martes, 22 de mayo de 2018

Dirty dancing 2


Prescindible película que se acerca al ridículo por momentos. Precuela sin relación, con único nexo la aparición puntual de Patrick Swayze, algunos acordes de la canción y colocarlo en 1959 coincidente con la revolución cubana, y eso sí, suena a ritmo de son. Dirty Dancing: Havana Nights , también conocido como Dirty Dancing 2 una película musical estadounidense del año 2004 dirigida por Guy Ferland . 

La película es una precuela / "reinvención" de la exitosa película de 1987 Dirty Dancing , reutilizando la misma trama básica, pero trasplantándola del norte de Nueva York a Cuba en la cúspide de la Revolución Cubana . Lo mejor lo poquito que dura, menos de hora y media. 

Guy Ferland contó con el apoyo de un grupo de productores integrado por Lawrence Bender y Sarah Green responsables de Miramax Films y Artisan Entertainment a los que se suman A band apart, Havana Nights LLC, Lawrence Bender Productions. La distribuidora fue Lions Gate Films quie invirtieron un total de 25 millones de dólares. 

La historia partía de un guión escrito por Victoria Arch y Boaz Yakin basada a su vez en la historia de Kate Gunzinger y Peter Sagal 

El elenco lo encabeza Romola Garai como Katey Miller, Diego Luna como Javier Suarez, Sela Ward como Jeannie Miller, John Slattery como Bert Miller y Mika Boorem como Susie Miller. 

A ellos se suman Jonathan Jackson como James Phelps, Rene Lavan como Carlos Suarez, Patrick Swayze como instructor de la clase de baile, Enero Jones como Eva, Mya como Lola Martínez y Angélica Aragón como la Sra. Suárez. 

La banda sonora, casi lo mejor, así como la puesta en escena y la coreografía es de Heitor Pereira, estando Anthony B. Richmond en la fotografía y Luis Colina y Scott Richter en la edición. En 1958, Katey Miller ( Romola Garai ), sus padres ( Sela Ward y John Slattery ) y su hermana menor Susie ( Mika Boorem ) llegan a Cuba durante la revolución cubana . 

Una joven norteamericana , una estudiante norteamericana, una chica estudiosa llamada Katey (Romola Garaino) ha de mudarse a Cuba en el  último año de escuela secundaria, dejando atrás su ordenada vida en el   Radcliffe College , para llegar a un nuevo país muy a su pesar. La razón está en el traslado a la isla caribeña al que se ha visto obligado su padre, Bert ( John Slaterry)  , algo que satisface al mismo y especialmente a su mujer , Jeannie (Sela Ward) y a su joven  hermana Susie (Mika Boorem). 

Se alojan en un hotel de la capital cubana, el Oceanía, un lugar en el que se alojan otros muchos miembros de la comunidad norteamericana, entre ellos muchos   adolescentes estadounidenses y  ricos que gustan ir a la piscina, incluido James Phelps ( Jonathan Jackson ), el hijo del jefe de su padre. Nada más bajar para conocer a sus nuevos compañeros de comunidad tiene lugar un pequeño incidente que molesta especialmente a Katey , ya que James, uno de los adolescentes presentes insulta llamándole con desprecio hispano a un camarero local de nombre Javier ( Diego Luna) cuando accidentalmente tira algunas de sus bebidas. 

Katey intenta hablar con el camarero, Javier, que trabaja en el hotel , pero éste tampoco se muestra muy receptivo.

Después nos enteramos que este Javier trabaja allí para mantener a su familia, ya que es huérfano de padre. 

Ya en su habitación  Katey ve una película de su madre y su padre bailando y desea poder bailar tan bien como ellos que llegaron a ser profesionales del baile. Ella y su padre ahora bailan un poco. 

Al día siguiente en clase, su profesor pide una voluntaria y le pide a Katey que lea en voz alta de La Odisea , un pasaje sobre el amor y la pasión. Después de la clase, James la invita a una fiesta en el club de campo para el fin de semana y ella acepta. 

Mientras sale del Instituto se retrasa un poco y pierde su transporte así que ha de ir andando. Mientras camina a casa desde la escuela, y recibe los piropos de los cubanos se encuentra en una plaza con Javier , mientras éste se encuentra bailando en la calle y éste se ofrece a acompañarla a su casa. 

Mientras se desplazan se paran a escuchar a una banda callejera y en ello aparece la policía, deteniendo a Javier mientras Katey escapa. 

Al día siguiente, Katey prueba algunos de los movimientos de baile que vio. Javier la ve y le pide que vaya a ver a los verdaderos bailarines la noche del sábado, pero ella dice que ya va al club de campo. Javier se molesta ya que quiere seguir viviendo como una extranjera en Cuba y se va. 

Katey , que sabe de la necesidad de la pasión para el baile en vez de ponerse un vestido propio de americana que va a bailar foxtrox decide pedirle un vestido a su sirvienta, una latina,  para ir a la fiesta del club de campo. Con su traje deslumbre  e impresiona a James. 

Katey lo convence de llevarla al club cubano donde Javier baila con una chicas al ritmo del son. Tras verla Javier le pide bailar a Katey mientras James se sienta en el bar y bebe cerveza. Pronto es abordado por el hermano de Javier, Carlos, quien le dice que eventualmente expulsarán a los estadounidenses de Cuba. Javier llega poco después y discute con su hermano. 

James lleva a Katey de vuelta al auto  e intenta seducirla de mala manera  después de que ella se niega a besarlo. Ella lo abofetea y corre hacia el club, y Javier acuerda llevarla a su casa. Y así lo hace siendo vista a su llegada por Susie y una amiga. 

Al día siguiente, Katey pasa por una clase de baile. Allí ve los pasos de un maestro ( Patrick Swayze ) que pregunta si alguien quiere participar en el gran concurso de baile y luego baila con Katey por un momento. Ella se lleva la información. Mientras camina hacia la piscina, James se disculpa con Katey y luego le dice que Susie la vio con Javier. Al ser política de la empresa que los empleados no estén con los residentes en el complejo, Javier ha sido despedido. 

Tras eso Katey marcha a su habitación y discute con Susie yendo después a buscar a Javier. Ahora está trabajando en una tienda de desguaces de vehículos - principalmente robados - de su hermano Carlos. Ella le pide que participe en el concurso de baile con ella, pero él se niega. Mientras tanto, descubrimos que Carlos está ayudando a los revolucionarios que todavía se ocultan en la Sierra Maestra. 

Al día siguiente, Javier aparece en el exterior del Instituto de Katey y acepta participar en el concurso de baile con ella. Comienzan a ensayar los movimientos de baile entre sí y Javier la convence de "sentir la música". Practican todo el tiempo, y Katey baila un poco más con el profesor de baile, hasta que  la noche del baile que coincide con la noche de nochebuena. Esa noche la madre de Katey y el padre han quedado para cenar con su el jefe de Bert y padre de James, el Señor Phelps y su esposa. Tanto ella como los padres de Katey están convencidos de que James y Katey son pareja, pero cuando se inicia el concurso se ve que no es así para irritación especialmente de ambas madres. 

Katey y Javier bailan con las otras parejas al ritmo de la orquesta y son elegidos dentro del trío que han de pasar a la siguiente ronda que tendría lugar la semana siguiente, en la noche de fin de año. 

Los padres de Katey desaprueban su relación con Javier, especialmente la madre Jeannie que en la irritación llega a abofetear a su hija, pero Katey se reconcilia con ellos, incluso con Susie con la que ya había discutido. 

En la noche de la ronda final del concurso, mientras Katey y Javier están en la pista de baile, Javier ve a su hermano vestido de camarero. Junto a él hay algunos revolucionarios disfrazados de camareros, y la policía pronto intenta arrestarlos. El concurso termina ya que todos huyen del club, pues hay algunos disparos y Javier tiene que salvar a Carlos de la policía. Javier y Carlos hablan de cómo extrañan a su padre, pero Javier le pide que no se convierta en un asesino, para, de inmediato, escuchar que Batista ha huido del país. Ellos se unen a la celebración popular. 

Más tarde, Javier llega al hotel y encuentra a Katey junto a sus padres, preocupados por la situación política. Él la lleva a la playa y hacen el amor. 

Al día siguiente, los padres de Katey le dicen que se van de Cuba y ella acepta muy a su pesar, pero eso sí, esta última noche baila desaforadamente con Javier. Van al club cubano donde primero bailaron, siendo ellos los reyes de la pista.  La familia de Katey está allí para verla, y Katey dice que no sabe cuándo volverá a ver a Javier, pero esta no será la última vez que bailen juntas y acaba así esta moñada. 

Havana Nights está basado en un guión original del dramaturgo y presentador de NPR Peter Sagal , basado en la experiencia de la vida real de la productora JoAnn Jansen, quien vivió en Cuba con 15 años entre los años 1958-59. Sagal escribió el guión, que tituló Cuba Mine , sobre una joven estadounidense que fue testigo de la revolución cubana y tuvo un romance con un joven revolucionario cubano. El guión sería, inicialmente,  una seria historia de romance político, documentando, entre otras historias, cómo la revolución cubana se transformó del idealismo al terror. 

El proyecto le llegó inicialmente en 1992  a Lawrence Bender , que se estaba haciendo famoso con su producción de Reservoir Dogs y Pulp Fiction de Quentin Tarantino . El guión fue comprado por un estudio de cine, que solicitó varias reescrituras antes de decidir no producir la película. 

Una década más tarde, Bender decidió que de la misma se podría hacer una secuela de Dirty Dancing , y la película fue muy poco adaptada del guión de Sagal. Ni una sola línea del guión original de Sagal aparece en la película final y Sagal dice que los únicos restos del tema político que existió en su guión es una escena en la que algunas personas son ejecutadas. 

La película fue la primera película de Hollywood de la actriz británica Romola Garai y ella ha citado reiteradamente el rodaje de la película como una experiencia extremadamente negativa que le hizo reevaluar su trabajo en Hollywood. En una entrevista en 2004 en  The Telegraph , explicó que los cineastas "estaban obsesionados con tener a alguien más delgado. Solo pensé, ¿por qué no consiguieron a alguien como Kate Bosworth, si eso es lo que querían?" 

Ninguno de los dos actores principales sabía bailar salsa, por lo que los dos tu¡vieron que pasar diez semanas en Puerto Rico entrenando ocho horas diarias. Las dos Dirty Dancing tienen en común la celebración del baile como experiencia liberadora y como medio para conocerse a unos mismo, además de un premio económico final, en este caso, 500 dólares.

En octubre de 2017, en medio de las denuncias de abuso sexual del productor Harvey Weinstein en Hollywood, Garai reveló más tarde que Weinstein, cuya compañía Miramax coproducía la película, le había pedido que lo encontrara solo en la habitación de un hotel mientras llevaba puesto. Sólo un albornoz para obtener la pieza: "Tuve que ir a su habitación de hotel en el Savoy, y él respondió a la puerta en bata de baño. Tenía solo 18 años. Me sentí violada por eso, se ha quedado muy claramente en mi memoria. "

Llama la atención los pasos de gigante dados por el Diego Luna , impresionante como asesino implacable poco después en la película de Agustín Díaz Yanes cuatro años más tarde en Sólo quiero caminar, ya comentada por aquí.

En cuanto a la critica una de las cosas más mencionadas es que se trata de un remake innecesario. DE ella han dicho los críticos cosas tales como lo señalado por Robert Denerstein del Denver Rocky Mountain News, que  dijo de ella "Trata de agregar sabor cubano a un argumento familiar, pero se le ocurre nada más que un burbujeante estofado de clichés".

Para el canadiense  Peter Howell del Toronto Star pensó que era "Sin encanto, torpe y culturalmente ofensivo, todo al mismo tiempo" .

Según  Wesley Morris del Boston Globe   "Como es de esperar, la película es tan cuadrada como un salto de media".

Una valoración más favorable vino de Philip Martin del Arkansas Democrat-Gazette, señaló que "aparte de la trivialidad del diálogo, la previsibilidad matemática del guión y el embrollo de la política  (...) es bastante experiencia disfrutable."

De acuerdo con Louis Hobson de Jam! Magazine, el principal factor redentor fue la coreografía: "Puede tener problemas con la historia obvia y cliché, pero el baile es increíble".

Para Ann Hornaday del The Washington Post "Tiene su modesto encanto" ; mientras que Rene Rodriguez del  Miami Herald "Se hace muy larga"

Por su parte, Jonathan Foreman del New York Post "Hacia las tres cuartas partes de la película, 'Dirty Dancing: Havana Nights' se vuelve de repente horrible, con espantosas y pobres líneas de guión mal dichas, como si un guionista y un director diferentes se hubieran hecho cargo del acto final de la película."

Para Jami Bernard de otro diario neoyorkino,  New York Daily News "Tiene algo de buena música y sensuales bailes -filmados a base de cortes-, pero carece completamente de la magia de su predecesora."

Sin embargo eso no convenció a todos; para Philip Wuntch del Dallas Morning News la película no valía  gran cosa afirmando que "tanto el número de baile como el drama personal son en gran parte indiferentes".

En España M. Torreiro de  El País declaró que "De que no pase a los anales tiene la culpa tanto el director como su guión, soso y previsible. Y también, claro, las limitadas artes danzarinas de los protagonistas."

Y Pablo Kurt en Filmaffinity afirmó que " Sospecho que gran parte del éxito de "Dirty Dancing" (1987) se debió a que las chicas se sintieron identificadas con una chica físicamente 'normal' (Jennifer Grey), medianamente atractiva y algo bajita, a la que le revolucionaba las hormonas un varonil macarrilla (Patrick Swayze) con un meneo de caderas de impresión. Las hormonas se las revolvía a Grey y al público femenino, que fue quien mayormente encumbró la cinta al Olimpo del cine juvenil. Nada que objetar, pues uno casi se apunta en su día a clases de baile.  Y continuaba que "Así pues, presumo que parte del relativo 'fracaso' de "Dirty Dancing 2" ha sido por invertir los términos, poniendo una carnal protagonista (Romola Garai) por la que la mayor parte de las adolescentes no sentirán tanta empatía, y un simpático protagonista masculino (el siempre solvente Diego Luna) que no se mueve mal, pero lo que se dice cachas, cachas… pues poco. También puede que influya que el guión es tan pobre como previsible y que los bailes no son nada espectaculares. Por no mencionar que al mundo 'teen' la revolución cubana les trae sin cuidado (están más interesados en la hormonal), y que la típica historia de "niña rica que se rebela contra sus padres y ya de paso contra lo establecido enamorándose del atractivo niño pobre" ya se ha visto en multitud de cintas  Resumiendo: "Dirty dancing 2" no invita a bailar, la salsa no es ni la esperada ni lo suficientemente espesa, y lo único "dirty" supongo que serán los pensamientos de los chicos con el cuerpo de la Garai, que por ella harían la revolución y lo que haga falta.

Puede que lo mejor sin duda sea la música realizada por varios artistas como Wyclef Jean con Claudette Ortiz con "Dance Like This", la versión de Dirty Dancing de Black Eyed Peas, Yerba Buena y su "Guajira (I Love U 2 Much)", Jazze Pha con Monica con su "Can I Walk By" , Santana con Jorge Moreno con "Satélite" en un par de versiones , Christina Aguilera y su "El Beso Del Final" , los Orishas con Heather Headley - que salen brevemente en la cabntina en la que bailan por primera vez los protagonistas con su "Represent, Cuba" , Mya y su "¿Solo quieres bailar" , Shawn Kane con "You Send Me" Aterciopelados con "El Estuche" , Julio Daivel Big Band (dirigida por Cucco Peña) con la gra "Do You Only Wanna Dance" - "Satélite (versión en español) Nave Espacial (de" Havana Nights ")" - Santana con Jorge Moreno.

La película se estrenó un 27 de febrero de 2004 y apenas superó lo invertido que fue los $ 25 millones de presupuesto añl conseguir en taquilla unos $ 27.7 millones para este , inisto, grimoso, cursi e hipermoñas remake innecesario.

No hay comentarios:

Publicar un comentario