sábado, 7 de marzo de 2020

De dioses y hombres



Recuerdo la fotografía y la crónica sobre lo ocurrido en Tibhirine , en el Atlas argelino en el diario El País. La vi en blanco y negro como era lo habitual en prensa.

Era 31 de mayo de 1996 y el artículo comenzaba así "Los cuerpos de los siete monjes trapenses asesinados por un comando de la organización integrista Grupo Islámico Armado (GIA) fueron localizados ayer en las cercanías de Medea -50 kilómetros al sur de Argel-, según anunció un lacónico comunicado oficial del Ministerio del Interior argelino difundido por la agencia de prensa estatal APS. La confirmación oficial del asesinato de los religiosos se produce nueve días después de que fueran degollados por sus secuestradores, tras fracasar un intento de negociación iniciado entre el GIA y las autoridades francesas el 27 de marzo, cuando fueron capturados".

Me conmocionó saber que alguien con una brutalidad absoluta podía degollar a otra tras tenerla secuestrada. Hoy , visto lo visto desde entonces, en la guerra de Irak, Afganistán o en la guerra de Siria con gentuza como la del ISIS de por medio que , además, se dedicaba a grabarlo y subirlo a las redes, creo que ni me extraña. En aquel momento sí .

Lo cierto es que en aquella primavera de 1996 el semanario Paris Match llegó a asegurar que el GIA había enviado al Gobierno francés las imágenes grabadas en vídeo de la ejecución de los monjes, pero nunca hubo una confirmación oficial al respecto. De cualquier manera descubrimos que se confirmaba la idea de Hobbes de que efectivamente que el hombre era un lobo para el hombre.

No me imaginaba que años después los franceses tuviesen a bien hacer una película sobre aquellos siete monjes que tenían edades que oscilaban entre los 50 y los 82 años y que en algún caso llevaban viviendo más de 30 años en el país . Con su muerte las víctimas religiosas pasaron de 10 a 18 en el número de religiosos asesinados en Argelia desde que se inició la guerra civil en el 1992.

Los grupos islamistas exigieron en diciembre de 1993 que los extranjeros abandonaran el país, pero los monjes decidieron quedarse, incluso después de haber sido amenazados directamente por un grupo islamista. Pero ellos no quisieron abandonar el monasterio de Nuestra Señora del Atlas en las montañas de está zona montañosa de Argelía que se había transformado en un jardín. Tibhirine significa precisamente eso, los años noventa. Aquel lugar cobijaba una comunidad de ocho monjes trapenses que vivían en perfecta armonía con la población musulmana. Los monjes de Tibhirine fueron secuestrados a fines de marzo de 1996 y sus cuerpos fueron encontrados degollados dos meses después. Hasta el día de hoy, nadie sabe realmente quién fue el responsable de sus asesinatos.

Mientras que el Grupo Islámico Armado fueron los captores, en años posteriores afirmaron que el ejército argelino mató accidentalmente a los monjes. Pero la verdad es que los cautivos habían sido decapitados. Sus restos están enterrados en el cementerio del monasterio.

Esta terrible historia es la que nos cuenta la película francesa Des hommes et des dieux , en español de De hombres y dioses  dirigida por el actor, director de cine y guionista francés Xavier Beauvois. Esta fue su cuarta película como director , tras una relativamente exitosa carrera como director de cortos , algún guion y como actor. Su primera película , del año 1995 No olvides que vas a morir (1995) se exhibió en el festival de Cannes donde ganó el Premio del Jurado .


A estas siguieron como director À Matthieu, Le petit Lieutenant , alguna película como actor que ha pasado por aquí como el clásico de la literatura de aventuras , Arsène Lupin, y en 2010 llegó su cuarta película De hombres y dioses que se estrenará en el Festival de Cine de Cannes. El título de la misma se refiere a un verso de la Biblia que se muestra al comienzo de la película.

El director que más tarde será el responsable de otras dos películas como La Rançon de la glorie (El peso de la fama, 2014) y Les Gardiennes (2017), contará como ayudante de dirección con Guillaume Bonnier así como Akrame El Meziane y Amine Louadni. Se apoyará en la dirección artística de Johanna Colboc.

En la producción de esta película están Pascal Caucheteux y Etienne Comar siendo el responsable del diseño de producción Michel Barthélémy trabajando con el apoyo de las empresas Why Not Productions, France 3 Cinéma, Armada Films, France Télévision , Canal+ , CinéCinéma, Centre National du Cinéma et de l'Image Animée , Cinémage, Cofinova , Soficinéma quedando para la distribución la empresa Golem.

La película responde al guion escrito a cuatro manos entre el mismo director Xavier Beauvois - responsable del guión de todas las películas que dirige- y Etienne Comar .

En cuanto a otras labores técnicas destaca la fotografía de Caroline Champetier, el montaje de Marie-Julie Maille y el vestuario de Alice Cambournac.

En cuanto el cuadro de actores y alguna actriz que completa el elenco destacan Lambert Wilson como Christian, Michael Lonsdale como Luc, Olivier Rabourdin como Christophe, Philippe Laudenbach como Célestin, Jacques Herlin como Amédée, Loïc Pichon como Jean-Pierre, Xavier Maly como Michel, Jean-Marie Frin como Paul, Abdelhafid Metalsi como Nouredine, Sabrina Ouazani como Rabbia, Abdallah Moundy como Omar, Olivier Perrier como Bruno, Farid Larbi como Ali Fayattia y Adel Bencherif como el jefe de los terroristas.

La película comienza con una cita del Libro de los Salmos , Salmo 82 : 6–7: "He dicho: Ustedes son dioses; y todos ustedes son hijos del Altísimo. Pero morirán como hombres ...".

La película comienza con una de las rutinas de estos monjes que se dedican a la oración, a la asistencia médica , a las labores del campo, venta en mercados con los productos que obtienen ( miel, productos agrícolas,...) e interacción comunitaria ayudando a la comunidad que vive alrededor de este Monasterio en el trabajan algunos locales, hombres y mujeres, y al que asiste diariamente musulmanes y musulmanas para ser atendidas en el consultorio médico y su farmacia que coordina el monje Luc (Michael Lonsdale) .

Junto a Luc vamos conociendo al resto de integrantes de esta comunidad en la que el peso del Monasterio es Christian (Lambert Wilson ) que es el jefe de la comunidad elegido por todos , un hombre prudente, interesado en los textos sagrados especialmente comparando los cristianos con el Corán.

Junto a ellos está el que parece más joven Christophe (Olivier Rabourdin) que se dedica a arar la tierra , un trapense que padece una enfermedad y que se encuentra débil como Célestin ( Philippe Laudenbach), un veterano trapense que lleva muchos años en el Monasterio, Amédée (Jacques Herlin) y otros que se dedican a la cocina y a la venta como Michel ( Xavier Maly ) asi como los hermanos Jean-Pierre (Loïc Pichon)  y Paul (Jean-Marie Frin).

Algunos de ellos asisten a la fiesta de la circuncisión de uno de los niños de la comunidad musulmana que vive humildemente alrededor del Monasterio.

Los integrantes del Monasterio   cooperan contra los efectos de la pobreza, ocasionados por un régimen corrupto militarizado y en decadencia.

Sin embargo, poco a poco van llegando noticias de la mala situación política de un país que vive una guerra civil no declarada tras la anulación de las elecciones que dieron la victoria al FIS (Frente Islámico de Salvación) por parte de los militares golpistas que no quisieron ceder el poder  y establecieron un estado militarizado y corrupto.

Con la aparición de  la organización integrista Grupo Islámico Armado (GIA) y su amenaza a todos los occidentales que viven en el país la comunidad empieza a vivir sus dudas e inquietudes especialmente cuando vemos que las amenazan su concretan al producirse el asesinato violento por parte del GIA de un grupo de trabajadores croatas en una zona cercana al monasterio (20 km aproximadamente).

El pánico se apodera de los habitantes de la región, que soportan los embates de la Guerra Civil Argelina y el temor ante una violencia que  va a más  son trasladadas al líder elegido del Monasterio, Christian ( Lambert Wilson), pues algunos de los integrantes de la comunidad como Christophe , Célestin o Michel le asaltan dudas sobre irse - opción que algunos se plantean abiertamente- o quedarse algo que no concibe Christian o Luc.

Pero las amenazas del grupo fundamentalista islámico van a más con lo que las autoridades militares y civiles le piden a los integrantes de la Comunidad que se vayan. Christian declina la protección de la autoridad civil, corrupta, mientras que los monjes se dividen entre sí sobre la cuestión de si quedarse o huir de Argelia.

Antes de llegar a una decisión, un grupo de fundamentalistas, liderados por Ali Fayattia (Farid Larbi ) , llega al complejo de los monjes  en Nochebuena y exige que con ellas vaya su médico así como productos de la farmacia que últimanente llegan con cuentagotas y que se administran para los habitantes de la zona.

Christian rechaza sus peticiones y cita el Corán como prueba de la buena voluntad de los monjes. Con una mezcla de sorpresa y respeto, Fayattia abandona el recinto y le otorga su protección hasta que se produce su captura, tortura y muerte a manos de las fuerzas gubernamentales que ahora cubren todas las carreteras y que para la población civil son tan peligrosos como los islamistas.

Los monjes dudan sobre la posibilidad real de retirarse debido a los lazos de amistad formados con la población civil, que les pide quedarse. A pesar de la creciente amenaza, los monjes hacen uso de la reflexión: por un lado el apego a su vida, y por el otro cuál es su deber; los ocho monjes hacen una síntesis de sus miedos y obligaciones, dando por resultado su permanencia en el monasterio hasta las últimas consecuencias.

A pesar del creciente peligro, los monjes llegan a un consenso sobre la importancia moral de mantener sus vidas comprometidas y el ministerio con la población local, incluso cuando enfrentan violencia y muerte.

En marzo llega un miembro de la orden que ha estado fuera. Les traen regalos y peticiones que habían solicitado. Como todos están dispuestos a quedarse deciden hacerse una foto de grupo.


Finalmente, en la noche del 26 al 27 de marzo de 1996 un comando armado formado por una veintena de hombres irrumpió en el monasterio al que acababa de llegar un nuevo integrante que había traído alimentos, cartas de amigos, vino, a todos los integrantes. Antes del secuestro, durante la cena, vemos como sus rostros durante el brindis sonríen, pero luego se endurecen sabedores del futuro incierto que le espera.

Esa noche entra el comando armado y siete de los nueve trapenses -dos se salvaron porque no fueron encontrados - que hay son secuestrados. Por ellos se pide un intercambios, prisioneros a cambios de los mojes trapenses.  Los siete son retenidos como rehenes.

En abril de 1996 el jefe del Grupo Islámicos Armados (GIA), Djamel Zitouni, reivindicaba en un comunicado el acto criminal.

Mientras los monjes cautivos caminan por un camino nevado hacia un destino sombrío, la película concluye con el testamento espiritual del Prior Christian de Chergé, escrito valientemente ante la muerte.

Tras la historia se nos informa que el Monasterio de Tibhirine quedó abandonado. Al mes siguiente del secuestro un segundo comunicado de los GIA anunciaba sus muertes: «Les hemos cortado las gargantas a los monjes». Ocurrió el 21 de mayo de 1996. Tras el secuestro el Monasterio quedó clausurado . Se cerraba el jardín de Tibhirine.

En 2016 se anunciaba su reapertura , a pesar de que en 1998, dos años después del asesinato, cuatro monjes trapenses se propusieron para volver y abrir el monasterio, situado unos cien kilómetros de Argel, pero el ministro argelino de Interior los desestimó por razones de seguridad.

El productor Etienne Comar tuvo la idea de la película cuando  en Francia se conmemoraba el décimo aniversario de los asesinatos en los medios franceses cuando volvió a ser un tema en los medios de comunicación franceses. Comar, un productor de cine de profesión y confesionalmente católico,  había estado fascinado por los monjes desde las primeras noticias del secuestro, pero sentía que su muerte había eclipsado lo que él pensaba que era realmente interesante: por qué habían decidido quedarse en Argelia a pesar de la situación actual. Guerra civil argelina .

Comar contactó a Xavier Beauvois en 2008 después de haber escrito un borrador, y juntos continuaron trabajando en el guión. Los dos investigaron, se reunieron con teólogos y, durante un descanso, Beauvois eligió vivir seis días en la Abadía de Tamié en Saboya.

El guion se inspiraba en los escritos de dos de los monjes de Tibhirine, Christian de Chergé y el dubitativo Christophe Lebreton. Se le pidió al consultor monástico francoamericano Henry Quinson que corrigiera y agregara contenido histórico y litúrgico para mayor autenticidad.

Una vez que  se completó el guión por parte de Beauvois y Etienne Comar se envió a los familiares de los monjes para recibir su aprobación. La mayoría  reaccionaron positivamente al proyecto.

Todos los actores tuvieron que hacer lo mismo , entrar durante una semana para vivir como monje en la Abadía de Tamié y así conocer las normas y la rutina diaria de una comunidad religiosa.

Los actores se entrenaron durante un mes con Francois Polgar, el ex director asistente del coro de la Ópera de París y ex director de Le Chœur de Radio France y director del Coro de Niños de París. Esto les ayudó a sonar más auténticos a la hora de cantar cantos gregorianos y cistercienses. De los actores, solo Lambert Wilson tenía experiencia previa en el canto, habiendo actuado en varios espectáculos.

La película tiene el buen gusto de no mostrar las escenas explícitas del asesinato de los monjes; sin embargo, hace alusión a éste en medio de la nieve, donde se les observa desaparecer por las montañas a un lugar retirado, escoltados por sus captores.

A pesar de que el Grupo Islámico Armado de Argelia se atribuyó la total responsabilidad del incidente. Sin embargo, según documentos de los servicios secretos franceses , es posible que los asesinatos hayan sido un error cometido por el ejército argelino durante un intento de rescate. Nunca llegó a esclarecer lo ocurrido.

En 2002 se publicó un libro sobre los acontecimientos. Se titulaba Los monjes de Tibhirine : Fe, amor y terror en Argelia  de John W. Kiser .

Mientras se financiaba el proyecto surgieron noticias que revelaban la posible participación del ejército argelino en el incidente, lo que una vez más despertó un interés por la historia por parte de los medios y el público. La producción fue dirigida por Why Not Productions con Armada Films y France 3 como coproductores. El apoyo financiero fue otorgado por el CNC . El presupuesto fue de 4 millones de euros.

Los actores utilizaron diferentes enfoques para sus roles individuales. Lambert Wilson utilizó principalmente los escritos de Christian de Chergé para desarrollar una percepción subjetiva de la personalidad del monje.

Un actor Xavier Maly, no católico, se preparó rezando todos los días durante un mes. Por su parte, Jean-Marie Frin basó su interpretación parcialmente en un video casero del voto de Paul Favre-Miville. Michael Lonsdale, por otro lado, prefirió confiar en el instinto, y no se preparó mucho.

La filmación comenzó a principios de diciembre de 2009 en Meknes , Marruecos, y terminó dos meses después.  La película se rodó en el Monasterio marroquí de Tioumliline en Azrou,  un monasterio abandonado en el Atlas marroquí, sin vigilancia durante más de 40 años.

El equipo de filmación contrató el diseñador de producción Michel Barthélémy, renovó el monasterio para que se pareciera a la ubicación de los eventos reales.


Se prestó atención a la ropa de los extras y la entonación árabe para que parecieran y sonaran argelinos y no marroquíes .

El secuestro y asesinato de los siete monjes franceses del Tibhirine en 1996 marcó el apogeo de la violencia y de las atrocidades que azotaban Argelia como resultado del enfrentamiento entre el gobierno y grupos extremistas decididos a derrocarlo. La desaparición de los monjes, atrapados entre ambos bandos, afectó profundamente a unos gobiernos, a la comunidad religiosa y a la opinión pública internacional que estaba pendiente de la guerra civil que vivía el país de 1991  a 2002. La identidad de los asesinos y las circunstancias exactas de su muerte siguen siendo un misterio. El caso está en los tribunales franceses desde 2003.

Tras su estreno la película llevó al cine en Francia a más de 3.000.000  espectadores consiguiendo en taquilla unos $ 42.1 millones. El 17 de septiembre de 2010, diez días después de su estreno en Francia, De dioses y hombres fue elegida por el CNC para representar a Francia en los Oscars 2011, para la categoría de mejor película en lengua extranjera. Se mantuvo en la cima de las listas de taquilla francesas durante cuatro semanas consecutivas.

La película fue presentada en el Festival de Cannes de 2010 ganando el Gran Premio del Jurado y el Premio del Jurado Ecuménico. 

La película ganó el Premio de la Educación Nacional. La National Board of Review, la NBR, la Asociación de Críticos Norteamericanos concedió el título de mejor film extranjero: visionado en Nueva York. También fue valorada como Mejor film del 2010 para los lectores de Télérama.

La película consiguió tres Premios César 2011 de sus once nominaciones , el de mejor película, mejor actor secundario por Michael Lonsdale y mejor fotografía por Caroline Champetier. Las otras nominaciones fueron para Wilson como Mejor actor , Olivier Rabourdin como Mejor actor de reparto, Mejor director , Mejor guión original , Mejor sonido , Mejor edición , Mejor diseño de vestuario y Mejor diseño de producción .

La película estuvo nominada en la categoría Mejor Película y a la mejor fotografía en los European Film Awards. También lo fue en los Premios BAFTA a la Mejor película en habla no inglesa así como en los Premios Independent Spirit a la mejor película extranjera.

El Sindicato francés de críticos de cine la consideró la Mejor película francesa y el Premio London Film Critics 'Circle a la mejor película extranjera de ese año.

Recibió el Premio del Público en el Festival Internacional de Cine de Palm Springs, el Silver Condor a la mejor película extranjera.

Estuvo nominada a los Premio Amanda concedidos por el cine noruego a la mejor película extranjera  y por el cine italiano en los Nastro d'Argento a Mejor Director Europeo. La Asociación de Críticos de Cine de Toronto la nominó a la Mejor Película en Lengua Extranjera  

En cuanto a las críticas fueron positivas en casi todos los casos. En el diario Le Monde  Isabelle Regnier escribió: "Podemos, debemos, incluso, consideramos esta película como una profesión de fe. Pero es en el cine donde Beauvois siempre ha colocado la suya, y donde la coloca aquí más que nunca. Confiado en el talento de su cineasta, Caroline Champetier, ... firma una poderosa y despojada puesta en escena [.] ... Confiando en la árida majestuosidad de los paisajes del Atlas (marroquí para la filmación), la pureza lechosa de las túnicas de los monjes , el ritmo del ritual, Xavier Beauvois juega con los disparos de seguimiento con un dominio impresionante ".

Para Didier Péron del  Libération la valoración en general fue positiva  pero comentó: " De Dioses y Hombres sin duda habría perdido en la grandeza y el lirismo ... lo que hubiera ganado en contenido político si se hubiera cuestionado específicamente el lugar de los monjes y el profundo papel de su paternalismo untuosa frente a un estado fallido y entre una población privada."

En Estados Unidos  A. O. Scott en las paginas del The New York Times señalaba que era una obra "Bella, sombría y rigurosamente inteligente"

En el Reino Unido, Tom Dawson de Total Film  y Tim Robey del The Daily Telegraph  elogiaron las actuaciones de Wilson y Lonsdale. Dawson calificó la película como un "drama magistral" destacando una de las escenas finales, la de la última cena diciendo que es " La secuencia al estilo de la Última Cena , donde los monjes escuchan al lago de los cisnes y compartir el vino tinto, está muy lograda".

Para Robey escribió: "Es una película grave y reflexiva, y ciertamente no es mala, a pesar de mis escepticismos sobre cuán profundas son sus ideas". La queja principal de Robey se refería al final de la película: "Hay un grave error, en una imagen que es casi pasivo-agresivamente cuidadosa en la mayoría de sus escenas: una última cena, mientras los monjes beben vino, se miran en silencio, muy cerca  , y suena el Lago de los cisnes de Tchaikovsky (...) Beauvois difícilmente podría ordeñar esta catarsis emocional de manera más coercitiva si bajara por los pasillos repartiendo pañuelos ". 

El crítico Mark Kermode dio una opinión muy positiva de la película, más adelante lo que la sitúa como la segunda mejor película de 2010. Y otro como Richard Corliss de Time señaló que era "Un relato iluminador sobre fe y heroísmo"

Ya en España Carlos Boyero en  El País decía que "Beauvois cuenta admirablemente (...) no hace trampas en esta fábula moral, no fuerza el sentimentalismo (...) sales conmovido con la historia de estos religiosos. Palabra de agnóstico."

M. Torreiro en Fotogramas destacaba que "Con los modos de un gran drama clásico (...) de la película, tersa, en ocasiones demasiado morosa, pero también recorrida por un hálito de tierno humanismo, emerge toda una lección de convivencia social y religiosa" Un habitual de Fotogramas como Fausto Fernández escribía en twitter que "Por una vez, la sesión del viernes noche de cine católico de TRECE no es un telefilme catequésico y sí una película de profunda religiosidad y humanidad: DE DIOSES Y HOMBRES (22.30h). "

Lluís Bonet Mojica de La Vanguardia escribía que "Quizá le falta mayor economía narrativa en algunos tramos, pero "De dioses y hombres", también gracias al portentoso grupo de actores, supone un regalo visual y moral"

Para el crítico de ABC  Oti Rodríguez Marchante se trata de  "Un equilibrado ejercicio de descripción, reflexión y ritmo (...) La película es tan recomendable como 'larga', tiene tanta calidad como 'exigencia' y provoca indignación y convulsión pero también su miajita de tedio"

Sergi Sánchez  en  La Razón destaca "La humanidad de los héroes. (...) Toda la película parece organizada para llegar a un clímax bellísimo"

En el cono sur , en  Argentina Diego Batlle en La Nación destacaba "Una puesta en escena impecable (...) 'De dioses y hombres' se convierte en una película no sólo inteligente, profunda, lírica y conmovedora (sin golpes bajos), sino también necesaria."

Pablo O. Scholz en Clarín escribió sobre ella que "La humanidad y el entendimiento de lo que es correcto son las bases en las que se sustenta este muy buen filme que no debería pasar desapercibido."

Para  Horacio Bernades de Página 12 "'De dioses y hombres' ensalza valores en los que la contemporaneidad se ha habituado a descreer."

Por su parte,  Gustavo Castagna de Tiempo Argentino habla de que la película "Emociona y hace un agujero en el estómago, pero tampoco oculta su torpe manipulación y su transparente abyección. "

Isabel Croce en La Prensa lacónica pero clara sentencia diciendo que es "Una obra de arte, sencilla, auténtica, emocionante."

Por último, Josefina Sartora en la web de OtrosCines.com afirma que "El film transmite cierta atemporalidad, se presta a la sugerencia de que ese estado de cosas no tiene fecha ni lugar determinado, es universal y permanente. (...) "

Señalar que la película me parece tan maravillosa como terrible me parece la historia. Una historia de un grupo de hombres que dan su vida por lo que para ellos da sentido: la coherencia de su fe y el deber con la comunidad con la que vive. Sus principios pero también sus dudas y miedos salen a la luz  y se colocan sobre el tapete de la mesa durante sus reuniones y especialmente durante el refectorio final que será su particular última cena.

Me ha encantado la composición técnica conseguida a través de las imágenes. A destacar las escenas grupales del refectorio casi inspiradas en Zurbarán o las escenas en las que se procede a mostrarnos los cantos de los maitines o el servicio religioso, una muestra minimalista de la austeridad de la hermandad.

Frente a ello están las imágenes en primeros planos de los rostros de aquellos que son sabedores que van a morir , que están presentes en su última cena que se convierten en una galería de retratos en primer y primerísimo plano inspirado en los mejores retratistas de la historia de la pinturas que mostrando sus rostros blancos sobre fondo oscuro. 

Una gran película sobre los principios que llevan a algunas personas a la entrega más absoluta , al sacrificio. Con independencia de tener fe o no , es una película que emociona, especialmente pues sabes como va a terminar esta entrega a su comunidad de fieles, a los hombres y mujeres que viven allí y que tienen fe en su trabajo, en ellos, más que en sus creencias.




No hay comentarios:

Publicar un comentario