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sábado, 27 de enero de 2024

La batalla de Inglaterra



"Nunca en el campo de los conflictos humanos tantos les debieron tanto a tan pocos" con esta fase lapidaria de Winston Spencer Churchill termina la batalla de Inglaterra.  una película épica en el diseño,  en el elenco y en el intento de narración de la historia para que la misma sea lo más real posible, así como en la música. Fue una de las películas bélicas ambientadas en la Segunda Guerra Mundial, con las escenas más reales y mejor logradas.

La película, que cuenta con un extenso reparto de primeras figuras, y que ya comentamos hace años en esta entrada, narra de forma bastante rigurosa los acontecimientos que se desarrollaron en Inglaterra aquel verano de 1940, cuando la invasión de las islas británicas era inminente por parte de la Alemania nazi en la Operación León Marino.

Las escenas de combates aéreos están fielmente reproducidas, ya que fueron asesoradas por dos de los auténticos protagonistas de la batalla, el as alemán y general de la Luftwaffe Adolf Galland y el jefe de ala de combate de la RAF Robert Stanford Tuck. Fue una producción Daniel Goldstein para la United Artists. 

La película contó con el guion de Wilfred Greatorex y James Kennaway. La bando sonora fue labor de Ron Goodwin y William Walton, siendo la fotografía responsabilidad de Freddie Young y el montaje de Bert Bates.  

La película es un tributo a los pilotos aliados que participaron en la Batalla de Inglaterra de múltiples países, en los que destacan los polacos, checos,  belgas,  franceses de la Francia libre, sudafricanos,  gente de Rodesia, irlandeses, americanos, canadienses y algunos más ya que fueron más de mil ochocientos veintidós pilotos, de los cuales hubo fallecidos en combate un total de 339. Las bajas alemanas fueron también numerosas, muchos de ellos murieron en combate en gran medida llegando a morir 1.176 tripulantes de bombarderos, ochenta y cinco de Stucas y con muchos también soldados que desaparecieron de sus tripulaciones. 

La batalla de Inglaterra es una película del año 1969 dirigida por Guy Hamilton que cuenta con lo más granado del cine británico del momento. Entre otros actores participan Ian McShane, Michael Caine, Trevor Howard, Harry Andrews, Laurence Oliver, Michael Redgrave, Susannah York, Curt Jürgens y un largo etcétera de buenos actores ingleses y alemanes como Robert Shaw, Kenneth More, Paul Neuhaus y Edward Fox. 

En la película empieza en la Francia ocupada por los nazis. Vemos los ingleses huyen con sus aviones de aeródromos franceses ante el avance alemán. Hitler cuenta poder tratar con Inglaterra y le hace una oferta indirecta en su discurso del 19 de julio de 1940 en el resto. Su llamada no obtiene respuesta alguna y busca la forma de llevar a su adversario al orden. Y en efecto la fuerza británicas en tierra y aire son ínfimas integradas por tres divisiones de las que solo una está completamente equivocada y menos de 700 aviones modernos. Con esto resulta imposible proteger la isla. 

Por la ruta marítima la flota alemana no está en condiciones de asegurarse ni siquiera momentáneamente la libre disposición del paso de Valais, y por aire dos mil de los seis mil aviones alemanes están inservibles tras la campaña de Francia. Ante esto el mando alemán resuelve bajo la influencia de Goering (Hein Riess) , designado por Hitler jefe de la luz bace recurrir a las bombardeos aéreos masivos combinados con una amenaza de desembarco en lo que se donning denomina operación día del águila. 

La situación parece excepcionalmente favorable al éxito tras arrasar los aeródromos británicos, pero la fuerza de resistencia de la población civil, el excepcional valor en lo material y personal de la aviación de caza británica y sobre todo la intervención por sorpresa de la técnica con la aparición del radar que permite detectar de lejos al enemigo aéreo seguir su vuelo y orientar el de las defensas Ana antiaéreas o buses y aviones permiten a los británicos resistir con éxito.

La película de Guy Hamilton director que fue entre otras de Golfinger de la saga 007 se recrea con rigurosa fidelidad histórica alguna de las horas claves de esta fase de la Segunda Guerra Mundial. 

La operación día del águila significó el primer asalto en Inglaterra de la aviación alemana. Las formaciones de la luz bafe tras desmantelar el dispositivo de defensa británico y arrasar sus campos de aterrizaje tuvieron vía libre hacia Londres objetivo primordial de Goering. Con Spitfires, los pequeños pero ágiles cazas británicos recayó el peso de lo que habría de llamarse la batalla de Inglaterra. 

La película fue rodada en la Base Aérea de Tablada (Sevilla), algunas playas de la Provincia de Huelva y en San Sebastián, Fuenterrabía, Zarauz (Guipúzcoa), Bentley Priory y Middlesex. Los productores de la película se encontraron con el problema de encontrar, 30 años después, los aviones protagonistas de aquellos enfrentamientos. Su salvación llegó al comprobar que muchos de los aparatos aún estaban en servicio en España. Para ello fue esencial el papel de Gil Parrondo como director artístico. Uno de los grandes, de los más grandes. 

En el Reino Unido, el rodaje de escenas de batallas aéreas sobre Londres y sus condados generó un interés considerable. La publicidad previa al estreno incluyó carteles cuádruples de la película en lugares destacados de vallas publicitarias y artículos en la revista The Sunday Times y en la prensa local. 

Sin embargo, la película se estrenó en un momento en el que el sentimiento pacifista suscitado por la guerra de Vietnam estaba en auge, y también había cinismo entre las generaciones de la posguerra sobre el supuesto heroísmo de quienes participaron en la Batalla de Gran Bretaña. 

El estreno de la película se celebró en el Dominion Theatre de Londres el 15 de septiembre de 1969 y contó con la asistencia de 350 veteranos de la Batalla de Gran Bretaña, incluido el mariscal jefe del aire Lord Dowding.

El Evening Standard la calificó ´de "una película más absorbente que conmovedora", The Times escribió que era "una mezcla discreta de todos los enfoques posibles, hecha con buen gusto, nada poco inteligente, eminentemente respetable y en su mayor parte mortalmente aburrida", y The Guardian la calificó como "ni una película muy buena ni una pieza histórica muy formidable". 

La prensa norteamericana también fue crítica con la película. Vincent Canby de The New York Times escribió que la película es un "homenaje a aquellos aviadores que, en 1940, rompieron la amenaza de invasión nazi. También es una de esas no películas de estrellas, de un orden algo inferior. que El día más largo, que intenta recapitular la historia, pero no añade nada a la comprensión. La mezcla de ficción en clave menor y hechos reescenificados nunca es –al menos para mí– nunca particularmente satisfactoria, ya que se le niegan las prerrogativas y posibilidades de ambos el documental y el cine de ficción.

En el Chicago Tribune, Gene Siskel afirmó: "Creemos que el público cinematográfico estadounidense ya no se deja impresionar por elencos de miles y presupuestos de millones. Lamentablemente, Harry Saltzman, que produjo La batalla de Gran Bretaña, no está de acuerdo. La película es una película de 12.000 millones de dólares. Una bomba de un megadólar que presenta 100 aviones antiguos que consumen 40 minutos de película. La película no tiene absolutamente ningún interés dramático en los otros 93 minutos, y cuestiono la idea de que vale la pena verla sólo por las secuencias aéreas". Siskel incluyó la película en su lista de las veinte peores películas de 1969, señalando que "los aviones tenían las únicas buenas líneas de la película". 

Roger Ebert escribió que "las escenas aéreas pueden reproducirse eternamente y repetirse descaradamente, hasta que estemos seguros de haber visto al mismo Heinkel sumergirse en el mar (lo siento, la "bebida") ya tres veces. Y los efectos especiales no lo son. "No es tan bueno para una película que cuesta 12.000.000 de dólares."

Según el director Guy Hamilton en una entrevista incluida en el DVD de dos discos de la película, Battle of Britain recaudó poco menos de 13 millones de dólares en la taquilla mundial. Debido a sus altos costos de producción y marketing, eso significó una pérdida de 10 millones de dólares, pero la película finalmente se volvió rentable gracias a las ventas de medios domésticos.



lunes, 8 de febrero de 2021

El americano tranquilo



No hace mucho pude disfrutar de El Factor humano, la película de Otto Preminger que llevó la obra homónima de Graham Greene al cine. Al escritor británico gustaba de completar sus libros con unos temas que le preocupaban, caso obsesionaban: el amor, la religión, la ocupación colonial por parte de metrópolis occidentales, la injerencia de los poderosos en la vida en la vida de los más débiles, los intereses ocultos, la muerte con un fin injustificable. 

Gran parte de esto, que vimos en el factor humano, reaparece en El estadounidense tranquilo o The Quiet American , una novela policial escrita por el novelista británico y publicada por primera vez en 1955. Un novela de las que recomienda Arturo Pérez Reverte cuando le preguntan por novelas de espionaje señalando otras como La máscara de Dimitrios, El espía no vuelve, El enigma de las arenas, Goldfinger, . 

Si la anterior se ambientaba en Londres, Moscú y el pasado de alguno de los protagonistas en África, ahora la historia se desarrolla en la Indochina francesa, aunque la presencia británica se hace notar en alguno de los protagonistas. 

La novela, pero también la película, cuestionaba implícitamente los fundamentos de la creciente participación estadounidense en Vietnam en la década de 1950 y casi anuncia la intervención futuro de los americanos en lo que será la guerra de Vietnam. 

La novela publicada en Inglaterra en 1955 con el título de The Quiet American nació de la experiencia de Greene como agente de espionaje en Sierra Leona y, posteriormente, como corresponsal de guerra en Saigón en la primera mitad de los cincuenta, mientras los franceses veían como los naipes de su imperio colonial se desvanecían. En la capital vietnamita fue reportero para Le Figaro, The New Republic y The Times, periódicos de enorme solvencia. 

Graham Greene pasó cuatro inviernos en Saigón entre 1951 y 1954 como corresponsal para  esta prena por lo que le dio tiempo para conocer el país, lo que podían ocurrir y conocer a personajes de todo pelaje. Se señala que el escritor británico se inspiró en Edward Landsale para crear a su personaje de Alden Pyle. Como señaló en alguna ocasión «Quizá haya en El americano tranquilo un reportaje más directo que en cualquiera de mis otras novelas». 

Joseph L. Mankiewicz, anticipándose a la carga controvertida del libro, sobre todo en relación a los sectores estadounidenses más conservadores, con su recién creada productora Figaro Incorporated, adquirió los derechos para la explotación cinematográfica de The Quiet American a las pocas semanas de publicarse el relato en  los Estados Unidos de la mano de Viking Press. 


La película sobre la novela, como ocurrió con respecto a otras, se estrenó tres años después de su publicación. Ya sabemos la importancia que le daba Greene al mundo del cine. Más aún si en la dirección se encontraba uno de los más grandes directores, uno de los guionistas más inteligentes y uno de los productores más certeros de la historia del cine, el mismo Joseph L. Mankiewicz con la ayuda en la distribución de la productora United Artists. Como guionista fue el responsable de los guiones y películas como Solo en la Noche, El Castillo de Dragonwyck, El Mundo de George Appley, El Fantasma y la Señora Muir, y director en otros muchas como Odio entre Hermanos, Carta a Tres Esposas, Eva al Desnudo, Murmullos en la Ciudad, Operación Cicerón, Julio César, La Condesa Descalza, Ellos y Ellas,  De Repente El Último Verano, Cleopatra o La huella. Gran parte de ellas vista en  aquel ciclo de los ochenta de televisión española que me permitió conocerlo. 

La película contó con la música de Mario Nascimbene y la fotografía en blanco y negro de Robert Krasker. 

El reparto lo integraban Audie Murphy como Pyle, Michael Redgrave como Thomas Fowler, Claude Dauphin como el Inspector Vigot , Giorgia Moll como Phuong,Kerima como la hermana de Phuong, Bruce Cabot como Bill Granger, Fred Sadoff como Dominguez, Richard Loo como Mr. Heng, Peter Trent como Eliot Wilkins , Georges Bréhat el coronel francés, Clinton Anderson como Joe Morton, Yoko Tani, una de las chicas del Rendez-Vous  

Son las fiestas del año Nuevo Chino. Una multitud está en la calle ya que a pesar del enfrentamiento entre la metrópoli francesa y parte del país, es una fecha en la que todo se detiene para conmemorar un nuevo año, Entre petardos, gente en la calle y dragones, un ciudadano encuentra el cadáver de un hombre ha aparecido flotando en un río.

Mientras en su habitación el periodista británico Thomas Fowler (Michael Redgrave) ve desde la ventana a una chica  de nombre Phuong ( Giorgia Moll ) a la que conoce y que está a la espera con un chico, pues ha quedado con él. Su chico es Pyle, un ciudadano norteamericano,  con el que lleva saliendo un tiempo. Ante la extraña ausencia se dirigen a la comisaria de policía comandada por el Inspector Vigot (Claude Dauphin). Nada más llegar le comentan que han encontrado el cuerpo de un ciudadano occidental en la ribera del río. 

Cuando Thomas Fowler se aprxima al mortuorio de la policía descubre la persona que ha aparecido flotando en el río  es Pyle ( Audie Murphy) con su chaqueta blanca reluciente comenzando en ese momento un largo flashback donde el corresponsal rememora la historia que vincula a uno y a otro , relacionadps ambos con Phuang, mientras observa el cadáver del americano en la morgue. 

Fowler recuerda la primera vez que tuvo un encuentro con Pyle, mientras tomaba un batido con Phuang en el hotel Continental. Al principio Pyle se da a conocer como  miembro de una misión de mediación de paz y  de nacionalidad estadounidense. 

Nos enteramos que el periodista británico  lleva un tiempo  en la Indochina francesa en la década del cincuenta, mientras las fuerzas coloniales francesas están perdiendo ante el ejercito nacionalista del Vietming  y mientras en la zona se expande el avance del comunismo. 

Thomas Fowler, el narrador de la historia, es un corresponsal de guerra británico, de mediana edad, casado con una británica, a la que no quiere y que ya lleva cinco años cubriendo el conflicto y dos de convivencia con Phuong, su joven amante vietnamita. Fowler es un hombre escéptico ante la vida y ante la política internacional.

La llegada del joven Alden Pyle, un hombre algo simple y amante de la democracia, que aboga por una “tercera vía” que ayude a los vietnamitas, aunque para ello haya que recurrir a dolorosos actos  contra algunos principios siempre que el fin sea bueno.  Pyle está convencido de que la solución a los problemas del tercer mundo no estaría en el colonialismo ni obviamente en el comunismo, sino en una tercera fuerza que se perfilase hacia una democracia liberal. Nunca se dice que sea agente encubierto de la CIA. 

A Fowler le llama su atención sus principios, pero también su imagen de chico joven , con un corte de pelo militar y su amplia mirada de universitario, parecía incapaz de hacer daño a alguien. Se muestra amable y respetuoso en el trato,  que no bebe alcohol y  que al entrar entra en un cabaret no quiere abusar de ninguna de las chicas que allí se buscan la vida. 

Casi de inmediato Pyle invita a cenar a Phuong y al periodista. Cuando él invita a sacar a bailar a la chica, éste se enamora de Phuong.

Como Fowler recibe la orden de cubrir una ofensiva en el frente marcha al mismo y allí se presenta Pyle, cruzando por la zona en pleno estallido bélico. Dado que admira y aprecia a Fowler, se siente en la obligación moral de advertirle que le pedirá la mano a su amante para que se case con él. 


Nuevamnete en Saigón, como el francés de Pyle es muy malo y Phuong no comprende el inglés, Fowler termina oficiando de traductor para declararle su amor a la chica, que no entiende algunos conceptos como Futuro. Phuong, la joven vietnamita, es una amante devota, que junto a su hermana (Kerima)  busca un matrimonio económicamente solvente, despojada de manera radical de todo romanticismo e incluso de erotismo. Fowler no se engaña, sabe por qué quiere estar con ella. 

La chica de todas maneras no toma partido y sigue conviviendo con Fowler. Mientras la actuación como periodista de Fowler continúa en la zona. Uno de los actos más singulares al que tiene que ir  a la ceremonia anual del caodaísmo. Se trata de una religión nueva , surgida en los años veinte e ideada por  un funcionario vietnamita, Ngo Van Chieu, que servía al gobierno francés, y que sufrió una revelación directa de Dios durante una sesión de espiritismo. Este sería el origen del caodaísmo, una religión sincrética que integra elementos del cristianismo, el islamismo, el hinduismo, el budismo, el taoísmo y el confucianismo. Una religión que tiene una autoridad máxima, un Papa, sacerdotes masculinos y femeninos y casi una milicia enorme ya que el caodaísmo contaba con un ejército propio de unos veinticinco mil hombres, armados con morteros construidos con los tubos de escape de coches viejos, «que era aliado de los franceses, pero se volvía neutral en los momentos de peligro». 

La persona que controlaba esta milicia hasta hace poco era el general Thé que había sido el jefe de estado mayor del caodaísmo, pero había abandonado luego la iglesia para irse a la montaña y combatir los dos bandos, a los franceses y a los comunistas. Esta es la tercera fuerza por la que apuesta Pyle.

Cuando acaba el acto descubre Fowler que su coche no funciona además de ver a Pyle, sospechando que éste tiene algo que ver con Thé. Pero como no tiene coche y necesitan llegar a Saigon , que dista del lugar unos 70 kilómetros se monta en el coche de pyle , que se queda a mitad de camino en su desplazamiento. Como se quedan cerca de una torreta de vigilancia en la que hay soldados de reemplazo vietnamita suben a ella, pues quedar en la carretera es peligroso. 

Efectivamente, al caer la noche, la gente del general Thé actúan y ataquen la torreta matando a los soldados. Ellos escapan milagrosamente refugiándose en un arrozal aunque Fowler queda herido. 


Mientras se recupera Fowler que recibe ayuda de Pyle, su posición ante Phuong , mejora pero a base de mentiras. Ya que le oculta que ha recibido la orden de su diario de retornar a Gran Bretaña. Además recibe una carta de su mujer que le confirma que no se divorciará en la vida. Esto lleva a Fowler aumentar su escepticismo en lo político. es consciente que la prolongación de la guerra solo traerá más muertes, y se muestra descreída de su oficio de periodista como de los grandes discursos ideológicos. En lo único que cree es en la posibilidad de mantenerse al margen de esa guerra inútil, limitarse a contar lo que ve y no tomar partido, otra ilusión que más tarde también se derrumbará. 

Esto no le impide quererla, ni sentir un afecto sincero por Pyle, quien será su rival, mientras recurre a la mentira y a los más bajos recursos para evitar quedarse solo. la cercanía a la potente explosión.

Por su parte, Pyle persiste en su intento de quedarse con la chica que finalmente se decanta por él al desvelarse la mentira del periodista. Desde ese momento, Fowler se muestra dolido con el americano tranquilo y personas de su círculo como Domínguez (Fred Sadoff) lo ponen en contacto con agentes que señalan que Pyle es un agente norteamericano que está en el país para desestabilizar como lo demuestra que se dedique e la importación de plásticos . Precisamente Dominguez le pone en contacto con  un chino, Mr. Heng (Richard Loo) que le intenta demostrar que el plástico se usa para producir explosivos.  

Todo ello coincide con una campaña de bicis bombas que estallan en el centro de la ciudad. Pero lo peor está por llegar mientras el va a un bar, Fowler escucha el estallido de una gran bomba. Se trata de un atentado en la Place Garnier. El paisaje es estremecedor , pero predomina es el silencio. 

Esto hace que Fowler, resentido con Pyle por haberse quedado con Phuong, con la que espera casarse, crea en las palabras de Mr. Heng considerándolo un agente desestabilizar. Así que tras quedar con él, y habiendo informado a Mr. Heng esa noche, la noche del inicio de la película, Pyle desaparece y se cuerpo es encontrado.

Aunque mientras el interrogatorio que le hace el Inspector Vigot (Claude Dauphin) afirma que no lo había viso desde el día anterior. El perro de Pyle que siempre le acompañaba, un boxer, deja sus marcas en el cemento fresco de la escalera de la casa de Fowler lo que lo vincula, aunque no lo responsabiliza de su muerte, pero sí entregarlo a sus asesinos. 

Tras ser desenmascarado Fowler se siente desorientado, a pesar de que ha renunciado a su puesto como subdirector y su mujer le ha concedido el divorcio,  y busca a Phuong por la ciudad, encontrándosela en una fiesta bailando con un vietnamita. Ella no quiere saber nada de él. Tras dar un espectáculo bochornoso como le echan en cara sus colegas, ya que va hasta sucio, a una fiesta elegante. Finalmente, esta  en la calle rodeado de gente, solo, acabando así la película. 

La película fue un proyecto impulsado por la propia productora de Mankiewicz, la Figaro Incorporated, En masdearte.com se señala que "La disputa de Mankiewicz y Greene a cuenta de A Quiet American tuvo que ver con la “libertad” que el primero se tomó al alterar aspectos de la trama que el inglés consideraba cruciales, y tampoco quedó conforme con un reparto actoral que descabalgó a las dos primeras opciones para los principales papeles masculinos". 


El escritor en declaraciones que hizo a Michel Ciment en la revista Positif. Núm 154. Traducida y publicada en España por Dirigido por… núm 10. Febrero 1974.: “Si usted lee la novela vera un libro sin humor, amargo y de un antiamericanismo bastante absurdo. Da la impresión de que un funcionario idiota del Departamento de Estado rehusó su visado a Greene y que éste, por rencor, decidió escribir un libro sobre un americano absolutamente imbécil, salido de Harvard a los 27 años (verdaderamente es estar atrasado), virgen, bebedor de Coca-Cola todo el día e importando materias plásticas en Indochina para hacer bombas” 

El film de Mankiewicz resultó ser un producto alejado ideológicamente de las intenciones de Greene, menos agresivo en las críticas al colonialismo y a la intervención norteamericana, centrándose sobre todo en el triángulo amoroso; todo esto provocó el enfado del escritor inglés que protestó con una carta dirigida a The Times y que influyó en la mala carrera económica del film en Inglaterra. 

Parte de los esfuerzos de la productora de Mankiewicz, Figaro Incorporated, se concentraron en la contratación de Laurence Olivier para dar vida al periodista Robert Fowler, mientras que la tentativa de contar con Montgomery Clift como Pyle se frustró a causa del accidente que desfiguró la cara de actor estadounidense. 

Al no poder ser Olivier, su coetáneo Michael Redgrave, terminaría encabezando el reparto del filme, a lo que ayudó su participación en alguna producción inspirada en un relato original de Greene como The Man Within (1947). 

Mientras crecía su fama en los escenarios y en el cine, Redgrave entendió que Mankiewicz le ofrecía en esta ocasión una oportunidad de oro dada la complejidad del personaje que había desarrollado a partir de la historia de Greene, y que sufriría drásticas modificaciones en su traslación al celuloide. 

Pero las objeciones del escritor en el apartado artístico se centraron en Audie Murphy  al que el director, guionista y productor eligió persuadido por la idea de que Pyle como Murphy representaba al héroe americano más laureado de la segunda guerra mundial. 

Para los otros dos papeles relevante los elegidos fueron Claude Dauphin y Giorgia Moll. El rodaje se inició en Cinecittà, complementándose con localizaciones en Saigón. 

Poco después de su estreno Greene, escribía en febrero de 1958 para el London Times que" Los cambios más extremos que he visto de un libro mío eran en The Quiet American; podría pensar que el filme estaba hecho deliberadamente para atacar al libro y al autor. Estoy plenamente convencido de que el libro sobrevivirá pocos años más que la incoherente película del señor Mankiewicz".

La adaptación de Mankiewicz intercaló la historia reflejada en el libro con un tono cercano al cine negro en la que uno admite su posición de perdedor y su personalidad esceptica en frases como esta "Soy un reportero. Dios sólo existe para los que escriben editoriales" como es el caso de Robert Fowler, o la presencia del  inspector Vigot, inteligente y capacitado, Phuong, la chica que se mueve a dos bandas y Pyle, ese americano tranquilo que hace de la ambivalencia su forma de vida. 

Por cuestiones de censura, El americano tranquilo no se distribuyó en su momento en España por lo que no fue evaluada en su momento. 

Cahiers du Cinema fue alabada por Jean Luc Godard y Erich Rohmer. 


Ya en España Carlos F. Heredero en su libro sobre el director Joseph L. Mankiewicz sostiene que  “El americano tranquilo se convierte así en una excelente piedra de toque para profundizar en la polémica de las adaptaciones literarias. Siguiendo fielmente el contenido argumental, su puesta en escena traiciona voluntaria y premeditadamente la filosofía y el pensamiento del escritor”. A lo que añade: “Sus personajes están contemplados de manera diferente (sustancialmente Fowler y Pyle), y el talante ideológico de la película no se corresponde en nada con el del texto. Pero no lo es menos que ninguna de tales correspondencias es obligada, y mucho menos necesaria para hacer una buena adaptación literaria” .


Miguel Ángel Ciscar en el artículo ante citado "lo más destacable seria la puesta en escena y la historia de venganza soterrada de Fowler contra el americano que remite al melodrama y al cine negro de los años cuarenta y cincuenta. " Además destaca que "La magnífica fotografía en blanco y negro de Robert Krasker (también fotógrafo de El tercer hombre) con los claro-oscuros característicos del noir también ayuda a encuadrar a este film dentro de los parámetros clásicos del género negro. En definitiva, un film sólo parcialmente acertado de Mankiewicz, mezcla de géneros (negro, drama amoroso, intriga política), que traicionó el punto de vista del autor del libro y que se ve lastrado por unos intérpretes poco inspirados y unos condicionamientos de la época que le impidió ser más explícito en los aspectos amorosos y políticos, cosa que pudo remediar el remake de Phillip Noyce cuarenta y cuatro años más tarde, en 2002". 

En ABC Play se comenta de ella que estamos ante "Una adaptación de la cínica y amarga novela homónima de Graham Greene que el cineasta Joseph L. Mankiewicz convirtió en una especie de análisis de los pros y los contras de la intervención americana en el sudeste de Asia. La cinta sigue el argumento del libro, pero con una importante diferencia: en la pantalla, el personaje del americano no trabaja para el gobierno como en la novela, sino para una misión americana de ayuda. En otras palabras, sus ideas sobre la conveniencia de una tercera fuerza interpuesta en Vietnam entre los comunistas y las fuerzas coloniales francesas son sólo suyas. Esto le resta significado al personaje y le da a la película una inclinación claramente pro-americana. "


miércoles, 24 de octubre de 2018

El misterio del barco perdido


No siempre proyectos liderados por Sir Alfred Hitchcock llegaban a buen puerto. Algunos fueron planteados por el director cockney, pero no cuajaron , ya por decisiones del estudio , ya fuese por opción personal. 

Lo cierto es que algunas obras proyectadas a lo largo de una carrera que abarcó más de medio siglo, no llegaron a buen término y no se unieron a esas más de cincuentas obras que componen la filmografía de Alfred Hitchcock . Algunas se quedaron en la etapa de preproducción , otras algo más avanzadas dando lugar a algunas mínimas grabaciones. Fueron en concreto 19 proyectos los que se quedaron en el tintero o se abandonaron apresurada y / o definitivamente. 

El primero de ellos , titulado el Número 13 es del año 1922 , y tendría que haber sido su debut como director después de trabajar en el departamento de arte en doce películas anteriormente, pero los problemas presupuestarios cancelaron la producción después de que solo se filmaran algunas escenas. 

A este proyecto non nato siguieron otros en la década de los treinta como Territorio Prohibido o Greenmantle (1939–1942). Otros en los cuarenta tampoco cuajaron. Al igual que cuatro más en los cincuenta , siete en los difíciles sesenta y alguno en los setenta.

Pues bien en el año 1959 el que se vino abajo fue el llamado El naufragio de la María Deare o The Wreck of the Mary Deare. Esta era una película que se iba a basar en una novela homónima escrita por Hammond Innes que contaba la historia de un barco muy antiguo descrito como "Una trampa mortal de remaches de traqueteo", que es encontrado a la deriva en el mar por John Sands que lo aborda con la esperanza de reclamarlo para salvarlo. Sin embargo, cuando ya está dentro de él se encuentra al primer oficial, Gideon Patch, todavía a bordo y tratando de manejar la nave por su cuenta. Eso era la reseña, pero para Sir Alfred y la MGM pudo ser algo más que una simple lectura. 

La novela de Hammond Innes fue elegida por la MGM con la intención de tener a Hitchcock como director y a Gary Cooper como estrella. Hitchcock siempre había querido trabajar con Cooper, pero después de desarrollar el guión con Ernest Lehman durante varias semanas, llegaron a la conclusión de que no se podía hacer sin convertir la película en "un drama aburrido ". Sin embargo, Hitchcock y Lehman ya se habían presentado ante los ejecutivos de MGM contando la historia de North by Northwest por lo que a la Metro les gustó, y les propuso que MGM obtendría dos películas de Hitchcock bajo su contrato con MGM. Sin embargo, finalmente Hitchcock abandonó la idea de la Mary Deare por las razones antes expresadas y siguió adelante con North by Northwest que aquí se llamó Con la muerte en los talones. . 

Así que este Naufragio de la Mary Deare o El misterio del barco perdido como se vendió en España pasará a ser una producción para la MGM producido a su vez por Julian Blaustein, un hombre que había pasado de la Universal a la Paramount y de esta a David O. Selznick Productions y a la 20th Century Fox , pasando a ser a partir de 1955 un productor independiente -  en calidad de productor , y que tuvo en Michael Anderson, un talentoso director que se manejaba bien en los efectos especiales y en películas de aventuras como lo prueba su película de mayor éxito - La vuelta al mundo en 80 días, 1956 - así como otros como La fuga de Logan de 1976 que ya pasó por aquí- como director. 

Se trató de una Coproducción entre el Reino Unido-USA por medio de la Blaustein-Baroda y la MGM en la producción y la distribución que contó con un presupuesto de $ 2,596,000.

En este caso el director británico que falleció este mismo año - el 29 de abril de 2018, en concreto, con 98 años de edad - tuvo como guionista a Eric Ambler que adaptó la novela de Hammond Innes.

Al proyecto se unieron George Duning para la música, Joseph Ruttenberg y Freddie Young para rodar la fotografía en Metrocolor ( vamos, en CinemaScope ) y Eda Warren en el montaje, entre otros.

El reparto lo encabezaba Gary Cooper como Gideon Patch y Charlton Heston como John Sands. Junto a ellos estaban Michael Redgrave como Mr Nyland, Emlyn Williams como Sir Wilfred Falcett, Cecil Parker como el Presidente de la Compñía, Alexander Knox como Petrie, Virginia McKenna como Janet Taggart, Richard Harris como el suboficial Higgins, Ben Wright como Mike, Peter Illing como Gunderson, Terence De Marney como Frank y Charles Davis como Yules, el intendente en Mary Deare.

La historia se desarrolla en el presente, finales de los años cincuenta, tras la guerra de Corea y en el área que va desde el Golfo de Vizcaya entendida de forma extensa desde el mismo Golfo hasta el Canal de la Mancha durante una fuerte galerna.

En un pequeño barco de rescate conocemos a John Sand (Charlton Heston), capitán de un barco de rescate, que va junto a su socio en mitad de la galerna cuando entre ambos divisan un carguero , el 'Mary Deare' , que parece a la deriva, sin el motor en marcha.

Ante la posibilidad de hacer negocio John se dispone acercarse el barco y penetran en el mismo para , en aplicación del derecho del mar, hacerse con la propiedad de la carga y conseguir un rescate por parte de los patrones. Observa antes de subir que el barco ha sufrido un incendio y que aparenta no tener a nadie a bordo , pues no se divisan la mayor parte de los botes - sólo queda uno- y no se ve a nadie.

Ante esto entra en el interior y en una primera revisión concluye que efectivemente hubo un pequeño incendio ya apagado y que toda la tripulación parece haber abandonado la nave.

Tras dar otra vuelta por el mismo y con John esperando una gran tarifa de rescate, se encuentra para su sorpresa con Gideon Patch (Gary Cooper), un hombre misterioso y algo aturdido tras un golpe en la cabeza, que ha presenciado los hechos y que conoce las razones por las que el buque ha perdido el rumbo, pero que se las calla.

Cuando habla con el capitán, Gerald Patch, que inicialmente dice ser el capitán del barco, después revela que , inicialmente fue el segundo, pero que tras la muerte del Capitán Taggart hace cuatro días , el asumió el mando. Extrañamente Patch le dice a John que no comente nada de lo visto a bordo.


Pero cuando John pretende salir del barco no consigue volver a su remolcador y Patch le ayuda pues bajar es imposible con la galerna.

Patch decide en ese momento salvar el barco y convence a Sands para que lo ayude a varar el barco en las islas rocosas del Canal, a pesar de que eso anulará su reclamo de salvamento y le pide que guarde silencio hasta que se realice la investigación oficial del incidente , ya que el tiene una sospecha.

De hecho después sabremos que Patch se quedó en el barco para probar que fue saboteado para cobrar el seguro de la carga que se había descargado en secreto en Rangún.

Aunque aún no entiende lo que sucedió en el Mary Deare, Sands colabora con Patch convencerlo de que no hable sobre lo que vio a bordo y alargar la investigación oficial del incidente. Esto es lo que ocurre cuando ambos, unas vez que han varado el barco en la islas del Canal, arriban al puerto francés de Saint Malo tras ser divisados por un avión de reconocimiento.

Nada más llegar a la localidad francesa de Bretaña, son abordados por los agentes del seguro que ya saben del fin de barco por el resto de la tripulación que se han marchado y especialmente por el  el suboficial Higgins(Richard Harris) portavoz de aquellos que se han salvado y , previsiblemente , la persona que golpeó a Patch en el barco. Al verse entre ambos hay un importante tensión que acaba con la agresión de Patch a su subordinado.

El primero está seguro de que su testimonio evitará que los dueños del barco estafen a la compañía de seguros, así que cuando a éste le preguntan se niega a hablar con la compañía para dilatar la investigación.

Así que John lleva a Patch a Inglaterra y cuando desembarca en Southhampton, Patch , una vez que aclarar el por qué ne negó a declarar en el puerto francés de Saint Malo ante los agentes del seguro, decide alquilar un barco y , casi de inmediato, marcha a Londres para entrevistarse con la hija del Capitán Taggart que falleció durante la travesía.

La entrevista de ambos es poco clara. Ella quiere saber de su padre del que estaba alejada desde hacía 7 años tras fallecer su madre. El único contacto con el padre es epistolar,

Allí ella le hace entrega de una carta en la que habla de como el barco se detuvo en el puerto de Rangún cuatro días sin que estuviese previsto. Esa noche , de retorno a Southhampton Patch quiere salir pero el barco no se enciendo pues John que ha sido informado de la salida le ha quitado una pieza al motor.

Poco después comienza lo que quería Patch, el juicio. El mismo tiene lugar en Londres. Allí Patch es llevado ante una junta de investigación para determinar qué sucedió.

En el juicio Patch quiere hacer una declaración para mostrar que es evidente que los armadores planeaban arruinar a Mary Deare todo el tiempo y presentar a Patch , un capitán , con un difícil pasado , pues ya había perdido una barco con anterioridad por abandonarlo, como responsable del desastre y la pérdida del barco y , sobre todo, de la carga. . 

En el juicio Patch declara que el capitán había bebido, pues tenía un problema enorme con el alcohol. Además tenía amistades con contrabandistas que vendían productos ilegales a China. La sospecha del capitán es que el barco no llevaba carga alguna pues en el puerto de Rangún el barco se había quedado cuatro días más desembarcando los motores de avión que habían intervenido en la Guerra de Corea y que iban a llegar a China a través del contrabando.

El mayor problema es que no puede desmostrarlo, salvo que se revise la carga del Mary Deane. Sin embargo, y durante el juicio sale a la luz que el barco ha sido detectado varado en los arrecifes de los Minquiers. De inmediato el juicio se aplaza hasta hacer las averiguaciones pertinentes. Y aunque se hace evidente que los armadores planeaban arruinar a Mary Deare todo el tiempo y tener a Patch como "chivo expiatorio" los armadores que pretenden conseguir el dinero del seguro mandan a parte de la tripulación encabezada por su hombre de confianza, Higgins, a los Minquiers para sacar la carga del barco y anular así la pruebas.


Por su parte,  Patch y John , ahora como socios, van a los Minquiers pues quieren investigar la carga. Tras entrar buceando por una de los mamparos abiertos abren las cajas y descubren que en su interior no hay motores sino grandes piedras con lo que se demuestra la estaba planteada por la compañía , conjuntamente con el capitán y parte de la tripulación.

Tras salvarse de un ataque por parte del suboficial Higgins (Richard Harris), se desenmascara el asunto definitivamente acabando así la película.

La mayor parte de la película se rodó en el verano de 1959 en los Metro-Goldwyn-Mayer Studios sito en el 10202 W. Washington Blvd., en Culver City, aunque también en los MGM British Studios de Borehamwood en Hertfordshire (Inglaterra), pero también en Regent's Park y en Waterloo Station en Londres, en la californiana Long Beach

La novela de Hammond Innes fue publicada por entregas en el Saturday Evening Post, en 1956. Decir que casi todo el trabajo de estudio para la película se realizó en Hollywood, con un equipo de técnicos y actores británicos que se traslado a California tras el rodaje que había tenido previamente lugar en el Reino Unido.

La tarea de llevar esta novela a la pantalla fue originalmente asignada al escritor Ernest Lehman y al director Alfred Hitchcock . Hitchcock siempre había querido trabajar con Cooper, pero Lehman, tras algunas semanas de trabajo, finalmente fue a Hitchcock y le dijo que no podía encontrar nada interesante en la misma. Hitchcock le dijo que no se preocupara por eso, que harían otra cosa. Lehman dijo: "¿Pero qué hay de MGM?" Hitchcock respondió: "No se lo diremos". Esa "otra cosa" que se les ocurrió fue Con la muerte en los talones (1959) o North by Northwest.

John Sturges también fue contactado para dirigir la película, aunque recayó en Michael Anderson. La tarea de adaptar la novela pasó a Eric Ambler .

La película que mezclaba el thriller con el suspense, las aventuras con la intriga judicial, cuenta , y eso es cierto, con una buena fotografía y con logrados efectos especiales adecuados para época, especialmente los de la galerna y la foografía submarina, y se convirtió en un pequeño éxito en su momento consiguiendo en taquilla unos $ 2,815,000.

El reparto, además, era de lo más atractivo, enfrentado a un veterano Gary Cooper, visiblemente enfermo, aunque todavía no había sido diagnosticado con cáncer hasta la primavera de 1960, y con un Charlton Heston en plena forma. A ellos se unió, en un rol muy  secundario, un joven Richard Harris, así como otros actores británicos ,  Michael Redgrave y Emlyn Williams.

Gary Cooper, sólo rodaría otra película más antes de su muerte, apenas dos años más tarde. La producción tuvo que pararse en varias ocasiones debido a la enfermedad de Gary Cooper .

Charlton Heston, portotipo del héroe espectacular por excelencia, y que apostaba por personajes "más fuertes que la vida" , según declaró alguna vez, un gran profesional, concienzudo y obsesionado con la perfección en su trabajo como señala Terenci Moix en su obra sobre la Historia del Cine,  quedó impresionado de que Gary Cooper aún realizara sus propias acrobacias, incluso permaneció sumergido durante largos períodos de tiempo, a pesar de su edad y su evidente mal estado de salud.

El debutante Richard Harris odió tantos los retrasos constantes al hacer la película tanto que se negó a regresar a Hollywood durante cinco años.

Los críticos generalmente están de acuerdo en que la película terminada coincide con la predicción de Hitchcock y Lehman. La película , salvo por ver a dos grandes del cine, y a un joven Richard Harris, así como los solventes secundarios , no me ha gustado en exceso. Ni es misterioso ni es una obra de aventuras. Es , simplemente una historia que trascurre con un relato plano que podría presentarse en tres actos: el encuentro entre los protagonistas y el encallamiento del Mary Deane; una segunda, en la que se aclara el supuesto misterio durante el juicio por negligencia contra el capitán y el breve acto final de resolución de la trama que es muy simple.

En Fotogramas se dice de él que es una "Adaptación de una novela de Hammond Innes que debió dirigir Alfred Hitchcock. Sin embargo, una serie de circunstancias impusieron al acomodaticio Anderson, con lo que se perdió una oportunidad de oro. La compleja trama adolece de un tratamiento excesivamente plano, que ni posee capacidad para inquietar ni explora sus recovecos más prometedores. Su principal aliciente se halla en el sólido reparto." Poco más que decir.