Qué Dios nos perdone

La policía no es tonta. ¿Cuántas veces habremos escuchado esa frase? Ese debe ser el planteamiento del asesino en serie protagonista de esta película. ¿Pensaba que era fácil dejar huellas, semen, restos de cremas y que no diesen con el asesino? 

Lo cierto es que la incapacidad para detectar esos elementos con precisión hace que la narración se prolongue en la película, una gran película. Lo cierto es que en España se hace , de un tiempo a resta parte, buen thriller policíaco con historias complejas, con policías que manifiestan una personalidad propia y con malos repulsivos, como este violador en serie y asesino de ancianas. Todo muy adecuado para ofrecernos la radiografía de tres psicópatas , eso sí, muy diferentes entre sí, pues si bien uno es el violador, los otros , los policías, están o poseídos por una violencia incontrolable o por un voyerismo fruto del rechazo y la incomunicación que pues explotar en un arrebato de semiviolación. 

Esta compleja historia por la que pululan estos tres personajes quebrados psicológicamente es fruto del buen hacer de el que fue el tercer largometraje de su director Rodrigo Sorogoyen, después de Stockholm - vista no hace mucho- y 8 citas. Hablamos de Qué Dios nos perdone.

No hace mucho hablamos del desarrollo profesional de Sorogoyen, posiblemente una de las perlas más brillantes y prometedoras de nuestro cine patrio. En este caso , como en anteriores, Sorogoyen es junto a Isabel Peña,responsable de esta historia que las productoras Tornasol Films , Atresmedia Cine , Mistery Producciones AIE y Hernández y Fernández P.C que pusieron sobre la mesa unos 4 millones de euros llevaron a la gran pantalla y estrenaron en 2016. 

La película cuenta con una banda sonora compuesta por Olivier Arson, la fotografía de Álex de Pablo y el montaje de Alberto del Campo y Fernando Franco García. 

El reparto lo integran Antonio de la Torre como Velarde, Roberto Álamo como Alfaro, Javier Pereira como Andrés, Luis Zahera como Alonso, Raúl Prieto como Bermejo, María de Nati como Elena, María Ballesteros como Rosario, José Luis García Pérez como Sancho, Mónica López como Amparo. También aparecen Rocío Muñoz-Cobo, Teresa Lozano, Francisco Nortes, Andrés Gertrudix, Jesús Caba, Alfonso Bassave, Raquel Pérez, Javier Tolosa, Josean Bengoetxea-

Estamos en el bochornoso verano de 2011, en un Madrid al que han llegado miles de católicos de todo que se han acercado para ver al Papa Benedicto XVI y formar parte de las Jornadas Mundiales de la Juventud. Un Madrid en parte desolado porque los madrileños han salido en masa a la playa y donde el calor deja grandes "roeles" en las caminas sudorosas. 

Ese calor no impide que el inspector Velarde( Antonio de la Torre) vaya siempre impecable con su traje de chaqueta mientras su compañero, el Inspector Alfaro (Roberto Álamo) lleva sudorosas camisas. Eso demuestra que el carácter del primero, absolutamente reservado, sea contrapuesto a la naturaleza expansiva del segundo al que le gusta bromear con compañeros y con la gente de la calle que conoce. 

En un momento dado hay un aviso. Ha aparecido muerta una anciana en las escaleras de un bloque de la zona de Carretas en el centro de la capital estando presentes en el levantamiento del cadáver de la mujer . 

Nada más llegar vemos que la actuación de ambos es distinta. El primero sistemático y extraño ante los ojos de sus compañeros se tira al suelo simulando el cuerpo caído de la señora. Velarde se esfuerza en replicar las muertes para poder comprenderlas. Tras eso sube al piso y detecta pequeños detalles que contradicen la primera impresión policial: la fallecida ha muerto tras una pugna con el ladrón que ha entrado en el piso. 

Velarde al analizarlo asume que lo que al principio parece un intento de robo infelizmente concluido en accidente doméstico, y poco a poco va revelándose como un homicidio.todo tiene una sospecha. La señora ha sido violada. Tras un análisis ocular. No se ha equivocado. 

Todo es bastante sórdido. Será tras aparecer un segundo cuerpo cuando los policías se den cuenta de que por primera vez en sus carreras se tendrán que enfrentar a un asesino en serie meticuloso y obsesivo, y que para dar con él tendrán que llegar a comprender el funcionamiento de su mente retorcida. 

Se inicia así una carrera contrarreloj para localizar a un asesino que indudablemente volverá a matar y lo hará en repetidas ocasiones.

En este contexto, los inspectores de policía Alfaro y Velarde deben encontrar al que parece ser un asesino en serie cuanto antes y sin hacer ruido pues su Jefe ordena silencia absoluto.

Llama la atención el momento pues mientras la presencia papal y de los peregrinos refleja paz y amor todo tiene un contraste con la violencia y la saña.

Durante este trayecto descubrimos que Velarde es un minucioso investigador con una tartamudez que lo ha vuelto retraído y que actúa casi como un autista. Su único interés fuera de sus casos es una limpiadora a la que observa por la mirilla de su puerta y por la que se siente atraído. 

Un día la chica , conocedora del extraño interés que despierta en el inspector, y con la excusa de recompensarle por una caída que tuvo mientras ella limpiaba, intenta abusar de ella, aunque ella se resiste y se marcha; mientras que Álamo es un policía tan violento como eficaz. Ha sido suspendido por su agresividad con un compañero al que le ha quitado tras la pelea un 90 % de la visión en un ojo. Esta siempre en el disparadero de su jefe que no le soporta. 

Una nueva pelea con dos compañeros a los que no soporta por su escasa profesionalidad Alonso (Luis Zahera) y Bermejo (Raúl Prieto) supondrá su separación casi definitiva. Para su desgracia cuando va al pueblo en el que está veraneando su mujer , lo descubre con su amante, lo que supone su derrota como persona y la degradación absoluta. Ahora los dos se dan cuenta de que ninguno de los dos es tan diferente del asesino. Tras repetirse el "modus operandi" el cerco al asesino se estrella. Un ese cerco , Alfaro usando el "metodo" de su colega descubre una medalla. Y aunque uno de ellos - no revelaré quién- pierde la vida. El otro no ceja en cerrar el caso ya que la pequeña medalla apunta directamente al asesino al dar referencias de la iglesia y la fecha de la comunión . La intervención del párroco actual , y del anterior así como un álbum guardado da nombre y rostro al asesino. Años después , el asesino es descubierto. 

Tras el éxito del último largometraje de Sorogoyen, Stockholm, en el Festival de Cine de Málaga de 2013, el productor Gerardo Herrero (Tornasol Films) se interesó por este guion y decidió acceder a la producción de la película, contando Sorogoyen, para este proyecto con un presupuesto más ambicioso que anteriormente. 

Ahora contará con actores de peso como Antonio de la Torre y Roberto Álamo quienes ya habían coincido en títulos más amables como ''La gran familia española'' o ''Gordos'' así como con el protagonista de Stockholm, Javier Pereira . 

En una entrevista, poco antes del estreno, Sorogoyen declaró "Con Isabel [Peña, coguionista del filme] trabajamos muchísimo los diálogos para huir de lo peliculero e ir a lo naturalista, que es lo que nos gusta".

Y añade "Yo en el 2011 vivía en la calle Montera [al lado de la Puerta del Sol] y aquel verano fui testigo de todo aquello. Todo eso flota en el ambiente de la película, porque aparte de contar tres viajes humanos, los de los personajes principales, queríamos explicar un estadio, una situación de una ciudad, de una sociedad, de una gente".

Sobre las influencias el director madrileño Sorogoyen declaró que "Soy un espectador voraz de 'thrillers'. Me fascina 'Zodiac': quisimos coger de ella ese aburrimiento que transmite, con esa gente en la comisaría esperando a que un señor mate a alguien para poder trabajar. También me gusta mucho el 'thriller' europeo: 'Un profeta', 'Gomorra'.. De hecho, esas dos películas me han influido mucho. Mi director de fotografía (Alejandro de Pablo) y yo queríamos parecernos a esa realidad, en la que te crees que de verdad estás en una cárcel o en una barriada napolitana. Ah, lo olvidaba: otro gran referente es Denis Villeneuve. Ese hombre rueda de maravilla. 'Enemy' es un peliculón". 

Antonio de la Torre dijo de su personaje que " el reto para el papel de Velarde era bastante difícil pr el tem de la tartamudez “Estuve acompañado durante el rodaje de un portador de la Fundación Española de la Tartamudez para poder llegar al fondo del asunto, tenía que entender el personaje. Tuve quecrearlo con mucha delicadeza ya que me parecía grosero hacer una parodia de este tipo de cosas. Para mí era muy importante darle dignidad a este trastorno del habla”. 

Por su parte Roberto Álamo sostuvo en una entrevista en Blasting news que "Durante las persecuciones mi cuerpo estuvo al límite y me rompí los dos cuádriceps de las piernas"Confesaba el intérprete que tuvo que hacer un gran esfuerzo y a un vendaje compresivo.“Sabía que era una locura pero valió la pena, así que seguí corriendo con las piernas rotas”. Y en otra en Fotogramas señala que "La primera secuencia del guión, cuatro o cinco páginas sobre el personaje que hace Antonio... la leí y me emocioné. Apenas había diálogos pero sí mucha descripción, pero me enamoró, por su precisión, por la forma de estar escrita. Me pareció una maravilla. Después nos hemos hecho muy amigos de Rodrigo Sorogoyen. Además de que es un tipo brillante, seductor, encantador, muy cinéfilo, dirige excepcionalmente bien, y confía muchísimo en los actores, les escoge minuciosamente, les escucha, y permite que aportemos vida propia a los personajes. Al fin y al cabo estamos dando forma a lo que otros han escrito: yo creo que el cien por cien de lo que siente un personaje viene del interior del actor, recurres a lo que hay en ti, a tus mecanismos, para darle forma. Es lo que se llama encarnar, darle tu carne y tus emociones al personaje. " 

El rodaje se llevó a cabo en el centro de Madrid en agosto de 2015, en Tenerife - los interiores: las casas y la comisaría; por las ventajas fiscales que hay en las Islas Canarias- y la escena final en Torrelavega (Cantabria). 

La película pasó por el Festival de Málaga en la sección Cinco minutos de cine y después compitió en el Festival de San Sebastián. Se estrenó en España el 28 de octubre de 2016.Fue presentado en Sitges fuera de concurso. 

Se premió especialmente el trabajo de Roberto Álamo quien recibió el premio Goya a la mejor interpretación masculina por su actuación y sus guionistas Rodrigo Sorogoyen e Isabel Peña fueron galardonados, en la 64 Edición del Festival de Cine de San Sebastián, con el premio del Jurado por el guion. 

Lo cierto es que en los Premios Goya de las 6 nominaciones , aparte de mejor actor (Roberto Álamo) las nominaciones fueron a la Mejor película , Mejor dirección (Rodrigo Sorogoyen), Mejor actor de reparto (Javier Pereira), Mejor guion original (Isabel Peña y Rodrigo Sorogoyen) y Mejor montaje (Alberto del Campo y Fernando Franco) 

En los Premios Feroz consiguió el Premio de Mejor actor (Roberto Álamo) al igual que en los Premios Forqué, aunque aquí tuvo dos nominaciones y en los Premios Platino que fue nominada a mejor montaje ( Alberto del Campo y Fernando Franco García) 

En cuanto a la crítica estadounidense Jonathan Holland en The Hollywood Reporter dijo de ella que era "Sudorosa y llena de suspense (...) Un conjunto tenso y peculiar que, con su enfoque en la investigación antes que en los asesinatos, sugiere que el director apuesta por el estilo Fincher" 

Ya en España Luis Martínez en El Mundo sostuvo que era "Un angustioso e irrespirable retrato de la crueldad que nos asiste. (...) Un 'thriller' tan brillante como anómalo" También aquí Alberto Luchini comenta que "La puesta en escena de Sorogoyen es vibrante, incluso frenética cuando es menester, y angustiosamente desasosegante y confirma las buenísimas sensaciones que apuntaba en su anterior filme. Las interpretaciones son brillantes (...) 

Para Carlos Boyero en El País "Es una película en posesión de cierto clima y que no te aburre. No dudo de los dones narrativos de su creador, pero no soporto la personalidad de uno de sus protagonistas." Y en este mismo diario Javier Ocaña señalaba que era "Magnífica (...) tan fascinante como atroz (...) la película te agarra y no te suelta (...) 

Capítulo aparte merecen los intérpretes, fabulosos" Olga Pereda en El Periódico nos dice que "Rodrigo Sorogoyen aprueba con nota su salto el cine 'major' con un potente 'thriller' policiaco que habla de las miserias de la sociedad" Para Quim Casas en este mismo periódico "Sorogoyen (...) trabaja bien (...) la doble figura policial y antitética (...) Funciona en armonía la estricta pesquisa policial y el retrato de dos personajes sin visible salida. (...) 

Carlos Marañón en Cinemanía defiende que "Sorogoyen desciende al Km. 0 del infierno y enfrenta a Roberto Álamo y Antonio de la Torre con su peor enemigo en un thriller castizo y asfixiante. (...)" Igualmente aquí encontramos la crítica de Andrea G. Bermejo que nos dice que "Un thriller sudoroso aupado por las interpretaciones de Antonio de la Torre y Roberto Álamo." 

Y Beatriz Martínez en Fotogramas lo define como un "Policíaco bronco y sudoroso, incómodo y avieso, que se adentra en las miserias de una serie de individuos que cargan con la culpa a cuestas de sus propios pecados." Y Mirito Torreiro destaca que "Lo que afea el conjunto está (...) por una parte, en la gratuidad del mostrar (...) por [la otra], un tufo insalvable a falocentrismo (...) Convierte lo que pudo haber sido un buen thriller, un film de dramaturgia equilibrada, en otra cosa.

Por mi parte señalar que estamos ante un film impactante , directo, fuerte, potente bien construido y mejor desarrollado, que solo flojea un poco al final con personajes complejos que van mostrando ante la pantalla sus dificultades, pues son personajes extremos,abominables, llenos de flaquezas, de violencia sin control, trastornados, inteligentes pero débiles. Una película de gran factura técnica, bien rodada, con mucho ritmo salvo la última media hora, con momentos del mejor estilo Fincher por lo impactante - los cadáveres en el lugar del crimen o en la morgue- , mejor fotografiada - mientras que las imágenes externas son muy luminosas, las del interior de las casas son lúgubres-, donde encaja música, fotografía y tensión. Todo un hostión en toda regla. Muy recomendable aunque tenga un final bastante forzado.

Las imágenes corresponden a © 2016 Atresmedia Cine, Hernández y Fernández Producciones, Tornasol Films y Mistery producciones.