viernes, 20 de octubre de 2017

La vida del último gran héroe, según Saramago, sigue


Acabo de volver a ver Detachment, conocida en España como El profesor y cuya entrada yo titulé El último héroe, según Saramago. Hasta que no llevaba un rato no me he dado cuenta que ya había visto este filme del año 2011 dirigido por Tony Kaye , el mismo de una gran película de 1998 que llevaba por título el de American History X por el que había sido nominado para los Oscar, y producida por Adrien Brody, quien además es protagonista de este film.

Los directores suelen ser personas coherentes que intentan contarnos, en ocasiones, aspectos de su manera de entender la vida o el mundo abordando temas universales como el amor , la amistad, la rebeldía o el racismo. En este caso, Tony Kaye retoma un tema de ámbito social, al igual que había hecho antes en American History X que se centraba en el racismo y en Lake of Fire en el aborto. Aquí en Detachment aborda el tema de la crisis de la educación, sin excluir del tema educativo, lo familiar.

Como dice Beatriz Maldivia en Espinof la película es un "retrato punzante y certero sobre varios valores de la sociedad que comienzan desde la enseñanza". Destaca esta editora de Espinof, antes blog de cine, "las animaciones en stop-motion de Rebecca Foster, que juegan con una inocencia perdida, y otras de las licencias, suavizan, si esto es posible, el duro contenido del film". Y concluye diciendo de esta película que en la web de Imdb está valorada en 7'7 sobre 10 que "El final poético en el que se superponen imágenes de decrepitud con la lectura de ‘La caída de la casa Usher’, de Poe, resulta armónico con el resto del relato, gracias a la maestría de Kaye para componer planos y para combinar un cierto efecto mágico con un realismo cruel".

En ese sentido Alberto Abuín, igualmente en Espinof, comenta que el director " no duda en unir sin ningún tipo de rubor el mundo de Edgar Allan Poe al mundo de la docencia, con esa escuela vacía, destrozada y asolada que evoca el hundimiento de la casa Usher, en otros tiempos una lujosa y esplendorosa mansión, siempre brillante y reluciente, como una vez fue la vida en las escuelas".

En la película , además del torturado Brody, igualmente actúan James Caan, Marcia Gay Harden y Christina Hendricks. Pero no están sólos, pues se hacen acompañar de un reparto de lujo formado igualmente por Lucy Liu, Louis Zorich, William Petersen, Bryan Cranston, Tim Blake Nelson, Sami Gayle y Blythe Danner.

Entre este gran elenco juega un papel importante su propia hija, Betty Kaye. Después de tres años preparando el proyecto, Tony Kaye pensaba que su hija Betty era la ideal para interpretar el papel de Meredith. Explica su elección, revelando que: «Betty no se parece en nada a Meredith en la realidad. Tiene confianza en ella, es muy fuerte y determinada a tener éxito en la vida. Pero tuvo una existencia difícil. Abandoné a mi familia cuando era muy joven. Fui muy egoísta. Betty tenía cinco años y lo pasó muy mal. Pienso que esto verdaderamente se percibe en su interpretación». Aun así Kaye tuvo sus dudas de dar a conocer su decisión, ya que temía ser acusado de favorecer a sus allegados.  

La película se rodó fue el 2011 en E.E.U.U. en concreto en el Mineola High School en Garden City Park, sitó en Long Island (Nueva York) y en Parkway Hospital en Queens de la misma ciudad, y tiene un tono que nos recuerda en gran medida al documental visible por ejemplo cuando combina los títulos de crédito con los dibujos del cineasta Tony Kaye, dibujos que vuelven a repetirse a lo largo del relato , o al inicio de la película cuando verdaderos profesores se confiesan ante la cámara del director y nos cuentan como accedieron a trabajar en la enseñanza y lo que ha supuesto para ellos su experiencia al enseñar.

El director Tony Kaye en Detachment en alguna ocasión ha admitido que su objetivo era el de transmitir un ambiente de verosimilitud y que las situaciones fueran tan espectaculares como auténticas. Para llevarlo a cabo, intentó captar las emociones afectivas: «La gente llora, se encoleriza, cuchichea, ama y odia. Simplemente trato de utilizar un microscopio, un telescopio y un radar para explorar la mente y la moral de los individuos que tengo delante de las cámaras», comentó en alguna ocasión.

Posiblemente en el ambiente de la película subyace una idea que se atribuye a Derek Bok, jurista y educador estadounidense en Harvard: “Si crees que la educación es cara, ya verás la ignorancia”.



La película es un drama sobre la devastadora realidad de la enseñanza , pero visto principalmente desde la óptica de los enseñantes, educadores, maestros, profesores ,... o como quieras llamarles,  que trabajan en un decadente sistema educativo público como el estadounidense actual o el de cualquier otro sitio, no creo que sea muy diferente en nada al francés, al británico o al  español, en un entorno urbano, en el que el nivel de degradación en determinadas zonas es alarmante y preocupante.

Y, como digo, no es que España no ocurra eso, pues yo, como antiguo jefe de estudios de un IES en una barriada problemática, he visto historias muy parecidas, que, a veces, no han acabado bien ni para el alumnado, ni para sus familias, ni para el profesorado.

Es cierto que en esto de la enseñanza - o educación , como quieras llamarle-, hay grandísimas satisfacciones. Esas satisfacciones serán siempre las que finalmente recordamos. Los que trabajamos en ella tenemos la facultad de olvidarnos, más bien dejar atrás lo malo, para quedarnos con lo bueno, lo mucho bueno que hay. Pero no hay que engañarse; los momentos de agresividad, angustia y de soledad existen, y sólo un profesional que lo haya sufrido sabe lo durísimo que son, aunque también sabe que minutos después sonará el timbre, dejarás el grupo y volverás a entrar en otra aula. Y lo harás con el deseo permanente e intacto de formar a todos y a todas aquellos que tienes delante. Y, una vez abandonado el pesimismo, que lo sueles dejar en los pasillos, comienza la clase y la vida sigue...

No hay comentarios:

Publicar un comentario