viernes, 23 de marzo de 2012

Un tipo de Virginia


Un virginiano de Marte, un marciano de Virginia, da igual, eso es lo de menos. Una película de aventuras, sin más pretensiones que esa, la de entretener. Eso es lo que hoy hemos visto en los cines del Guadalquivir. 
John Carter es un personaje de ficción creado por Edgar Rice Burroughs, el autor de Tarzán, que aparece en la serie marciana de sus novelas. El héroe apareció inicialmente en Una princesa de Marte, la primera novela de esta serie marciana —entre julio y septiembre de 1911— y que se publicó por capítulos en la revista All Story Weekly con el título Bajo las lunas de Marte en julio de 1912, y como libro en 1917. 

Burroughs retrata al personaje como un ser heroico e inmortal. En efecto, apenas recuerda algo de su pasado. Su matrimonio, su hija y los efectos de la guerra civil en su casa y su familia. La pérdida de todo. Las generaciones de su familia, en este caso la de Edgard o Ned, se refieren a él como el tío Jack, pero las ve siempre en una edad próxima a los 30 años. Su carácter y cortesía ejemplifican los ideales de la confederación propios de su Virginia natal. Capitán durante la Guerra Civil Estadounidense, busca hacerse rico – al final lo consigue- encontrando una mina de oro en Arizona al acabar la guerra. Un día tras ser detenido por miembros de la caballería de la Unión y escapando de ellos se esconde de los indios Apaches en una cueva y tiene allí un encuentro “astral”, cayendo en una muerte aparente, pero siendo transportado misteriosamente en proyección astral a Marte, donde se reencarna en una forma idéntica a sí mismo. 

En Marte, que los nativos marcianos llaman Barsoom, acostumbrado a la mayor gravedad de la Tierra, Carter es mucho más fuerte allí y más ágil que los nativos de Marte. Allí encuentra varias razas humanoides y formidables criaturas alienígenas que recuerdan a animales míticos de la Tierra. 

Descubre también su vocación como guerrero-salvador-pacificador del planeta, cuyas razas se enfrentan entre sí en guerras interminables. Logra ganarse el corazón de la princesa científica Dejah Thoris de Helium y sacrifica su vida para salvar Barsoom de la desolación generada por una interminable guerra civil. 

Al despertar se encuentra otra vez en la Tierra en su cuerpo original. Al cabo de otros diez años muere, pero de nuevo se trata de una muerte aparente, y es transportado a Barsoom por segunda vez, en donde, al parecer según el autor de la obra, alcanza el honor de Señor de la Guerra. 
Carter es un guerrero impresionante, mide en la obra literaria 6 pies y 2 pulgadas, algo así como 1,88 metros y tiene los ojos gris acero y pelo negro largo. Burroughs lo describe como inmortal. 
El personaje es de tipo heroico, con las cualidades que se atribuyen al mito del héroe. Al igual que los caballeros andantes medievales se distingue por su valentía, sentido del honor, defensa del débil, carácter noble, aspiraciones aristocráticas, generosidad, amor a la batalla, exaltación de la amistad e idealización del amor. 
En la lucha, aunque en Marte conocen las armas de fuego, rara vez se utilizan, prefiriéndose el empleo de los puños o las armas blancas o espadas, más propias de caballeros. Esta característica se da también en el otro personaje de Burroughs, el más conocido Tarzán. 
Por otra parte, comparte caracteres con los dioses y semidioses de la antigüedad clásica, como la inmortalidad, la fuerza y la agilidad extraordinarias, la resistencia a la fatiga, la pronta recuperación de las heridas, etc. En lo posible, se trata de racionalizar estas cualidades atribuyéndolas en parte a la gravedad marciana o al poder curativo de sus hierbas medicinales. 
En el aspecto amoroso, es destacable la dedicación exclusiva y caballeresca a su dama, Dejah Thoris, descartando cualquier mención explícitamente sexual o relación con otras mujeres, por muy atractivas y tentadoras que puedan resultar. 

La película está dirigida por Andrew Stanton, teniendo como ayudante de dirección a Mark Andrews- otro de los guionistas-, escrita por Stanton, Mark Andrews y Michael Chabon, producida por Jim Morris, Colin Wilson y Lindsey Collins, y musica compuesta por Michael Giacchino. El diseño de producción es de Nathan Crowley. El sonido por parte estuvo en manos de Timothy Nielsen. El maquillaje correspondió a Kim Ayers, mientras que la fotografía, el montaje, la escenografía estuvieron en manos de Daniel Mindel, Eric Zumbrunnen y Paki Smith, respectivamente. El vestuario fue obra de Mayes Rubeo, mientras que los efectos especiales estuvieron a cargo de Robert Cole. 

La película, de una duración de 132 minutos, ha sido distribuida por Walt Disney Pictures y se estrenó el 9 de marzo de 2012. La filmación comenzó en noviembre de 2009 y el rodaje se alargó de enero a julio de 2010. La película también marca la primera vez que Andrew Stanton trabaja en una película de acción en vivo, a raíz de su trabajo en las películas de animación de Pixar como Buscando a Nemo y Wall-E. Combina imagen real y digital. 

La película se ha rodado entre Utah, Nuevo México y en los siempre presentes Estudios Shepperton de Londres. En la película John Carter , que en principio se iba a llamar John Carter de Marte, estrenada en 2012, el personaje fue interpretado por Taylor Kistch y el papel de Dejah Thoris, por Lynn Collins. Un irreconocible Willem Dafoe asume el papel de Tars Tarkas. Thomas Haden Church es Hajus, Samantha Morton es Sola. Bryan Cranston Coronel de la guerra civil, Mark Strong Matai Shang, Ciarán Hinds Tardos Mors, Dominic West actua como Sab Than, Polly Walker como Sarkoja, James Purefoy como Kantos Kan y Jonathan Hyde, Daryl Sabara como Edgar Rice Burroughs, sobrino de John Carter.

John Carter contó con uno de los mayores presupuestos de la historia de Disney, 205 millones de dólares. A lo que hay que sumar otros 100 que se destinaron a una campaña de publicidad sin precedentes. Sin embargo, el fracaso en la taquilla estadounidense ha hecho que la productora anuncie que esta última producción cinematográfica tendrá unas pérdidas estructurales de unos 200 millones, convirtiéndola en uno de los peores fracasos comerciales en la historia del cine. 

Sin embargo, la película apenas ha recaudado hasta la fecha 41 millones de euros en EEUU, el principal mercado mundial del cine, y los 95,7 logrados en el resto del mundo apenas son un consuelo para Disney. Pero John Carter es solo la última de una serie de fracasos a la hora de llevar a la gran pantalla alguna película ambientada sobre Marte, un planeta que parece maldito para los estudios hollywoodienses. 
En Cinemanía la clasifican como lo que es, una buena película de aventuras de toda la vida. Sólo les ha faltado decir “…de Dios”. Una recomendación: vayan a verla sin prejuicios. La película no es de arte y ensayo, pero consigue lo que se propone, entretener.


No hay comentarios:

Publicar un comentario