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martes, 16 de febrero de 2021

El aura



Ponía en la carátula Bielinsky. Y era el responsable de Nueve Reinas, la película que tenía antes mis manos. Por aquellos días comenzaba a traicionar al VHS, que hasta ese momento había sido mi fuente material para ver películas en mi reproductor. Pero lo cierto es que unos días antes acababa de comprarme un reprodutor de DVD y estaba por pasarme de un formato a otro. Tenía que elegir películas y las que compré en mi kiosko, el que regentaba Maleni, eran entre otras Manhatan Sur y esta de Nueve Reinas. 

Bielinsky y Nueve Reinas, ¿quién era éste?  y ¿de qué iba la película?  Ese día traicioné definitivamente al formato. Pero conocí la obra de Bielinsky. Obra cinematrográfica corta compuesta por dos películas, la citada y El aura.

El aura es una película argentina de 2005 dirigida por el bonaerense Fabián Bielinsky fallecido de forma repentina tras un infarto a la edad de 47 años que únicamente nos dejó dos películas, dos auténticas joyas, la enorme Nueve Reinas (2000) y esta que he visto El aura estrenada en 2006, un año antes de su muerte en Sao Paulo. 

Nos dejó algunos cortos que fueron premiados como El péndulo (1980) y La espera (1983), una carrera publicitaria y como asistente de dirección trabajando junto a directores argentinos como Miguel Pérez en el documental La República perdida II (1986), al igual que con Carlos Sorín (La eterna sonrisa de New Jersey, 1989), Marco Bechis (Alambrado, 1991), Eliseo Subiela (No te mueras sin decirme a dónde vas, 1995), Mario Levin (Sotto voce, 1996), Daniel Barone (Cohen vs. Rosi, 1998), y Alejandro Azzano (El secreto de los Andes, 1999) y escribiendo algún guion como el de La sonámbula , recuerdos del futuro(1999), que dirigiría Fernando Spiner. 

En el 1999 finalmente obtuvo financiación para un guion que le rondaba desde hacía varios años y que se estrenó en agosto del 2000 con el título de Nueve reinas. Cuatro años después rodaba El aura 

La película es una producción hispano-argentina y francesa en la que están implicados Ariel Saúl, Victor Hadida y Cecilia Bossi por medio de las productoras Patagonik Film Group, Tornasol Films,  Davis Film Productions.

La película surge de la mente de Fabián Bielinsky y cuenta con la música de Antonio Vivaldi y Lucio Godoy , la fotografía de Checco Varese y el montaje de Alejandro Carrillo Penovi y Fernando Pardo.

El reparto lo encabeza Ricardo Darín como Esteban, Dolores Fonzi como Diana ,  Pablo Cedrón como Sosa , Walter Reyno como Montero, Nahuel Pérez Biscayart como el joven Julio, así como  Jorge D'Elía como Urien y Alejandro Awada como otra taxidermista, Sontag. 

La película comienza con la presentación de Esteban (Ricardo Darín) un taxidermista de naturaleza taciturna, reservada y epiléptica, casado con una mujer por la que no siente nada ( es mutuo) y que realiza trabajos esporádicos para el Museo de las Ciencias de la capital. 


Cuando llega se ha de someter a una valoración por parte de la dirección para revisar su obra como analizar como están los fondos. Junto a él en el Museo se encuentra con otro taxidermista, Sontag (Alejandro Awada )  que ha de realizar la misma función.

Tras eso le entregan un cheque y mientras están en el banco para cobrarlo, Esteban le cuenta a su compañero de profesión, Sontag, una fantasía sobre un posible robo en el banco. Su idea es que existe el atraco  perfecto y  milimétricamente planificado. Sontag descreído lo escucha y finalmente le invita a acomparle a un viaje al Oeste del país, al pie de monte andino para ir de caza. Pero Esteban rechaza la invitación.  

No obstante, cuando llega a casa descubre que su mujer lo ha abandonado aceptando entonces la invitación de Sontag para cazar. Tras un viaje en avión intentan hospedarse en un hotel Casino al que habitualmemte va Sontag, pero , al ser puente, uno de la dirección del hotel  le informa que hay unas cabañas aisladas ideal para cazadores que son propiedad de un hombre llamado Carlos Dietrich, un guía de caza de la zona

Tras recorrer una buena cantidad de kilómetros llegan al lugar y allí encuentran a un joven, llamado Julio (Nahuel Pérez Biscayart) que les dice que está todo ocupado, pero tras al momento una chica Diana (Dolores Fonzi) les dice que sí, que hay alojamiento.

Tras eso Sontag pregunta su tienen también un rifle para Esteban, y se lo alquila igualmente. Mientras que esperan a la entrega ven unas fotos de Diana con un hombre mucho mayor  y cuando le preguntan si es su abuelo, ella comenta que no pues se trata de Dietrich su esposo. 


Tras eso salen a cazar a un área poco transitada. Cuando Sontag trata de disparar sobre un ciervo, Esteban pisa una rama que, al producir el chasquido, hace que el animal escape. Sontag sospecha que  éste lo hizo a propósito porque a Esteban no le gusta matar animales, así que discuten. Tras eso se separan  y mientras Sontag se vuelve a la cabaña, Esteban decide quedarse solo en el bosque, donde sufre una crisis epiléptica. Tras recuperarse apenas de la crisis cree ver a un ciervo en su mira telescópica (que luego huye), pero al que mata accidentalmente es a Dietrich. 


Al acercarse al lugar ve a Dietrich en el suelo, muerto, y tras él una cabaña que está cerrada a cal y canto. Con muchas dudas sobre cómo explicar lo que ha pasado, regresa a la cabaña donde se alojaba, descubriendo que Sontag está preparando todo para marcharse pues a su mujer ha sufrido un ataque ¿al corazón?, pero Esteban decide quedarse unos días más. Tiene que pensar que hacer con el cuerpo.

Al llegar la noche se acerca otro coche. Sus dos ocupantes preguntan a Diana por Dietrich y ella comenta que no está en la casa. Ellos, molestos , por no estar allí y haber recorrido centenares de kilómetros para llegar a ese recóndito lugar les da un recado a la chica: que Sosa (Pablo Cedrón) y Montero (Walter Reyno), volverán mañana y que lo esperan sin falta.

Mientras tanto vemos que Diana no parece preocupada. A la mañana siguiente Esteban vuelve al lugar del crimen y con una llave que se ha agenciado en la casa, abre la cabaña. Allí encuentra oculta fichas de un casino, una pistola, pero también lo que parece el diseño de un robo. Estebán con su memoria visual se queda con todos los lugares referenciados: el Casino, Cerro Verde, El Edén, así como una serie de nombres, unas cifras y un plano con indicaciones diversas como el recorrido de un camión blindado y de los guardias, además de la suma de dinero que transportaría por ser un fin de semana largo ($ 2.500.000). 

En primer lugar vuelve a la casa, alquila una furgoneta a Diana, que le cede la suya y se dirige a Cerro Verde. Nada más llegar al lugar ve que el principal edificio de esa localidad es una fábrica que casualmente en ese momento la están robando. Logra presenciar el fallido atraco desde la distancia. En el tumulto interior observa como un hombre herido huye por una ventana. Decide seguirle . Cuando ve que se baja el moribundo lo amenaza, pero de inmediato muere y le arrebata la llave del cofre del camión. Descubre que se trata de  Vega, uno de los nombres señalados en el diseño del robo y que , al parecer, es un criminal que se infiltraría como guardia de seguridad en el blindado que pretendía robar Dietrich.  

Igualmente Esteban recuerda haber visto referencia del lugar del que saldrá el dinero, un Casino, que en un fin de semana largo y coindente con el fin de temporada llegará a los 2,5 millones de dólares. Así que se hace con las fichas del casino y una corbata dela colección existente y nada más entrar se pone a apostar,... y a perder. Un señor mayor y elegante se le acerca y le dice que si puede ir con él a un apartado . Se presenta como Urien (Jorge D'Elía ) y describe lo impropio de lo que está realizando Esteban. Está jugando con unas fichas descatalogadas , al que únicamente se le permitía a Dietrich, y lleva las corbatas de esa persona. Cuando se ve rodeado por la verdad, Esteban le dice que está allí en nombre de Dietrch. Como tiene la memoria que tiene sabe que el guía tiene una deuda con él y que el mismo Urien le ha pasado la información, pues con el robo saldará su deuda con él. Tras ser , medianamente convincente en sus mentiras le permite salir.

Una vez fuera decide ir a El Eden, descubriendo que en prostíbulo en mitad de una carretera de poco tránsito en el que suelen pararse los dos habituales custodios del camión blindado. Observando  y mientras toma un café, descubre que en el interior hay una niña y junto a los dibujos de la pared deduce que uno de los guardias de seguridad tiene una hija con una prostituta y que semanalmente se para allí para verla. 

Tras eso vuelve a casa y allí descubre que ya han llegado Sosa y Montero que resultan ser los delincuentes con quienes planeaba el asalto a un camión blindado que lleva las ganancias de un casino de la zona. Además, estos albergan muchas dudas sobre Esteban pues tiene el móvil de Dietrich y que Esteban había sustraído del cadáver, no le queda más remedio que fingirse cómplice del muerto y decir que éste había huido contándole todo.  

Como Esteban tenía memoria fotográfica, relata y detalle el  plan para asaltar el blindado. Habiendo descubierto Julio, el cuñado de Dietrich, que los vigilantes del camión se detenían siempre en un bar-prostíbulo de carretera llamado "El Edén"-donde uno de ellos tenía incluso una hija pequeña, deciden que ese es el sitio para asaltarlo. Los demás, Sosa, Montero y el mismo Julio,  tras escuchar el detallado plan que va desvelando y desmenuzando  Esteban acceden a dar el golpe en los términos previstos. 


Mientras tanto Esteban sigue ocultando a Diana el paradero de su marido que lleva tres días ilocalizable. Como se siente en deuda con ella, especialmente al ver los moratones que le chica tiene en la espalda, tras llevarla en la furgoneta a una Iglesia de una localidad cercana, ella le cuenta como pasó del maltratador de su padre a manos de otro maltratador por medio de un matrimonio con el que ella esperaba huir de los golpes. Pero, no fue así. 

Llega el día del robo y antes de salir al Casino Esteban le dice a Diana que Dietrich no volverá nunca. Tras eso marcha el taxidermista al Casino. Lo que Esteban ignoraba era que Vega ocuparía el cargo de tercer guardia, ya que, al llevar una suma de dinero mayor a la acostumbrada, colocaban un guardia extra en el interior del blindado. Cuando el asalto está ya en marcha se entera por medio de Urien de la existencia de este tercer guardia (y de que el guardia no sería uno de ellos infiltrado), trata de comunicárselo a Sosa, a Montero y a Julio, que se encuentran robando el camión. Pero, en ese momento, sufre un ataque epiléptico. 

Cuando se recupera, viaja hasta el bar "El Edén" y observa a Sosa abriendo la puerta del blindado. Esteban le grita, pero Sosa no lo escucha y, al abrir la puerta, el tercer hombre les dispara desde el interior, iniciándose un tiroteo, tras el cual Montero resulta herido. 

Tras la confusión, uno de los guardias huye herido, pero Sosa lo sigue y remata y hace lo mismo con el otro. Para su sorpresa, el tercer guardia se ha escondido dentro del vehículo ante la impotencia de Julio y de Sosa.

Una vez consumado la toma del camión, pero con la imposibilidad de abrirlo Esteban propone conducir a los delincuentes hasta el escondite de Dietrich en el bosque, dado que allí hay herramientas con las cuales pueden abrir el blindado. 

A una orden gestual de Montero, Sosa asesina a Julio e intenta hacer lo propio con Esteban, pero se le habían acabado las balas, sí que lo conduce al interior de la cabaña, donde había balas del calibre 9 mm para poder matarlo. 

Lo que Sosa no sabe es que había una pistola escondida tras una cabeza disecada y que Esteban saca en una descuido de Sosa y le dispara, hiriéndolo. Esteban sale y huye al bosque. 

Entre los árboles Esteban vuelve a tener un desvanecimiento, el aura, y aunque con dudas logra alcanzar a Sosa. 


Cuando regresa al camión, Montero y el vigilante restante, que había quedado encerrado en el vehículo, se han muerto desangrados. 

Esteban vuelve a la casa de Dietrich. Descubre que Diana también ha huido, así que Esteban se lleva a su perro y regresa a su actividad de taxidermista, acabando así la película 


La película fue filmada en Bariloche,  en los exteriores del Museo de La Plata  en la ciudad de La Plata, en Comodoro Rivadavia  y en el Museo Argentino de Ciencias Naturales en Buenos Aires.  

La película tras estrenarse obtuvo en una recaudación de $1,785,981 dólares y recibió críticas ampliamente positivas en los medios escritos de Buenos Aires. En Clarín Pablo Scholz,  la calificó “excelente” y destacó que Bielinsky “(...) hizo todo bien” y describe a la obra como “(...) un filme inteligente, con complicaciones en el último momento, pero que nadie espere una vuelta de tuerca final a-lo-Shyamalan.” Y oncluía es columnista de Clarín que la película era "Atrapante, 'El aura' combina thriller y drama con impresionantes resultados. Darín, en la mejor labor de su carrera." 



Diego Batlle en  La Nación  elogió la “(...)   actuación prodigiosa” por parte de Ricardo Darín, y concluyó que “A nivel técnico, el film es impecable en todos y cada uno de sus rubros”, mientras analizó que Bielinsky confirmaba su don “para hacer películas extremadamente personales y con un impecable acabado industrial, una historia contada con íntima vocación cinéfila y, al mismo tiempo, con genuina aspiración popular.” 

Horacio Bernades del diario Página 12  se preguntaba a su mismo si quizás Bielinsky logró crear una obra maestra, y confesando que “(...) es imposible determinar qué es más brillante: el guion o la puesta en escena, las escenas de acción o las íntimas, el trabajo de cámara o el montaje, las actuaciones o el tratamiento de tiempos y espacios.” 


Ya en España Daniel Andreas de Filmaaffinity escribió sobre ella que la película es "Seca, lacónica y de ritmo pausado pero tenso, la última pelicula del malogrado Bielinsky es un bien rodado thriller, con un pie en su variente psicológica y otro en la más convencional del “atraco perfecto”. Mientras el recurso de la enfermedad del personaje resulta artificioso y previsible, juegan a su favor la sólida dirección, el buen uso del peculiar entorno natural en que se desarrolla la acción, y el poco convencional manejo de una apuntada historia de amor. Darín, como siempre, espléndido". 

Javier Ocaña en El País sostuvo que era  "Una obra cautivadora, oscurísima y cargada de talento." 

En las páginas de ABC Oti Rodríguez Marchante: defendía que "El arranque es espectacular (...) Progresa la acción lentamente (...) consigue que el espectador nunca se sienta tranquilo (...) "  


La película llegó a ser pre-candidata al Óscar para Mejor Película Extranjera y fue presentada en el Festival de Sundance siendo nominada a Premio del Jurado - Drama (World Cinema) y al  Festival de San Sebastián siendo nominada a la Concha de Oro.

La película ganó el Balance de Bronce en el II Encuentro Argentino-Europeo de Pinamar del año  2005, y arrasó en los premios Cóndor de Plata 2006, donde se llevó seis nominaciones (mejor película, director, guion original, actor, fotografía y sonido) llevándose los de ​ (mejor película, mejor director, mejor guion original ) . El director los recogió el 26 de junio de 2006.


Poco después fue a Brasil para rodar un spot publicitario. Allí falleció de un infarto Bielinsky, un hombre que sufría de hipertensión, mientras dormía, a los 47 años de edad. 

Dejaba atrás una obra corta, pero de impresionante calidad tanto por sus guiones, complejos e inteligentes, en los que nada queda desligado o al azar. Algo que es visible igualmente en su puesta en escena. Un detalle a inicio de la película cuenta planifica el robo en el banco, es todo una genialidad. Se perdió uno de los grandes. Con el Darín tocó el cielo. Como he leído en un tweet "Las joyas que podría haber filmado...¡Que bárbaro, la puta madre! ". Dejó dos grandes obras, mayúsculas. DEP. 



domingo, 7 de septiembre de 2014

Nueve reinas, con guión y con acento



Me da igual lo que diga la RAE. Ha apostado por una estupidez y no aceptaré, ni esto, ni sólo, ni otras majaderías. Lo importante es el guión. Lo dijo tres veces Bielinsky y no la tilde. Aquí también fue importante el acento. En este caso, el argentino. 

Como había oído hablar de ella estaba interesado y compré el DVD. Ese año, salvo la primera parte de ESDLA , no hubo opción a casi nada desde mayo. Ir al cine y colocar a mi mayor me era una misión casi imposible. Así que cuando la vi se lo pedí a mi vendedora de prensa habitual. Realmente no sabía lo que compraba. Sabía que es una película argentina. De esta cinematografía a inicios del siglo XXI apenas conocía obras que no estuviesen firmadas por Luis Puenzo (La historia oficial) o Adolfo Aristarain (Un lugar en el mundo o Martín Hache) o Alejandro Agresti con su El viento se llevó lo que de 1998. 

Pero tras ver Nueve reinas me resultó sorprendente en todos los sentidos. Por lo pronto era una película sorprendentemente buena, con grandes actuaciones, sobre todo la de Gastón Pauls y un cada vez más introducido en el cine patrio Ricardo Darín.

Se trata de una película del año 2000 escrita y dirigida por Fabián Bielinsky y nos cuenta la historia de dos estafadores que se conocen por casualidad y deciden unirse para trabajar juntos. Se trataba de una pequeña producción en la que estaban presentes Pablo Bossi y Cecilia Bossi que invirtieron en ella 1´3 millones de dólares, realizada por Patagonik Film Group e Industrias Audiovisuales Argentinas S.A. y que tuvo la fortuna de ser distribuida internacionalmente por Buena Vista International. Fabián Bielinsky, el director, pero también el guionista contó con la ayuda de Martín Hodara en la dirección.

En otros aspectos técnicos estuvieron Marcelo Camorino (fotografía), Sergio Zottola (montaje), César Lerner (música), Osvaldo Vacca (sonido), Lucila Robirosa (maquillaje), Marcelo Salvioli (Mejor dirección artística), y Monica Torschi (vestuario).

En cuanto al elenco de actores y actrices contó con un florido ramillete que lo borda. El grupo lo encabeza Gastón Pauls como Juan, Ricardo Darín como Marcos. Los acompañantes son Leticia Brédice como Valeria, la hermana de Marcos, Tomás Fonzi como Federico, Oscar Núñez como Sandler, Ignasi Abadal como Vidal Gandolfo, Elsa Berenguer como Berta, Leo Dyzen como el experto filatelista, así como unos convincentes Graciela Tenenbaum como empleada de la tienda, María Mercedes Villagra como otra de las empleadas de la tienda, Gabriel Correa como el encargado de la tienda, Pochi Ducasse como la Tía, Luis Armesto como el Mozo del bar, Ernesto Arias como encargado del bar, Amancay Espíndola como Señora del ascensor, Isaac Fajm como el kiosquero, Jorge Noya como Anibal, Carlos Lanari como el hombre del celular, Alejandro Awada como Washington, Roly Serrano como Castrito, Celia Juárez como la Sra. Sandler, Antonio Ugo como D'Agostino, Roberto Rey como el Texano, Carlos Falcone como el amante de Berta, Ricardo Díaz Mourelle como Ramiro, Ulises Celestino como Botones, Norberto Arcusin como el funcionario, Gabriel Molinelli como Cárdenas.


Un día temprano, muy de mañana, Marcos (Darín) observa como Juan (Pauls) tima éxitosamente a una cajera de una tienda de 24 horas. Al producirse el cambio de cajera, intenta repetir el truco con la siguiente cajera, pero en este caso es atrapado intentando realizar el mismo truco. Cuando el encargado lo para, Marcos, otro cliente se entromete, argumentando ser policía, y lleva a Juan fuera de la tienda.

Una vez que están en la calle, Marcos revela ser un estafador que le explica que nunca debe hacer dos veces el mismo truco en un mismo establecimiento. Marcos , que acaba de perder a su compañero de estafas, conocido como el turco, invita a Juan a ser su compañero de crimen.

Juan se muestra escéptico al principio, pero luego acuerda trabajar con Marcos por un día, después de que este lo impresionara con algunos métodos de estafa sofisticados tales como conseguir unos pesos de una presunta tía o desayunar por la cara en un bar o llevarse un periódico.


Desde este momento, Marcos y Juan conforman una atractiva pareja de maestro-aprendiz que desprende una significativa química, en la que Juan muestra su habilidad como estafador consiguiendo que una chica le entregue un bolso en un ascensor.

A Marcos le gusta la compañía de Luis, pues además este tiene cara de buena persona. De repente al dúo recibe un llamado de la hermana de Marcos, Valeria, con la que tiene rotas todas las relaciones desde que éste estafara a su hermana y hermano con la herencia de sus abuelos.

Con todo Valeria le pide por favor vaya al moderno hotel en donde ella trabaja, y le informa que un viejo de nombre Sandler, la ha reconocido como hermana de Marcos y le ha pedido que lo llame.
Sandler es un viejo estafador y antiguo compañero de fatigas de Marcos, se encontraba allí para hacer un negocio con unos sellos.

Como el anciano de 73 años había sufrido un ataque cardíaco y considera que es una oportunidad única, o de "una en un millón", para un negocio insiste en llamarle a Marcos. El negocio está en vender una colección de estampillas falsas de un valor de medio millón de dólares, las "nueve reinas", provenientes de la República de Weimar.

Sandler es especialista en la falsificación de documentos , billetes, etc. Una pariente suya le entregó el original, el la copió y pretender vender la magnífica copia como si fuera el original. Marcos accede a realizar el negocio, pero al enterarse de esta cifra, Juan, que necesita 70.000 pesos para sacar de la cárcel a su padre, le pide meterse en el negocio a Marcos, quien acepta su ayuda por 2.500 pesos.

El objetivo y la razón por la que Sandler está en el hotel es vendérselas a Vidal Gandolfo, un empresario español que estaba parando en el hotel y que se iría del país al día siguiente, "jugando" de esta manera con la premura.

Previamente, Marcos y Luis han de ir a buscar las estampillas a la casa de la anciana esposa de Sandler, Ésta, recelosa, no quiere dársela a Marcos, pero Juan se inventa una excusa sobre el motivo de su presencia vinculándola a su relación familiar con la provincia y con el rabino local. Ante esta familiaridad y relación casi espiritual la señora Sandler le deja pasar a él.

En este momento Juan extorsiona a Marcos para quedarse con una mayor parte del dinero, y llegan a la conclusión de que obtendría un 30%. Tras diseñar una estrategia de aproximación, Vidal y los estafadores se encuentran en los servicios.

Vidal se da cuenta que Marcos es un estafador vendedor de algo y no se cree la historia revelada vía telefónica ni la presencia de un supuesto policía o miembro de seguridad en los servicios. Pero el negocio propuesto le interesa a Vidal Gandolfo.

Tras ir a la habitación y contar con la presencia de un experto filatélico, negocian la venta de los sellos por 450.000 dólares. A la salida se les aproxima el filatélico que les pide un dinero, pues se ha dado cuenta del negocio y quiere sacar tajada del dinero del gallego.

Tras rechazar al experto y cuando van por la calle, de repente dos tironeros en una motocicleta roban el maletín con las estampillas, y luego, presuponiendo que el contenido de éste carecía de valor, las arrojan al río. Juan y Marcos, desesperados y deprimidos, no saben cómo harán para completar la transacción. Marcos concluye que deberán conseguir las verdaderas estampillas, que están en manos de Berta, la hermana de Sandler. La buscan y negocian con ella.

Pero ella, que quiere desprenderse de la mismas, ya que eran de su difunto marido, sabe de su valor y se niega a comprarlas por una cantidad más elevada. Arreglan con ésta, y ante su joven amante, comprarlas por 250.000 dólares.

Más tarde, Marcos, hablando sobre el negocio con Juan, le comenta que, aunque él tiene 200.000 dólares, están faltando 50.000 dólares. La reacción de Juan es violenta, creyendo que Marcos le quiere engañar a él. Tras romper su relación, vemos a Juan caminando por las calles de Buenos Aires, reflexionando sobre el negocio.

Posteriormente, Marcos que está en su “despacho”, un bar, ve entrar a Luis que lleva el dinero suficiente para comprar a Berta las "nueve reinas". Con ellas se dirigen al hotel para realizar la venta.

Una vez allí, Vidal Gandolfo conociendo la relación fraternal entre Marcos y Valeria quiere añadir un detalle al acuerdo. Le pide a Marcos incluir a su hermana en el paquete, debe de entregar los sellos ella y pasar la noche con él, indicando que de lo contrario no realizaría el negocio.

Debido a esto, Marcos le comenta acerca del asunto a Valeria, quien decide acceder una vez con una condición: que este sea capaz de contarle la verdad sobre su proceder frente a la herencia de sus abuelos, a su inocente hermano menor, Federico, quien lo idolatra. Federico, quien trabaja en la cocina del hotel escucha indignado como su hermano se pulió la herencia y como los problemas surgidos en Italia, según el contaba, era parte de unja milonga más del quilombo vital en que Marcos le había metido a los hermanos.

Llega la entrega. Juan y Marcos quedan en el hall del hotel esperando. Ambos intranquilos. Marcos por el dinero y Juan por ella, pues se ha quedado perplejo con ella. Una vez amanecido y tras tomar un café, Marcos ve a Vidal Gandolfo.

Finalizado el acuerdo, Vidal Gandolfo, efectivamente, ha entregado a Valeria un maletín. En su interior está el pago. Pero el mismo es un cheque de caja certificado por un banco. Esto no le gusta a Marcos, pero, afortunadamente, tiene un amigo que trabaja allí.


Antes de salir al banco Marcos realiza una llamada y Juan besa a Valeria, quien se queda sorprendida. Mientras se dirigen allí, asaltan a punta de pistola a la pareja. El asaltante es, aparentemente, un acreedor de Marcos. Sin embargo, mientras demanda la cartera da un dato que debe desconocer: el pago en cheque. El asaltante es un estafador llamado Castrito, y realiza un intento frustrado de quitar a Juan del negocio. Juan se da cuenta y se lo echa en cara a Marcos que reconoce su error.


Luego llegan al Banco Sudamericano de Crédito para cambiar el cheque, pero se encuentran con una gran manifestación. Marcos se acerca a la puerta y encuentra a un conocido, Cárdenas, quien le comenta que los once integrantes del directorio se escaparon con 135.000.000 de pesos. La gente se abalanza sobre la puerta, y posteriormente Marcos, lastimado, se acerca a Juan, quien está aparentemente triste.

Marcos, desesperado y en un ataque de ira, corre hacia el banco, mientras Juan parece deambular por la ciudad Juan llega a una nave en una quinta. Entra en la misma se encuentran reunidos los dos "ladrones" que manejaban la moto desde la que robaron las falsas Nueve Reinas, y alguna persona más que hemos visto en la película, así como jugando una partida de cartas Sandler, Vidal Gandolfo, el experto filatélico y Berta.

Esta última, mientras le dice a Juan que "llamó el muchacho del banco, el que te pasó el dato del cierre, dice que hay bronca y que va venir a cobrar más tarde". Finalmente en un sofá Juan se reclima. Sobre el mismo está Valeria a la que besa. Valeria le recuerda a Juan que hoy era su primer aniversario como pareja. Juan, quien ha intentado recordar a lo largo de la película una canción de Rita Pavone, que encantaba a su padre, de repente se acuerda de la melodía de aquella canción que trató de recordar durante todo el día.

Se desvela así que Valeria había ideado toda aquella farsa, con la ayuda de Juan y de los otros, para recuperar el dinero de la herencia y, de paso, vengarse de su hermano Marcos. Punto y final.

Nueve reinas está dirigida por el por aquel entonces debutante Fabián Bielinsky, quien, aunque había escrito los guiones de varias películas y dirigido cortos basados en historias de Borges y Cortázar. Bielinsky había trabajado como asistente de dirección durante casi 20 años, en 400 comerciales y largometrajes, y tuvo que sortear dificultades surgidas de su supuesta "falta de experiencia". El triunfo su guión en el concurso "Nuevos Talentos" de 1998 fue lo que le aseguró el contrato de producción de su proyecto.

La película se filmó en la Ciudad de Buenos Aires, en Puerto Madero y en el bonaerense Hotel Hilton  con un presupuesto de apenas 1.300.000 dólares, por lo que Bielinsky, para evitar que se perdiera un sólo minuto de filmación, se aseguró de que los actores tuvieran el tiempo suficiente para ensayar.

Ricardo Darín indicó: "Muchas de las escenas se filmaron en la calle, entre peatones, sin escenografía. Íbamos a un lugar, nos subíamos a una camioneta, filmábamos la escena y nos íbamos. La verdad es que fue muy bueno que estuviéramos tan bien preparados".

Bielinsky dijo que prefiere "Filmar todo en plano secuencia o en un único decorado, o con dos personajes solos, o todo en tiempo real" argumentando "En el caso de Nueve reinas, la consigna era contar todo a lo largo de un día, lo cual me permitía concentrarme exclusivamente en las acciones concretas de los personajes".

En cuanto al punto de vista, éste indicó que mantuvo una cierta forma de "objetividad", que a su vez determinaba necesariamente una neutralidad en el tono, con respecto a lo que estaba contando, procurando no hacerlo en ningún momento desde los ojos de alguno de los personajes, ya que de lo contrario "se hubiera desarmado la propia lógica de la película".

El único pero de toda a historia es la presencia del padre de Juan en la visita de este a la cárcel. ¿No hubiese sido mejor un flash back?

La película cuenta con un guión finalizado en 1997 y que , a mediados de 1998, resultó ganador, entre 354 guiones, del concurso "Nuevos Talentos", presidido por el reconocido ex realizador y docente José Martínez Suárez, y realizado por la productora Patagonik Films, que poco tiempo antes había rechazado este mismo guión: la clave de la película. Para Bielinsky para que una película funcione necesitan tres cosas, "guión, guión y guión". Éste, lleno de inesperadas sorpresas, permite hacer lucir tanto a los personajes principales como a los secundarios.

El guión fue escrito en un lapso de ocho semanas. Además Bielinsky dijo que "el guión está muy trabajado para convertir al espectador en víctima. A mí me gusta que, bajo determinadas reglas y herramientas nobles, me engañen, me distraigan y me den pistas falsas".

El guión se destaca por sus giros argumentales y los conflictos surgidos entre los protagonistas, cuya gran actuación sumada a la fluidez de los diálogos permite mantener al público pendiente del más mínimo detalle.

La película se estrenó en Argentina el 31 de agosto de 2000, siendo uno de los grandes éxitos cinematográficos del año, con más de un millón y medio de espectadores y recaudando más de 5 millones de pesos.

La película fue proyectada en varios festivales de cine, tales como el Festival de Telluride, de los Estados Unidos; el Festival Internacional de Cine de Toronto, de Canadá; el Medellín de Película, de Colombia; el Festival Internacional de Portland, de los Estados Unidos; el Festival de cine de Múnich, de Alemania; y el Festival Internacional de Noruega, de este país.

Nueve reinas participó igualmente en Francia en febrero de 2002, en el Festival de Cine Policíaco de Cognac obteniendo un enorme éxito.

En España tuvo su estreno en el verano de 2001. Tras su estreno fue nominada a veintinueve premios internacionales, de los cuales ganó veintiuno.

Está considerada la obra maestra de su director y un clásico insoslayable de la cinematografía de su país. Roger Ebert, al que le dijo que le gustó mucho el guión de la película, escribió "Una y otra vez, dando vueltas y más vueltas, en una elegante y astuta comedia inexpresiva. Una trama, no importa cuan ingeniosa sea, sólo hace avanzar la película; lo que realmente importa es su contenido. Nueve reinas está bendecida con una galería de personajes bien dibujados, incluyendo al del alcohólico y sus dos guardaespaldas; la viuda avara, dueña de las "nueve reinas", y su joven novio teñido de rubio, y Valeria la hermana de Marcos, quien se opone a los sórdidos amigos de su hermano y su vida de crimen, pero que duerme con Gandolfo para poder compartir el botín”.

El crítico Francois Robien se refirió al filme como "Un brillante ejercicio de manipulación cinematográfica. Es una de las sorpresas del comienzo de la temporada". Mientras que la BBC clasificó al filme con cuatro estrellas, describiéndolo como "una bienvenida adición al género".

El crítico de cine Edward Guthmann, del San Francisco Chronicle, también analizó positivamente a la película e indicó que los actores realizaron una buena interpretación, escribiendo, "A paso rápido y sorprendentemente sin fallas, Nueve reinas está muy bien interpretada por un numeroso elenco, en particular Darín (El hijo de la novia) como un estafador casi perfecto de barba candado. David Mamet realizó varias películas sobre estafadores estafados, como Heist, House of Games y The Spanish Prisoner, pero Bielinsky, en su debut como director, lo hace ver fresco y renovado".

En España Carlos Boyero por entonces en El Mundo decía que "Nueve reinas es ingeniosa, cínica, y un pelín tramposa. Sirve, entre otras cosas, para que descubramos al extraordinario Ricardo Darín." Por su parte, María Casanova en Cinemanía hablaba de que era una "Premiadísima película sobre timadores de poca monta (...) Sencillamente impresionante".

La película fue la base del remake estadounidense Criminal, dirigido por Gregory Jacobs y protagonizado por John C. Reilly y Diego Luna en 2004. E incluso Nueve reinas inspiró también al remake indio Bluffmaster, dirigido por Rohan Sippy. 

Desde 2001, Nueve reinas ha tenido muchos reconocimientos internacionales, especialmente en su país ( Asociación de Críticos de Cine de la Argentina concedíéndole el Condor de Plata en múltiples campos, Festival Internacional de Cine de Mar del Plata) en otros países latinoamericanos (Festival de Cine de Bogotá, Festival de Lima, Premios MTV Latinoamérica de México a lo mejor del cine, Gran Premio de Cine de Brasil). 

También fue galardonada en Europa (British Independent Film Awards, Festival de Biarritz de Cines y Culturas de América, Festival de Cine del Sur en Noruega, Festival de Trieste, Festival de Cine Policíaco de Cognac en Francia y Fantasporto en Portugal ), en Estados Unidos (AFI Fest, Premios de la Sociedad de Críticos de Cine de Phoenix, Festival Internacional de Portland) y en España (Muestra de Cine Hispanoaméricano de Lleida, Premios Sant Jordi) . Con todo no fue seleccionada para el mejor film extranjero en los Óscar del año 2001. 

Quizás por este motivo la película no tuvo más recorrido , con todo hay que reconocer que estamos ante una muy buena película, muy trabajada, bien dirigida en la que brilla con luz propia no sólo los actores, también "el guión, el guión, el guión".