La sociedad de la nieve

Es la primera película qué bien en pantalla grande lo que va de año. Extraño puesto que en condiciones normales ya habría ido al menos la Filmoteca Andalucía, pero la circunstancias son las que son y serán las que tienen que ser para el próximo martes así que ha sido una película comercial como la sociedad de la nieve la elegida para inaugurar el curso cinematográfico en gran pantalla.

La sociedad de la nieve está basada en un libro homónimo es una película que ha tenido una campaña publicitaria y en red de potente. Está detrás de la misma José Antonio Bayona el que fuera responsable de El orfanato y Lo imposible, y que en esta película demuestra su enorme capacidad para narrar historias en las que la condición humana tenga mucho peso pero conociendo una película previa como Viven de Frank Marshall, realizada en 1993, la película que en los años noventa contó la misma historia, la del equipo de rugby del Old Christians Club de Montevideo se estrella en el remoto corazón de la cordillera de los Andes y como los supervivientes se ven obligados a depender unos de otros para sobrevivir, pero centrado en otro protagonista, Numa Turcati (interpretado por Enzo Vogrincic), hay que reconocer que viendo la de Bayona en gran medida te remite a la de Marshall, aunque en el caso de la española es más sentida, más vivida. Son distintas en tanto en cuanto que se centran en otros protagonistas pero la historia es como fue. Poco más que contar de la misma. 

En este caso está basada en el libro homónimo de Pablo Vierci, que a su vez se basa en el documental homónimo de Gonzalo Arijón que relata el accidente del vuelo 571 de la Fuerza Aérea Uruguaya en la cordillera de los Andes en 1972. Aquí se transformó en guion por parte de J. A. Bayona, Bernat Vilaplana, Jaime Marques y Nicolás Casariego. 

Se iniciaron las proyecciones de la película en septiembre de 2023 en la clausura del 80.º Festival Internacional de Cine de Venecia., aunque previamente J.A. Bayona presentó la película a los supervivientes, a sus familias y a las familias de los pasajeros fallecidos del avión Fairchild FH-227D. 

Se trata de una producción en la que participan Belén Atienza, Sandra Hermida y J. A. Bayona por medio de Misión de Audaces Films, El Arriero Films y Netflix que desembolsaron unos 60 millones de euros. 

Bayona descubrió el libro de Vierci mientras investigaba para su película de 2012 Lo imposible y compró los derechos del libro al final del rodaje. Los realizadores grabaron más de 100 horas de entrevistas con todos los supervivientes vivos. Los actores tuvieron contacto con los supervivientes y las familias de las víctimas. A diferencia de las películas de 1976 y 1993 –Supervivientes de los Andes y ¡Viven!, respectivamente–, La sociedad de la nieve es la primera adaptación que utiliza los nombres reales de todos los pasajeros fallecidos. 

Los lugares de rodaje incluyen Sierra Nevada, España; Montevideo, Uruguay; y Chile y Argentina en los Andes, incluido el lugar real del accidente En agosto de 2021, una segunda unidad, encabezada por el director argentino Alejandro Fadel, filmó bajo la dirección de fotografía de Pedro Luque, paisajes en Chile como referencia en la producción y postproducción virtual en el set.  

La mayor parte del rodaje tuvo lugar en Sierra Nevada del 10 de enero al 29 de abril de 2022. En Sierra Nevada, la producción se vio desafiada por la escasez de nieve y la capa de aire del Sahara, que cubrió las montañas de naranja. 

Se utilizaron tres réplicas de restos de fuselaje: una se colocó en un hangar construido en un estacionamiento, otra enterrada en nieve artificial y sostenida por una grúa hidráulica que permitía mover el fuselaje y la otra  3000 m de altura. En el hangar, una pantalla de 30 metros de altura mostraba las imágenes de los Andes de la segunda unidad. Una tercera unidad se encargó de tiros de montaña más peligrosos. Las tres unidades constaban de alrededor de 300 trabajadores. 

El rodaje en Uruguay concluyó a fines de julio de 2022 y la producción continuó en Madrid. David Martí y Montse Ribé, maquilladores de efectos especiales ganadores de un premio de la Academia por El laberinto del fauno, crearon prótesis de cadáveres y heridas.

La posproducción duró alrededor de cinco meses e involucró a más de 300 personas. Para la banda sonora se contó con la música de Michael Giacchino.  

En cuanto a la crítica quiero empezar por una columna del diario La Diaria escrita por Guillerme de Alencar Pinto que señala que "Hay buenos parlamentos (...), pero están perdidos entre una mayoría de diálogos bastante pobres. El tratamiento agrega un sentimentalismo desparramado que recuerda cierto cine asiático." 

Ya en los Estados Unidos, David Rooney de The Hollywood Reporter escribió que Bayona recupera «la tragedia de la vida real y la historia de la resiliencia humana... con autenticidad y un realismo escalofriante, con emoción pero sin sensacionalismo»; comentó además, que la película es «desigual pero en última instancia efectiva» y añade ""Demasiado larga pero conmovedora (...) Bayona narra de nuevo esta tragedia con autenticidad y un realismo escalofriante, con emoción pero sin sensacionalismo."

Guy Lodge de Variety considera que "Es una potente y efectiva película lacrimógena que te atrapa con oleadas alternas de pavor, horror y alivio, a pesar de que la historia no resulte novedosa (...) Bayona logra, de nuevo, una reconstrucción visceral y estremecedora de una catástrofe real" 

Ya en España, Luis Martínez en el El Mundo la describe como "Una gran película, sin duda, pero sobre todo una gran película digna, sobre la dignidad del cine; sobre el heroísmo sin estridencias; sobre la evidencia de la bondad. Pese a todo. (...)" 

Carlos Boyero en El País señala que "Todo funciona con perfección. Es una película tan sentida como primorosamente realizada. Me siento todo el rato dentro de ella. Su estética es poderosa. No hay desfallecimientos narrativos. Y todos los intérpretes resultan auténticos" 

Para Oti Rodríguez Marchante de ABC "Bayona ha hecho una obra impecable en lo técnico y en lo narrativo, y en lo interior es de una profundidad y un respeto mayúsculos." 

Sergi Sánchez de La Razón comenta que la película "Se debate entre la película que querría ser y la que (...) acaba siendo, un artefacto mecánico y ampuloso, imbuido de la responsabilidad moral de contar esta historia de la única manera en que había que contarla. (...) " 

Quim Casas en la edición barcelonesa de El Periódico de España destaca que "El filme es un homenaje a los muertos. El uso de la voz narrativa es en este sentido muy interesante y lo que da sentido y diferencia a 'La sociedad de la nieve' de los otros filmes sobre esta historia (...)" 

Jordi Batlle Caminal en La Vanguardia habla - con confianza- de que "Jota ha realizado un trabajo magnífico, serio y meticuloso, sin recrearse en el efecto morboso ni en el dramatismo inflamado y centrando la atención en el paso lento de los días (...) ".

En Cinemanía mientras que Philipp Engel sostiene que "Es la mejor película del director (...) Bayona logra el equilibrio justo entre lo que puede y no debe mostrar (...) La experiencia para el público, el gran público al que va dirigida, es inolvidable. (...) ; Janire Zurbano en esa misma revista señala que "Bayona eleva el cine de supervivencia con su película más certera, agónica y espectacular (...) " 

En Fotogramas, Manu Yáñez afirma que es "Una oda sensorial al instinto de supervivencia (...) Se distingue por su apuesta deliberadamente fílmica, entendiendo lo cinematográfico como una forma de expresión personal. (...)"  

Por mi parte destacar que es una película impecable , dura, sobrecogedora, espectacular, por momentos, con toques melodramáticos, pero coherente con la historia, más sentida y con un buen sentido de la narración. 

Me consta por lo que he leído que la película ha conectado a los supervivientes de aquello con los supervivientes actuales como vemos en las declaraciones, por ejemplo, de María Laura Methol, hija de Liliana, ya falleció en el alud y de Javier Methol, hoy ya también fallecido cuando contó  que “La Sociedad de la Nieve fue una sociedad de todos los que estaban arriba en ese avión”.

 De Stellita Pérez del Castillo, hermana de Marcelo Pérez del Castillo (quien, al igual que Liliana falleció en el alud refiere que “[Los autores de la película] fueron los primeros que se acordaron que no eran 16 y que eran 29 más” 

Otro de los supervivientes, Eduardo Strauch, uno de los Strauch comentó que “Cuando surgió la idea de hacer La Sociedad de la Nieve empezamos a darnos cuenta de cómo iba a ser el guion. Empezamos a sentir como una especie de esperanza, tranquilidad y felicidad de que la historia iba a ser contada con todos”. Pues así es.