miércoles, 31 de marzo de 2021

Bellamy

 


Tenía pendiente una entrada de Claude Chabrol sobre la película Le boucher, El carnicero, en la que explicaba lo grande e importante que ha sido en la historia del cine, tanto este director como el grupo al que pertenecía , la "nouvelle vague". Para completar lo que tengo esbozado, pero no escrito ni publicado, añadiré que fallecido a los 80 años de edad, nos dejaba algo más de 50 en el cine - había comenzado con "El bello Sergio" ( 1958), casi 60 largometrajes, su tercer momento profesional está ligado a lo que el llamó su "Etapa Patrick Godeau (2004-2009)" que representaba casi su “tercera juventud” . Una vez escrito aquí está Le boucher



Cercano a sus casi 80 años, Chabrol retomaba en ella algunas de sus características del cine anterior, como la historia de un triángulo amoroso en Una chica cortada en dos (Une fille coupée en deux, 2007), que fue Premio Filmcritica "Bastone Bianco", o la recuperación para su cine de Isabelle Huppert en Borrachera de poder (L'ivresse du pouvoir, 2006) o en su obra testamento final, Bellamy, su amor por el cine y la literatura policíaca que le sirve como excusa para hablar de la complejidad de la familia, el amor en la edad madura, el asesinato, la muerte, o el papel de la burguesía francesa de provincias, así como su primera y última colaboración uno de los más grandes actores franceses, Gerard Depardieu. 

Todo esto lo hace un última película, Bellamy. Para hacerlo contó como subdirectores con Cécile Maistre, Vincent Guilleminet , Constance Meyer y César Chabrol. Bellamy o Monsieur Bellami es una película producida por Françoise Galfré, Patrick Godeau y Jean-Louis Nieuwbourg , aunque implicado igualmente estuvo Gérard Depardieu para las productoras Alicéléo, France 2 Cinema, DD Productions y con el apoyo de la región Languedoc-Roussillon. 

Para su historia contó con un guion escrito por el mismo Claude Chabrol y Odile Barski. A la película se sumó la musica de Matthieu Chabrol, orquestada y dirigida por Laurent Petitgirard y durante la misma suena música de Georges Brassens , Tchaikovsky ( 6 ª Sinfonía Patética ) - para el taxi- y, al final, Edward Elgar ( Concierto para cello ) la fotografía de Eduardo Serra, el montaje de Monique Fardoulis y el diseño de producción de Françoise Benoît-Fresco. El vestuario fue labor de Mic Cheminal, mientras que el sonido y las mezclas son de Éric Devulder y Thierry Lebon. 

La película cuenta en el elenco con Gérard Depardieu como Paul Bellamy, Clovis Cornillac como su hermanastro Jacques Lebas, Jacques Gamblin como Noël Gentil / Emile Leullet / Denis Leprince y Marie Bunel como Françoise Bellamy. Junto a ellos están Vahina Giocante como la masajista Nadia Sancho, Rodolphe Pauly como el abogado, Adrienne Pauly como Claire Bonheur, Marie Matheron como Madame Leullet, Dominique Ratonnat como el médico, Yves Verhoeven como Alain, Henri Cohen como el presidente del tribunal, Thomas Chabrol como otro del tribunal y Bruno Abraham-Kremer como Bernard. 

La película comienza con un recorrido visual de un horizonte, un espacio en el que a través de un travelling vemos los tejados de un espacio que al centrarse un poco más, descubrimos que es un cementerio, el cementerio de Sète, frente al mar. 

Cuando la cámara se acerca vemos que al pie del mismo hay un coche accidentado y junto a él, el cuerpo de un hombre descabezado y quemado. 

Tras esto la historia nos remite al día a día de una pareja. Como todos los años, el comisario Paul Bellamy (Gerard Depardieu) va a pasar unos días a Nîmes a casa de que heredó su mujer de su familia. Su mujer Françoise (Marie Bunel) gusta de esa casa familiar , aunque está deseando igualmente salir al exterior algo que a Paul le da mucha pereza. Ella sólo piensa en hacer algún crucero por países lejanos, pero Paul odia viajar. 

Lo cierto es que el inspector Paul Bellamy (Depardieu) es un famoso detective de la policía parisino experimentado y obeso que quiere disfrutar de sus vacaciones con su esposa Françoise (Marie Bunel) en Nimes . 

Descubrimos a Bellamy leyendo tranquilamente, cuando un señor se mete en su jardín y mira la casa con Paul dentro. Pero después se acerca a la cocina en la que está Françoise. Posteriormente ella escucha como llaman a la puerta y resulta que es el señor que estaba en el jardín. Se trata de un hombre que dice llamarse Noël Gentil (Jacques Gamblin) y le da un número de teléfono. Ella le dice que no molestará a su marido y le pide que se vaya. 

Sin embargo, poco después se lo comenta. A pesar de no haber anotado el número , ella lo recuerdo al detalle y , finalmente, se lo da a Paul. 


Tras la cena, Paul contacta con él y va al motel en el que ese señor reside. Al llegar Noël Gentil le dice que se siente responsable o no de una muerte. Noël le cuenta la historia de un corredor de seguros de nombre Emile Leullet (Jacques Gamblin), que recientemente intentó fingir su propia muerte en un accidente automovilístico cerca de Sète. La razón del mismo es que tenía una amante (Vahina Giocante) y quería con ese dinero defraudar al seguro para su propio bienestar y el de su mujer a la que acaba de abandonar. Leullet, reconoce que está escondido bajo un nombre falso y apariencia alterada y sin saber qué hacer busca ayuda de Bellamy que es una celebridad en toda Francia a través de sus memorias publicadas, que revelan que tiene una "debilidad por los asesinos". Tras volver a casa, le cuenta el caso a su mujer  que habitualmente está interesada por los casos que lleva su marido aunque éste no es oficial.  

A la mañana siguiente Bellamy va en busca de la mujer de Leullet (Marie Matheron), a la que conoce Françoise ya que le da clase a su hijo por las mañanas. Madame Leullet le cuenta que su marido la ha abandonado puesto que comenzó una relación que ella creía que no llegaría a nada con una masajista que tiene un local en el casco viejo de Nîmes. La masajista es Nadia Sancho (Vahina Giocante) una chica joven y guapa que era la pareja de baile de su marido. Poco a poco fue pareja de otras cosas, algo que a Madame Leullet le molesta en exceso , tanto es así que cerró el zapatero e intentó evitar que su marido saliese de la casa. Pero el no dudo en salir cada noche y no disimular que mantenía una relación con la chica. 

Cuando le entrega una foto de Emile, Paul se la lleva a casa y Françoise descubre que Emile y Nöel Gentil son la misma persona, aunque ahora operada y con aspecto distinto. 

A la casa de los Bellamy suelen ir amigos de la pareja, como un dentista gay con el que gustan cenar. Es él quien le da información a Françoise de un crucero por Egipto. Prefieren cenar con él y con su novio, un cirujano facial, que con una visita familiar que esperan un jueves por la noche, pero que se adelanta en unos días. 

El familiar que está por llegar es el medio hermano alcohólico de Bellamy, Jacques Lebas (Clovis Cornillac), que aparece inesperadamente antes de lo previsto. 

Desde ese misma noche que llega en taxi, vemos que tanto él como Paul comienzan a discutir amargamente por todo. Las razones son todas: las inversiones que Jacques quiere hacer en la compra de un bosque, después de haber perdido las tierras de la familia, el gusto por el juego, la suerte de Paul frente a la suya, el exceso de bebida, el querer el coche de su hermano, un Mercedes, el pedir un préstamo al mismo. No hay razón que no inicie una discusión. 


Tanto le harta la presencia de su hermano que Paul comienza a beber a pesar de que llevaba un tiempo sin hacerlo. Françoise lo lleva con resignación , pero sin estar encantada no está molesta. 

Los días van pasando y Paul encuentra tiempo para entrevistar informalmente e interrogar repetidamente a Leullet, a la amante de Leullet, incluso a la ex amante del posiblemente fenecido, un vagabundo de nombre Leprince , una chica llamada Claire Bonheur (Adrienne Pauly) ,que trabaja en Bricomarché. 

Por lo que le cuenta a Paul esta última Leullet pudo o no haber matado al vagabundo cuyo cadáver fue encontrado quemado en su automóvil. Ella mientras toma un café le habla de quién era realmente el hombre muerto en el accidente, Denis Leprince (Jacques Gamblin), hijo de un juez local, que lo había apartado de su vida y que ahora también está muerto. 

A medida que las cosas se complican, las tensiones familiares amenazan con abrumar las obligaciones "profesionales" de Paul. Éste es un gran profesional, en medio del enfrentamiento con su hermano que roba en la casa del dentista cuando es invitado a cenar, del que duda de su lealtad como hermanastro con respecto incluso en un momento que lo ve descamisado en la casa saliendo del cuarto de su mujer llega incluso a dudar de Françoise.

A pesar de todas esas dudas la tranquilidad que le trasmite ella lo apacigua todo. Ellos hablan de lo que está por venir , según creen. Dudan de sobre si Leullet, cuando decida salir del motel, si buscará antes a su amante o a su esposa. Se plantean igualmente si el vagabundo tenía motivos para suicidarse o fue inducido a la muerte, etc. Entre ese mar de dudas , lo cierto es que el hombre que se esconde en el motel en las afueras de Gard, Leullet, desesperado cuando Paul le informe de que su amante ahora mismo está teniendo una relación con el comisario de policía, decide entregarse a la policía y se pone a disposición de la justicia. 

Por su parte, Claire que está convencida de poner fin al caso y , finalmente, piensa en que posiblemente Denis tuvo el deseo de acabar con su vida, casi como homenaje a su padre espiritual que nos es otro que Georges Brassens , el músico enterrado en Sète, a pocos metros donde cayó el coche del desdichado Denis. Por lo tanto, pone a disposición de Leullet a un joven abogado (Rodolphe Pauly ), que parece ahora mismo su amante, y que tiene claro cómo ha de ser la defensa. Todo esto ocurre, mientras Madame Leulet ha fallecido de un infarto fulminante. 

El juicio tiene lugar y Leullet es absuelto en el juicio tras la intervención sorprendente del joven abogado  quien presenta la defensa (también a sugerencia de Bellamy) en forma de una canción de Georges Brassens . 

Tras el juicio Paul vuelve a casa. Cuando llega Jacques ya se ha marchado. Se ha llevado el Mercedes de Paul. Lo llama desde Saint Malo, en el norte. 

Días después Françoise recibe una llamada desde un hospital. Jacques, al que hemos visto llevando el coche a toda velocidad por las carreteras nacionales enmarcadas entre grandes árboles, ha muerto en un accidente. 

Esa noche Paul le confiesa a su mujer, que siempre estuvo en deuda con Jacques, ya que un día, mientras su madre le ordenaba que lo cuidará estuvo a punto de estrangularlo. Su vida sin él hubiese sido otra, distinta, puede que peor. Esa es la fuente de su tristeza vital que lleva sintiendo toda la vida con respecto a su relación fraterna. 

La película termina con un epigrama de WH Auden  que dice que "Siempre hay otra historia / Hay más de lo que parece". 

La película está dedicada a la memoria de dos Georges. Georges Simenon y de Georges Brassens (enterrado en el cementerio que se ve al principio). De hecho sobre el primero Bellamy viene a tener costumbres parecidas a las del principal personaje creado por Simenon, el inspector Maigret . Al igual que él Bellamy es un amante de los buenos vinos y un gran fumador, pero en lugar de fumar en pipa fumará cigarros. Chabrol dijo en una entrevista que la película es como una "novela que Simenon nunca escribió", una especie de " Maigret de vacaciones". 


Esta último película de Chabrol (que murió al año siguiente) y la única vez que trabajó con el actor  Gérard Depardieu . De hecho la película comenzó con el deseo mutuo que tenían Claude Chabrol y Gérard Depardieu de rodar juntos. Varias veces había coincidido de vacaciones en Nimes y habían hablado de ello por lo que decidieron rodar una película en esta ciudad, que es tan romana como contemporánea. Para ello tiraron de un caso real ya que el film está inspirado en el caso "Yves Dandonneau".

La película se rodó entre abril y junio de 2008. La base del rodaje estuvo en Nîmes en el Departamento del Gard. La película se abre con varias tomas de lugares famosos de la ciudad de Nîmes , es un guiño del director al actor, porque ambos tienen lazos de Nîmes y lugares favoritos… Asimismo, en varias escenas algunos objetos o carteles hacen referencia a la ciudad. (Cartel de Féria 2008…) De la ciudad vemos su plaza de toros, las Arènes, del Boulevard des Arènes, el Hôpital Universitaire de Carémeau, el Bricomarché, el Palais de Justice en el Boulevard de la Libération,el Cinéma Le Sémaphore, Uchaud así como diversas calles de la ciudad como Rue Maurice Fayet, Rue Littré, Place d'Assas, el Grand Café de la Bourse en el Boulevard Victor Hugo, así como otros lugares del Grad como Gajan, Saint-Mamert-du Gard, Caissargues. Igualmente aparecen otras localidades de otros Departamentos como  Leucate en el Aude, Montpellier y Sète ambas en Hérault. 


El director  presentó la película en febrero de 2009 en Berlín y recibido con una gran ovación en la edición del Festival Internacional de Berlín, donde fue premiado con un Oso de Oro honorífico por su trayectoria. Lo cierto es que Claude Chabrol aprovechó la ocasión para presentar entonces su última película, Bellamy, aunque no contó con el favor de la crítica. Poco después fue estrenada en 2009 en su país de origen. 

En España fue presentada en Valladolid en el otoño de 2010 en la 55 edición de la Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci) como parte del homenaje que el festival tenía previsto dedicar al director. El realizador, según recordaron fuentes del festival en un comunicado recogido por Europa Press, había confirmado su presencia en el certamen como protagonista de la retrospectiva 'Universo Chabrol', que incluía títulos como 'Merci pour le chocolat' (2000), 'La cérémonie' (1995) o 'La demoiselle d'honneur' (2004). Este ciclo y una publicación que lo acompañaba, 'Claude Chabrol: la mirada del entomólogo', fueron realizados por Cahiers du Cinéma España. La prevista entrega que iban a recibir de la Espiga de Honor fue recogido uno de sus familiares.

Con respecto a la crítica los franceses por un lado valoraron el trabajo del octogenario director, pero con matices. 

Emmanuel Burdeau en la mítica revista en la que escribía el director , Cahiers du cinema, en su número n ° 643 de marzo de 2009 publicó lo siguiente: "No tendría mucho sentido, entonces, usar la distinción habitual entre el Chabrol grande y pequeño en esta ocasión (...) Porque la novedad de Bellamy es ante todo que se entrega absolutamente por lo que es: un texto, una película. Un entrelazamiento de significados unidos. Un juego de mesa. Su medida no es externa, calculable a la luz de una obra, un éxito anterior, un tema o un estado de cine. Está construido solo a partir de las referencias que la película maneja por sí misma. Lo que ganamos es considerable. " 

Por su parte, Jean-François Rauger en las páginas de Le Monde en marzo de 2009 comentó que : “ Bellamy es una película engañosamente afable. Mientras el motor policial de la intriga se desmorona, se ponen en marcha los componentes de una visión que van más allá de las cuestiones triviales del género criminal. En el transcurso de la investigación, aparecen los detalles de la estafa, el plan de fuga con una amante, la implementación de subterfugios mediante operaciones de cirugía estética y disfraces, destinados a facilitar su desaparición y su reemplazo por un doble. " 

Jacques Morice en Télérama , escribía tras su estreno en febrero de 2009 : “Baste decir que la película se reserva pliegues inesperados. Está lleno de guiños (a Truffaut , Maupassant …) y homenajes (especialmente a Brassens ). Las ostras calientes, la pintada, las arenas de Nîmes y el monumento que es el mismo Depardieu podrían hacer creer en un paseo patrimonial un poco cómodo. Apariencia engañosa. Comenzó un poco suavemente como una serie B (...), aunque Bellamy termina fríamente como una película negra a la Duvivier , consumida por la culpa y el autodesprecio. "

Mehdi Benallal en Foco escribió que "¿Qué hay en Bellamy para decodificar ?" Todo, por supuesto, de ahí el extraordinario placer intelectual que tenemos frente a esta película. Este placer se redobla al ver que se realiza una investigación, y se convierte en una emoción violenta cuando uno comprende que esa investigación ocultaba otra. Cuando las investigaciones de Bellamy llegan a su fin, solo quedan "habitaciones vacías" para explorar, luego se lo ve derritiéndose lentamente, incapaz de seguir fingiendo ser un policía eficiente, bondadoso y dichoso, incapaz de seguir ocultando la figura de su hermano detrás de esta fachada. Su tristeza y su carencia afloran a la superficie, y es un niño muy chiquito el que pide luz en la gran cama, y se refugia en el costado de la tostadora para no escuchar las malas noticias derretirse sobre él como la verdad. "

Entre las críticas menos elogiosas destaca la escrita en el diario de editorial comunista, L´Humanité o L´Huma por Gilles Renault que dice de ella que “Sin convicción real, entorpecidos por la presencia imponente de Depardieu (...) buscamos un sentido en la puesta en escena perezosa y la interpretación despojada, antes de capitular (...). " 

Muy crítica Rania Hoballah en Metro comenta que “Bellamy decepciona. Si Depardieu interpreta a otro policía desilusionado, Chabrol se enreda en sus historias de simulación. " 

Josefina Sartora en Otros cines comenta que "Como en todos los films de Chabrol, la actuaciones son impecables: Depardieu, en su primera colaboración con este maestro, interpreta con serena intensidad un personaje por fin no sólo a la medida de su físico sino también de su experiencia; una excelente Marie Bunel es su esposa y Jacques Gamblin se anima con tres caracterizaciones diferentes. Como ya se dijo, todo el film está sostenido por la ambigüedad; el viejo director está más interesado en abrir preguntas y perspectivas que en llegar a conclusiones o certezas. ".

Por mi parte señalar que a mi la película me ha gustado. Por lo pronto consideró extraordinaria la actuación de la pareja formada por Gérard Depardieu y Marie Bunel, que trasmite encanto, cariño, respeto, dudas por medio de sus caricias que intenta dar siempre él a ella o sus excelentes diálogos. El resto que lo acompaña están igualmente bien. A destacar el papel múltiple de Jacques Gamblin que hace hasta de tres personajes diferentes. 

Me ha gustado especialmente un momento, cuando hablando de la suerte, de la fortuna, del dinero, del papel de los seguros, Depardieu se dirige a la cámara en un discurso de crítica social que indudablememte lo hace en boca del mismo Chabrol. 

La película está llena de historias, de pequeñas píldoras en las que descubrimos desde dramas, hasta humor y amor, críticas a la sociedad de clases, al papel de la fortuna, a la dualidad. La de la pareja integrada por Bellamy y su esposa, una pareja que se quiere y complementa a pesar de sus intereses , a veces no coincidente; la historias de los dos hermanos, que por no compartir no comparten ni su apellido, el afortunado Bellamy, y el desgraciado, Lebas. Ambos conforme avanza la historia van completando los huecos que nos faltan de la misma ( los recelos de uno hacia el otro, el peso del pasado, desde la niñez al presente, la vida de aciertos de uno , y de desgracias del otro, la posición de uno al lado de la justicia y el éxito, y la del otro avocada al fracaso que incluso le ha llevado a prisión). La historia de Leullet con esas dos mujeres, sus arrebatos de sensibilidad, su intento de resarcirse a su mujer y a su amante, traicionando a la empresa en la que trabaja, su gusto por el cambio de personalidad, su paso desde el mundo de los humildes a una posición de poder. El papel importantísimo de las mujeres que intentan vivir el presente más que anclarse en el pasado. El peso de lo ambiguo visible en el epílogo o cita final de W.H.Auden "Siempre hay otra historia. Hay más de lo que los ojos pueden captar". Siempre es así. 



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