sábado, 16 de junio de 2012

Era de Iowa, no de Minessotta






Saving Private Ryan , o sea, lo que conocemos en España como Salvar al Soldado Ryan, y en algunos países de Hispanoamérica como Rescatando al Soldado Ryan es una película bélica épica estadounidense estrenada en 1998 y ambientada en la invasión de Normandía durante la Segunda Guerra Mundial. Dirigida por Steven Spielberg y escrita por Robert Rodat, el filme destaca por su recreación gráfica y muy realista de la guerra, especialmente en sus intensos 27 primeros minutos, que narran el desembarco y asalto aliado de la playa de Omaha el 6 de junio de 1944. 

Recuerdo que cuando la vi en el cine casi bajaba la cabeza y me metía detrás de la butaca de la persona que había delante con tal de que no me dieran las balas. El sonido en el cine era literalmente impactante. 

La historia continúa con Tom Hanks como el capitán John H. Miller del ejército de los Estados Unidos y siete hombres (interpretados por Tom Sizemore - Sgto. Michael Horvarth -, Edward Burns - Richard Reiben- , Barry Pepper - , Daniel Jackson-, Vin Diesel- Adrian Caparzo- , Giovanni Ribisi - Irwin Wade-, Adam Goldberg - Stanley Mellish- y Jeremy Davies - Cabo Timothy E. Upham-) en busca de un paracaidista, el soldado James Francis Ryan (Matt Damon) de Iowa, que ha perdido a sus tres hermanos en combate. En papeles menores se encuentran Ted Danson - Cap. Fred Hamill- y Paul Giamatti -Sgto. William Hill-. 

Rodat concibió la historia de la película en 1994, cuando vio un monumento dedicado a ocho hermanos que murieron en la Guerra de Secesión e imaginó un símil narrativo ambientado en la Segunda Guerra Mundial. El guión fue presentado al productor Mark Gordon, quien se lo entregó a Hanks, y finalmente llegó a Spielberg, que decidió dirigirlo. La premisa de la película se basa libremente en el caso real de los hermanos Niland. 
Salvar al soldado Ryan fue bien recibida por el público, obtuvo buenas críticas y ganó varios premios a la película, el reparto y el equipo. También obtuvo una importante recaudación en taquilla, que ascendió 481,8 millones de dólares estadounidenses en todo el mundo y la situó como la película norteamericana más taquillera del año. La Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas norteamericana nominó la película a siete premios Óscar y Spielberg ganó su segunda estatuilla al mejor director, aunque de estos datos los puntualizaremos más al final. 

En la mañana del 6 de junio de 1944, comienzo de la invasión de Normandía, los soldados estadounidenses se preparan para desembarcar en la playa de Omaha. Nada más abrirse las puertas de sus lanchas de desembarco son recibidos por un feroz fuego de artillería alemana, que masacra a muchos de los soldados en cuanto ponen pie en tierra. 

El capitán John H. Miller, al mando de la compañía Charlie del 2º Batallón de Ranger, sobrevive a la carnicería del desembarco, reúne a un grupo de soldados para intentar penetrar las defensas alemanas y abre brecha para avanzar desde la playa. Cosa que finalmente consiguen. En el Departamento de Guerra de los Estados Unidos, en Washington D. C., el general George Marshall es informado de que tres de los cuatro hermanos de la familia Ryan han muerto en combate con pocos días de diferencia y que su madre recibirá los tres telegramas de pésame en el mismo día. También tiene noticia de que el cuarto hermano, soldado James Francis Ryan de la compañía Baker, 506º Regimiento de Infantería de Paracaidistas, 101.ª División Aerotransportada, está desaparecido en combate en algún lugar de Normandía. Tras leer a su equipo una carta que Abraham Lincoln envió a la señora Bixby, que perdió cinco hijos en la guerra, Marshall ordena que Ryan debe ser encontrado y enviado a casa inmediatamente en cumplimiento de la política de único superviviente del ejército estadounidense. 
En Francia, tres días después del Día D, Miller recibe la orden de localizar a Ryan. Reúne a seis hombres de su compañía (Horvath, Mellish, Reiben, Jackson, Wade y Caparzo) y otro más – un traductor encargado de las transmisiones y sin experiencia de combate- de la 29ª División de Infantería (Upham) que habla francés y alemán, para servir como traductor. 

Sin información sobre el paradero de Ryan, Miller y sus hombres se trasladan a la localidad de Neuville, donde se encuentran con un pelotón de la 101. Tras entrar en la localidad bajo una fuerte lluvia, y ayudar a una chica a petición de sus padres, Caparzo es herido en el pecho por un francotirador alemán y muere desangrado sin que nadie pueda acudir en su ayuda. Jackson localiza al tirador enemigo y lo abate cuando Caparzo ya ha fallecido. Poco después encuentran un soldado de nombre James Frederick Ryan, de Minnesota, aunque rápidamente se percatan de que no es su hombre, sobre todo por que su hermano es un niño. En su búsqueda también se topan con un miembro de la compañía Charlie- un aviador que perdió el control de su avión debido al peso del vehículo de un tipo con estrellas- , quien les informa que su zona de aterrizaje fue Vierville y que las compañías Charlie y Baker tenían el mismo punto de reunión. Una vez allí localizan a un amigo de Ryan que les dice que el hombre al que buscan está defendiendo un puente de gran importancia estratégica sobre el río Merderet en la localidad de Ramelle. 
En camino a Ramelle el grupo de búsqueda se topa con un nido de ametralladora alemana y Miller decide aprovechar la oportunidad para neutralizar la posición, cercana a una estación de radio y que ya ha acabado con varios soldados aliados, a pesar de los recelos de sus hombres. 

En el asalto, Wade, el médico del grupo, es mortalmente herido. El único superviviente alemán es objeto de la ira de todos los miembros del grupo estadounidense, menos Upham, que protesta ante Miller por dejar que sus hombres intenten fusilarlo. 
El soldado alemán suplica por su vida y Miller lo deja marchar con los ojos vendados y con órdenes de entregarse a la primera patrulla americana que encuentre. 
Tras ver a su capitán dejar marchar a un enemigo, Reiben – el chico de Brooklyn- deja de confiar en su liderazgo y le comunica su decisión de desertar del grupo, lo que le lleva a enfrentarse con Horvath. Ambos discuten acaloradamente hasta que Miller decide intervenir revelando su situación personal anterior a la guerra, cuando era maestro de literatura inglesa, una información que había llevado a los miembros del grupo a realizar apuestas. Reiben decide finalmente quedarse. 
De camino a su destino el grupo de soldados americanos llega finalmente a las afueras de Ramelle, donde, en una emboscada a un vehículo semioruga alemán, se encuentran con tres paracaidistas estadounidenses. Uno de ellos es James Francis Ryan. 
Ya en Ramelle, Ryan es informado de la muerte de sus tres hermanos y de la misión para devolverlo a casa, en la que han muerto dos soldados americanos. Se conmueve enormemente con la muerte de sus hermanos, pero siente que no es justo regresar a casa y le dice a Miller que le diga a su madre que «cuando me encontraron, estaba aquí con los únicos hermanos que me quedaban», mirando al pequeño grupo de soldados con el que defendía el puente de Ramelle mientras pronunciaba las palabras. 

Miller decide tomar el mando de todos los hombres y defender el puente con los pocos medios a su alcance. Los alemanes llegan a la localidad con una fuerza de más de cincuenta hombres y con el apoyo de vehículos blindados. 

Los americanos han preparado la defensa e infligen numerosas bajas a los germanos, incluida la destrucción de dos tanques con bombas lapa hechas con calcetines y grasa, pero en la lucha mueren la mayoría de componentes del grupo de Miller, incluidos Jackson, Mellish y Horvath. 
En el intento por volar el puente para evitar su caída en manos alemanas, Miller es mortalmente ametrallado. Los americanos resisten el feroz ataque alemán hasta que, justo antes de la llegada al puente de un tanque enemigo Tiger I, un avión estadounidense P-51 Mustang lo sobrevuela y destruye, seguido de más aviones aliados e infantería americana con tanques M4 Sherman que consiguen derrotar a los alemanes. 
Upham, que se había quedado rezagado y escondido en una trinchera, encañona a varios soldados germanos, entre los que se encuentra el soldado que dejaron marchar tras tomar el nido de ametralladora – y al que identificamos como el asesino de Mellish- , y lo mata de un tiro tras ser testigo de cómo disparaba a Miller. Ryan, Reiben y Upham son los únicos supervivientes de la batalla de Ramelle. 
Ryan acude a ayudar al moribundo Miller y éste le dice sus últimas palabras: «James… hágase usted digno de esto… merézcalo». 

Ya en la actualidad, Ryan, un veterano de la Segunda Guerra Mundial, y su familia visitan el Cementerio Estadounidense de Normandía en Colleville-sur-Mer, Francia. Ryan se acerca a la tumba de Miller y le pregunta a su esposa si ha sido un buen hombre, digno del sacrificio de Miller y su grupo de soldados, tras lo que hace un saludo militar a la cruz bajo la que reposa su salvador. Una bandera de barras y estrellas pone fin a la magnífica película. 
Sabemos que Robert Rodat concibió el argumento de la película tras ver en 1994 un monumento dedicado a la memoria de soldados muertos en combate en el que figuraban los nombres de ocho miembros de la misma familia fallecidos en la Guerra de Secesión americana como ya hemos indicado. Inspirado por esta historia, Rodat investigó sobre el tema y decidió escribir una historia similar en el contexto de la Segunda Guerra Mundial. 
La fecha fijada para iniciar el rodaje fue el 27 de junio de 1997. Antes de comenzar el rodaje los protagonistas del filme, Edward Burns, Barry Pepper, Vin Diesel, Adam Goldberg, Giovanni Ribisi y Tom Hanks, tuvieron que prepararse sus roles de soldados durante diez días en un campo de entrenamiento.

Spielberg había mostrado con anterioridad su interés en la Segunda Guerra Mundial con las películas 1941, El imperio del Sol, La lista de Schindler y la saga de Indiana Jones. Tras Saving Private Ryan Spielberg también produjo dos grandiosos y muy recordadas miniseries para televisión ambientadas en la Segunda Guerra Mundial, Band of Brothers (Hermanos de Sangre) y The Pacific, junto a Tom Hanks. Preguntado sobre ello, el cineasta estadounidense dijo: «Creo que la Segunda Guerra Mundial es el evento más importante de los últimos cien años; el destino de los Baby boomers e incluso de la Generación X estuvo vinculado a ella. Más allá de esto, yo siempre he estado interesado en la Segunda Guerra Mundial. Mis primeras películas, las que hice con catorce años, eran filmes de combates tanto aéreos como terrestres. Desde hace años buscaba una buena historia sobre la Segunda Guerra Mundial para rodarla, y cuando Robert Rodat escribió Saving Private Ryan, la encontré.» 
Las escenas del Día D fueron filmadas en la playa Ballinesker de Curracloe, condado de Wexford, Irlanda. El rodaje dio comienzo el 27 de junio de 1997 y duró dos meses. Algunas escenas se filmaron en Normandía, en el Cementerio Estadounidense de Normandía de Colleville-sur-Mer y en Calvados. Otras escenas fueron rodadas en localizaciones inglesas, como el British Aerospace en Hatfield (Hertfordshire), Londres, el Thame Park de Oxfordshire y Wiltshire. La producción también se iba a desarrollar en Seaham, en el condado de Durham, pero el gobierno británico lo impidió. 

Saving Private Ryan ha sido alabada por la crítica por su realista retrato de la Segunda Guerra Mundial, y en particular por la secuencia inicial del desembarco en Normandía, que fue votada como la «mejor escena de batalla de todos los tiempos» por la revista Empire y fue puesta en el número uno del ranking «50 grandes momentos de cine» de la revista TV Guide. La secuencia costó 12 millones de dólares e implicó a 1500 extras, algunos de los cuales eran miembros de las Reserve Defence Forces irlandesas. Miembros de grupos locales de reconstrucción histórica como el Second Battle Group formaron parte del reparto interpretando a soldados alemanes. Además, intervinieron de veinte a treinta personas con amputaciones reales para interpretar a los soldados estadounidenses mutilados durante el desembarco. Spielberg no realizó un guión gráfico de la secuencia, pues quería reacciones espontáneas y que «la acción me inspire sobre el lugar donde colocar la cámara». 

Me ha interesado enormemente la representación histórica de las acciones de la compañía Charlie, encabezada por su comandante, el capitán Ralph E. Goranson, también se recreó en la secuencia de apertura. La escena y los detalles de lo acaecido esa mañana en la playa normanda son muy fieles a la realidad, como el mareo sufrido por muchos soldados, el gran número de bajas entre los aliados al desembarcar de las lanchas y las dificultades para reagruparse en la playa que experimentaron las unidades. Los detalles contextuales de las acciones de la compañía también se mantuvieron, caso de los nombres en código del sector Charlie y los adyacentes. La película también ilustra cómo el desembarco fue seguido de la limpieza de los búnkeres y el sistema de trincheras alemanes en la parte alta de los acantilados, algo que no era parte de los objetivos de la misión de la compañía Charlie pero que se realizó tras ascender los acantilados de Pointe du Hoc. 

Las lanchas de desembarco usadas incluyeron doce auténticas de la Segunda Guerra Mundial, diez LCVP y dos LCM, usadas por las compañías Ranger británicas para tomar las playas durante la operación Overlord. Los cineastas usaron también cámaras subacuáticas para mostrar mejor a los soldados siendo ametrallados bajo el agua y el estallido de las balas en el agua y la explosión inmediata de sangre. Se necesitaron cuarenta barriles de sangre falsa para teñir el agua de mar y simular la masacre causada entre los soldados estadounidenses. Este empeño por el realismo fue más difícil de conseguir en los vehículos blindados alemanes de la contienda, pues muy pocos han sobrevivido en condiciones operativas. Los tanques Tiger I que aparecen en la película fueron copias montadas sobre el chasis de los más antiguos paro funcionales tanques soviéticos T-34 como son aquellos que aparecen en el parque berlinés junto al monumento al soldado soviético. Los dos vehículos que aparecen como Panzers intentaban simular cazacarros Marder III. Uno fue creado para la película reutilizando el chasis de un tanque Panzer 38(t) de fabricación checa, similar en configuración al original Marder III, y el otro fue un vehículo de asalto sueco SAV m/43, que también empleó el chasis del 38(t) y recibió cambios cosméticos para la ocasión. 

Inevitablemente los cineastas se tomaron algunas licencias artísticas por el bien del drama. Una de las más famosas es el retrato de la 2º División Panzer SS Das Reich como el enemigo de los estadounidenses en la batalla final de Ramelle. La 2ª SS no combatió en Normandía hasta julio, y lo hizo en Caen contra los británicos y los canadienses, cien kilómetros al este. Por otra parte, los puentes sobre el río Merderet no fueron un objetivo de la 101ª División Aerotransportada, sino de la 82ª División Aerotransportada como parte de la misión Boston. Mucho se ha hablado de varios «errores tácticos» por parte tanto de los alemanes como de los americanos en la batalla final de la película, a lo que Spielberg respondió que en muchas escenas optó por sustituir las tácticas militares y la estricta precisión histórica en favor del efecto dramático ya que al fin y al cabo esto es solo cine, entretenimiento y no un documental. 

Para lograr un tono y una calidad fiel a la historia, así como para reflejar la época en que se ambienta el filme, Spielberg volvió a colaborar con el director de fotografía Janusz Kaminski, afirmando que «al principio, los dos sabíamos que no queríamos que esto pareciera una extravagancia Technicolor sobre la Segunda Guerra Mundial, sino más bien como imágenes de un noticiero de los años 1940, muy desaturado y antiguo.» Kaminski quitó el revestimiento protector de las lentes de las cámaras para acercarse lo máximo posible a la tecnología de filmación de la época de la Segunda Guerra Mundial. Explicó que «sin la capa protectora, la luz penetra y comienza a rebotar, lo que la hace más difusa y más suave sin perder el foco.» El director de fotografía completó el efecto global pasando el negativo por el bleach bypass, un proceso que reduce el brillo y la saturación del color. La sincronización del obturador fue de 90 o 45 grados para muchas de las escenas de batalla, cuando lo habitual son 180 grados. Kaminski aclara «de esta manera logramos un cierto staccato en los movimientos de los actores y cierta nitidez en las explosiones, lo que lo hace un poco más realista.». Estas cuestiones técnicas sobre la imagen son las que llegan en algún momento a mis hijos a preguntarse si la película es en color o no, más aún nosotros que la hemos visto en el original VHS. 

Salvar al soldado Ryan (Saving Private Ryan) fue distribuida por DreamWorks en Norteamérica y por Paramount Pictures internacionalmente. Como resultado de la adquisición de DreamWorks por Paramount en 2005, ésta se ha quedado también con los derechos de distribución en Norteamérica (aunque a través de la división DreamWorks). 

La película fue un éxito de crítica y público y se le atribuye una importante contribución al resurgir del interés en Estados Unidos por la Segunda Guerra Mundial. Viejas y nuevas películas, videojuegos y novelas sobre este conflicto disfrutaron una renovada popularidad tras su estreno. El uso en la película de los colores desaturados, cámaras en mano y ángulos reducidos han influido profundamente en películas y videojuegos posteriores, tipo Call of Duty, Modern Warfare o Metal of honor que tanto gustan a mis hijos . 


Salvar al soldado Ryan fue estrenada en 2463 salas de cine el 28 de julio de 1998 y recaudó 30,5 millones de dólares en su primer fin de semana. En total amasó 216,5 millones en Norteamérica y 265,3 en el resto del mundo, haciendo ascender su recaudación mundial hasta 481,8 millones, marcando con ello la mayor recaudación de una película estadounidense ese año. Yo participé de la misma pues fui a verla a los desgraciadamente desaparecidos cines del Zoco. 

La película fue recibida de manera muy positiva por la crítica, con muchos elogios a sus realistas escenas de combates y a la actuación de los actores, pero también señalando como puntos negativos el guión y el hecho de ignorar la contribución de muchos otros países al Día D en general y a la playa de Omaha en particular. El ejemplo más claro de esto último es que durante la auténtica invasión de Normandía el 2º de Rangers desembarcó de barcos británicos y fue llevado a las playas por lanchas de la Real Armada británica. En la película se los ve en barcos tripulados por guardacostas de los Estados Unidos y procedentes de un barco americano, el USS Thomas Jefferson (APA-30). Sin embargo, esta crítica negativa no la comparto, insiste esto es cine, y además no fue para nada general, pues otros críticos reconocieron el intento del director por hacer una película «americana». La cinta no fue estrenada en Malasia porque Spielberg se negó a cortar las escenas más violentas, aunque en ese país fue finalmente editada en DVD en 2005. Muchas asociaciones de críticos, como el Círculo de críticos de Nueva York y el de Los Ángeles, eligieron esta película como la película del año. 

Roger Ebert le otorgó cuatro estrellas de cuatro y la definió como «una experiencia poderosa» y Vicente Molina Foix dijo que Saving Private Ryan era «la película que mejor y más conmovedoramente nos muestra lo que es ese infierno llamado guerra.» 

El cineasta Quentin Tarantino ha expresado su admiración por la película de Spielberg y la ha citado como un influencia para su filme Inglourious Basterds de 2009. En una entrevista, Tarantino le dijo a su entrevistador, Samuel Blumenfeld, «Spielberg está haciendo algo sin precedentes con la apertura de esta película. Cuando presencias la secuencia del desembarco, ya nunca más podrás ver de la misma manera El día más largo o The Big Red One de Samuel Fuller… Saving Private Ryan hace que me dé cuenta de algunas situaciones del cine bélico que yo no podía hacer por mi cuenta. La idea de que cuarenta hombres en un barco son exterminados en segundos por una andanada de fuego de ametralladora es terrible. ¿Puedes imaginar la carnicería más atroz? Obviamente, sí. Salvo que a través de esta escena, estás persuadido para asistir a la peor masacre de la historia. La secuencia de lucha a cuchillo entre un soldado americano y uno alemán hacia el final de la película es tan notable como el desembarco. Odio las películas bélicas que muestran a un soldado matando a sus oponentes sin sudar, como si fuera insignificante. Si yo estuviera luchando por mi pellejo, creo que sería un poco más difícil. Es complicado matar a alguien, se necesita sudar y, aun así, no tienes garantías de conseguirlo. Spielberg realizó admirablemente esta escena con esa dimensión.» 

Sin embargo, el director de cine Oliver Stone acusó a la película de promover «el culto a la Segunda Guerra Mundial como una guerra buena», y la ha situado junto a películas como Gladiator y Black Hawk Down las obras de Ridley Scott, que él cree que se hicieron bien pero que inadvertidamente contribuyeron a la preparación de los estadounidenses para la invasión de Irak de 2003. Bueno, esa es la opinión de Stone que, evidentemente es tan enrevesada y maquiavélica que yo comparto. Otras críticas vinieron por parte de veteranos de la batalla como ocurrió con el actor Richard Todd, que actuó en El día más largo y fue de los primeros soldados americanos que desembarcaron en Normandía, dijo que la película era «Basura. Exagerada».Otros veteranos de la Segunda Guerra Mundial, sin embargo, declararon que la película era la representación más realista de la guerra que habían visto jamás. 

La película es tan realista que algunos veteranos de combates del Día D y Vietnam salieron de los cines antes de terminar de ver la escena inicial del desembarco. Sus visitas a los psicólogos por el trastorno por estrés postraumático aumentaron tras el estreno de la película, y muchos psicólogos advirtieron que evitaran verla los veteranos «más psicológicamente vulnerables». 

Esta historia sobre la búsqueda del soldado Ryan fue nominada a once premios Óscar y ganó los de mejor fotografía, mejor sonido, mejor edición de sonido, mejor montaje y mejor director para Steven Spielberg, pero ¡oh sorpresa! no le concedieron el de mejor película, que fue a parar a la buena pero no grandiosa Shakespeare in love, lo que lo convierte en uno de las pocos filmes que gana la estatuilla de mejor director pero no de mejor película. 

La cinta también fue distinguida con los premios Globos de Oro a mejor película dramática y al mejor director, el BAFTA británica a los mejores efectos visuales y mejor sonido, el premio del Sindicato de Directores, el premio Grammy al mejor álbum de banda sonora, el Producers Guild of America Golden Laurel Award y el premio Saturn a mejor filme de acción o aventuras. En junio de 2008 el American Film Institute reveló su «Ten top Ten» (las diez mejores películas en diez géneros clásicos) tras realizar una encuesta entre 1500 personas de la comunidad creativa y Saving Private Ryan entró como el octavo filme en el género de «películas épicas». 

La película apareció en vídeo doméstico en mayo de 1999 con un estreno en VHS que ganó más de 44 millones de dólares. Yo lo obtuve de la colección del diario “El mundo” que se presentaba bajo el título genérico de La historia más grande jamás contada”. Y gracias a ella hemos descubierto que Ryan era de Iowa, y no de Minessotta.

La producción estuvo en manos de Mark Gordon Productions, DreamWorks, Paramount Pictures, Amblin Entertainment, Mutual Film Corporation. La distribución recayó DreamWorks SKG (Estados Unidos y Canadá) y la Paramount Pictures para el resto del mundo. El Presupuesto fue de 70.000.000 para la producción en dólares USA y destinaron otros 25.000.000 para el marketing, lo que alcanzó un montante de 90.000.000 US$ en total nada más y nada menos. Por último la recaudación pudo alcanzar un total de 481.840.909 dólares.¿sabemos por qué llaman a Spielberg, el “Rey Midas”?.

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