sábado, 16 de enero de 2021

Número diecisiete

 


Canal Sur hace cosas inexplicables. Programan Ciclos de manera informal por lo que se hacen sin sistematización. Lo bueno es que apuestan por un cine que ya no emite nadie como es el cine de los años treinta. Es cierto que el resto de cadenas emiten películas a partir de aquella magnífica cosecha que fue el año 1939. Pero esta cadena tiene a bien apostar por el cine anterior a esa fecha con directores y actores y actrices que hoy están casi olvidados. 

Sin embargo, y como ocurre en este caso ¿quién se puede olvidar de Sir Alfred Hitchcock? Nadie, aunque muchas personas ignoran su etapa inglesa. Es precisamente una película de esta etapa la que he visto. Lleva por título Number Seventeen que no es otro que el número de la calle de la casa. En este caso Alfred Hitchcock estuvo amparado por la productora de John Maxwell que tuvo el respaldo de la British International Pictures. 

La película responde a un guion escrito a seis manos por Alfred Hitchcock, su mujer, Alma Reville y Rodney Ackland que partía de la obra teatral escrita de corte burlesco o cómico de J. Jefferson Farjeon burlesca deen el año 1925 y que llevaba por título Number Seventeen. 

La película cuenta con la banda sonora de Adolph Hallis que suena especialmente al inicio de la misma. Junto a ello cuanta con la fotografía de Jack E. Cox y Bryan Langley en un glorioso blanco y negro, pero que Gilbert Taylor , quien fotografió el penúltimo trabajo de Hitchcock, Frenesí (1972) estuvo en esta película como claquetista y segundo ayudante de cámara y el montaje de AC Hammond. 

El reparto lo integran Leon M. Lion como Ben, Anne Gray como Nora que es La chicala joven 'sordomuda', John Stuart como Barton, el detective, Donald Calthrop como Brant el escolta de Nora, Barry Jones como Henry Doyle, Ann Casson como Rose Ackroyd, Henry Caine como el Sr.Ackroyd y Garry Marsh como Sheldrake 


La película comienza con la llegada de un hombre ( John Stuart ) a una casa aparentemente deshabitada que parece que está a la espera de una venta o alquiler. El detective, por ahora un personaje anónimo, ve luz en su interior desde la calle así como sombras extrañas. Al comprobar que la puerta está abierta, entra en la casa, una vivienda marcada con el número 17. 


Al penetrar en el interior de la misma escucha ruidos en el piso superior y poco después descubre en el interior a un desconocido con una vela que deambula por la casa y que se acaba de encontrar a un cadáver. Cuando se encuentra cara a cara se enfrenta a él. El hombre que entró en la casa se deshace de su contrincante que dice llamarse Ben ( Leon M. Lion ), y dice ser inocente y no responsable de la persona asesinada que yace en el suelo. 



El hombre que ha entrado en la vivienda se presenta a sí mismo como Forsythe y le pregunta al extraño qué tiene en sus bolsillos. Este le muestra un pañuelo, una cuerda, una salchicha envuelta en papel, la foto de un niño y medio cigarrillo, antes de que se muestre la sombra de una mano alcanzando el pomo de una puerta. El extraño que dice llamarse Ben registra el cuerpo de la persona muerta y encuentra unas esposas y una pistola que se mete sin aviso en el bolsillo. 


Forsythe​ regresa tras investigar el extraño sonido y encuentra las esposas que Ben dejó en el suelo. Poco después se ve a una persona arrastrándose por el techo a través de las sombras, que luego cae por el techo. Se trata de una mujer llamada Miss Ackroyd ( Ann Casson ) que tras recuperarse del golpe llama y pregunta por su padre. 

La muchacha explica que su padre se subió al tejado de la casa al escuchar ruidos ya que viven al lado en el número 15. 

Justo cuando la campana da media noche se escucha que alguien está en la puerta y tras pasar uno de ellos una carta con el numero 17. Forsythe abre y primero entran dos personas y luego otra persona que piden entrar en la casa. La pareja que inicialmente ha entrado son el Brant ( Donald Calthrop) junto a Nora ( Anne Gray ) una chica elegante y sordomuda. Tras esos, entra una tercera persona el señor Henry Doyle (Barry Jones). Todos entran al interior de la vivienda diciendo que tienen interés en alquilarla. Mientras esto ocurre Ben descubre que el cadáver ha desaparecido. Casi de inmediato y ante la subida de esos extraños Ben saca el armapor si la situación se complica. 


Cuando el trío acompañado de Forsythe sube por la escalara Ben está armado. Tras cruzar unas palabras se produce un forcejeo entre ellos y Ben que dispara accidentalmente dándole a Forsythe en la mano. 

Por su parte, y casi de inmediato Brant (Donald Calthrop) saca una pistola y le pide que registre a Forsythe, Ben y la Srta. Ackroyd. Descubren algo que ya conocemos nosotros que es un telegrama que estaba en poder de la chica. Es un telegrama  dirigido al Sr. Ackroyd y se informa que Sheldrake ( Garry Marsh ) ha obtenido un collar de diamantes. En el mismo se informa que detrás de la operación e investigando está el detective Barton.


Ellos no saben que en la casa hay otra persona escondida que no es otro que  Sheldrake y que  había  escondido el valioso collar de diamantes en la parte superior de un inodoro del cuarto de baña. Sin saberlo los intrusos ese es el lugar al que llevan a Ben. Cuando a éste le cierran la puerta de inmediato es atacado por una persona. Resulta que ha sido está encerrado junto a Sheldrake que en ese momento estaba recuperando el collar de diamantes, que tenía escondido en el inodoro. 

Tras esto vemos como Ben parece morir  estrangulado por Sheldrake. Sin embargo, Ben, que solo finge estar inconsciente ve como el ladrón ha cogido el collar y se lo ha metido en el bolsillo. Aprovechando un descuido de Sheldrake le saca del bolsillo el collar y se lo queda sin que el ladrón lo perciba.

Casi de inmediato llegan los otros tres que entraron en la casa y sugieren atar a Miss Ackroyd y 'Forsythe'. Tras eso comentan que han de tomar un tren en dirección al continente. Sin embargo, y para sorpresa de todo la persona que estaba en el suelo, aparentemente muerto cuando Forsythe y Ben entraron en la casa y que luego había desaparecido, resulta ser el Señor Ackroyd (Henri Caine) que reaparece y resulta ser el padre de Miss Ackroyd, un oficial de policía, que encierra a dos de los ladrones y a la mujer, liberando a Miss Ackroyd su hijo y a Forshyte. Tras eso abre la puerta donde Ben está encerrado con Sheldrake y descubre como éste se lanza contra él y se pelea a puñetazos.


Sheldrake  gana así que Miss Ackroyd y 'Forsythe' vuelven a estar atados de nuevo, pues los  tres intrusos parecen tener prisa para huir de la casa. Ante de irse Nora deja caer al suelo su bolso. La chica que ha pasado antes como muda se revela que puede hablar y le dice a los que están atados "ahora vuelvo" ante el asombro de ellos. 

Nora cumple su palabra y vuelve justo en el momento en que Forshyte y la señorita Ackroyd están en peligro pues la baranda en la que estaban sujetos se ha venido y parece que van a caer por el hueco de la escalera. Sin embargo, Nora lo libera aunque dada la tensión la señorita Ackroyd se desmaya aunque casi de inmediato se recupera. 


Por su parte Nora regresa al sótano para disipar las sospechas de los otros ladrones y ganar tiempo para que el resto se escape. Los dos liberados sacan a Ben del cuarto de baño y auxilian al padre de la señorita Ackroyd. 

Mientras tanto los ladrones llegan al patio que da acceso a las vías del tren y suben a un tren de carga que  se identifica como Deutsch-Englischer Fahrverkehr Ferry Service, o sea, el que enlaza con el ferry que conecta por mar Alemania y Gran Bretaña. 

El tren sale con los tres dentro , pero al mismo se ha subido Ben. Este da con un vagón lleno de cajas de vino. Mientras tanto los ladrones dispuestos a llegar al barco que está próximo a zarpar, deciden torpemente eliminar al conductor y al carbonero, quedando otro conductor aunque éste se desmaya. De cualquier manera ellos están convencidos que Sheldrake lleva el collar de diamantes. 

Mientras tanto 'Forsythe' que no pudo subirse al tren antes de que partiera y se ha lanzado a la calle y se ha apoderó de un autobús obligando al conductor a llevarlo al puerto desde donde salen los ferrys en dirección a Alemania.


Tras esto vemos como un bebido Ben saca el collar de su bolsillo y que Sheldrake descubre que no tiene el collar de diamantes generando una discusión entre los ladrones que luchan entre sí. Sheldrake afirma que uno de ellos es 'Barton' , un detective que se hace pasar por un ladrón. Y entre acusaciones comienzan a persiguir al supuesto Barton. Sin embargo, éste escapa y esposando a Nora que quiere abandonar el proyecto de robo. 

Mientras todo esto ocurre el autobús en el que va 'Forsythe' está en carreretera desplazándose a toda velocidad, generando mareos e inquietud entre los usuarios siguiendo al tren. 

Los ladrones, al darse cuenta de que el tren está acelerando, intentan encontrar los frenos y aunque giran los diales  no pueden hacer nada , lo hace una y otra vez miviendo todos tipo de palancas , pero nada, aquello sigue desbocado. El tren va cada vez más rápido, dejando a los ladrones sin poder escapar. 

En el muelle, el ferry llega a puerto y se ajusta a las vías. Tras hacerlo se detiene. Mientras 'Forsythe' que ya ha llegado con su autobús observa como el tren atraviesa el muelle, choca contra el  ferry a toda velocidad y lo empuja hacia el mar, arrastrando sus vagones al océano. 

Forsythe viendo el desastre se lanza al mar en busca de Nora y Ben que serán rescatados del agua al igual que uno de los ladrones Henry Doyle que mientras es interrogado le dice a Forsythe que realmente el es  detective Barton. Pero Forsythe rie y le comenta que en realidad es el auténtico detective Barton, diciéndole a Doyle: "No puedes ser Barton porque yo lo soy". 

Cuando todos los ladrones han sido detenidos por la policía que se encuentra en el lugar, Nora le pregunta a Barton: "¿Qué vas a hacer al respecto?" Barton respondió: "Será mejor que vengas conmigo". Nora dice "¿Dónde?" "A desayunar." Dice Barton, y se ríen acabando así la película. 

Hitchcock después de un periodo vacacional regresó a Inglaterra de un viaje al Caribe con una nueva idea para una película. La idea se lo contó a su productor habitual,  John Maxwell , pero éste le dijo que Walter C. Mycroft tenía en mente para él una película diferente: una versión filmada de la obra de teatro Number Seventeen de Joseph Farjeon . Hitchcock no estaba nada contento con la oferta ya que consideraba que la historia estaba  lleno de clichés y  mientras que él estaba interesado en llevar a la gran pantalla una versión de una obra de John Van Druten, London Wall . Pero el estudio no accedió y fue el director Thomas Bentley, que finalmente llegó a hacer London Wall. Muy a supesar lo cierto es que Sir Alfred Hitchcock no estaba interesado en hacer esta película. 

La razón de esta negativa y casi de esta obligación estaba en que el estudio quería castigar a Hitchcock por el fracaso financiero de "Lo mejor es lo malo conocido (1931)". 

A Hitchcock se le asignó como guionista junto a él y su esposa Alma reville al escritor Rodney Ackland para la película, que  apostó por cominar el suspense con dosis de comedia que sería asumida por el principal protagonista que no es otro que Leon M. Lion. El telegrama que aparece en la película está dirigido a alguien llamado Ackland siendo Rodney Ackland  uno de los guionistas. 


La película se rodó en Elstree, en Hertfordshire, y en los British International Pictures de Borehamwood. 

Para su rodaje la película hizo un uso extensivo de conjuntos en miniatura, incluidos un tren, un autobús y un ferry a escala especialmente en el último cuarto de hora de la película. 

Hitchcock se ha referido a esta película como "una película terrible, un melodrama muy barato". En el libro de Hitchcock / Truffaut ( Simon y Schuster , 1967), Hitchcock calificó la película como "Un desastre" a pesar de los elogios de François Truffaut que confesó que a él le parecía "bastante divertida, pero la historia era bastante confusa".


De hecho fue la última película de Sir Alfred Hitchcock como director para British International Pictures, aunque hizo una película más para ellos como productor: Lord Camber's Ladies (1932), dirigida por Benn W. Levy. 

En su lanzamiento inicial, el público reaccionó a Number Seventeen con confusión y decepción. Aunque esta película fue un fracaso de taquilla en 1932, más tarde tuvo admiradores. 

Muchos críticos contemporáneos que no estaban familiarizados con la raiz teatral y de la comedia de la película, han juzgado injustamente a Number Seventeen como un intento fallido de un drama serio. 

Variety dijo de ella que "Al igual que la obra de teatro, la historia es vaga y, a pesar de su inquietud intencionada, poco convincente" Se destacaba en la crítica que la película presentaba a la "mujer como cómplice de un banda de ladrones y se enamorará a primera vista de un detective y evitará que sus asociados lo maten ". Y con respecto a los efectos especiales pues si fueron elogiados. 

El historiador de cine William K. Everson en una entrevista entre él  y Sir Alfred Hitchcock en 1972, éste mostró su admiración por esta película y también elogió la escena de la persecución de trenes y autobuses. Hitchcock estaba encantado con el entusiasmo de Everson y pasó a explicar cómo se filmó una de las secuencias en la escena de la persecución del tren y el autobús.  

He leído un tweet de Manuel Mamud con el que estoy de acuerdo y que dice "Number Seventeen (Alfred Hitchcock, 1932): Confusa película realizada en pleno conflicto con el estudio para el que trabajaba. Pese a no ser de las mejores del director, se destaca su gran comienzo inspirado en el expresionismo y su clímax en un tren".

Para Leonardo D’Espósito en la revista Noticias se trata de "Una de las películas olvidadas del primer Hitchcock sonoro, pero una que hay que ver con mucha atención. (...) Moraleja: un genio domina su arte incluso cuando no tiene casi nada para contar, y sabe cómo comunicar la emoción con la pura manipulación." 

Yo, por mi parte, recalco las mismas conclusiones a las que llegaron Truffaut y Hitchcock, estamos ante una película confusa, llena de toques cómicos, en el que la verdad nunca fluye y en la que es difícil saber como acabará todo. 


A destacar la apuesta de Hitchcock en esta película por las luces y las sombras , especialmente al inicio de la película, los diálogos inteligentes y en muchos casos surrealistas como los que tiene Ben casi con todos los protagonistas pero especialmente con John Stuart, y el juego de verdades / mentiras encubiertas por los participantes. Es un complejo quién es quién, pero entiendo que ese final explosivo de tren golpeando en el puerto generó admiración entre los espectadores del momento. Aunque no sea un film inolvidable y a pesar de que a Hitchcock  se le pudo ir la mano con tanto complejidad, hay que verla. Al fin y al cabo es una obra del mago del suspenso, del mejor, el de siempre. 


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