Maribel y su extraña familia

Lo que en su momento fue "Historia de nuestro cine" no se muy bien lo que es en la actualidad, pero hay que reconocer el acierto de recuperar clásicos del cine español que si bien no son obras maestra, su que son grandes obras cinematográficas que cualquier amante del cine debe conocer , al menos, en lo referente al cine patrio. 

Una de estas películas no ha de caer en el olvido es Maribel y su extraña familia , película basada en una obra teatral de Miguel Mihura escrita en el año 1959 y que en el año 1960 José María Forqué la transformó en película. Mihura fue un dramaturgo, periodista y autor de guiones cinematográficos, considerado el más importante creador del teatro del absurdo, y principal humorista en lengua castellana del siglo XX. 

Mihura fue, además, guionista de más de veinticinco películas, entre ellas Bienvenido Mr. Marshall, dirigida por Luis García Berlanga en 1952. La película contó con el guion de Miguel Mihura, José María Forqué, Luis Marquina y Vicente Coello así como de la fotografía de José Fernández Aguayo 

Cuenta como principales actores con Adolfo Marsillach en el papel de Marcelino y con la mexicana Silvia Pinal como Maribel.  Junto a ellas aparecen Julia Caba Alba como Tía Paula , Guadalupe Muñoz San Pedro como Doña Matilde, Gracita Morales como Nini, Trini Alonso como Rufi,  Carmen Lozano como Pili, y José Orjas como Fermín y como el contable Don José o Pepe, Erasmo Pascual.

Película que llamó la atención de Luis Buñuel en parte por la participación de la final en la película con la que contaría poco después para hacer Viridiana en parte por lo escrito por Miguel miura que tanto se acercaba a el surrealismo y lo absurdo sobre todo a Buñuel lo que le interesó fue la primera parte de la película.

La historia nos presenta a Marcelino, un chico tímico y provinciano, que tiene una fábrica de chocolate en un pueblo y que va a Madrid con su madre doña Matilde para presentarle a su novia Maribel. Madre e hijo se alojan en casa de la tía Paula, hermana de la madre. Una persona curiosa, capaz de alquilar a un vecino como parte de su familia o como integrante de la visita con tal de no sentirse sola pagando por ello 50 pesetas, y amante de los discos de Elvis Presley, George Williams y Louis Armstrong. Maribel que llega al piso de la tía cree que la han llevado hasta allí con una intención muy distinta, pero intenta huir cuando Marcelino le informa que su intención es presentarle a la familia. 

Ella que viene de trabajar en una whiskería se siente descolocada. En uno de estos bares de copas ha conocido Marcelino, y él naturalmente no se ha atrevido a hablarle de matrimonio. Pero cuando la lleva a su casa y la presenta a su madre y a su tía Maribel queda desconcertada por el comportamiento extraño de ambas que se apresuran a prepararle unos Gimlets.

Su primera reacción es huir de allí avergonzada por ser quien es y por no entender absolutamente nada. Pero ni Marcelino ni las dos ancianas parecen comprender nada sobre la realidad y el pasado de Maribel. 

La joven se deja llevar por los acontecimientos, pero termina asustada por las rarezas de la familia Pasan los días en aquella casa donde se la trata como una señorita y llega a pensar efectivamente que lo es. Pero sus tres amigas, las muy entrañables Rufi y Nini, y la algo más seca, Pili, compañeras en la pensión de la muchacha y de profesión en la calle de La Ballesta, consiguen generarle dudas en su ánimo resultando todo aquello muy extraño especialmente cuando a través uno de los clientes de sus amigas- Don José o Pepe, el contable , que aparece saliendo y entrando de una misteriosa habitación pasando al lado de las amigas de la novia y del que hablando con ellas descubren un secreto del pasado, su viudez, de su prometido. 

Cuando Marcelino le propone a Maribel ir a la casa familiar y fábrica de chocolate cercana a un lago, el de las niñas malas, la historia parece haberse complicado más. 

Ya en Sanabria, Maribel, llevada al equívoco por sus amigas, pero aclarado con los trabajadores de la fábrica y personal de la casa descubre que quiere quedarse. Al fin y al cabo, ni Marcelino quiere saber nada del pasado de Maribel ni ella admite que se esté mintiendo a sí misma ni a su prometido: se abrazan, se besan, triunfa la hipocresía y todos son felices. 

En la película es una adaptación a cargo de José María Forqué de la célebre novela de Miguel Mihura. Se lanzan a montar una película tras el éxito de la obra teatral en el Teatro Infanta Beatriz de Madrid, donde se había estrenado la noche del 29 de septiembre de 1959, y con el Premio Nacional de Teatro bajo el brazo de Miguel Mihura. Maribel y la extraña familia se llevaba a la gran pantalla apenas un año más tarde. 

Su director, José María Forqué, tuvo el acierto de situar la escena inicial a orillas del lago de Sanabria (Zamora), ya que sus aguas guardan un secreto que no se nos revelará hasta el momento del desenlace. 

 Tras esto se nos narra la relación entre un joven y una chica de alterne con la que pretende contraer matrimonio. El buen reparto encabezado por la mexicana Silvia Pinal que al año siguiente gozaría de un gran papel en España al interpretar a la protagonista de Viridiana de Luis Buñuel.

Ayuda al éxito la actriz principal, la Pinal, pero también la participación coral de personas como Julia Caba Alba, que ya realizó ese papel en la obra teatral, o Guadalupe Muñoz que también trabajó en ella, están magistrales como prácticamente casi todo el reparto. 

El resultado es una comedia plena de locura y situaciones absurdas, llena de teorías conspiranoicas en torno a un hombre soltero que busca esposa y la encuentra en la ciudad. Forqué nos expone un modelo de comedia con una buena cantidad de tintes policíacos y humorísticos que casi nos invita en pensar en el Frank Capra de Arsénico por compasión con esas adorables ancianitas, y gracias a una excelente fotografía, unos diálogos brillantes y una cuidada puesta en escena, Forqué recrea maravillosamente la triste vida de unos personajes que buscan rehacer sus vidas, del tímido y noble, Marcelino (un excelente Adolfo Marsillach), un hombre laborioso y emprendedor, torpe en la conquista femenina que cae enamorado ante la sonrisa de Maribel, una chica de vida alegre que terminará redimida, por la ternura, el cariño y el respeto. 

En ABC Play se dice de la película que "La película intentó ser una fiel adaptación de la obra original, en la que se explotaba la comicidad surgida de las diferencias existentes entre el mundo del provinciano Marcelino y el de Maribel. Sin embargo, por culpa de la censura franquista, el filme perdió parte de la frescura que caracteriza la obra original. La película está protagonizada por Adolfo Marsillach y la mejicana Silvia Pinal, acompañados por Guadalupe Muñoz Sampedro y Julia Caba Alba, que repiten en los papeles que ellas mismas interpretaron en la célebre versión teatral. La intención de Mihura, perfectamente llevada al cine por Forque es mostrar la ridiculez de tantos prejuicios que nos llevan a olvidar que todos somos personas, así como de la hipocresía reinante en determinados medios provincianos dominados por los convencionalismos sociales y la falsa moral".

Para acabar quiero reflejar lo que viene como reseña en un libro sobre Maribel y su extraña familia y dice lo siguiente: "Para Mihura, el humor es una posición ante la vida y el objeto del mismo es la propia existencia, considerada como un absurdo. En Tres sombreros de copa, considerada como una de las obras maestras del teatro humorístico, la fuerza dramática radica en la oposición de dos mundos irreconciliables: el de la burguesía provinciana esclavizada por mil convenciones, y el de un grupo de automarginados de esa sociedad que buscan la libertad y rechazan la moral hipócrita. También en Maribel y la extraña familia pretende el autor mostrar la falsedad y la hipocresía de algunas costumbres sociales, centrándose, en este caso, en el tema del conflicto de la pareja. Como en toda su obra, el enredo, la mentira y las falsas apariencias producen una divertida comedia de intriga".