Cuando hablamos del cine de catástrofes nos referimos a aquel que tiene como centro de la historia una catástrofe en curso o inminente para la humanidad. Este género, que se hizo famoso en los setenta con un sinfín de Aeropuertos, que comenzó - creo- con la película Aeropuerto dirigida en 1970 por George Seaton y protagonizada por Burt Lancaster, Dean Martin, Jean Seberg, Jacqueline Bisset, George Kennedy, Helen Hayes y Van Heflin en los papeles principales, encabezando un largo reparto; y que contó con muchos epígonos como Aeropuerto 75 dirigida por Jack Smight en 1974, y dio con una fórmula de éxito para el cine de la década -como se aprecia en Aeropuerto 77 y Aeropuerto 80- y de la siguiente, y que , de vez en cuando resurge como Ave Fénix en los noventa y en este milenio.
La fórmula consistía en llevar a la gran pantalla una historia aparentemente normalizada ( un vuelo, una fiesta en un bloque de pisos, un paseo por el campo o la playa,...) que , de repente, acaba siendo un infierno para los personajes debido a las catástrofes naturales (reales o ficticias), tales como grandes incendios, terremotos, inundaciones, volcanes o una hipotética colisión de un asteroide contra la Tierra, a una invasión de plagas, depredadores, mutantes o alienígenas o por siniestros de avión o barcos. Todo ello es una delicia para un público casi "sadomasoquista" que disfruta o alucina con las muertes o terribles circunstancias que viven los protagonistas para divertimento de los espectadores. Por cierto, protagonistas que suelen ser estrellas de ayer y de hoy de Hollywood. Por ejemplo, ese Aeropuerto 74 fue interpretado por actores casi en su cénit tales como Charlton Heston, hoy una olvidada Karen Black o Linda Blair, el recientemente fallecido George Kennedy, un actor de los cincuenta como Dana Andrews y dos divas del cine mudo como Gloria Swanson y Myrna Loy. La fórmula de éxito ha contado con grandes presupuestos y ha dado lugar a importantes réditos.
El año 1974 fue productiva en este tipo de películas. Ese año se rodó por ejemplo Terremoto dirigida por Mark Robson con Charlton Heston, Ava Gardner , Geneviève Bujold , George Kennedy, Lorne Greene, Richard Roundtree, Marjoe Gortner, Barry Sullivan, Lloyd Nolan, Victoria Principal, Monica Lewis, Pedro Armendáriz Jr. y Walter Matthau ; Tiburón dirigida por Steven Spielberg y protagonizada por Richard Dreyfuss y Roy Scheider; y The Towering Inferno aquí conocida como El coloso en llamas .
La película en cuestión fue producida por Irwin Allen y dirigida por el británico John Guillermin - director fallecido el pasado 2015 y protagonizada por reparto coral repleto de estrellas y encabezado por Steve McQueen y Paul Newman.
Fue una coproducción de 20th Century Fox y Warner Bros. con la Irwin Allen Productions- aunque también participó la United Films - , la primera película resultado de la unión de dos grandes estudios, con guión de Stirling Silliphant basado en dos novelas: La torre, de Richard Martin Stern y The Glass Inferno de Thomas N. Scortia y Frank M. Robinson. La película siguiendo el esquema de las películas de catástrofes contó con un presupuesto de $14.3 millones. Como buena película de catástrofes contó con una recaudación de $139.7 millones.
En el apartado técnico contó con gente experimentada como John Williams para la música, la fotografía de Fred J. Koenekamp, el montaje de los hermanos Carl Kress y Harold F. Kress
Como era de experar el reparto lo integraban actores en la cúspide, otros en decadencia, otras que parecían grandes estrellas y fueron fugaces , otros procedentes del medio televisivo que se entreveran en múltiples líneas argumentales, y que serán personajes que intentan evitar, escapar o resistir las consecuencias de la catástrofe. Hay siempre uno o dos personajes principales, con varios menores y muchos extras suelen morir antes de la resolución de la historia.
En este caso el elenco protagonista lo forman Paul Newman como Doug Roberts, el Arquitecto; Steve McQueen como Michael "Mike" O'Halloran, como el Jefe del bomberos , William Holden como James "Jim" Duncan, el Constructor, Faye Dunaway como Susan Franklin, la prometida de Doug Roberts, Fred Astaire como Harlee Claiborne, el estafador que coquetea con la señora Mueller, Susan Blakely como Patty Duncan Simmons, hija de James Duncan, Richard Chamberlain como Roger Simmons, el ingeniero eléctrico, y yerno de Duncan , una casi irreconocible Jennifer Jones como Lisolette Mueller, OJ Simpson como Harry Jernigan, el Oficial Jefe de Seguridad, Robert Vaughn como el senador estadounidense Gary Parker, Robert Wagner como Dan Bigelow, el oficial de relaciones públicas.
A estos se le suman Susan Flannery como Lorrie
Sheila, Matthews Allen como Paula Ramsay, Norman Burton como Will Giddings, ingeniero eléctrico, Jack Collins como Alcalde Robert "Bob" Ramsay, Don Gordon como Kappy, el capitán de Bomberos, Felton Perry como Scott, otro bombero, Gregory Sierra como Carlos, el camarero, Ernie Orsatti como Mark Powers, otro de los bomberos, Dabney Coleman como el Jefe Adjunto de ls bomberos, Elizabeth Rogers como una de las señoras, Ann Leicester como invitado, Norma Grabowski como el jefe de la Armada de rescate aéreo, Ross Elliott como el jefe Adjunto de los bomberos, Olan Soule como Johnson, Carlena Gower como Angela Allbright, Mike Lookinland como Phillip Allbright, Carol McEvoy como la señora Allbright, Scott Newman como el joven bombero, Paul Comi como Tim, George Wallace como el Oficial Jefe, Patrick Culliton como Técnico, William Bassett como un agente de venta, John Crawford como Callahan, Erik Nelson como Wes, Art Balinger como el locutor. Se suman Norman Hicks como piloto, Thomas Karnahan como copiloto, Maureen McGovern como la cantante en la fiesta, William Traylor como Bill Harton, el guardia de seguridad.
Varios actores que aparecían en pequeños papeles, incluyendo a John Crawford, Erik Nelson, Elizabeth Rogers, Ernie Orsatti y Sheila Matthews, habían aparecido previamente en La aventura del Poseidón , que Irwin Allen también produjo. El hijo de Paul Newman participa como Scott el bombero que hace rappel en el hueco del ascensor.
La historia comienza con un helicóptero que se dirige hacia San Francisco, ciudad que aparece entre nieblas hasta definirse finalmente, viendo desde el helicóptero su skyline de donde destaca un rascacielos, el más alto del mundo acaba de ser construido en San Francisco.
Del mismo helicóptero baja el arquitecto que ha proyectado el edificio, Doug Roberts (Paul Newman) que regresa a San Francisco desde su nueva finca para la dedicación de la torre de cristal, que diseñó para el propietario de James "Jim" Duncan, (William Holden) y su constructor,
El edificio es un mastodonte de 1.800 pies o 550 metros, siendo en 1974 es el edificio más alto del mundo.
Nada más bajarse se entrevista con Jim que cree que la retirada de Doug es momentánea y le dice que se verán esta noche en la inauguración oficial. Tras esto, Doug va a su oficina en el edificio en el que le espera su prometida Susan Franklin (Faye Dunaway),
Mientras Doug Roberts y Susan pasan el rato juntos, aquí puedes leer lo que quieras, se detecta en el edificio un par de cortocircuitos. Uno de ellos no es detectado, con el que se inicia un fuego sin ser detectados en el piso 81. Mientras que con el otro, tras ser informado Roberts del mismo y llegarse a ver la causa del mismo descubre que no se han respetado las especificaciones técnica en los claves en ninguna parte del edificio. Robert habla con Jim, pero entre los dos llegan a la conclusión que el responsable de eso es el ingeniero eléctrico del edificio, Roger Simmons (Richard Chamberlain) y yerno de Duncan. Roberts que va a Lombard Street a casa del ingeniero eléctrico para entrevistarse con éste. Allí está su mujer Patty Duncan Simmons, (Susan Blakely), la hija de James Duncan, y poco después llegar Roger, un vividor egoista y manirroto, al que Robert acusa ,de comprar un cable de menos calidad con el que se ha montado todo el edificio. de cortar esquinas, Simmons insiste en que el edificio está a la altura.
Por la noche tiene lugar una fiesta con numerosos invitados (senadores, alcalde, congresistas, empresarios,....) en la sala de baile, situada en la planta más alta del edificio.
Durante la ceremonia de dedicación, el jefe de relaciones públicas Dan Bigelow (Robert Wagner ) ordena encender las luces exteriores de la torre para impresionar a los invitados y dignatarios. La iluminación sobrecarga el sistema eléctrico y Roberts ordena que se apaga de inmediato viendo la mala calidad del cable Tras esto Dan Bigelow, el oficial de relaciones públicas, se va a su despacho para pasar la velada con su secretaria.
Del mismo helicóptero baja el arquitecto que ha proyectado el edificio, Doug Roberts (Paul Newman) que regresa a San Francisco desde su nueva finca para la dedicación de la torre de cristal, que diseñó para el propietario de James "Jim" Duncan, (William Holden) y su constructor,
El edificio es un mastodonte de 1.800 pies o 550 metros, siendo en 1974 es el edificio más alto del mundo.
Nada más bajarse se entrevista con Jim que cree que la retirada de Doug es momentánea y le dice que se verán esta noche en la inauguración oficial. Tras esto, Doug va a su oficina en el edificio en el que le espera su prometida Susan Franklin (Faye Dunaway),
Mientras Doug Roberts y Susan pasan el rato juntos, aquí puedes leer lo que quieras, se detecta en el edificio un par de cortocircuitos. Uno de ellos no es detectado, con el que se inicia un fuego sin ser detectados en el piso 81. Mientras que con el otro, tras ser informado Roberts del mismo y llegarse a ver la causa del mismo descubre que no se han respetado las especificaciones técnica en los claves en ninguna parte del edificio. Robert habla con Jim, pero entre los dos llegan a la conclusión que el responsable de eso es el ingeniero eléctrico del edificio, Roger Simmons (Richard Chamberlain) y yerno de Duncan. Roberts que va a Lombard Street a casa del ingeniero eléctrico para entrevistarse con éste. Allí está su mujer Patty Duncan Simmons, (Susan Blakely), la hija de James Duncan, y poco después llegar Roger, un vividor egoista y manirroto, al que Robert acusa ,de comprar un cable de menos calidad con el que se ha montado todo el edificio. de cortar esquinas, Simmons insiste en que el edificio está a la altura.
Por la noche tiene lugar una fiesta con numerosos invitados (senadores, alcalde, congresistas, empresarios,....) en la sala de baile, situada en la planta más alta del edificio.
Durante la ceremonia de dedicación, el jefe de relaciones públicas Dan Bigelow (Robert Wagner ) ordena encender las luces exteriores de la torre para impresionar a los invitados y dignatarios. La iluminación sobrecarga el sistema eléctrico y Roberts ordena que se apaga de inmediato viendo la mala calidad del cable Tras esto Dan Bigelow, el oficial de relaciones públicas, se va a su despacho para pasar la velada con su secretaria.
De repente, una fallo en la instalación eléctrica provoca un fallo generalizado y el incendio empieza a manifestarse de materia notoria. El humo se ve en el piso 81 y Roberts llama entonces al cuerpo de bomberos de San Francisco para apagarlo.
Roberts y otro ingeniero eléctrico Will Giddings (Norman Burton) van a la planta 81, pero no pueden entrar pues un guardia de seguridad les impide el paso. En ese momento se produce una explosión y el fuego da directamente en Giddings (y que más tarde se nos informa que ha muerto), mientras que Roberts informa del fuego a un desdeñoso Duncan, que se niega a ordenar una evacuación.
Los bomberos llegan inicialmente mal equipados para hacer frente a las llamas, que de pronto se propagan y el incendio se ve que está fuera de control.
Tras lo acontecido el Jefe de bomberos de San Francisco (SFFD) Michael O'Halloran (Steve MacQueen) sube en asensor hasta la última planta y obliga a Duncan a evacuar a los invitados de ese piso, el 135, dirigiéndolos a ir en los ascensores.
Entre los invitados se encuentra Lisolette Mueller (Jennifer Jones), una señora de edad que está siendo cortejada por un señor (al final sabremos que es un estafador) Harlee Claiborne (Fred Astaire) quiere ir al piso 87, pues allí están durmiendo una familia formada por una viuda (sordomuda) y sus dos hijos. Lisolette piensa que están en peligro puesto que ella no habrá escuchado los avisos de los agentes de seguridad no de los bomberos. Allí se persona ella, acompañada de Harry Jernigan (OJ Simpson), el Oficial Jefe de Seguridad que le acompaña.
Por otro lado, Simmons admite ante su suegro Duncan que puso cables de menor calidad y grosor y que lo hizo para mantenerse dentro del presupuesto.
Duncan, ayudado por el senador estadounidense Gary Parker (Robert Vaughn) y el alcalde Robert "Bob" Ramsay (Jack Collins), que dirigen la evacuación hacia el ascensor .
Sin embargo, el fuego lo va devorando todo y hace que los ascensores sean inseguros. Al no prestar atención a las instrucciones de Duncan, un último grupo que toma un ascensor para en la planta 81 y son sorprendidos por el fuego.
Ahora los asistentes a la velada se ven acorralados por el fuego, por lo que tienen pocas probabilidades de sobrevivir ya que al estar a una altura tan elevada y a los bomberos les resulta imposible controlar el infierno.
El fuego también atrapa a Bigelow y a su secretaria, la señora Lorrie (Susan Flannery) en su oficina del piso 65, quemando primero a él, cuando sale de la habitación protegido únicamente con toallas mojadas y a ella en la misma habitación, cuando todo estalla y salga disparada a la calle .
Por su parte, el Jefe de Seguridad Harry Jernigan y Roberts rescatan a la señora Mueller y la familia. Jernigan. manda a la madre a un lugar seguro, pero Roberts, la señora Mueller y los dos niños son detenidos por la escalera cuando está se colapse y caiga al vacío. Hacen una subida peligrosa por las escaleras, pero el fuego les obliga a la ir a la Sala Promenade donde se celebraba la fiesta de inauguración del nuevo rascacielos de 138 plantas.
Todos los esfuerzos de extinción de los incendios se muestran inoperante, y esto se agrava cuando el edificio se queda sin alimentación eléctrica y los hombres de O'Halloran se ven obligados a hacer rappel por un hueco de ascensor.
Por medio de la azotea de un edificio colindante, así como usando medios aéreos ( helicópteros) se inicia un proceso de rescate, aunque ya no se puede evitar el desastre.
Por medio del helicóptero se consiguen sacar frenar la caída de un ascensor al vacío lleno de mujeres de los invitados así como de los dos niños ,entre ellos Mueller. Una explosión deja el ascensor descendente hace que el ascensor penda de un solo cable en el piso 110, pero Mueller cae y muere., Finalmente entre el helicóptero y algunos bomberos frenan la caída. El jefe de bomberos O'Halloran y otros ayudan al grupo y siguen salvando personas.
Desde la azotea vecina se decide ir trasvasando uno a uno a los asistentes. Así van saliendo no pocas invitadas en un rescate casi imposible entre ellas salvan a la hija de Duncan, Susan y alguna esposa más.
Simmons dice a Duncan que él y otros la boya para alcanzar la azotea vecina, pero Duncan le da un puñetazo, diciendo que a todos que la salida se hará tal y como se ha proyectado con los números sacados al azar, y que él y su yerno serán los últimos en salir. Hay un intento de asalto de la boya por parte de algunos de los asistentes entre ellos Simmons. A la boya se agarra el senador Parker que es empujado a la muerte por Simmons, quien muere momentos después por efectos de una explosión.
Mientras como la situación es tan grave un militar le propone al jefe de la SFFD O'Halloran un plan para para el incendio y salvar a algunos de los asistentes: explotar los tanques de agua de millones de galones que hay en lo alto del edificio para extinguir el fuego.
Tras esto el el jefe de bomberos (Steve McQueen) y le plantea una solución al arquitecto del rascacielos y le pide ayuda. Sabiendo que podría ser su muerte, O'Halloran se reúne con Roberts y avanzan con explosivos hacia los seis tanques de agua. Tras colocar el explosivo, vuelven a la habitación Promenade, donde los invitados restantes se atan para evitar ser arrastrados por las aguas.
La explosión se produce y el agua lo invade todo. O'Halloran, Roberts, Duncan, Claiborne y la mayoría de los asistentes a la fiesta sobreviven al agua que correpor el edificio y extingue las llamas.
Sobre el terreno, Claiborne se entera de que Mueller no sobrevivió y tiene el corazón roto. Jernigan, que sabe que Clairborne tonteaba con ella le entrega su último recuerdo: el gato de Mueller.
Duncan consola a su hija Patty por la muerte de su marido, pero no da a conocer la forma cobarde en la que Simmons ha muerto.
Mirando hacia lo alto de la torre, Duncan promete que una debacle así de trágico no volverá a ocurrir en el futuro. Roberts dice a Susan que él no sabe qué va a ser del edificio, y tal vez se debe dejar en su estado dañado por el fuego como "una especie de santuario para recordar la miseria de este mundo".
Roberts informa que el número de víctimas numerada son al menos de 200, y O'Halloran dice que son unos afortunados. Roberts se compromete a consultar con los bomberos en el futuro, cuando dichos diseñe los edificios, tras lo cual O'Halloran se va, exhausto, mirando los muchos bomberos caídos. Acabando así la película.
Parecía una premonición de lo que podía acontecer con las torres gemelas en 2001 ya que las novelas de las que parte el filme fueron inspirados por la construcción del World Trade Center en la década de los años 1970, y lo que podría suceder en un incendio en un rascacielos. Aparte de la espectacularidad de algunas escenas y el suspense que provocó al espectador, el filme brindó la oportunidad de ver juntos a dos de las más grandes estrellas de Hollywood como Paul Newman , quien hizo la mayoría de sus escenas de acción, incluyendo subir y bajar la barandilla de escalera doblada -y Steve McQueen, sin miedo a rodar escenas de peligro, que por cierto se negó a dar entrevistas durante la película, además de viejas estrellas como Fred Astaire, Jennifer Jones o William Holden, quien hizo en ésta película una de sus últimas apariciones en el cine, al igual que Jennifer Jones.
Irwin Allen junto a la Fox y la Warner se unieron para ofrecer todo un clásico del cine de catástrofes -un género que se popularizó enormemente en los años setenta-, con superproducciones que combinaban siempre espectáculo y conocidas estrellas.había obtenido un espectacular éxito con ‘La aventura del Poseidón’ (‘The Poseidón Adventure’, Ronald Neame, 1972) que, junto a ‘Aeropuerto’ (‘Airport!’, George Seaton, 1970), abrieron la veda de películas sobre catástrofes, creando un nuevo (sub)género. Para ello la Warner Brothers había comprado ya los derechos para filmar "La Torre" de Richard Martin Stern, por $ 390.000. Y Ocho semanas después de Irwin Allen (de la 20th Century Fox) hizo lo mismo con "The Glass Inferno" Thomas N. Scortia y Frank M. Robinson comprando los derechos por $ 400,000. Para evitar dos películas similares compitieran en la taquilla los dos estudios se unieron y unieron sus recursos, pagando cada uno la mitad de los costes de producción. A cambio, la 20th Century Fox puso la cuota de taquilla de Estados Unidos y la Warner para el resto del mundo.
De hecho, el mismo año ‘El coloso en llamas’ “competía” con otro conocido film, ‘Terremoto’ (‘Earthquake’, Mark Robson), el cual ganó directamente el Oscar a los mejores efectos visuales.
El film dirigido por Guillermin, y también por Irwin Allen —dirigió todas las secuencias de acción— es, a día de hoy, el más recordado de todos. La película tuvo un coste de 15 millones de dólares, y para hacerle frente unieron fuerzas Twentieth Century Fox —distribución estadounidense— y Warner Bros. —distribución internacional—. Un reparto absolutamente espectacular, y un equipo técnico de primera, son los pilares sobre los que se sustenta ‘El coloso en llamas’.
La película obtuvo un gran éxito de taquilla -fue la segunda película más taquillera del año 1975, tras "Tiburón" (Jaws)- y, en cuanto a premios, consiguió 3 Oscar "menores", aunque tuvo 8 nominaciones, incluyendo el de mejor película.
Fue todo un éxito , pues John Guillermin era todo un especialista en este tipo de película como lo demuestran las eficaces La gran aventura de Tarzán (1959), Tarzán en la India (1962), El mayor mujeriego (1962), The Blue Max (1966), El puente de Remagen (1969), y , más tarde al la vista, King Kong (1976), Muerte en el Nilo (1978) y King Kong 2 (1986). Todos ellas bien realizadas y con mucho suspense.
A la hora de los créditos hubo muchas susceptibilidad. McQueen, Newman, y William Holden querían aparecen como los primeros dado el prestigio del trío. Esa es la razón por la que los créditos fueron dispuestos en diagonal, con McQueen en la parte superior derecha y Newman en la parte inferior izquierda, quedando Holden relegado.
McQueen fue el primero es ser mencionado en los trailers de la película aunque el el nombre de Newman es totalmente visible primero. A McQueen y Newman se les prometió el mismo pago y el número de líneas, lo que significaba que había que rodar escenas adicionales para igualar el diálogo.
Por exigencias de McQueen, ambos actores poseen el mismo número de palabras pronunciadas, y el personaje del jefe de bomberos debía ser superior, heroicamente hablando, a todos los demás. Ambos actores cobraron un millón de dólares y el 7’5 % de la taquilla. Newman odió ceder ante los porcentajes, era su primera vez, y juró que sería la última.
Seis años más tarde volvió a colaborar con Allen , pero justo después del film más famoso de John Guillermin, el actor regresó sobre uno de sus personajes más recordados, el detective Harper. El papel de Jennifer Jones fue ofrecido originalmente a Olivia de Havilland y a Esther Williams, al igual que Katharine Ross , Raquel Welch y Natalie Wood fueron ofrecidos para el papel que finalmente fue interpretado por Faye Dunaway . Wood se negó porque estaba embarazada de su segundo hijo y también encontró el guión "mediocre".
James Franciscus y John Forsythe eran las opciones originales para el senador Gary Parker. Sin embargo, se consideró que se parecían demasiado al entonces senador. John Tunney y al entonces gobernador Ronald Reagan . Dado que uno era un demócrata y el otro republicano, decidieron que querían dejar la política fuera. A continuación, elegidos para ofrecer el papel a Robert Vaughn , que no se parecía a nadie política en el momento.
Se película se rodó en varios escenarios californianos , entre ellos San Francisco , en lugares tan emblemáticos como Vallejo Street, la casa Roger y Patty Simmons, el Bank of America Building, en Mason Street, Nob Hill, Hyatt Regency Hotel en Embarcadero Center,Grace Cathedral Episcopal Church , San Francisco Fire Station 38 en California Street, todas ellas en mi querida y recordada San Francisco, en la 20th Century Fox Ranch, de Malibu Creek State Park en Las Virgenes Road, Calabasas, en 20th Century Fox Studios en Pico Blvd., en Los Angeles. De los 57 conjuntos construidos para la producción, sólo ocho permanecieron de pie al final del rodaje.El edificio utilizado en la película era una serie de miniaturas. Sólo las secciones del edificio fueron construidos en realidad para los actores y para que dobles de riesgo pudieran realizar sus escenas. Las tomas interiores principales se hicieron en el Hyatt Regency de San Francisco con su ascensor panorámico. Para rodaje de exteriores se utilizó el edificio del Banco de América . Unos 1.000 bomberos reales fueron contratados a través de toda la producción.
Steve McQueen , siempre intrépido, durante el rodaje cundo se produjo un incendio real en uno de los conjuntos se encontró ayudando brevemente junto a bomberos reales. El rodaje terminó el 11 de septiembre de 1974 A veces el rodaje no estuvo exento de problemas. Por ejemplo, el actor / especialista Ernie F. Orsatti , señaló que Faye Dunaway a menudo llegaba tarde a rodar o no aparecía en absoluto. Esto hizo que algunas escenas fueran imposibles de filmar y generó malestar en actores como William Holden o Jennifer Jones . Según los informes, Holden empujó Faye contra el único día de la pared y la amenazó.
La música fue compuesta y dirigida por John Williams , orquestada por Herbert W. Spencer y Al Woodbury, El ingeniero de grabación original fue Ted Keep. La canción ganadora de un Oscar «We May Never Love Like This Again»fue compuesta por Al Kasha y Joel Hirschhorn e interpretado por Maureen McGovern , que aparece en un cameo como cantante de salón y en el álbum de la banda sonora . Además, la melodía del tema de Williams y del tema musical se repite en varias ocasiones.
Desde su estreno el 16 de diciembre de 1974 y el internacional el 1 de enero de 1975, El coloso en llamas tuvo críticas positivas de los críticos, obteniendo una calificación del 77% "fresco" en el agregador de críticas del sitio web Rotten Tomatoes . Entre las mismas destacan las de Roger Ebert del Chicago Sun-Times que elogió la película como "la mejor de la onda de cintas de desastres de mediados de 1970 ".
Alberto Abuín en blog de cine señala que , la película construida con la precisión de un arquitecto, y a la que el paso del tiempo no sólo no daña ni lo más mínimo, sino que efectúa sobre ella un proceso de rejuvenecimiento que sólo las obras atemporales. Este editor destaca como Paul Newman y Steve McQueen ya habían coincidido en la película ‘Marcado por el odio’ (‘Somebody Up There Likes Me’, Robert Wise, 1956), con el segundo en un papel insignificante, y casi irreconocible. Mucho cambiaron las cosas desde esa película hasta el rodaje de ‘El coloso en llamas’ (‘The Towering Inferno’, John Guillermin, 1974) en la que ambos actores, ya estrellas, volvieron a coincidir, y Newman tuvo que someterse ante las exigencias de McQueen, que en ese momento era su máximo rival en el cine. Una rivalidad, como todas, absurda, y propiciada por McQueen.
Fue una de las películas con las mayores recaudaciones de 1974 con 116 millones de dólares y fue nominada al Óscar a la mejor película. De hecho fue nominada a ocho Oscar en total, de los cuales ganó tres: mejor fotografía(Fred J. Koenekamp y Joseph F. Biroc) , mejor montaje y edición (Carl Kress y Harold F. Kress) y mejor canción (Al Kasha y Joel Hirschhorn) por la canción «We May Never Love Like This Again» . Entre ellos al Mejor actor de reparto para Fred Astaire , al mejor diseño de producción para William J. Creber , Preston Raphael Bretton , mejor banda sonora original (John Williams) , mejor mezcla de sonido (Theodore Soderberg, Herman Lewis) , y mejor película para Irwin Allen como productor.
También ganó, entre otros premios, dos BAFTA: Fred Astaire como mejor actor secundario y John Williams a mejor música - Anthony Asquith a la mejor música, y dos Globos de Oro uno para Fred Astaire, de nuevo como mejor actor secundario y Susan Flannery como intérprete promesa, aunque Jennifer Jones,Stirling Silliphant y .como mejor canción original estuvieron nominados.
Ganó en 1974 el Premios David di Donatello al mejor film extranjero
Abuín, seguimos con él. destaca que la película es un prodigio de montaje, de narración cinematográfica pura y dura, desde el primer minuto hasta el 158 final. El espectador ya es consciente del inicio de la desgracia en el minuto doce, y nos vuelven a avisar en el minuto 29 —dos planos del pequeño cuarto en el que da comienzo el incendio son suficientes—. Así, y hasta el minuto 43, con la entrada de Steve McQueen en escena, ‘El coloso en llamas’ es toda una lección de suspense, por cuanto el espectador posee datos que los personajes no.
La labor de los montadores Harold F. Kress y Carl Kress —padre e hijo, el primero con un currículum impresionante— fue galardonada con un más que merecido Oscar; hacen avanzar con sumo interés un relato que, a tenor de lo visto en muchas de las películas del género, podría haber caído de lleno en el aburrimiento. Pero ambos, siguiendo las órdenes de Allen, consiguen el tempo interno perfecto en las secuencias más emocionantes, que son innumerables. Por citar dos: la secuencia de Paul Newman con Jennifer Jones y dos niños por el hueco de una escalera destrozada —el actor hizo absolutamente todas sus secuencias—, o la secuencia del ascensor externo y el helicóptero. Un espectáculo por todo lo alto
Con una muy presente banda sonora de John Williams, quien convenció a Allen de insertar música desde la primera secuencia, ‘El coloso en llamas’ avanza a un ritmo espectacular, sin caer en subrayados y manejando los tópicos con habilidad. A ello se debe, cómo no, lo entregado de un reparto lleno de estrellas, aportando todos y cada uno matices de autenticidad a personajes en base simples. Tanto Paul Newman como Steve McQueen no necesitan esforzarse lo más mínimo por tener carisma con dos de los personajes más planos de sus carreras. William Holden está perfecto con su ambivalente personaje; otros como Jennifer Jones y Fred Astaire, más por el segundo que por la primera, hacen creíble una historia de amor imposible.
En su concepción de cine espectáculo, la película tiene tiempo para criticar sin miramientos a todo aquel que quiere hacerse rico mediante operaciones que superan la legalidad, incluso el respeto por la vida. Se traduce aquí en la figura de Duncan (Holden) y Simmons —Richard Chamberlain, demostrando que es mejor villano que héroe—, que por “ahorrar” millones de dólares decidieron emplear material defectuoso en el edificio. También no da concesiones a la hora de mostrar las víctimas, de toda índole, que el gigantesco incendio se cobra. En ese aspecto, el film es incluso bastante cruel. Baste citar al respecto el destino sufrido por los personajes de Robert Wagner y Susan Flannery, unos de los momentos más fuertes de la película, de una tensión indescriptible; por supuesto el de Jennifer Jones, demostrando que la vida es terriblemente injusta, o el de todos los héroes anónimos que dieron sus vidas por intentar apagar un incendio que en realidad representa el tamaño de la estupidez y avaricia humanas.
El plano de O’Hallorhan (McQueen) mirando en silencio los cuerpos de sus hombres muertos es el broche perfecto a un film que, en cierto modo, es todo un homenaje a esa profesión en la que se juegan la vida continuamente por los demás.
El coloso o El gigante, El Pánico o La Tormenta, aquí, no hacen referencia a esa obra atribuida a Goya y que se exhibe desde 1931 en el Museo del Prado, pero para mi si tiene elementos en común con la película. En reste caso el gigante es el edificio, las nubes equivalen a las llamas y el Pánico que lo invade todo. Así es la película, unas obra grande, colosal sobre uno de nuestros grandes temores: el fuego y sus consecuencias, el Pánico.
Roberts y otro ingeniero eléctrico Will Giddings (Norman Burton) van a la planta 81, pero no pueden entrar pues un guardia de seguridad les impide el paso. En ese momento se produce una explosión y el fuego da directamente en Giddings (y que más tarde se nos informa que ha muerto), mientras que Roberts informa del fuego a un desdeñoso Duncan, que se niega a ordenar una evacuación.
Los bomberos llegan inicialmente mal equipados para hacer frente a las llamas, que de pronto se propagan y el incendio se ve que está fuera de control.
Tras lo acontecido el Jefe de bomberos de San Francisco (SFFD) Michael O'Halloran (Steve MacQueen) sube en asensor hasta la última planta y obliga a Duncan a evacuar a los invitados de ese piso, el 135, dirigiéndolos a ir en los ascensores.
Entre los invitados se encuentra Lisolette Mueller (Jennifer Jones), una señora de edad que está siendo cortejada por un señor (al final sabremos que es un estafador) Harlee Claiborne (Fred Astaire) quiere ir al piso 87, pues allí están durmiendo una familia formada por una viuda (sordomuda) y sus dos hijos. Lisolette piensa que están en peligro puesto que ella no habrá escuchado los avisos de los agentes de seguridad no de los bomberos. Allí se persona ella, acompañada de Harry Jernigan (OJ Simpson), el Oficial Jefe de Seguridad que le acompaña.
Por otro lado, Simmons admite ante su suegro Duncan que puso cables de menor calidad y grosor y que lo hizo para mantenerse dentro del presupuesto.
Duncan, ayudado por el senador estadounidense Gary Parker (Robert Vaughn) y el alcalde Robert "Bob" Ramsay (Jack Collins), que dirigen la evacuación hacia el ascensor .
Sin embargo, el fuego lo va devorando todo y hace que los ascensores sean inseguros. Al no prestar atención a las instrucciones de Duncan, un último grupo que toma un ascensor para en la planta 81 y son sorprendidos por el fuego.
Ahora los asistentes a la velada se ven acorralados por el fuego, por lo que tienen pocas probabilidades de sobrevivir ya que al estar a una altura tan elevada y a los bomberos les resulta imposible controlar el infierno.
El fuego también atrapa a Bigelow y a su secretaria, la señora Lorrie (Susan Flannery) en su oficina del piso 65, quemando primero a él, cuando sale de la habitación protegido únicamente con toallas mojadas y a ella en la misma habitación, cuando todo estalla y salga disparada a la calle .
Por su parte, el Jefe de Seguridad Harry Jernigan y Roberts rescatan a la señora Mueller y la familia. Jernigan. manda a la madre a un lugar seguro, pero Roberts, la señora Mueller y los dos niños son detenidos por la escalera cuando está se colapse y caiga al vacío. Hacen una subida peligrosa por las escaleras, pero el fuego les obliga a la ir a la Sala Promenade donde se celebraba la fiesta de inauguración del nuevo rascacielos de 138 plantas.
Todos los esfuerzos de extinción de los incendios se muestran inoperante, y esto se agrava cuando el edificio se queda sin alimentación eléctrica y los hombres de O'Halloran se ven obligados a hacer rappel por un hueco de ascensor.
Por medio de la azotea de un edificio colindante, así como usando medios aéreos ( helicópteros) se inicia un proceso de rescate, aunque ya no se puede evitar el desastre.
Por medio del helicóptero se consiguen sacar frenar la caída de un ascensor al vacío lleno de mujeres de los invitados así como de los dos niños ,entre ellos Mueller. Una explosión deja el ascensor descendente hace que el ascensor penda de un solo cable en el piso 110, pero Mueller cae y muere., Finalmente entre el helicóptero y algunos bomberos frenan la caída. El jefe de bomberos O'Halloran y otros ayudan al grupo y siguen salvando personas.
Desde la azotea vecina se decide ir trasvasando uno a uno a los asistentes. Así van saliendo no pocas invitadas en un rescate casi imposible entre ellas salvan a la hija de Duncan, Susan y alguna esposa más.
Simmons dice a Duncan que él y otros la boya para alcanzar la azotea vecina, pero Duncan le da un puñetazo, diciendo que a todos que la salida se hará tal y como se ha proyectado con los números sacados al azar, y que él y su yerno serán los últimos en salir. Hay un intento de asalto de la boya por parte de algunos de los asistentes entre ellos Simmons. A la boya se agarra el senador Parker que es empujado a la muerte por Simmons, quien muere momentos después por efectos de una explosión.
Mientras como la situación es tan grave un militar le propone al jefe de la SFFD O'Halloran un plan para para el incendio y salvar a algunos de los asistentes: explotar los tanques de agua de millones de galones que hay en lo alto del edificio para extinguir el fuego.
Tras esto el el jefe de bomberos (Steve McQueen) y le plantea una solución al arquitecto del rascacielos y le pide ayuda. Sabiendo que podría ser su muerte, O'Halloran se reúne con Roberts y avanzan con explosivos hacia los seis tanques de agua. Tras colocar el explosivo, vuelven a la habitación Promenade, donde los invitados restantes se atan para evitar ser arrastrados por las aguas.
La explosión se produce y el agua lo invade todo. O'Halloran, Roberts, Duncan, Claiborne y la mayoría de los asistentes a la fiesta sobreviven al agua que correpor el edificio y extingue las llamas.
Sobre el terreno, Claiborne se entera de que Mueller no sobrevivió y tiene el corazón roto. Jernigan, que sabe que Clairborne tonteaba con ella le entrega su último recuerdo: el gato de Mueller.
Duncan consola a su hija Patty por la muerte de su marido, pero no da a conocer la forma cobarde en la que Simmons ha muerto.
Mirando hacia lo alto de la torre, Duncan promete que una debacle así de trágico no volverá a ocurrir en el futuro. Roberts dice a Susan que él no sabe qué va a ser del edificio, y tal vez se debe dejar en su estado dañado por el fuego como "una especie de santuario para recordar la miseria de este mundo".
Roberts informa que el número de víctimas numerada son al menos de 200, y O'Halloran dice que son unos afortunados. Roberts se compromete a consultar con los bomberos en el futuro, cuando dichos diseñe los edificios, tras lo cual O'Halloran se va, exhausto, mirando los muchos bomberos caídos. Acabando así la película.
Parecía una premonición de lo que podía acontecer con las torres gemelas en 2001 ya que las novelas de las que parte el filme fueron inspirados por la construcción del World Trade Center en la década de los años 1970, y lo que podría suceder en un incendio en un rascacielos. Aparte de la espectacularidad de algunas escenas y el suspense que provocó al espectador, el filme brindó la oportunidad de ver juntos a dos de las más grandes estrellas de Hollywood como Paul Newman , quien hizo la mayoría de sus escenas de acción, incluyendo subir y bajar la barandilla de escalera doblada -y Steve McQueen, sin miedo a rodar escenas de peligro, que por cierto se negó a dar entrevistas durante la película, además de viejas estrellas como Fred Astaire, Jennifer Jones o William Holden, quien hizo en ésta película una de sus últimas apariciones en el cine, al igual que Jennifer Jones.
Irwin Allen junto a la Fox y la Warner se unieron para ofrecer todo un clásico del cine de catástrofes -un género que se popularizó enormemente en los años setenta-, con superproducciones que combinaban siempre espectáculo y conocidas estrellas.había obtenido un espectacular éxito con ‘La aventura del Poseidón’ (‘The Poseidón Adventure’, Ronald Neame, 1972) que, junto a ‘Aeropuerto’ (‘Airport!’, George Seaton, 1970), abrieron la veda de películas sobre catástrofes, creando un nuevo (sub)género. Para ello la Warner Brothers había comprado ya los derechos para filmar "La Torre" de Richard Martin Stern, por $ 390.000. Y Ocho semanas después de Irwin Allen (de la 20th Century Fox) hizo lo mismo con "The Glass Inferno" Thomas N. Scortia y Frank M. Robinson comprando los derechos por $ 400,000. Para evitar dos películas similares compitieran en la taquilla los dos estudios se unieron y unieron sus recursos, pagando cada uno la mitad de los costes de producción. A cambio, la 20th Century Fox puso la cuota de taquilla de Estados Unidos y la Warner para el resto del mundo.
De hecho, el mismo año ‘El coloso en llamas’ “competía” con otro conocido film, ‘Terremoto’ (‘Earthquake’, Mark Robson), el cual ganó directamente el Oscar a los mejores efectos visuales.
El film dirigido por Guillermin, y también por Irwin Allen —dirigió todas las secuencias de acción— es, a día de hoy, el más recordado de todos. La película tuvo un coste de 15 millones de dólares, y para hacerle frente unieron fuerzas Twentieth Century Fox —distribución estadounidense— y Warner Bros. —distribución internacional—. Un reparto absolutamente espectacular, y un equipo técnico de primera, son los pilares sobre los que se sustenta ‘El coloso en llamas’.
La película obtuvo un gran éxito de taquilla -fue la segunda película más taquillera del año 1975, tras "Tiburón" (Jaws)- y, en cuanto a premios, consiguió 3 Oscar "menores", aunque tuvo 8 nominaciones, incluyendo el de mejor película.
Fue todo un éxito , pues John Guillermin era todo un especialista en este tipo de película como lo demuestran las eficaces La gran aventura de Tarzán (1959), Tarzán en la India (1962), El mayor mujeriego (1962), The Blue Max (1966), El puente de Remagen (1969), y , más tarde al la vista, King Kong (1976), Muerte en el Nilo (1978) y King Kong 2 (1986). Todos ellas bien realizadas y con mucho suspense.
A la hora de los créditos hubo muchas susceptibilidad. McQueen, Newman, y William Holden querían aparecen como los primeros dado el prestigio del trío. Esa es la razón por la que los créditos fueron dispuestos en diagonal, con McQueen en la parte superior derecha y Newman en la parte inferior izquierda, quedando Holden relegado.
McQueen fue el primero es ser mencionado en los trailers de la película aunque el el nombre de Newman es totalmente visible primero. A McQueen y Newman se les prometió el mismo pago y el número de líneas, lo que significaba que había que rodar escenas adicionales para igualar el diálogo.
Por exigencias de McQueen, ambos actores poseen el mismo número de palabras pronunciadas, y el personaje del jefe de bomberos debía ser superior, heroicamente hablando, a todos los demás. Ambos actores cobraron un millón de dólares y el 7’5 % de la taquilla. Newman odió ceder ante los porcentajes, era su primera vez, y juró que sería la última.
Seis años más tarde volvió a colaborar con Allen , pero justo después del film más famoso de John Guillermin, el actor regresó sobre uno de sus personajes más recordados, el detective Harper. El papel de Jennifer Jones fue ofrecido originalmente a Olivia de Havilland y a Esther Williams, al igual que Katharine Ross , Raquel Welch y Natalie Wood fueron ofrecidos para el papel que finalmente fue interpretado por Faye Dunaway . Wood se negó porque estaba embarazada de su segundo hijo y también encontró el guión "mediocre".
James Franciscus y John Forsythe eran las opciones originales para el senador Gary Parker. Sin embargo, se consideró que se parecían demasiado al entonces senador. John Tunney y al entonces gobernador Ronald Reagan . Dado que uno era un demócrata y el otro republicano, decidieron que querían dejar la política fuera. A continuación, elegidos para ofrecer el papel a Robert Vaughn , que no se parecía a nadie política en el momento.
Se película se rodó en varios escenarios californianos , entre ellos San Francisco , en lugares tan emblemáticos como Vallejo Street, la casa Roger y Patty Simmons, el Bank of America Building, en Mason Street, Nob Hill, Hyatt Regency Hotel en Embarcadero Center,Grace Cathedral Episcopal Church , San Francisco Fire Station 38 en California Street, todas ellas en mi querida y recordada San Francisco, en la 20th Century Fox Ranch, de Malibu Creek State Park en Las Virgenes Road, Calabasas, en 20th Century Fox Studios en Pico Blvd., en Los Angeles. De los 57 conjuntos construidos para la producción, sólo ocho permanecieron de pie al final del rodaje.El edificio utilizado en la película era una serie de miniaturas. Sólo las secciones del edificio fueron construidos en realidad para los actores y para que dobles de riesgo pudieran realizar sus escenas. Las tomas interiores principales se hicieron en el Hyatt Regency de San Francisco con su ascensor panorámico. Para rodaje de exteriores se utilizó el edificio del Banco de América . Unos 1.000 bomberos reales fueron contratados a través de toda la producción.
Steve McQueen , siempre intrépido, durante el rodaje cundo se produjo un incendio real en uno de los conjuntos se encontró ayudando brevemente junto a bomberos reales. El rodaje terminó el 11 de septiembre de 1974 A veces el rodaje no estuvo exento de problemas. Por ejemplo, el actor / especialista Ernie F. Orsatti , señaló que Faye Dunaway a menudo llegaba tarde a rodar o no aparecía en absoluto. Esto hizo que algunas escenas fueran imposibles de filmar y generó malestar en actores como William Holden o Jennifer Jones . Según los informes, Holden empujó Faye contra el único día de la pared y la amenazó.
La música fue compuesta y dirigida por John Williams , orquestada por Herbert W. Spencer y Al Woodbury, El ingeniero de grabación original fue Ted Keep. La canción ganadora de un Oscar «We May Never Love Like This Again»fue compuesta por Al Kasha y Joel Hirschhorn e interpretado por Maureen McGovern , que aparece en un cameo como cantante de salón y en el álbum de la banda sonora . Además, la melodía del tema de Williams y del tema musical se repite en varias ocasiones.
Desde su estreno el 16 de diciembre de 1974 y el internacional el 1 de enero de 1975, El coloso en llamas tuvo críticas positivas de los críticos, obteniendo una calificación del 77% "fresco" en el agregador de críticas del sitio web Rotten Tomatoes . Entre las mismas destacan las de Roger Ebert del Chicago Sun-Times que elogió la película como "la mejor de la onda de cintas de desastres de mediados de 1970 ".
Alberto Abuín en blog de cine señala que , la película construida con la precisión de un arquitecto, y a la que el paso del tiempo no sólo no daña ni lo más mínimo, sino que efectúa sobre ella un proceso de rejuvenecimiento que sólo las obras atemporales. Este editor destaca como Paul Newman y Steve McQueen ya habían coincidido en la película ‘Marcado por el odio’ (‘Somebody Up There Likes Me’, Robert Wise, 1956), con el segundo en un papel insignificante, y casi irreconocible. Mucho cambiaron las cosas desde esa película hasta el rodaje de ‘El coloso en llamas’ (‘The Towering Inferno’, John Guillermin, 1974) en la que ambos actores, ya estrellas, volvieron a coincidir, y Newman tuvo que someterse ante las exigencias de McQueen, que en ese momento era su máximo rival en el cine. Una rivalidad, como todas, absurda, y propiciada por McQueen.
Fue una de las películas con las mayores recaudaciones de 1974 con 116 millones de dólares y fue nominada al Óscar a la mejor película. De hecho fue nominada a ocho Oscar en total, de los cuales ganó tres: mejor fotografía(Fred J. Koenekamp y Joseph F. Biroc) , mejor montaje y edición (Carl Kress y Harold F. Kress) y mejor canción (Al Kasha y Joel Hirschhorn) por la canción «We May Never Love Like This Again» . Entre ellos al Mejor actor de reparto para Fred Astaire , al mejor diseño de producción para William J. Creber , Preston Raphael Bretton , mejor banda sonora original (John Williams) , mejor mezcla de sonido (Theodore Soderberg, Herman Lewis) , y mejor película para Irwin Allen como productor.
También ganó, entre otros premios, dos BAFTA: Fred Astaire como mejor actor secundario y John Williams a mejor música - Anthony Asquith a la mejor música, y dos Globos de Oro uno para Fred Astaire, de nuevo como mejor actor secundario y Susan Flannery como intérprete promesa, aunque Jennifer Jones,Stirling Silliphant y .como mejor canción original estuvieron nominados.
Ganó en 1974 el Premios David di Donatello al mejor film extranjero
Abuín, seguimos con él. destaca que la película es un prodigio de montaje, de narración cinematográfica pura y dura, desde el primer minuto hasta el 158 final. El espectador ya es consciente del inicio de la desgracia en el minuto doce, y nos vuelven a avisar en el minuto 29 —dos planos del pequeño cuarto en el que da comienzo el incendio son suficientes—. Así, y hasta el minuto 43, con la entrada de Steve McQueen en escena, ‘El coloso en llamas’ es toda una lección de suspense, por cuanto el espectador posee datos que los personajes no.
La labor de los montadores Harold F. Kress y Carl Kress —padre e hijo, el primero con un currículum impresionante— fue galardonada con un más que merecido Oscar; hacen avanzar con sumo interés un relato que, a tenor de lo visto en muchas de las películas del género, podría haber caído de lleno en el aburrimiento. Pero ambos, siguiendo las órdenes de Allen, consiguen el tempo interno perfecto en las secuencias más emocionantes, que son innumerables. Por citar dos: la secuencia de Paul Newman con Jennifer Jones y dos niños por el hueco de una escalera destrozada —el actor hizo absolutamente todas sus secuencias—, o la secuencia del ascensor externo y el helicóptero. Un espectáculo por todo lo alto
Con una muy presente banda sonora de John Williams, quien convenció a Allen de insertar música desde la primera secuencia, ‘El coloso en llamas’ avanza a un ritmo espectacular, sin caer en subrayados y manejando los tópicos con habilidad. A ello se debe, cómo no, lo entregado de un reparto lleno de estrellas, aportando todos y cada uno matices de autenticidad a personajes en base simples. Tanto Paul Newman como Steve McQueen no necesitan esforzarse lo más mínimo por tener carisma con dos de los personajes más planos de sus carreras. William Holden está perfecto con su ambivalente personaje; otros como Jennifer Jones y Fred Astaire, más por el segundo que por la primera, hacen creíble una historia de amor imposible.
En su concepción de cine espectáculo, la película tiene tiempo para criticar sin miramientos a todo aquel que quiere hacerse rico mediante operaciones que superan la legalidad, incluso el respeto por la vida. Se traduce aquí en la figura de Duncan (Holden) y Simmons —Richard Chamberlain, demostrando que es mejor villano que héroe—, que por “ahorrar” millones de dólares decidieron emplear material defectuoso en el edificio. También no da concesiones a la hora de mostrar las víctimas, de toda índole, que el gigantesco incendio se cobra. En ese aspecto, el film es incluso bastante cruel. Baste citar al respecto el destino sufrido por los personajes de Robert Wagner y Susan Flannery, unos de los momentos más fuertes de la película, de una tensión indescriptible; por supuesto el de Jennifer Jones, demostrando que la vida es terriblemente injusta, o el de todos los héroes anónimos que dieron sus vidas por intentar apagar un incendio que en realidad representa el tamaño de la estupidez y avaricia humanas.
El plano de O’Hallorhan (McQueen) mirando en silencio los cuerpos de sus hombres muertos es el broche perfecto a un film que, en cierto modo, es todo un homenaje a esa profesión en la que se juegan la vida continuamente por los demás.
El coloso o El gigante, El Pánico o La Tormenta, aquí, no hacen referencia a esa obra atribuida a Goya y que se exhibe desde 1931 en el Museo del Prado, pero para mi si tiene elementos en común con la película. En reste caso el gigante es el edificio, las nubes equivalen a las llamas y el Pánico que lo invade todo. Así es la película, unas obra grande, colosal sobre uno de nuestros grandes temores: el fuego y sus consecuencias, el Pánico.
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