miércoles, 23 de noviembre de 2016

Insomnio


Ayer me fui a la cama "reventao" de sueño. El sueño podía conmigo de tal manera que tuve que dejar de ver la película en alguna ocasión. La película va del poder implacable y la mella que hace en nosotros el compañero de Morfeo. El que nos retira de reuniones, del sillón del salón, nos invita a dar un beso rápido a los hijos y a la mujer, e ir al cuarto de baño ya casi con los ojos cerrados, para, de inmediato, sacarnos el yo oculto que tenemos y que fluyan en los sueños amables y pesadillas, depende de lo que hayas cenado.

Terror me da padecer el insomnio, ese incómodo acompañante que nunca llego conmigo pero que en ocasiones, pocas la verdad, me ha afectado cuando he tenido "jet lag" y he tenido cuando en contadas ocasiones he aparecido por puntos cercanos al Círculo Polar Ártico. 

Recuerdo haber estado en Noruega en 1995 y cómo tras acostarnos alrededor de las dos de la mañana cuando caían las tinieblas de la noche en  poco más de una hora más tarde, serían las tres de la madrugada, el sol se encontraba sobre nuestras cabezas. Acostumbrarse a eso nunca es fácil. 

Sensaciones parecidas he sentido tanto en Suecia como en Rusia cuando el sol de medianoche se abre al norte y a las cinco de la mañana uno estaba algo más que despierto. 

En la película que he visto - y que he revisitado en este octubre de 2018- el protagonista debido tanto a las interminables horas de luz que hay en el pueblo vive en esa penumbra en la que sueño y realidad se dan la mano, aunque en su caso los fantasmas personales son los que aparecen y le impiden sentirse tranquilo. 

De todas las películas que he visto de Christopher Nolan posiblemente sea la más impersonal, la más académicas la menos representativa de su obra. En ella posiblemente lo más destacado sea el papel de un somnoliento de Al Pacino y el papel de malvado - sorprendente - de Robin Williams en una de sus últimas interpretaciones. Pero, lo cierto, es que la película no pasará a la historia de ninguno de los tres nombres propios citados hasta el momento. 

Insomnia o Insomnio como se le llamó en España es una película dirigida por Christopher Nolan en 2002, un thriller que se desarrolla en una pequeña comunidad de Alaska (Estados Unidos) al que llega un veterano policía de la ciudad de Los Ángeles (Al Pacino), últimamente involucrado en feos asuntos por asuntos internos , aunque de enorme prestigio dentro del cuerpo policial con el fin de ayudar en la investigación. 

La historia realmente es una adaptación de la película noruega Insomnia, protagonizada por el actor Stellan Skarsgård en 1997 y que fue dirigida por Erik Skjoldbjaerg , un thriller noruego con psicópata que pronto llamó la atención en Estados Unidos, siendo lo habitual en estos casos intentar que el mismo director ruede el remake, aunque en este caso no fue así y rodó Nación Prozac (‘Prozac Nation, 2001) que pasó sin pena ni gloria. 

Sin embargo, el encargo recayó en un director emergente como Christopher Nolan para rodar esta producción de encargo. 

Christopher Nolan contó para ello con la producción de Broderick Johnson, Paul Junger Witt, Andrew A. Kosove y Edward L. McDonnell con el apoyo de la productoras Alcon Entertainment más la productora Section Eight Productions, Witt / Thomas Productions y sobre todo la Warner Bros. Pictures que además se encargaría de la distribución. La película manejó un presupuesto estratosférico de $46.000.000. 

En este caso el guión fue de Hillary Seitz encargado de adaptar la historia de los helados paisajes noruegos que desarrolló inicial en la obra Insomnio de Nikolaj Frobenius y Erik Skjoldbjærga , pero ahora en el Estado más al norte de los Estados Unidos. A este se le unieron en el equipo técnico la música de David Julyan, la fotografía de Wally Pfister y el montaje de Dody Dorn 

El reparto lo encabezaba Al Pacino como el detective Will Dormer, Robin Williams como el escritor de novela negra Walter Finch y Hilary Swank como la agente Ellie Burr. Junto a ellos aparecen Martin Donovan como el detective Hap Eckhart, Maura Tierney como Rachel Clement, Paul Dooley como el jefe Nyback, Jay Brazeau como Francis, Nicky Katt como Fred Duggar, Larry Holden como Farrell, Kerry Sandomirsky como Trish Eckhart, Lorne Cardinal como Rich, Katharine Isabelle como Tanya Francke, Jonathan Jackson como Randy Stetz y Crystal Lowe como Kay Connell-.

La película empieza con la llegada a un aislado pueblo pesquero de Nightmute en Alaska de un hidroavión en el que van Will Dormer (Al Pacino), un veterano detective de Los Ángeles, junto con su compañero Hap (Donovan) para investigar el brutal asesinato de una chica, Kay Connell , de 17 años. Hay algo de ritual en el mismo pues tras ser asesinada fue lavada y se le hizo la manicura. 

A Will se le ve cansado y somnoliento, mientras que Hap está preocupado ya que en Los Ángeles queda pendiente un oscuro asunto que les incumbe a los dos y que está siendo investigado por asuntos internos. Durante el vuelo a Alaska, Eckhart revela que dará testimonio contra Dormer a cambio de inmunidad, a lo que Dormer responde que muchos criminales a los que ayudó a condenar usando pruebas cuestionables podrían quedar libres si se reabren sus casos. 

Nada más llegar son recibidos por una joven policía , la agente Ellie Burr (Hilary Swan) que admira el trabajo de Dormer al que conoció como conferenciante en la Academía de policía y que para ella es todo un modelo a seguir. Tras ello saluda a un viejo conocido el jefe de policía Nyback ( Paul Dooley ), quien ha pedido colaboración a su viejo colega, y se pone manos a la obra. 

Tras ir al forense y comenzar a deducir algunas cosas a la que se les suman el relato de lo ocurrido y va a la casa de la adolescente fallecida plantea que en el mismo puede estar involucrado su novio otro adolescente, aunque el lugar en que murió la chica, una cabaña , podría tener su importancia. 

De cualquier manera la agente Burr detecta el elevado grado de desorientación del detective que no percibe que son casi las diez de la noche aunque sea de día. La cabaña y lo que en la misma aparece involucra a un novelista solitario Walter Finch, (Robin Williams). 

Pero mientras los detectives están en su interior y analizar los accesos al embarcadero de la misma detectan movimiento así que nada más abrir el caso podrían casi cerrarlo. Sin embargo, cuando persiguen al hombre que estaba en el embarcadero el detective Donner, por causa de la niebla, confunde a su compañero con el asesino y dispara matando a su compañero, Hap. 

Debido al testimonio pendiente de Eckhart, Dormer cree que Asuntos Internos nunca creerá que el tiroteo fue un accidente, por lo que afirma que Eckhart fue asesinado por el sospechoso. No menciona que tiene la pistola de calibre 38. 

La agente Burr se encarga de la investigación de los disparos, y su equipo encuentra la bala calibre del calibre 38 que mató al oficial. Esa noche, Dormer sale a caminar por un callejón y dispara la pistola , la del calibre 38 sobre el cadáver de animal, luego recupera y limpia la bala. En el depósito de cadáveres, el empleado le entrega la bala embolsada extraída del cuerpo de Eckhart, pero ella no está familiarizada con su tipo. Dormer deja y cambia la bala del 38 por una bala de 9 mm del cuerpo de Eckhart. El detective está agotado por el insomnio que lo lleva al límite: ahora debe resolver el crimen y su propio error entre la falta de sueño, las alucinaciones , su atormentado pasado y por una investigación que puede cuestionar toda su actuación. 

Dormer comienza a recibir llamadas telefónicas anónimas del asesino, quien afirma haber visto a Dormer matar a su compañero. 

Cuando la policía se entera de que Kay era fanática del escritor local de crímenes Walter Finch (Robin Williams), Dormer irrumpe en el apartamento de Finch en la aldea cercana de Umkumiut . Finch al llegar a su casa, se da cuenta de que la policía está presente y escapa de Dormer después de una persecución. 

Dormer regresa al apartamento de Finch y planta el arma del calibre 38 para inculpar a Finch. Finch contacta con Dormer y organiza una reunión en un ferry. Finch quiere ayudar para hacer que las sospechas se dirijan al novio de Kay, Randy Stetz, así se quedará callado sobre el disparo de Eckhart a cambio. 

Dormer da consejos sobre manejo de interrogatorios policiales. Después de que Finch deja a Dormer en el ferry, le muestra al detective una grabadora que usó para grabar la conversación. 

Pero como ya hemos comentado poco a poco el asesino (Robin Williams) va poniéndose en contacto con el detective y comienza a contactarlo en secreto vía telefónica para hacerle ver que ambos son igual de asesinos y que tienen mucho en común y que no va a dejarse atrapar sin dar batalla, y chantajea al detective con la grabación desarrollada en el barco, quien culpa al asesino de la joven. 

Atormentado por la culpa que le provoca la muerte de su amigo y por las constantes llamadas nocturnas que le hace el criminal para no buscarlo y para que ninguno salga inculpado, el detective comienza a sufrir ataques de insomnio que perjudican su rendimiento en las pesquisas. 

Finch llama a Dormer y le dice que la muerte de Kay fue "un accidente": la mató de un golpe de rabia después de que ella rechazara sus avances amorosos e intentara besarla. 

Tras asesinarla limpió en parte el cadáver y la arreglo. Al día siguiente, Finch da falso testimonio en la comisaría de policía. 

Cuando Finch afirma que Randy tiene un arma, Dormer se da cuenta de que Finch ha descubierto su plan y la ha escondido en la casa de Randy. Randy es arrestado cuando el arma se encuentra en su casa. Finch le pide a Burr que venga a su casa del lago al día siguiente para recoger las cartas que evidencia que Randy abusó de Kay. Burr regresa a la escena del crimen de Eckhart y encuentra una carcasa de un arma de 9 mm, que entra en conflicto con el tipo de bala que apareció en el cuerpo de Eckhart. 

Ella lee los archivos de casos antiguos de las investigaciones en las que Dormer estuvo involucrado y se entera de que ha llevado un 9 mm, lo que la hace sospechar que le disparó a Eckhart. 

Mientras tanto, Dormer confía a la propietario del hotel, Rachel Clement, acerca de la investigación de Asuntos Internos que fabricó pruebas para ayudar a condenar a un pedófilo de quien estaba seguro de haber cometido un asesinato. 

Dormer se entera de que Burr ha ido a casa de Finch. Encuentra las cartas de Kay en el apartamento de Finch y se da cuenta de que Finch intenta matar a Burr. Se entera de que han ido a la casa del lago de Finch y se apresura a ir allí. 

En la casa, Finch golpea a Burr que la deja inconsciente justo cuando llega Dormer. Dormer está demasiado desorientado por la falta de sueño para luchar contra Finch. Burr se recupera y salva a Dormer, mientras que Finch escapa. Burr revela que sabe que Dormer disparó a Eckhart, y él admite que ya no está seguro de si fue un accidente. 

Desde su cobertizo, Finch les dispara con una escopeta, y Burr devuelve los disparos mientras que Dormer se acerca a la ubicación de Finch. Después de una pelea en la que los hombres intercambian armas , Finch dispara a Dormer con la pistola de 9 mm, y Dormer dispara y mata a Finch con la escopeta. Burr se apresura a atender a Dormer, que está herido de muerte, y lo consuela al afirmar que el disparo de Eckhart fue accidental, luego se mueve para tirar la carcasa de 9 mm y preservar el secreto y el prestigio de Dormer. Dormer , sin embargo, le dice que no cometa sus errores como policía para que no viva con sus fantasmas y que lo deje dormir,  acabando así la película. 

Insomnia se rodó durante un período de tres meses, de abril a junio de 2001. La escena aérea inicial se filmó en el glaciar Columbia cerca de Valdez, Alaska y el enfoque del hidroavión fue sobre el Canal de Portland cerca de Hyder, Alaska y Stewart. 

También se rodó en la Columbia británica convirtiendo la ciudad de Nightmute, en Alaska, lo que en realidad era Squamish y sus alrededores, sitos igualmente en la Columbia Británica . Las escenas del hotel, de la comisaría de policía, la escuela secundaria y la escena del cementerio funerario se rodaron allí. 

La escena donde Will Dormer le dispara a su compañero en la playa rocosa en la niebla fue filmada en Clementine Creek, en Indian Arm , en las afueras de Vancouver, Columbia Británica . También en la isla de Vancouver está lo que aparece como el pueblo de Umkumuit, donde se encuentra el apartamento de Finch y donde ocurre la escena de la caza de troncos, en concreto en Port Alberni.

Eso sí, la escena del camino de la cascada donde Dormer se dirige a la casa del lago de Finch y gira su auto 180 grados se filmó frente a Bridal Veil Falls en la carretera Richardson cerca de Valdez, Alaska . 

La escena final de la película en el ficticio Lago Kgun en la casa del lago Finch fue filmada en el extremo noroeste del Lago Strohn en el Parque Provincial Bear Glacier , a las afueras de Stewart, Columbia Británica . Para esta escena final, el equipo de filmación construyó la casa del lago y el muelle de Finch desde cero y luego la desmontó y la retiró después de que terminara la filmación a finales de junio de 2001. 

La película se estrenó el 3 de mayo de 2002 en el neoyorkino Festival de cine de Tribeca y , a partir de 24 de mayo de 2002 tuvo se estreno en los Estados Unidos. Fue un éxito de público consiguiendo unos 114 millones de recaudación.

Erik Skjoldbjærg , el director de la película original, dijo acerca de la reinterpretación de Nolan: "Bueno, no lo he visto en mucho tiempo, pero cuando lo vi por primera vez fue una experiencia muy extraña porque fue bastante cercana, estilísticamente, a la original. Me sentí afortunado de que sea una película inteligente, tan bien elaborada y de que haya un muy buen director manejándola, porque como una nueva versión creo que lo hizo muy bien y no hace daño a ningún original si una nueva versión está bien hecha. Así que sentí que tuve suerte de que Christopher Nolan se encargara de hacerlo ". 

En cuanto a las críticas señalar que, en general, la película gustó a pesar de ser un remake lo cual es llamativo. En este sentido, Roger Ebert, del Chicago Sun-Times, señaló que "A diferencia de la mayoría de los remakes, el insomnio de Nolan no es un recauchutado pálido, sino un reexamen del material, como una nueva producción de una buena obra". 

Para Richard Schickel de la revista Time "El film representa el triunfo de la atmósfera sobre un misterio no muy misterioso. (...) 'Insomnia' no es espectacular a lo 'Memento' pero es una evidente e inquietante prueba del talento de un joven director." 

Similar posición es la de  Lou Lumenick, del New York Post, hizo de la película una crítica entusiasta, calificándola de "una alternativa gourmet de cuatro platos para las películas de palomitas de verano, ofreciendo las actuaciones más carnívoras que Al Pacino y Robin Williams han dado en muchos años" 

Ya en España M. Torreiro de El País dijo de la misma que "Al Pacino brilla en un thriller inquietante (...) una historia muy bien trenzada y desarrollada (...) creación de una atmósfera tensa, virtualmente insoportable (...) con excesivas concesiones a los modos de hacer del cine comercial actual". En la misma línea va su compañero Miguel Ángel Palomo también en El País afirmó que "Nolan reafirma su talento. (...) Espléndida" .

En El Mundo Alberto Bermejo escribía que "Menos sorprendente y más convencional que 'Memento', pero ojalá el grueso de lo que llamamos cine comercial americano se moviera en términos siquiera comparables. (...) El principal aliciente del filme estriba en asistir al espectáculo de su desarrollo y al intenso recital de sus actores" 

Por último para Mikel Zorrilla en la web "blog de cine" ya conocida espinof - lo digo hoy, ya en 2018, tras revisitar esta película - señala que " hay quien dice que ‘Insomnio’ es la peor película que ha hecho Christopher Nolan hasta la fecha, siendo el calificativo de aburrida el más utilizado para descalificarla.

Es cierto que Christopher Nolan tiene que plegarse a la producción noruega, siendo ésta su única película en la que ni él no participa en el guión, al menos no de forma oficial, ya que sí que escribió el borrador final. Eso sí, la historia de ‘Insomnio’ conecta perfectamente con el universo obsesivo de su realizador. Lo primero que salta a la vista es que estamos ante una película convencional en la que Christopher Nolan no puede usar ninguno de sus trucos en la estructura narrativa, ni tampoco hacer gran cosa a la hora de jugar con la información que tiene el espectador sobre lo que está sucediendo. La acción avanza de forma lineal y sólo algún pequeño flashback lo altera levemente. Nolan sí que sabe ir dosificando la aparición del personaje de Robin Williams, pero tampoco es algo particularmente excepcional. Eso sí, Nolan tiene la oportunidad para ofrecer un retrato diferente sobre la obsesión, ya que, por lo general, es algo que utiliza como motivador de las acciones de sus protagonistas, pero aquí funciona a modo de sentimiento de culpa sobre algo que ha hecho. Por ello, reincide en lo ya visto en ‘Memento’ de sentir cierta predilección por los planos más cerrados, y cuando éstos se abren funcionan como una forma de resaltar la soledad emocional por la que está pasando Al Pacino. Por lo demás, el director de ‘El Caballero Oscuro’ se pliega a las exigencias de la historia y se limita a resolver con pericia lo que vemos en pantalla. Hasta casi consigue que su final, la alteración más clara con respecto al original noruego, funcione como catarsis del protagonista, pero el guión de Hillary Seitz, a mitad de camino entre el procedimental más tópico y una curiosa exploración del policia-criminal como iguales, fracasa de forma notoria en su tercer acto.Sin embargo, por mucho que Nolan resuelva con solvencia (pero con escasa presencia de su habitual personalidad) la papeleta, lo que realmente eleva a ‘Insomnio’ por encima de cualquier thriller al uso es su dúo protagonista: Un estupendo Al Pacino, en lo que es uno de sus últimos grandes trabajos en la gran pantalla, ofrece un matiz diferente al rol de policía que ya había explorado con anterioridad en varias ocasiones (‘Sérpico’, ‘Heat’, ‘A la Caza’), pero que aquí ha de sobrellevar un insomnio agotador que va mermando sus facultades, tanto mentales como físicas, al mismo tiempo que ha de luchar contra su conciencia. Pacino está más reposado de lo habitual en él y domina perfectamente el progresivo deterioro de Will Dormer. 

También es especialmente contenido el trabajo de Robin Williams en lo que fue uno de sus tres trabajos consecutivos de personaje perturbado, ofreciendo un acercamiento bien diferenciado en cada uno de los casos (los otros dos fueron los de ‘Retratos de una obsesión’ y ‘Smoochy’). Aquí tarda mucho en aparecer en pantalla (prácticamente una hora), siendo entonces cuando ‘Insomnio’ mejora de forma exponencial, ya que Pacino estaba algo sólo a la hora de evitar que la película descarrilara. Williams consigue crear a un monstruo cuya inteligencia (sus wild cards) y saber estar se transmite perfectamente a un espectador que lamenta que no hubiese aparecido antes en escena. 

Eso sí, el espejismo que fue ‘Memento’ a la hora de crear un personaje femenino fuerte no se repite en este caso. Por un lado, tenemos a una Hilary Swank que ofrece su mejor trabajo entre los dos Oscar que logró (tampoco es decir mucho, que a esta mujer se le apareció la virgen con esos dos papeles), pero es un personaje un tanto desdibujado y sus motivaciones, aunque claras (admiración hacia el protagonista), nunca llegan a transmitir sensación de seguridad. Es como si quisiera hacer una cosa, pero sin decidirse a ello. Por otro lado, Maura Tierney sólo es útil para que Pacino consiga exteriorizar su sufrimiento, siendo esto algo cansino, ya que teníamos bien claro por lo que estaba pasando sin la necesidad de que nos lo diga directamente, y eso afecta sobremanera a una Tierney que cumple con corrección. 

En definitiva, ‘Insomnio’ es la película menos característica de las rodadas hasta la fecha de Christopher Nolan. A nivel formal resulta demasiado tradicional y sólo se atisban pequeños rasgos habituales de su cine pese a ser una propuesta temática perfecta para él. Al final acaban siendo las notables actuaciones de Al Pacino y Robin Williams las que consiguen que se alce por encima de lo que podría haber sido un thriller cumplidor pero bastante rutinario. Sin embargo, fue un relativo éxito comercial y sirvió de lanzadera a Nolan para ser el elegido para relanzar la carrera cinematográfica de un afamado superhéroe que estaba herida de muerte".

Por mi parte decir que la he visto en dos ocasiones y destaco la maestría del director y el buen hacer de los actores , así como enorme calidad de la fotografía con tiende a entrar en una nebulosa y a deshacerse,  pero dicho lo cual , y una vez leído lo escribió Alberto Abuín tras su estreno sólo cabe acabar con lo que él ha escrito con un: Amén.


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