sábado, 13 de mayo de 2023

Libéranos del mal



El cine coreano sigue estando a la vanguardia del cine mundial. Lo que algunos descubrieron en la película Parásitos era solo la punta del iceberg del que posiblemente es el cine más efectivo que hay en este momento. Un ejemplo de ello lo tenemos en este thriller titulado libéranos del mal, una película del año 2021 que parece moverse entre Japón Corea del Sur y Tailandia. El director de esta película es Won Chang Hong siendo este su segundo largometraje. 

Es una película del los mismos productores de Parásitos. Este thriller está lleno de acción desde el minuto uno hasta el momento en que acaba. 

Este thriller que cuenta con unas coreografías de artes marciales y duelos con arma blanca, nos presenta al protagonista que no es otro que un asesino de nombre Kim In-Am (Hwang Jung-ming) que lleva a cabo su último trabajo para los servicios secretos coreanos. Elimina a un tipo peligroso después de abatir a todos los miembros de su escolta. Ahora sueña con retirarse en Panamá. Por eso no acepta un nuevo encargo, aunque se trata del verdugo más confiable para sus autoridades. 

Considera que tras cumplir con su actividad profesional en Japón tras un encargo de su organización. El secuestro de una niña en Tailandia cambiará sus planes , puesto que la chica tiene mucho que ver con su pasado, ya que la niña es fruto de una relación del pasado del cual nació precisamente esa joven. La cosa se complica cuando tras el secuestro y muerte de la madre, la niña es vendida por sus captores a un delincuente que a su vez la destina a una intervención para tráfico de órganos. 

Al mismo tiempo, un sanguinario gánster llamado Ray, el carnicero (Lee Jung-jae), hermano de la última de sus víctimas, le persigue con denuedo para acabar con su vida.  viaja de Corea del Sur a Tailandia tras el secuestro de su hija y el suicidio o asesinato de la madre de la niña con la que el asesino tuvo una antigua relación. 

Mientras rastrea paso a paso para conseguir su objetivo, recuperar a la niña, descubre que es perseguido por un mafioso apodado como el carnicero que busca vengar la muerte de su hermano aquí el asesino cuando estaba en Japón. El enfrentamiento con Ray será a vida o muerte. En esta historia interviene un tercer personaje , Yoo-yi ( Park Jung-min) un transgénero surcoreano que será la intérprete del tailandés al protagonista, In-Am y le acompañará en sus desventuras por Tailandia.  

En Espinof se dice que "el guionista de 'The Chaser' y 'The Yellow Sea' firma un excelente thriller de acción que no da respiro". Uno de sus habituales columnistas señala que "Muy entretenida 'Libéranos del mal' (cuyo título en inglés sería Deliver Us From Evil). Crudo y furioso thriller de acción que recuerda a títulos como 'El fuego de la venganza', 'The Chaser' o 'El hombre sin pasado'; se siente la influencia de 'Heat' y eso siempre es bueno. ".

miércoles, 10 de mayo de 2023

Lisbon



En películas que pasan sin pena ni gloria y eso que cuenta aún a priori con un buen punto de partida o con un elenco de enorme calidad. Este es el caso de Lisboa película distribuida por la Repúblic y que fue dirigida por el mítico Ray Milland , un actor de éxito que lo fue especialmente en la década de los años treinta y cuarenta como galán pero por los 50 combina su labor de actor con la de director. 

En 1956 lo tenemos en Lisboa/ Lisbon en esta doble faceta. Esperaba más cine negro en esta película que no deja de ser sino una débil película del género de aventuras. 

"Lisboa" es una película de drama de 1956 dirigida por Ray Milland y protagonizada por él mismo, así como por Maureen O'Hara, Claude Rains, Yvonne Furneaux  y Jay Novello. 



La historia se desarrolla en la capital portuguesa que aparece como telón de fondo de esta historia y que se desarrolla durante la Guerra fría, aunque tampoco son muy claros qué papel juega esta en la historia narrada. 

El protagonista es el Capitán Robert John Evans (Ray Milland) un hombre que se dedica al contrabando. Con él contacta un personaje oscuro, interpretado por Claude Rains, que se dedica a hacer negocios en el mundo del hampa. Este le hace un encargo a Eva para que sea intermediario con la mujer de un hombre secuestrado (Maureen O'Hara). 



El hombre es un rico industrial que parece ser está en una prisión comunista tras el telón de acero. Se trata de un hombre de cierta edad, casado con una joven irlandesa que en caso de que fallezca su marido será la titular de una enorme fortuna que supera los 25 millones de dólares. 



Evans descubrirá que todo es una trampa y debe destapar el engaño para incluso salvar su vida. Robert John Evans termina involucrado en una trama de espionaje internacional. 



La película se filmó en la ciudad de Lisboa, lo que permite disfrutar de hermosas vistas y paisajes de la ciudad. 



Ray Milland, además de dirigir, fue su segunda película como director, también protagoniza la película como el capitán Evans. El actor había ganado el premio Óscar a Mejor Actor por su papel en la película "Días sin huella" y también había dirigido varias películas antes de "Lisboa". 

Maureen O'Hara interpreta a Julie, - que según Pere Vall aparece deslumbrante- y entre ella y el Capitán Evans se establece una fuerte atracción. O'Hara y Milland habían trabajado juntos anteriormente en "La túnica sagrada" (1953). 



Claude Rains interpreta al misterioso Mr. Frederick, un hombre sin muchos escrúpulos como adivinamos a inicio de la película y que está involucrado en una trama de espionaje y es el principal villano de la historia. 

La película combina elementos de drama y romance con intriga de espionaje, lo que la convierte en un híbrido interesante y entretenido. La banda sonora de la película, compuesta por Robert Farnon, también es notable y se considera uno de los puntos fuertes de la película. 

En general, "Lisboa" es una película intrigante que ofrece una combinación única de drama, romance y espionaje, ambientada en la hermosa ciudad de Lisboa y la primera súper producción de Hollywood autorizada por la dictadura de Salazar.. 



The World of Snow Hollow



Película de terror del año 2021 y que tiene como protagonista al que también es director Jim Cummings que hace de policía y padre desquiciado, y por cierto habrá que reconocer un gran trabajo. Se trata del mismo director de Halloween kills, película estrenada en 2021 y que tengo previsto ver en breve. 

"The Wolf of Snow Hollow" es una película de terror y comedia negra del 2020 dirigida, escrita y protagonizada por Jim Cummings. 

Snow Hollow no sé si se trata de una real o ficticia ciudad de turismo deportivo , principalmente de esquí, del  área montañosa del estado de Utah. Según lo que se ve en la película se trata de un área de alta montaña que vive del turismo y que puntualmente recibe a esquiadores de los alrededores. 

En esa ciudad desde hace algún tiempo se detectan la presencia de un asesino en serie que se centra en el asesinato de mujeres a las que agrede de manera brutal y que posteriormente desmiembra especialmente en sus zonas erógenas. 



El sheriff de esa localidad es un veterano policía, interpretado por Robert Forster en su último papel como protagonista, y  que se encuentra acompañado de un grupo de oficiales no especialmente capaces. Toda la unidad policial ha de enfrentarse ahora a una serie de brutales asesinatos que ocurren en luna llena. La primera de estas víctimas se trata de una turista que junto al borde de su novio se aloja en una cabaña. Tras un incidente entre el novio y dos parroquianos y lugareños que hacen un comentario sin intencionalidad alguna vemos como la chica es atacada y cómo se le extirpan sus órganos sexuales. 

A partir de aquí surgen mi especulaciones entre los integrantes de la Policía ya que algunos consideran que el asesino es un hombre alto y fuerte con ciertos conocimientos de la anatomía humana, mientras que otros se inclinan por pensar que los ataques pueden estar producidos por un hombre lobo un lobo u otro ser de enorme fuerza y altura. 

El hijo del sheriff que también es policía pero que tiene muchos problemas de autocontrol y que se encuentra en este momento desquiciado por razones diversas (es alcohólico, se acaba de separar, tiene una hija adolescente de cada para ir a la universidad, y su padre el sheriff sufre una enfermedad coronaria que lo lleva permanentemente al borde de la muerte y le impide realizar con eficacia sus labores como sheriff local ) ha de hacerse cargo del caso auxiliano por un par de compañeros como la agente interpretada por Riki Lindhome - cara conocida de algunas películas de terror- , u otros como algunos de origen latino con los que apenas se entiende algo que también le ocurre con el forense y prácticamente con todos los integrantes de la comunidad de Snow Hollow. 




La película combina elementos de terror y comedia negra de una manera efectiva, lo que la convierte en una experiencia única y entretenida. 

La actuación de Jim Cummings como el oficial de policía John Marshall es impresionante y destaca por su capacidad para alternar entre momentos de tensión y drama con otros de comedia. 

La película cuenta con un reparto talentoso que incluye a Riki Lindhome, Robert Forster y Chloe East, quienes también entregan actuaciones destacadas. 

La trama de la película es intrigante y mantiene al espectador adivinando quién podría ser el responsable de los asesinatos. La película también se destaca por su dirección creativa y cinematografía, que utiliza de manera efectiva el entorno montañoso de la ciudad para una atmósfera tensa y escalofriante. 

En general, "The Wolf of Snow Hollow" es una película interesante y divertida que combina elementos de terror y comedia negra en una trama intrigante y un entorno pintoresco.

Es una película mejor de lo que uno espera aunque no deja de ser una simple película de terror. A destacar por un lado el trabajo tanto en la dirección como en el papel principal de Jim Cummings, así como la dedicatoria que al final de la película le hacen a Robert Forster por ser posiblemente su última película. 



martes, 9 de mayo de 2023

El jugador


Pienso en el título y recuerdo una canción country, la de Kenny Rogers, The Gamble, una magnífica canción del año del año 1978, que fue todo un éxito comercial. Hablaba sobre un jugador y usaba metáfora sobre el juego de cartas. Pero no cuando yo aquí presento El jugador me refiero a un western titulado originariamente en inglés Tennessee´s Partner ,  realizado para la RKO Radio Pictures en el año 1955 y que tiene entre sus virtudes la dirección de Alan Dwan. La película cuenta con la intervención de John Payne, Rhonda Fleming y Ronald Reagan así como Coleen Gray entre otros. Y sñi, has leído bien Ronald Reagan. el que fuera Presidente de los Estados Unidos en los años noventa es el "deuterprotagonista" - como diría mi profesor de Literatura en segundo de carrera-  de esta historia. 

Tennessee's Partner fue escrita por Graham Baker , DD Beauchamp , Milton Krims y Teddi Sherman , con reescrituras no acreditadas de Dwan . Todos ellos parten de uno de los libros de Bret Harte, "Tennessee's Pardner", se aparta significativamente de la trama original. 

La historia de Harte de 1869 también se ha filmado como Tennessee's Pardner (1916), The Flaming Forties (1924) y The Golden Princess (1925). 

La película fue lanzada por RKO Radio Pictures, que entonces era propiedad del industrial Howard Hughes, aunque en la producción aparece Benedict Bogeaus de la Filmcrest Productions.

La historia conjuga lo propio de un western, pero tiene matices bien distintos. Estamos en plena época de buscadores de oro, y en una localidad cercana a un gran río al que se llega igualmente por barco de vapor o por caballo cruzando altas montañas. El protagonista de la misma es un jugador que se maneja muy bien con las cartas. Su nombre es Tennessee (John Payne), un mujeriego que vive instalado en un establecimiento llamado, el Marriage Market, en el que la titular es una bellísima mujer que responde al nombre de Duchess (Rhonda Fleming) regenta un negocio en el que prepara a chicas jóvenes y guapas para encontrar un marido. Además en el pueblo hay un saloom y un espacio para el juego donde Tennessee pasa su jornada a diario. Es tan buen jugador, como ya he dicho, aunque algunos de los parroquianos sospechan que hace trampa, por lo que muchos de sus contrincantes están muy resentidos con él y a más de una persona le gustaría verlo muerto.  

Un día de una de esas partidas que gana sorprendentemente coincide con la llegada de un pistolero y buscador de oro de nombre Cowpole (Ronald Reagan) - al que conocemos cuando va a caballo hacia la ciudad- . Una de sus víctimas del jugador, que es desplumado vilmente,  le tiende una emboscada, justo cuando Cowpoke (Ronald Reagan) llega a la ciudad. Cowpole que no permite que nadie sea disparada cuando un hombre está de espaldas, le dispara y lo mata. Ante lo ocurrido el sheriff local se persona y mete a los dos en la cárcel hasta que se aclare todo. 

Ambos en la cárcel empatizan. Cowpoke como ha salvado la vida de Tennessee y éste por ser un hombre agradecido. Lo cierto es que los dos se hacen amigos rápidamente tras pasar unos días en la cárcel. El jugador está encantado con Cowpoke pues le ha salvado.   Forman una pareja invencible en el juego, hasta que el tahúr aconseja el pistolero que tenga cuidado con las malas artes de una mujer. esto se debe a que Cowpoke está en la ciudad para casarse. 

Su amigo Tennessee sabe que la chica de la que se ha enamorado Cowpoke como un becerro , Goldie (Coleen Gray) tiene únicamente interés por él por su dinero. Tennessee sabe que a Goldie solo le interesa el dinero. Ella es una buena cazafortunas y que se deshará de Cowpoke tan pronto como obtenga el dinero de su mina. Así que la enamora con la promesa de una vida de lujo en San Francisco, luego le entrega el dinero y la despide. 

Esto pone a prueba su amistad con Cowpoke. Evidentemente, ambos rompen y Cowpoke se marcha de la ciudad y se instala en las montañas cercanas. Esto le duele al jugador, pero considera que es lo mejor para ambos. 

Pero pronto tiene un nuevo problema con el que lidiar: Grubstake, un viejo buscador de oro, que acaba de encontrar un yacimiento sabe que se hará rico. Pero tras sacarlo del saloom y protegerlo en su casa aparece al día siguiente muerto.

Todos sospechan de Tennessee que es protegido por el sheriff (Leo Gordon), un hombre justo. Sin embargo, el asesino resulta ser una de las personas que más odia a Tennessee, Turner (Anthony Caruso), otro ambicioso jugador, que se ha hecho con el plano que precisamente dibujó Cowpoke para Grubstake.  

Cuando Cowpoke y Tennessee aclaran lo que ha pasado entre ellos, no sin darse una paliza, se unen el uno al otro para averiguar quién es el asesino de Grubstake. Ambos, fugados de la cárcel, dónde vuelven a estar enchironados por el sheriff escapan y Cowpoke lleva a su amigo al lugar donde está el yacimiento de oro siendo él y el asesino el único que lo conoce. Allí descubren a Turner. En el tiroteo Cowpoke es mortalmente herido, justo cuando llega el sheriff.

La película acaba con Tennessee asentando la cabeza y casándose con Duchess quien abandono el negocio de casamiento de chicas y se marcha en un vapor a vapor junto a su marido.  

Nada adaptación de una historia de Bret Harté, autor y poeta americano del siglo XIX en forma de western dirigido por Alan Dwain prolífico director que pasó más de cincuenta y dos años tras las cámaras y dejó algunos títulos y inolvidables como el Robin de los bosques interpretado por Douglas Fairbanks en 1922. 

Para esta cinta se acompañó del ex presidente de los Estados Unidos Ronald Reagan en la que algunos críticos coinciden en descarcar como una de sus mejores interpretaciones previa a su carrera política. En el papel de Tennessee se encuentra a John Payne, actor americano recordado por participar el musicales de la tuente century Fox durante la década de los años cuarenta. 

El rostro femenino que hace tambalear la relación entre Tennessee y Cowpoke es el de Rhonda Fleming, actriz considerada como la diosa del Technicolor por la perfección que alcanzaba en aquel formato la textura y el color de su pelo rojizo así como su bello rostro, le saca un enorme provecho el director de fotografía John Alton. Rhonda Fleming es encantadora como siempre en la chica que ama a Tennessee y anhela de éste un beso que ella llama de "matrimonio". 

Buen guion y una trama poco convencional hacen un western entretenido. Ayuda que el equipo de John Payne y Ronald Reagan funcione bien, cada uno creíble en el papel que se le ha asignado. En cuanto a las damas, este probablemente marcó el papel western más interesante de Coleen Gray y destaca igualmente la aparición de Angie Dickinson que interpreta a una de las chicas de Marriage Market en un papel no acreditado, solo su segunda aparición en la pantalla grande. 

Por útimo decir que hubo una versión muda de esta película del año 1916 llamada igualmente "Tennessee's Partner". 

Y no lo olvides: "You got to know when to hold 'em, know when to fold 'em, Know when to walk away and know when to run. You never count your money when you're sittin' at the table. There'll be time enough for countin' when the dealin's done.”  / Tienes que saber cuándo quedarse con las cartas, saber cuándo tirarlas, Saber cuándo irse y cuando correr. Nunca cuenta el dinero cuando está sentado en la mesa. Habrá tiempo suficiente para contarlo cuando se haya repartido las cartas)". Eso para ser un buen jugador. 



domingo, 7 de mayo de 2023

Irati



En agosto de 1999 mi mujer y yo hicimos un viaje que nos llevó al país Vasco y a todos aquellos espacios en los que la cultura vasca estaba y está presente como fueron Navarra y el país Vasco francés. En aquel periplo uno de los puntos culminantes fue ir al pueblo de mi abuela, Ataun. Allí visitamos entre otras cosas tanto el caserío familiar, - llamémosle como le llamaba mi madre, Baindi, - como a la familia que aún nos quedaba por allí. 

Fue un viaje que tuvo mucho de mágico y de reencuentro. Descubrir la estela que le levantaron a uno de mis antepasados que murió junto a su hermano por un rayo, encontrar la placa de mi fallecido primo (segundo), Iosu, en lo alto de una montaña - el área Intxusti- cuando estábamos convencidos que nos habíamos perdido o ir de visita junto a mis tíos al caserío de Sara. 

El caserío de Sara era el viejo caserío del Aita por antonomasia. La casa de José Miguel de Barandiarán y Ayerbe estaba habitada en aquel momento por su sobrina, la persona que lo había cuidado y con la que había convivido desde el exilio en el país Vasco francés hasta los últimos años de su vida. 

La sobrina del Aita se mostró tanto con mi mujer como conmigo como lo que era, una persona tímida, sabia, encantadora y que agradeció enormemente nuestra visita. Hablamos de la enorme trascendencia que había su tío en la recuperación de la mitología vasca.  

Y es que Ataun y los estudios de Barandiarán están estrechamente ligados. Sus fiestas, la de los gentiles, sus leyendas como la de los basejaun, la presencia de las míticas lamias de los arroyos o del mismo Agaunza, la ancestral adoración a Mari, la vieja diosa Madre,  la presencia de los Jentiles o gigantes constructores, las cuevas donde duerme Sugaar, el hombre-sierpe de las profundidades o las imponentes montañas hogar de la diosa Mari, máxima representante de Ama Lurra o Madre Tierra el Txantxagorri... En fin, todo lo que nos podía remitir a la mitología vasca. 



Y esto es lo que te vas a encontrar en Irati, la película estrenada este año y que dirige Paul Urkijo Alijo. No, la película no habla aunque también sí del mayor bosque de haya del continente europeo, ni del espacio es cercano a Ochagavía. 

La película rodada en Euskera y en escenarios mayoritariamente en exteriores habla de la mitología vasca, de su retroceso en beneficio de la llegada del cristianismo, del amor a la naturaleza, y colateralmente de la historia de un valle y sus vecindades. 

La película se inicia en el siglo VIII, en concreto en el año 778  y tiene como protagonista a Eneko Ximénez , un joven noble que pierde a su padre en la lucha contra los francos tras su paso por el puerto de Ibañeta, que pasará a la historia épica con la chanson de Roland y su muerte en el paso de Roncesvalles. El padre sabedor que el valle puede caer en manos de los francos, y antes de morir en la batalla, como aún tiene presente la creencia en las viejas costumbres sabe que para salvar el valle tiene que ser el que se ofrezca en sacrificio con el objeto de salvar a su pueblo del control franco del valle. Por eso va a los más profundo del bosque para entregarse a la poderosa entidad del mismo, Mari (Itziar Ituño), pidiéndole expulsar a los invasores y garantizar la victoria; ofrece su vida a cambio de matar a sus enemigos. 

Su hijo, Eneko, al que está muy unido, no solo pierde a su padre en la batalla, sino que en su huida por el bosque conoce a una extraña niña de su edad llamada Irati en un río . Precisamente en ese encuentro ve a una lamia (una mujer mágica de ojos rojos y pies de lagarto) seduciendo a un soldado franco que está dispuesto a acabar con su vida para llevarlo bajo el agua. 



Su abuelo, temiendo por su nieto, lo envía desde allí para asegurarse de que crezca fuerte y poderoso. Eneko como su descendiente será educado al otro lado de la montaña, en Bigorre, y en la religión cristiana. 

Retorna 15 años después. Eneko Aritza (Eneko Sagardoy) regresa como un fiel católico, con la esperanza de gobernar sus tierras como lo hicieron su padre y su abuelo. Como noble aspira a convertirse en el señor del valle compitiendo para ello con otra dinastía, los Belasko, que no tuvieron la valentía de prestar ayuda a su padre frente a los francos. 

Su madre, Oneka (Nagore Aramburu) , tras el fallecimiento de su esposo se ha casado con la autoridad sarracena de Zaragoza, así que su posición ante la familia Belasko y la jerarquía eclesiástica aquí representado por Virila ( Ramón Agirre) que a pesar de apreciar a los Ximénez , y cuyo deseo es que se instalé un monasterio en la zona, no es la mejor para aspirar a convertirse en el Jaun. 

Estas circunstancias obligan al joven aspirante a señor feudal a hacer un trato con el heredero de la familia Belasko (Kepa Errasti) : demostrar que es digno de gobernar encontrando y recuperando el cadáver de su padre. que se perdió en la batalla y que fue enterrado de forma pagana. Para ello necesitará ayuda adicional y esta vendrá de una enigmática chica de la zona que responde al nombre de Irati (Edurne Azkárate) . Los dos se adentrarán en un extraño e inhóspito bosque. 

Para encontrar el cadáver, Eneko se ve obligado a viajar con Irati, convertida en una niña criada en el bosque por la anciana Luxa (Elena Uriz), adorando las antiguas tradiciones paganas y despreciando la fe católica y el cristianismo. 

Belasko, que se está aprovechando de la explotación forestal vendiendo la madera a los francos, quiere matar a Eneko cuando se entera de que en una cueva hay un tesoro, el de los francos, escondido. Además el quiere ser el nuevo gobernante, envía a unos secuaces al bosque para localizarlos y acabar con ellos. 

Mientras los dos protagonistas están en el bosque, Irati introduce a Eneko en un mundo “donde todo lo que tiene nombre existe”, un lugar lleno de criaturas mágicas y fantásticas que él rechaza tras su fe. 

Pero cuando los dos son atacados por la gente de Belasko, Irati se expone con un oscuro secreto que involucra un mundo en descomposición que intenta sobrevivir a pesar del cristianismo que se extiende por el continente que amenaza con exterminar. 

Al descubrir que los viejos mitos son realidad, Eneko emprende una aventura para descubrir no solo el verdadero corazón del bosque, sino encontrar la manera de convertirse en el hombre que debe ser.

Se estrenó por primera vez en el Festival de Cine de Sitges en octubre de 2022, donde ganó el Premio del Público, y se estrenó en cines españoles el 24 de febrero de 2023 de la mano de Filmax. Yo la he visto en Prime.

Según el director y guionista, Paul Urkijo Alijo, que también en este caso es guionista basándose en la novela gráfica "El ciclo de Irati" de Jon Muñoz Otaegui y Juan Luis Landa publicada entre 1995 y 1997. 

La producción de Irati tardó cinco años en levantarse. Intervinieron en ella Iñaki Burutxaga, Joanjo Landa y Paul Urkijo Alijo junto a las productoras Bainet Zinema, Ikusgarri Films, Kilima Media, la francesa La Fidèle Production y participan igualmente el Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz, Euskal Irrati Telebista (EiTB), el Instituto de la Cinematografía y de las Artes Audiovisuales (ICAA), Irati Zinema, Radio Televisión Española (RTVE) y Triodos Bank, quedando Mikel Serrano para el diseño de la producción. 

La película cuenta con la música de Aránzazu Calleja y Maite Arroitajauregi que usan letras del mismo director y , en ocasiones, se hacen acompañar de una txalaparta. El sonido fue responsabilidad de Andrea Sáenz, el maquillaje de Patricia López y Julián Fernández, la gran fotografía es de Gorka Gómez Andreu, mientras que el montaje fue labor de Elena Ruiz, el vestuario de Nerea Torrijos y los buenos efectos especiales del tándem Jon Serrano y David Heras. 


El rodaje comenzó en septiembre de 2021 y duró ocho semanas, entre septiembre y noviembre de 2021, teniendo lugar en diferentes localizaciones de Asparrena - en la cueva de la Leze, entre Ilarduia y Eguino- en el macizo calizo de la Sierra de Altzania en Álava, en la cueva de Arrikrutz, en Oñati, ubicada en el corazón de la cordillera de Aizkorri en Guipúzcoa, en la Pozalagua, en la parte más occidental del valle de Carranza (Vizcaya), bajo la Peña Ranero formando parte del parque natural de Armañón, así como en Abodi, la sierra en los Prepirineos Occidentales de Navarra que arranca del Pico de Orhi y separa los valles de Irati y Salazar la Sierra de Aralar , pero también en Irati - se rodaron las principales escenas de bosque, ríos y cascadas como la del Cubo- y alrededores de Ochagavía en Navarra y en el Castillo de Loarre que permite dominar la llanura de la Hoya de Huesca y Bolea, era clave tanto a nivel militar como agrícola, ya que permitía controlar también las áreas de cultivo en Huesca y en la vertiente pirenaica francesa, en concreto, en el Departamento de los Pirineos Atlánticos,  en el suroeste de Francia.

El presupuesto de la película fue de 4.3 millones de euros, incluyendo el máximo importe de 1.2 millones de euros en las ayudas del Ministerio de Cultura.

Irati se rodó en ocho semanas y fue la “película de aventuras histórico fantástico medieval que toda la vida he querido contar” con una historia “muy local, muy arraigada, que parte de los cuentos de la mitología vasca que nos contaban de pequeños” pero que a la vez es “totalmente exportable”. declaró el director. El mismo comentó en prensa que “Éramos de ir todos los domingos al monte y allí nos contaban las leyendas de criaturas como el gigantesco Sugaar, el misterioso Basajaun o la poderosa diosa de fuego Mari” “partimos de los entornos naturales que fueron los que nos ofrecieron los lugares espectaculares, impresionantes y épicos que le dieron a la película ese tamaño buscado y a la vez hablar de esas deidades"

En cuanto a la crítica Fausto Fernández de Fotogramas dijo de ella que "el producto, ambicioso en una industria como la española que suele frenar la ambición, de ese chaval que creía firmemente en la fantasía y en la aventura [...] como la mejor manera de entender qué somos, de dónde venimos y hacia dónde vamos" y diciendo que Urkijo "se ha convertido en un director enorme en [...] su segundo trabajo" y que "es ver cómo ha resuelto la espectacular escena de la batalla y que a uno [...] se le aparezca el Orson Welles de Campanadas a medianoche".

Oti Rodríguez Marchante del ABC escribió que Urkijo hizo una película "arriesgada", pero que "sale victorioso por lo atractivo de su aventura y de sus personajes" y que historia está "llena de potencia, imaginación visual y sentido histórico", concluyendo que es "muy interesante ver la película, tan esforzada y distinta, y lo que la rodea". 

Juan Zapater de Noticias de Gipuzkoa se refirió a Irati como "un caso radical de autenticidad creativa" y declaró que todos los aspectos de la expresión cinematográfica de la película "desprenden entusiasmo, calidad, y una insólita y armónica capacidad de aportar", además de elogiar el relato de Paul Urkijo Alijo, "donde el rigor histórico se funde con la imaginación fabuladora", concluyendo que su juego narrativo "ha empezado a crecer de manera prodigiosa" y que Irati es "una película ante la que solo cabe dejarse llevar por sus múltiples capas". 




A mi personalmente me ha gustado por que el tema me parece atractivo, y cercano en lo afectivo. Destaco del mismo el buen espectáculo visual que nos propone Urkijo, con luchas bien coreografiadas,  y muy bien rodadas por Gorka Gómez Abreu. La apuesta por el rodaje en exteriores le da una belleza total a la película, la oscuridad lo proporciona lo tupido del bosque y las sombras y luces de la cueva. Los efectos especiales bien utilizados y la música entra cuando debe. La historia está perfectamente integrada en la mitología vasca y me ha gustado el deseo de vincular al personaje principal con el inicio del Reino de Navarra, al ser casi presentado como Iñigo Arista. En definitiva, una buena y recomendable película.



jueves, 4 de mayo de 2023

Historia del Cine: Años 80 y 90 Estados Unidos: comerciales, autores e independientes



La televisión por cable y por satélite y el vídeo en los 80, el dvd y otras tecnologías digitales en los 90 hacen que el público acuda menos a las salas de cine. Por ello, la industria cinematográfica reestructuró su organización y sus estrategias comerciales, y para atraer al público, especialmente joven, recurrió a los efectos especiales y al aumento de la violencia y el sexo. Las técnicas digitales se aplicaran tanto en películas con actores como Terminator 2: el juicio final (Terminator 2: Judgement Day, James Cameron, 1991) como de animación, Toy Story (John Lasseter, 1995). 

Junto a las películas para todas las edades, se produce cine de violencia, erótico, policíaco y de terror, intentando sacar ventaja al conservadurismo de la oferta televisiva. Las propuestas de más calidad de los años anteriores se orientan sólo a sectores intelectuales, universitarios y a las salas especiales. Así continúan las tendencias alternativas de producción independiente, con puntos de vista no ortodoxos y estilos no convencionales. Pero tienen una distribución muy restringida, la mayoría restringidas a Festivales o ciclos, y sólo algunas llegan a un poco más al público, como los trabajos del grupo Dogma 95. 

La irrupción del vídeo 

Por la demanda de las cadenas estadounidenses de televisión (la necesidad de grabar noticias que ocurrían en una costa y transmitirlas en el horario de los noticiarios de la otra), surgió el magnetoscopio. Hasta ese momento las noticias en directo se grababan en 35 o 16mm desde la pantalla de un televisor, el llamado telecine. El primer modelo profesional fue fabricado por Ampex en 1956 y cambió totalmente el funcionamiento de la televisión. Tras numerosos intentos de llevar sistemas de grabación al mundo de la educación, en 1976-77 las empresas japonesas Sony (Betacam) y Matsushita (VHS) presentan dos sistemas -incompatibles entre sí- para lo que acabará llamándose vídeo doméstico. La implantación del vídeo, tanto para grabar como para reproducir películas revolucionará la estructura de la distribución y, a medio plazo, la de la producción. 

Las películas se convierten en un objeto de consumo doméstico, como el libro o el disco. A finales de los ochenta los ingresos del vídeo y las televisiones superan claramente al de las salas, especialmente para las majors americanas. 

El consumo mundial de películas a través de las televisiones y los reproductores domésticos dispara la cuota del cine americano y ello no es debido sólo al control de los canales de distribución sino a la competencia entre los canales privados de televisión fruto de la liberalización impulsada por los gobiernos europeos a instancias de la Unión Europea (en España se pasa en 1990 de dos canales públicos a un sistema con tres cadenas privadas y varias autonómicas). 

El vídeo (y posteriormente el DVD) crea nuevos modos de acercamiento al cine. El espectador de finales del siglo XX tiene acceso a través del alquiler en video-clubs o la compra al visionado y coleccionismo de películas actuales o clásicas, empiezan a proliferar las promociones en los quioscos y puede grabarlas desde el televisor sin estar presente. Pero además cambia su actitud, que deja de ser pasiva, ya que puede realizar un visionado fragmentado y con pausas, puede repetir y omitir secuencias, congelar la imagen, etc... Se pierde la magia de la gran pantalla en la sala oscura a cambio de una accesibilidad que los ordenadores domésticos y los nuevos sistemas digitales acabarán de apuntillar una década más tarde. La cultura cambia y se hace menos crítica, pero también hay más oportunidades para un cine de vanguardia o independiente; incluso, las tecnologías digitales van a hacer posible producir películas muy baratas. Además, la utilización de las tecnologías digitales (en teléfonos, cámaras, ordenadores, internet, GPS...) da origen al expanded cinema -según la expresión acuñada por Gene Youngblood- ,(3)un cine fuera de las salas, con vídeos, películas, entornos interactivos ( en los que el espectador puede ser cámara, editor o protagonista) y aplicaciones on line. 

Estados Unidos: comerciales, autores e independientes 

Las grandes productoras de cine fueron absorbidas por grupos multimedia con intereses en la industria electrónica, la televisión por cable, el oci, la telefonía, el mundo editorial,... como AOL-Time-Warner, Sony-Columbia, el grupo Murdoch (con la Fox), etc... Sólo los estudios encuadrados en estas grandes compañías (con salas de exhibición, centros comerciales, TV por cable, cadenas temáticas) se aseguran la amortización de sus productos (se calcula que sólo tres de cada diez filmes recuperan la inversión entaquilla). Esos oligopolios han permitido al cine norteamericano colonizar el mundo (aunque un 60% de la amortización se logra en Estados Unidos). 

Musicales 

Hollywood, en un intento de sacar provecho a la discomanía, inició la producción de una serie de películas musicales menores para jóvenes con Fiebre del sábado noche (Saturday Night´s Fever, John Badham, 1977). 

Pero también hubo grandes acercamientos a la música. Martin Scorsese dirigió El último vals (The Last Waltz, 1978), el concierto de despedida de The Band (dirigió varios films de música, incluído el clip de Michael Jackson Bad, 1987). Jim Brown rodó el precioso documental sobre el cuarteto de folk The Weavers: Wasn't That a Time (1982), George T. Nierenberg el interesante documento sobre gospel Say Amen, Somebody (1982) y Jonathan Demme fue el responsable de Stop Making Sense (1984) , una impresionante película rock con el grupo Talking Heads rodada en tres días. 

Ciencia-Ficción y Terror 

También proliferaron las películas de catástrofes y de ciencia-ficción, algunas de notables como Tiburón (Jaws, 1975), Encuentros en la tercera fase (Close Encounters of the Third Kind, 1977) y E.T. (1982), de Steven Spielberg; la trilogía galáctica iniciada en 1977 La guerra de las galaxias (Star Wars) de George Lucas o el universo de terror y futurismo de Alien (1979) (3) y Blade Runner, 1982, de Ridley Scott. 

Una variante fue el cine de experimentación genética como Jurassic Park (Steven Spielberg, 1993) y Gattaca (Andrew Niccol, 1997) . Con Pi, fe en el caos (Pi, Darren Aronofsky, 1998), Cube (1999) del canadiense Vincenzo Natali o Matrix (The Matrix, Larry y Andy Wachowski, 1999) se exploraron nuevos caminos formales y técnicos. William Friedkin inició con El exorcista (The Exorcist, 1973) un cine de terror de gran crudeza. Stanley Kubrick se basó en la novela de Stephen King para realizar El resplandor (The Shining, 1980), donde muestra el proceso hacia la locura y la autodestrucción de un hombre en una situación de soledad y aislamiento. Con Drácula (Bram Stoker's Dracula, 1992) Francis Ford Coppola intentó renovar planteamientos de un clásico. 

Violencia 

La violencia también resurgió en el cine de gansters y varios directores de nombre se unieron a la tendencia: El precio del poder (Scarface, 1983) y Los intocables de Eliot Ness (The Untouchables, 1987) de Brian DePalma, El honor de los Prizzi (Prizzi´s Honor, 1985) de John Huston y Manhatan Sur (The Year of the Dragon, 1985) de Michael Cimino. Oliver Stone dirigió una parodia sobre la fascinación por las armas y los asesinos, Asesinos natos (Natural Born Killer´s, 1994). Se ha llegado a llamar cine neo-noir al acercamiento "moderno" al cine negro, una definición que englobaría los thrillers de David Lynch, Ridley Scott, Tarantino, los hermanos Coen o el último Scorsese. Curtis Hanson mezcló clasicismo y modernidad en la exuberante L.A. Confidential (1997). 

Autocrítica 

En los 70 la crítica a Vietnam y al Watergate había creado una conciencia crítica con películas como Todos los hombres del presidente (All the President's Men, Alan J. Pakula, 1976) (5). En los 80-90 con el reaganismo se diluyó buena parte del espíritu crítico, pero Hollywood aún produjo algunas películas de carácter autocrítico con el sistema americano, como Desaparecido (Missing, 1982) de Costa Gavras, Rojos (Red, 1982) de Warren Beatty y la desconcertante The Times of Harvey Milk (1984), de Robert Epstein, que es uno de los más importantes documentales sobre los 80. 

Pero seguramente ha sido el director negro Spike Lee uno de los que de forma más explícita ha cuestionado aspectos sociales y políticos concretos de EE.UU. desde Haz lo que debas (Do the Right Thing, 1989) pasando por el bio-pic Malcom X (1992) hasta su documental sobre el Katrina (2006). 

Otras Películas revisaron el conflicto vietnamita, aunque algunas trascienden el propio tema o género, como Apocalypse Now (1979) de Francis Ford Coppola, El cazador (The Deer Hunter, 1978) (7) de Michael Cimino, Taxi Driver (1975) (8), de Martín Scorsese, Platoon (1986) y Nacido el 4 de julio (Born on the Fourth of July, 1989) de Oliver Stone, y La chaqueta metálica (Full Metal Jacket, 1987) de Stanley Kubrick. Pero también hubo un cine que volvió a reivindicar el orgullo americano como Rambo (George P. Cosmatos, 1985) y otras peores con los Chuck Norris de servicio. Ese anticomunismo reaganiano se plasmó en filmes como Los evadidos del Mekong (Love Is Forever, Hall Bartlett, 1983) o Amanecer rojo (Red Dawn, John Milius, 1984). Pero el uso político que los presidentes hacen de la guerra fue denunciado también en cintas como La cortina de humo (Wag the Dog, Barry Levinson, 1997). 

Cine de Autor 

En 1980 Martín Scorsese realizó con Toro Salvaje (Raging Bull) uno de los mejores relatos sobre el deporte cinematográfico por excelencia, el boxeo, filmado en blanco y negro y con un espectacular montaje de Thelma Schoonmaker. Tras recuperarse de su adicción a las drogas, dirigió varias cintas con relativo éxito como Jo, ¡qué noche! (After Hours, 1985) o El color del dinero (The color of the money, 1986) o la polémica La última tentación de Cristo (The Last Temptation of Christ, 1988). Con Uno de los nuestros (Goodfellas, 1990) (10) volvió a aunar éxito de crítica y público pero no obtuvo el anunciado Oscar lo que le llevó posteriormente a un cine cada vez más comercial. 

Hijo del músico italiano Carmine Coppola, Francis Ford Coppola (1939) comenzó en el cine trabajando con el productor independiente de películas de serie-B Roger Corman, desempeñando varios oficios. Con él dirigió su primera película, un filme de terror llamado Dementia 13 (1963). 

Tras ser llamado para dirigir un anodino musical con un anciano Fred Astaire, en 1969 ganó la Concha de oro de San Sebastián por Llueve sobre mi corazón (The Rain People) y en 1970 el Oscar por el guión de Patton (Franklin J. Schaffner, 1970). Estos reconocimientos avalaron la carrera de un director que tenía entre los productores fama de demasiado independiente. 

Fundó con su amigo George Lucas American Zoetrope , para producir películas de otros y las suyas propias con un espíritu independiente, versátil y ambicioso. No obstante, el fracaso de la película de Lucas THX 1138 (1971) dejó a la productora en muy mala situación. 

Esas necesidades de financiación le llevaron a aceptar el encargo de El padrino (The Godfather, 1972) . Pese a sus reticencias, la adaptación de la novela de Mario Puzo (que no gustaba nada a Coppola) alcanzó un éxito inimaginable que la acabará convirtiendo en un superventas. La película combina violencia, valores y lealtad dentro de una familia mafiosa italo-americana. El padrino, con su historia, el estudio de caracteres y el retrato de la sociedad, conserva el estilo tradicional del género de gángsters y, a la vez, renueva el modo de hacer estas películas. 

Con el dinero pudo producir American Graffiti (1973) de su amigo Lucas. En 1974, escribió, dirigió y produjo la magnífica La conversación (The Conversation) , con objetivos más artísticos, al estilo de los autores europeos. 

A pesar de su buena acogida crítica, fue un desastre económico y, para salir del fracaso, Coppola dirigió ese mismo año El padrino II (The Godfather II), que no alcanzó el éxito de la primera parte pero que es posiblemente aún más penetrante e intensa. Se trata de una de las mejores secuelas de la historia del cine. 

En 1979 dirigió la barroca y siniestra Apocalypse Now , adaptación libre de la novela de Joseph Conrad El corazón de las tinieblas trasladada al conflicto de Vietnam, y en la que volvió a trabajar con Marlon Brando. Como productor impulsó el film de Kurosawa Kagemusha (1980). 

El descalabro económico de Corazonada (One from the Heart, 1982) le obligó a liquidar su productora y a dedicarse desde ese momento a dirigir por encargo, pese a lo que logró ser autor de obras muy apreciables. La adaptación de las novelas de la autora juvenil Susan Hinton Rebeldes (The Outsiders) y La ley de la calle (Rumbling Fish, ambas 1983) , la segunda rodada en blanco y negro, le permitió recuperar el pulso fílmico. 

The Cotton Club (1984) volvió a ser una película con insuficiente resultado en la taquilla y ello acrecentó el estigma de Coppola de ser un director muy caro y con poco rendimiento comercial. Gracias a la ayuda de George Lucas, ahora un hombre muy rico, Coppola pudo abordar de nuevo un proyecto personal, Tucker: un hombre y su sueño (Tucker: The Man and his Dream, 1988) pero tampoco la taquilla la respaldó y ello acentuó su mala situación económica. 

Tras negarse durante años, finalmente accedió a abordar El padrino III (The Godfather III, 1990), a cambio de un sueldo astronómico y una participación en beneficios. 

Su heterodoxo acercamiento a Drácula, de Bram Stoker (Bram Stoker's Dracula, 1992) sí que fue muy rentable y ello le permitió convertirse en viticultor, uno de sus sueños. Siguió produciendo filmes muy desiguales, entre otros de directores como Tim Burton, Kenneth Brannagh, Walter Salles o su hija Sofia Coppola, y dirigiendo películas de encargo como la correcta Legítima defensa (The Rainmaker, 1997) o Tetro (2009), filmada en Argentina. 

Francis Ford Coppola representa uno de los empeños más genuinos por hacer cine de autor dentro de la maquinaria de los grandes estudios en las ultimas décadas. En el camino queda un balance con obras muy importantes y otros intentos menores, incluyendo algunos fracasos. A cambio de ello, Coppola ha logrado plasmar en algunas obras su visión, en la medida en que pudo controlar las condiciones de producción, creando un cine innovador e inquietante para la visión reaccionaria de la vida y la sociedad que tiene un amplio sector de su país, y lo que constituye el sello Coppola por excelencia, su capacidad de narrador y su maestría como cineasta. 

Francis Ford Coppola creó su productora American Zoetrope para sus propios proyectos y para producir los de otros directores, como Win Wenders que dirigió París, Texas (1982). Coppola pretendía hacer algunas películas comerciales para invertir lo ganado en otras más personales, pero las pérdidas contraídas con la película Corazonada (One from the Heart, 1981) hundieron su empresa. Un año antes, La United Artists también se dió el batacazo con La puerta del cielo (Heaven´s Gate) de Cimino. 

En la comedia destaca el actor, escritor y director Woody Allen con una fecunda obra original que, influenciado por grandes creadores como Bergman, aborda obsesivamente temas de su mundo interno, de relación de pareja, el sexo, la muerte y dios, desde una óptica muy personal. Su universo se muestra en películas como Annie Hall (1977) , Manhattan (1978) , Hannah y sus hermanas (Hannah and Her Sisters, 1986) y Delitos y faltas (Crimes and Misdemeanors, 1988) y tantas otras, ya que es un realizador muy prolífico. 

Manhattan es una película dirigida y protagonizada por Woody Allen, estrenada en 1979. Obtuvo dos nominaciones a los Óscar. 

La película describe la vida de Isaac Davis (Woody Allen), un escritor de chistes para televisión, que ha pasado los cuarenta y que, tras dos fracasos matrimoniales, se entera de que su última esposa (Meryl Streep) publica un libro con los detalles de su vida sexual, mantiene una relación con una joven de diecisiete años llamada Tracy (Mariel Hemingway), pero se enamora de Mary Wilkie (Diane Keaton), amante de su mejor amigo Yale (Michael Murphy). Isaac Davis (Allen), de más de cuarenta años de edad, es escritor de chistes para la televisión. Tras conocer dos fracasos matrimoniales, mantiene una relación con una joven de diecisiete años llamada Tracy (Mariel Hemingway), pero se enamora de Mary Wilkie (Diane Keaton), amante de su mejor amigo, Yale (Michael Murphy). Su última esposa (Meryl Streep) tiene ahora una relación de pareja con una mujer, y está a punto de publicar un libro con todo tipo de detalles sobre la vida sexual de Isaac. 

Según Allen, la idea de Manhattan se origina de su amor por la música de George Gershwin. Escuchando uno de los álbumes del compositor pensó, “esto sería una cosa hermosa para hacer… una película en blanco y negro… una película romántica”.

Allen ha dicho que Manhattan era “como una mezcla de lo que intentaba hacer con Annie Hall e Interiores”. También ha dicho que su película se ocupa del problema de la gente que intenta vivir una existencia decente en una cultura contemporánea obsesionada por lo material, admitiendo además que él mismo podría concebir dar todas sus posesiones a caridad y vivir en circunstancias mucho más modestas. El origen de la película se remonta a una noche cuando Woody Allen estaba cenando con el director de fotografía Gordon Willis; en medio de la cena comenzaron a hablar sobre hacer una película acerca de la ciudad que tanto amaban y de experimentar sobre el blanco y negro. 

De esta película Woody Allen diría: Siento verdadera pasión y una gran devoción hacia la ciudad de Nueva York y creo que en la película se la ve de la forma más hermosa que se ha visto nunca en el cine. Cuidamos mucho la fotografía y creo que es realmente impresionante. Filmada en blanco y negro como una declaración de amor a la ciudad de Nueva York. La película es una mirada sarcástica sobre las relaciones de pareja en la clase intelectualoide neoyorquina (escritores y periodistas, principalmente), lo que sirve asimismo para establecer el perenne tributo de Allen a Nueva York, y más concretamente al distrito metropolitano de Manhattan.

La música, de George Gershwin, está interpretada por la Orquesta Filarmónica de Nueva York dirigida por Zubin Mehta y por la Orquesta Filarmónica de Búfalo dirigida por Michael Tilson Thomas.Fue aclamada tanto por el público como por la crítica, posiblemente porque hasta cierto punto evocaba la cinta Annie Hall, dado que es la historia de un romance conflictivo narrada con mucho ingenio.El guion, original de Woody Allen y Marshall Brickman, fue traducido al español por José Luis Guarner, publicado por Tusquets en 1981 y reeditado posteriormente.  

Steven Spielberg (1946) puede presumir de tener una de las filmografías más exitosas , sino la que más, de todos los tiempos. 

Varios de sus títulos se cuentan entre las películas más taquilleras de la historia del cine. Este interesante registro procede de la combinación de un talento casi innato para el cine (empezó a dirigir desde niño, con su propia familia) con una intuición proverbial a la hora de detectar (o provocar) las apetencias en el público. Si a esto se le suma su considerables aptitudes como narrador fílmico y el respaldo de la industria hollywoodiense, se obtiene como resultado un auténtico hombre de cine, capaz de poner de moda en todo el mundo dinosaurios o extraterrestres, al tiempo que sensibilizar a la opinión pública sobre las consecuencias del racismo a través de películas de hondo calado, más propias del cine de autor que del cine estrictamente comercial. Bueno, eso para sus (muchos) partidarios ya que una parte de la crítica le acusa de manipulador y de exceso de sensiblería. 

Pero ni siquiera Spielberg ha escapado al sabor del fracaso . Entre sus numerosos éxitos hay algunos títulos que no alcanzan una nota aceptable en un cineasta de su calado: Loca evasión (The Sugarland Express, 1974), El imperio del sol (Empire Of The Sun, 1987), Always (1989), Amistad (1997) o A.I. (2001), bien por una mala concepción, bien por no haber contactado con el público, figuran entre sus obras de menos prestigio. Pero, más allá de estas excepciones, sólo cabe hablar de éxitos y reconocimientos. 

Su primer gran acierto, tras su excitante debut con la brillante road movie El diablo sobre ruedas (Duel, 1971) , fue Tiburón (Jaws, 1975), una película bien narrada y con ritmo, que le preparó el terreno para la realización de Encuentros en la tercera fase (Close Encounters of the Third Kind, 1977), película de extraterrestres que fue nominada al Oscar a la Mejor Dirección. 

La década de los 80 es, seguramente, la época de plenitud del cineasta. En 1981 comenzó la saga de aventuras de Indiana Jones, con En busca del arca perdida (Raiders of the Lost Ark, 1981), a la que seguirían Indiana Jones y el templo maldito (Indiana Jones and the Temple Of Doom, 1984) e Indiana Jones y la última cruzada (Indiana Jones and the Last Crusade, 1989), todas con Harrison Ford como explorador infatigable, un personaje compuesto de dureza y ternura. 

Entre una entrega y otra de Indiana Jones, Spielberg tuvo tiempo de rodar E.T. el extraterrestre (E.T.: The Extra-Terrestrial, 1982), inolvidable cuento en el que un curioso extraterrestre trata de entender el mundo de los humanos utilizando como cicerone a un niño.

El color púrpura (The Color Purple, 1985), uno de sus mejores dramas, que ahonda en la trágica existencia de una mujer negra, y El imperio del sol (Empire of the Sun, 1987), historia sobre los campos de concentración japoneses de la II Guerra Mundial en la que no acertó con el tono. 

Tras Always y Hook (1991), dos filmes fallidos, Spielberg quiso darse garantías definitivas de que su nombre pasaría por derecho a una de las primeras páginas de la Historia del cine, y realizó la sorprendente Parque Jurásico (Jurassic Park, 1993), donde explotó a fondo los efectos especiales. 

Considerado un cineasta de cine de aventuras, quiso demostrar su capacidad para temas más trascendentes en La lista de Schindler (Schindler's List, 1993), con la que Spielberg no consiguió convencer a todos los escépticos sobre la calidad artística de su cine. La película, planteada como reconstrucción histórica de dramáticos episodios de exterminio nazi, contiene todo tipo de recursos, y obtuvo por fin la consideración de la Academia, que la galardonó con 7 Oscar (entre ellos Mejor Director y Mejor película). 

De su última etapa, tras los incomprensibles tropiezos de Amistad (1997) y A.I. (2001), sólo explicables por prestar más atención a su faceta de productor (creó la productora Dreamworks), cabe destacar Salvad al soldado Ryan (Saving Private Ryan, 1998), irregular pero impactante película sobre la II Guerra Mundial, cuyas primeras secuencias ofrecen un tratamiento de las escenas bélicas tan realista como desconocido hasta entonces, aunque su supuesto mensaje antibélico queda diluído por un inevitable patrioterismo. 

Su sombrío acercamiento a la venganza de Israel en Munich (2006)  gustó a sus críticos pero indignó a sus seguidores más convencionales (y al estado judío) por la crudeza de su planteamiento. También decepcionó, pese a su éxito en la taquilla, su adaptación de La guerra de los mundos (War of the worlds, 2005).

Spielberg, que es junto con James Cameron el realizador más rentable de la historia, es asimismo un activo productor, campo en el que ha mostrado siempre cierta predilección por los filmes de aventuras y ciencia-ficción como Los Goonies, las sagas de Regreso al futuro, los Gremlins y los Tiny Toons, Men in Black y un largo etcétera. Pero también ha apoyado filmes de Akira Kurosawa o Clint Eastwood. 

El independiente 

Robert Altman continuó con sus obras corales, iniciadas en 1975 con Nashville, con estudios en profundidad de muchos personajes, como El juego de Hollywood (The Player, 1991) y Vidas cruzadas (Short Cuts, 1993), basada en textos de Raymond Carver, y que refleja la pérdida de valores de la sociedad. En Gosford Park (2001) realiza un minucioso examen de la rígida organización social en la Inglaterra de principios del siglo XX. 

David Lynch, que había iniciado un estilo vanguardista con Cabeza borradora (Erasehead, 1976) (13), dirigió en 1980 El hombre elefante (The Elephant Man (14), una producción muy lograda. Después, tras las inclasificables cintas de culto Terciopelo azul (Blue Velvet, 1985) y Corazón salvaje (Wild at Heart, 1990), dirigió la serie de televisión Twin Peaks. 

Considerado un actor menor, Clint Eastwood empezó a dirigir en los 70 sin hacer demasiado ruido pero se consolidó con dos filmes de impacto, el logrado retrato del músico Charley Parker en Bird (1988) (15) y Sin perdón (Unforgiven, 1992) (16), un western revisionista, lírico, violento y amargo. La buena acogida comercial de sus películas de los 90 como Los puentes de Madison (The Bridges of Madison County, 1995) le permitirá abordar proyectos más personales posteriormente. 

En 1984 aparecía la impresionante Sangre fácil (Blood Simple) de los hermanos Joel y Ethan Coen, con la que iniciaban una de las propuestas más originales del momento, que siguió con Muerte entre las flores (Miller´s Crossing, 1990), Barton Fink (1991), Fargo (1996)  y El hombre que nunca estuvo allí (2002) . 

Tim Burton desmostró su extraordinaria sensibilidad e imaginación en películas como Eduardo Manostijeras (Edward Scissorhands, 1990) y Ed Wood (1994) (20). Con Batman (1989) y Batman Returns (1992) plasmó, tomando elementos del expresionismo alemán y de Blade Runner, la estética de buena parte de la ciencia-ficción de final de siglo. 

Otro independiente es Quentin Tarantino, que causó bastante revuelo con Reservoir Dogs (1991) y Pulp Fiction (1994), películas de gansters con mucha violencia y humor negro, muy personales y de dirección agresiva y desenvuelta, deudora de Scorsese (22) y de Kubrick. 

Wayne Wang y Paul Auster dirigieron la admirable Smoke (1994), sobre los buenos sentimientos y el placer de compartir. 

Comerciales con Calidad 

Milos Forman dirigió Ragtime (1981), una obra coral sobre la época de la música ragtime. Con Érase una vez en América (Once Upon a Time in America, 1984), una épica película de gansters, con una cámara sublime, estupendos decorados y una interpretación impresionante, Sergio Leone demostró que era mucho más que un director de spaghetti-westerns. 

Proveniente del cine independiente, Susan Seidelman tuvo éxito comercial con Buscando a Susan desesperadamente (Seeking Susan Desperately, 1985), lo que la introdujo en la industria. 

Terrence Malick, tras llamar poderosamente la atención con Malas tierras (Badlands, 1973) (23) y Días del cielo (Days of Heaven, 1978), realizó una película atípica de guerra, La delgada línea roja (The Thin Red Line, 1998), que destacaba la naturaleza en relación con los personajes y sus sentimientos, junto a la destrucción que la guerra produce en ambos. 

Independientes 

Jim Jarmusch es autor de un cine independiente, tierno y encantador que fue una bocanada de aire fresco en el panorama USA. Stranger Than Paradise (1984), Down By Low (1986), Mystery Trains (1989) y Night On Earth (1991) le valieron un estatus de director de culto. Posteriormente la extraña Dead Man (1995) y, sobre todo, Ghost Dog (1999) sobre un moderno samurai americano, le mantuvieron en la cima del cine indie. 

 Martha Coolidge con El precio de la ambición (Rambling Rose, 1991) y John Sayles con Pasión Fish (1992) son otros autores independientes. 

 En los noventa continuaron los movimientos por un cine experimental, ahora apoyado por nuevas tecnologías, pero se mueve más en los circuitos relacionados con el arte.