los persigue inflexiblemente y la carrera continúa en las afueras de la ciudad. Al aproximarse, Bullitt los reconoce como los que habían matado a Ross, y uno de ellos, Mike, le dispara con su escopeta. El policía comienza a estrellar su vehículo contra el de los delincuentes, con la intención de sacarlos del camino, pero de repente la carretera se divide y el coche de los pistoleros va a estrellarse en una estación de gasolina, muriendo quemados. Con su automóvil maltrecho, Bullitt va a dar a una zanja.
De regreso en la estación de policía, Bullitt,
acompañado por Delgetti, son recibidos por los capitanes Bennett y Baker, que
interrogan y presionan a Bullitt para que entregue información sobre su
proceder. Bullitt les dice la verdad y consigue que le den plazo hasta la
mañana del lunes para terminar con su investigación, ya que tiene una pista, a
lo que el capitán Bennett accede, con la disconformidad de capitán Baker.
El policía había rastreado las llamadas que había
hecho Ross, y descubierto que una de ellas había sido hecha a alguien llamado
Dorothy Simmons (Brandy Carroll), huésped en un motel de la cercana ciudad de
San Mateo. Solicita un vehículo, para viajar hasta dicha ciudad, pero su
petición es rechazada. Bullitt sospecha que se trata de una maniobra, por
despecho, del capitán Baker. Llama a su novia Cathy y le pide que lo conduzca
en su propio automóvil a San Mateo.
Llegados allí, Bullitt le pide a ella que lo
espere en el coche. Mientras el policía pide el número de la habitación, un
hombre con las características físicas de Ross, abandona el hotel. Bullitt
llega a la habitación y descubre el cadáver estrangulado de Dorothy Simmons.
Llama inmediatamente a la policía local y a una ambulancia.
Al verlos llegar, Cathy se asusta y teme por la
vida de Bullitt. Decide entrar al hotel a buscarlo, encontrándolo junto al
cadáver estrangulado de la víctima, en una actitud profesional, fría, que no
comprende.
Ya de regreso, ella detiene su vehículo y le
encara la vida llena de violencia, crímenes y muertes que él lleva, y que lo
está convirtiendo en un ser deshumanizado, y dice que no sabe a donde conducirá
la relación entre ambos, ya que ella no acepta ese mundo. Él le responde que la
relación entre ambos comienza en ese momento.
Nuevamente en el cuartel, Bullitt y Delgetti
revisan las maletas de la asesinada Dorothy Simmons, buscando alguna pista, y
se encuentran que todas están llenas de ropa y accesorios recién comprados.
También encuentran ropa de hombre con un monograma, A.R. Buscando más
minuciosamente encuentran una gran cantidad de cheques de viaje a nombre de
Albert Renick y Dorothy Renick, y muchos folletos turísticos de Roma, Italia.
Bullitt cree comenzar a entender la trama y pide a las autoridades en Chicago,
una copia de la solicitud del pasaporte de Dorothy Renick y de su marido.
En ese momento aparece el senador Chalmers,
exigiéndole a Bullitt el reconocimiento firmado de su responsabilidad en la
muerte de Ross. El policía lo ignora.
Después de una tensa espera, llega la respuesta
de Chicago, donde se confirma la identidad de Dorothy Renick por su foto en la
solicitud, junto a la solicitud de su marido, Albert Edward Renick, cuya foto
resulta ser la de John Ross. El teniente Bullitt le dice a Chalmers que el
hombre que había sido asesinado en el hotel por los pistoleros, era realmente
Albert Renick y no Johnny Ross, dejando mudo al senador.
Más tarde, Delguetti le dice a Bullitt que ha
averiguado que la pareja Renick tiene pasajes por avión para Roma a las 19
horas; que se ha comunicado con las autoridades de Chicago para preguntar por
los antecedentes de Albert Renick, y que le habían confirmado que Renick es un
vendedor de autos de Chicago, sin ninguna relación con la mafia. Seguramente el
vendedor de autos habría sido comprado por Ross para que solicitara un
pasaporte con su foto, aprovechando el parecido físico entre ambos, y habría
encargado después su asesinato, para de ésta manera dejar establecida su falsa
muerte. También se habría deshecho de su esposa Dorothy, asesinándola para que
no hablara.
Bullitt y Delgetti viajan al aeropuerto para
encontrar y arrestar a Ross, cuando aborde el avión. Esperan junto a la puerta
de embarque, y faltando un par de minutos para la salida del vuelo, Bullitt
observa que cinco minutos antes estaba programado un vuelo con destino a
Londres. Llama al despacho de la línea aérea, donde le confirman que el
pasajero Renick está a bordo del avión.
Bullitt consigue hacer regresar al avión,
justificándolo con un problema técnico. Mientras espera junto a Delguetti, el
senador Chalmers, que también se encontraba allí, al darse cuenta de que sus
planes han fracasado, intenta negociar con Bullitt el resultado de la detención
de Ross, pero es rechazado con desprecio por el policía.
Los pasajeros comienzan a descender y Bullitt
decide entrar a la cabina para identificar al verdadero Ross (Pat Renella).
Después de un intercambio de miradas, Ross decide huir, abandonando el avión
por la puerta trasera, saltando al asfalto, siendo perseguido por Bullitt.
Comienza una cacería por la pista del aeropuerto, entre grandes aviones que se
preparan para despegar.
Ross regresa al edificio del aeropuerto repleto
de gente, buscando escabullirse entre los viajeros, pero Delgetti ya ha
alertado a la guardia de seguridad y el cerco se estrecha para Ross. Éste logra
llegar hasta una de las puertas automáticas de edificio, donde es conminado por
un guardia a rendirse. Ross le dispara y el guardia cae, bloqueando las
puertas. Ross se da la vuelta para hacer lo mismo con Bullitt, pero el policía
se adelanta y termina con su vida allí mismo.
La escena final muestra a Bullitt de regreso en
su apartamento, donde Cathy duerme. Silenciosamente se dirige al baño, deja
correr el agua del lavabo, y se queda contemplando su propia imagen en el
espejo.
La película tuvo dos nominaciones a los Oscars
del año 1969, y ganó un Oscar al mejor montaje (Frank P. Keller), fue
candidata, como hemos dicho, al mejor sonido y está preservada en el archivo de
la Biblioteca
del Congreso de los Estados Unidos. Igualmente consiguió en los American Cinema
Editors 1969 el premio al mejor montaje de película, también su montaje fe
premiado con Premio Golden Reel (1969) y el Premio Edgar (1969) a la mejor
película. Ganó el Premio a la mejor fotografía de NSFC 1969. Como mejor
película quedó en segundo lugar en el Premio Laurel de Oro 1970 y en el 2000
obtuvo el Premio a la Toma
histórica, centrada en la persecución.
Para Robert Ebert , el que fuera crítico del Chicago Sun Times "McQueen está estupendo en Bullitt, y la película es estupenda, porque el director Peter Yates entiende la imagen de McQueen y trabaja dentro de ella. Él termina de tal manera que se puede afirmar que es la mejor película de acción de los últimos años". En cuando a las crítica Fernando Morales del
Diario El País dijo de ella "Sin duda, uno de los mejores filmes de acción
que ha dado el séptimo arte. Apasionante historia protagonizada por un
impagable McQueen. Con persecuciones, emoción y intensidad". En el Diario "El mundo" además de reconocer de que estamos ante la mejor persusión automovilística de todos los tiempo, contando además la ausencia del elemento digital lo que le da más valor. No obstante critica a Mac Queen por no da talla en comparación con Bogart o Michum para revitalizar el cine negro, aunque Yates jugaba con tres factores fundamentales a su favor: la pasión de McQueen por los coches, las carreras y la velocidad; las calles de San Francisco, con sus cuestas vertiginosas, y, lo más importante, con el hecho de haber sido piloto acrobático antes que cineasta. El resultado es una secuencia memorable en una cinta que no lo es tanto.
Para Antonio Toca en Blogdecine "La mejor persecución de la historia". El parte de que en una reciente se ha realizado una encuesta para conocer cuáles eran según el público, las mejores persecuciones de coches de la historia del cine. Para el primer puesto no ha habido ninguna duda. Éste ha sido para Bullit, con un 40% de los votos.
Para Antonio Toca en Blogdecine "La mejor persecución de la historia". El parte de que en una reciente se ha realizado una encuesta para conocer cuáles eran según el público, las mejores persecuciones de coches de la historia del cine. Para el primer puesto no ha habido ninguna duda. Éste ha sido para Bullit, con un 40% de los votos.
Las calles de la ciudad de San Francisco son
también protagonistas silenciosas de la película. Especialmente destaco las
viviendas de Russian Hill , en concreto el Bloque 800 de Chestnut Street cerca
del San Francisco Art Institute y de Leavenworth Street. Aparecen igualmente el
Embarcadero con su antiguo aspecto modificado por el terremoto de Loma Prieta
en 1989. También fue modificado las alrededores del Hotel Kennedy u el miso
hotel ubicado en The Embarcadero cerca de la calle Howard. Ese edificio, junto
a la autopista de dos niveles se derribaron como parte de un importante
desarrollo de la línea de costa, así como la Freeway o vía rápida costera de la ciudad.
Se rodó en otros puntos como E. Millbrae Avenue
(Clarion Hotel entonces Thunderbird Hotel) , en la Taylor & Vallejo Sts.
en Russian Hill Street, Broadway (Enrico's Café), Brisbane, Mission District,
Union Street, Columbus & Lombard Streets, North Beach,Grace Cathedral
Episcopal Church en California Street, Intersection of York & Peralta en
Bernal Heights, Marina Green, en Marina District,o el San Francisco
International Airport, San Francisco, California, También se rodó en la Warner Brothers
Burbank Studios (Los Ángeles), en Chicago.
Hasta ese momento, San Francisco no era un gran
meca película y fue una decisiones de su alcalde, Joe Alioto, que estaba muy
interesado en promoverlas, por lo que Bullit (1968) disfrutó de una libertad de
movimiento alrededor de la ciudad que sería difícil de encontrar hoy en día,
incluyendo renunciar a un ala del hospital entero para la filmación, el cierre
de varias calles durante tres semanas para la escena de persecución de coches y
rodar en el aeropuerto internacional de San Francisco por la noche. De hecho en
el guión original se había establecido se desarrollo en Los Ángeles. Pero
finalmente el productor d'Antoni fue convencido por Alioto.
En cuanto a lo más famoso del film, la
persecución por las calles de SanFran, señalar que los dos Mustangs y dos
cargadores de Dodge se utilizaron para la famosa escena. Ambos Mustangs eran
propiedad de la Motor
Company y eran parte de un acuerdo de préstamo promocional
con la Warner
Brothers. El coche de Frank Bullitt es un Ford Mustang GT del
1968. La famosa escena de la persecución de la película no estaba originalmente
en el guión. En el primer borrador de "Bullitt", adaptada de la
novela de Robert L. Pike "Mute Witness", el Det. Frank Bullitt era un
policía de Boston que comía un montón de helado y nunca resolvía un caso. El
libro originalmente había sido comprado para tener como protagonista a Spencer
Tracy; pero con la muerte de Tracy, la propiedad pasó a manos de Steve McQueen
y el productor Philip D'Antoni. D'Antoni añadió la persecución y se cambió la
ubicación de San Francisco. Los malos conducen un Dodge Charger Magnum también
del 68. Los coches fueron modificados para la persecución a alta velocidad por
el veterano piloto Max Balchowsky. El coordinador de especialistas Carey Loftin
consiguió que Bud Ekins condujera el Mustang para la mayor parte de las escenas
de riesgo. Los coches rodaban a velocidades de 75 a 80 kilómetros por
hora, pero los coches (incluidos los que contienen las cámaras) alcanzaron
velocidades de más de 110 Tanto unos Mustangs como el Dodge fueron hechos
chatarra después de la filmación. . El otro Mustang menos dañado fue comprado
por un empleado del Banco Mundial después se completó toda la producción y
post-producción. El coche terminó en Nueva Jersey unos años más tarde, donde
Steve McQueen intentó comprarlo.
El rodaje de la escena de la persecución se
desarrolló durante tres semanas resultando los 10 minutos de metraje. Se
les negó el permiso para filmar en el puente Golden Gate. La esposa de Steve
McQueen rogó a Peter Yates utilizar especialistas. Así que cuando McQueen
informó para el deber de encontrar especialista Bud Ekins sentado en su coche,
vestido como McQueen, se puso furioso. Fue precisamente Bud Ekins quien también
hizo el salto de motocicleta de Steve McQueen en La evasión gran (1963). Aunque
Steve McQueen fue acreditado como el conductor durante la secuencia de la
persecución en realidad fue compartida por McQueen y Bud Ekins.
Tradicionalmente, las persecuciones de coches son filmados por segundas unidades, pero Peter Yates insistieron en hacerla él mismo.
Steve McQueen basó su personaje en el inspector
de Homicidios de San Francisco Dave Toschi, que se hizo famoso por su trabajo
en los asesinatos del zodiaco. Lalo Schifrin sugirió que había que añadir
música que añadir a esa secuencia, señalando que la banda sonora era lo
suficientemente poderosa. Un dato que ha querido destacarse es la vestimenta
del teniente Bullit, muy casual, pero apropiada para un policía que ha de
resolver su caso en un fin de semana.
Robert Vaughn ha dicho en repetidas ocasiones que
su actuación en esta película es su mejor y contiene el trabajo que está más
orgulloso. Robert Vaughn, quien interpreta al político Walter Chalmers recibió
el guión y no le gustó. Vaughn sintió que no había trama, ni un argumento
sensato. Steve McQueen insistió Vaughn hacer la película que el actor se había
negado, hasta que el estudio siguió ofreciéndole más dinero cuando finalmente
dijo que sí. Varios años más tarde, Robert Vaughn consideró activamente entrar
en la política. Para su consternación, descubrió que las personas no se lo
tomaban en serio.
El personaje de Jacqueline Bisset se muestra
trabajando en un estudio de arquitectura con un modelo de una fuente
modernista. Se trata de un modelo real de una escultura titulada "Quebec
libre!" por el escultor canadiense Armand Vaillancourt. La fuente
monumental se encuentraba en estudio en el momento en que se hizo la película.
La fuente fue construida y terminada 3 años más tarde, en 1971, no en negro
como muestra el modelo, pero sí en hormigón gris natural. Se puede ver hoy en
el centro de Embarcadero en San Francisco.
Bonnie y Clyde (1967) había popularizado el uso
de petardos para simular heridas de bala de un año antes, pero Bullit fue una
de las primeras películas en incorporarlos con los paquetes de sangre para dar
mayor realismo, especialmente cuando los asesinos matan al supuesto ganster .
El director Peter Yates fue seleccionado
personalmente por de Steve McQueen para esta película, porque Yates había
filmado una persecución de coches realistas el año anterior por las calles de
Londres en El robo Gran (1967). Para conseguir más intensidad, una de las
primeras cosas que Peter Yates hizo cuando él consiguió el trabajo era
convencer a Warner Brothers que le comprara una cámara Arriflex ligera que
podía usar para todo su material de archivo de mano.
Peter Yates contrató a una empresa de transporte
local para algunas tomas de fondo (sobre todo la escena donde el Dodge Charger
se estrella en la estación de servicio), pero evitó que el camión fuese rojo.
No quería que ningún vehículo de color rojo en la película, ya que iría en
detrimento de la sangre. Un camión azul se envió en su lugar.
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