viernes, 19 de abril de 2013

Como perder el tiempo


Uno es libre de perder el tiempo como quiera. Pero yo he perdido tontamente 90 minutos viendo una de las películas más penosas de los últimos tiempos, y mira que he visto tonterias. Pero esta es mala, desde el primer instante hasta el último segundo. Lo único que me duele es que no me he dormido, que hubiese sido lo más inteligente.

Saint Sinner (título completo Clive Barker presenta el Santo Pecador ) es una película, o algo así, coproducida por Estados Unidos y Canadá de terror del año 2002 y que se realizó para el mercado televisivo. 

Está perpetrada por Joshua Butler que , según parece, tomó como referencia los papeles – perdón, hablo del  guión- escrito por Doris Egan y Hans Rodionoff ( tela marinera, dos personas para escribir esto), y el propio Clive Barker, creador de la historia que, a su vez, se basa en una historia corta inspirada por el productor ejecutivo Clive Barker.
Aparte del título, no tiene relación ninguna con la serie de cómics publicados por Marvel Comics / Razorline de Barker. La producción estuvo a cargo de Clive Barker, Oscar L. Costo y Joe Daley que se gastaron la barbaridad de 3’9 millones de dólares a través de Seraphim Films , USA Cable Entertainment y Via Genesis Productions¡Increible! 
La música es labor de Christopher Lennertz. Mientras que, eso sí, la notable y luminosa fotografía estuvo en manos de Barry Donlevy, mientras que el montaje o la edición fue de Sean Albertson. 
 El elenco, por decir algo, está formado por los desconocidos Greg Serrano (Hermano Tomás), Gina Ravera (Det. Rachel Dressler), las súcubos Munkar (María Mara) y Nakir. (Rebecca Harrell), William B. Davis (Padre Michael), Antonio Cupo (Hermano Gregory), Jay Brazeau (Abad), Simon Wong (Vadear), el único que he reconocido de algunas series. 
 Se rodó principalmente en Canadá, principalmente en Vancouver, en las localidades de Gastown y Playland Amusement Park (Columbia Británica). 
La película se estrenó en los EE.UU. , y en concreto, - parece ser- en el Canal de Ciencia Ficción (Sci Fi Channel) el 26 de octubre de 2002. Aparte del título, nada de lo que hemos visto está relacionado con la obra de Clive Baker y eso que hubo siete entregas del cómic de Barker. 
Contar lo que he visto no es fácil. Más o menos, la historia se inicia en 1815, en California y en una Abadía o Convento. Allí nos encontramos con un tipo que aparece medio desnudo y en calzoncillos ¿ o son pañales? Que o está tomando el sol o durmiendo. Se trata de un joven musculoso, nuestro ¡¡¡monje!!! protagonista, ataviado únicamente con un taparrabos, se encuentra tumbado en la hierba observando los atributos físicos de una lavandera mientras se lleva una manzana a la boca, y que se fija en el pecho lustroso de una chica. Tras ser llamado por una campana lo vemos en compañía de otro monje con el que parece congeniar. ¡Vaya es un monje.

Después nos enteraremos que son los hermanos Alcalá, Tomás y Gregory. Uno de ellos se encarga de custodiar una nave en la que se guardan importantes secretos. Se trata de objetos sobrenaturales malignos recogidos por la Iglesia, y que se mantiene allí a buen recaudo gracias a esta orden religiosa. 
Una noche, esa misma noche, los hermanos Alcalá deciden visitar la sala. Mientras lo hacen, lógicamente, sin permiso se ven casi sorprendidos por la presencia del abad y del padre Michael, un emisario del Papa Pío VII – chúpate esta- , que ha viajado para revisar que lo guardado está bien custodiado. Tras verificar que eso es así, salen de la sala y los hermanos Alcalá, curiosos ellos, deciden experimentar con los extraños restos guardados. Entre ellos hay una ¡¡¡¡máquina del tiempo!!!! y extraña figura en forma de esfera y que al colocar la mano encima Gregory crece y devora la mano de éste. El otro, Tomás, no puede impedir que las dos figuras femeninas resultantes de la esfera o estatua antigua que representaba a dos mujeres, liberen los espíritus atrapados de dos hermosas mujeres demonio, Munkar y Nakir. Estas liberadas no pueden ser  frenadas por Tomas, que a su vez que no puede impedir que se introduzcan en la máquina del tiempo que también está por allí. 

Los hermanos Alcalá piden ayuda. Tras recuperar al hermano de la amputación, el padre Michael sostiene que el novicio hermano Tomás está protegido por el poder de San Nicodemo dada la muestra que la daga de éste ha dejado en su mano.

Gregory Alcalá, el monje que inadvertidamente liberó a los demonios asesinos, morirá, y Tomás Alcalá convencido por su superior, decide viajar al siglo XXI en la rueda del Tiempo del monasterio. 
Para redimirse, Tomas los persigue a la actual Seattle , Washington, donde se alía con una policía detective, Rachel Dressler que no es creyente, pero que lleva la cruz de su padre. La presencia de una pareja de policías formada por un veterano agente y su joven e inexperta ayudante, la cual arrastra ciertos problemas personales, en este caso derivados del asesinato de su padre a manos de un delincuente que ella misma había liberado. La investigación supondrá un camino de redención para ella por lo ocurrido, y para él, ya que tampoco se considera un santo. Ambos intentarán capturar a los malvadas homicidas que van trincando a diversos hombres(dos puteros, un oficial de policía, un vigilante,....) para chuparles la sangre. Por cierta, "magnífico" el “disimulado” interrogatorio en la noria al que someten las dos súcubos al guardia del parque de atracciones ante los ojos de todo el mundo, sin que ninguno de los presentes parezca reparar en dichas acciones. 

¡Qué más puedo contar de este rollo! Que el monje viaja en el tiempo persigue a estos dos súcubos con aspecto de prostitutas yonkis. Qué se asocia a una detective , la ya nombrada Detective Rachel Dressler y que junto con su compañero el agente Vadear intenta descubrir a las asesinas, aunque previamente detienen erróneamente a Tomás. 

Por cierto, uno de los súcubos está embarazada , aunque – sinceramente- esto no tiene nada que ver con la película, pero da igual, todo es un disparate. Como el montaje, que de forma fragmentada nos incluye un reloj, detalle este que, salvo como añadido ornamental, no tiene mayor trascendencia en el desarrollo de la historia, o esa máquina de tiempo que siempre te lleva al mismo sitio, sin tener que programar ni nada. 

En fin, noventa minutos tirados al cubo de la basura pues más que miedo o terror la película da risa. Es una sucesión sin fin de situaciones forzadas y ridículas – el protagonista escapando de la comisaría por su propio pie como si tal cosa -, trampas argumentales manoseadas – las demonios capturan a su perseguidor aplazando su ejecución con una disculpa peregrina, facilitando así su huida -, e incongruencias tales como el que el monje, a pesar de proceder del siglo XVIII, no parezca sorprenderse lo más mínimo porque en el futuro una mujer de color tenga un puesto de responsabilidad.Si me obligáis a destacar algo: el color de la fotografía es muy bueno. Del resto nada. 

Aunque yo me pregunto ¿Cómo pudo tener “esto” un coste de producción estimado de 3.900.000 de dólares ($)? . Por cierto, otra cosa llamativa, la distribución fue cosa de la Universal Video . Yo he llegado a pensar que era de la productora Troma. ¿Cómo se atrevieron con semejante bodrio?

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