Botte di Natale

Uno en los años 70, no luchaba contra Franco, pues a diferencia de nuestro Presidente de Gobierno que con sus dos añitos ya era antifranquista y luchaba contra él y sus instituciones, sino me dedicaba a jugar o a las cosas propias de mi edad. 

Yo a su edad iba al cine. En esa década veía parte de las películas que se estrenaban y sobre todo me fijaba en los carteles de las películas. Por supuesto en las de Terence Hill y Bub Spencer, una pareja de actores norteamericanos, - eso pensaba yo, por aquel entonces- , cuando todavía no teníamos 10 años y no luchábamos contra Franco. A esa edad nos preocupan los mamporros, los frigoles, los policías torpes, los malos... ¡Qué poca vergüenza la de mi generación que con diez años no luchamos contra Franco , pero íbamos al cine a ver película como Dos superpolicías, Par o Impar, o las de "Les llamaban Trinidad".

Si ibas a ver esas películas. te encontrabas, lo esperado. Así que hoy cuando he visto Y en Nochebuena... ¡se armó el belén! - o The Troublemakers , como se llamo en los Estados Unidos- esperaba ver un típico producto de Spencer / Hill. Y , efectivamente, eso he encontrado, una comedia del año 1994 escrita por uno de los hijos de Terence, en concreto, Jess Hill con ambientación de western, dirigida por su padre, Terence Hill. 

Participan en la película y en calidad de productores Giuseppe Pedersoli, el hijo de Bud Spencer,  y Matthias Wendlandt para la productora Rialto Film, quedando como productores ejecutivos Willy Egger, Günther Russ. 

En el apartado técnico están presentes en la Fotografia Carlo Tafani, en el montaje Eugenio Alabiso, en la música Pino Donaggio, en la escenografía Mario Garbuglia y en el vestuario Vera Marzot y Barcie Waite. 

Y es curioso lo que les unió en sus dos entregas de "Le llamaban Trinidad", una película que pudo ser trilogía, tardó casi 25 años en retomar esa historia. Pero como los personajes que representan, Terence Hill y Bud Spencer, son así de tercos, volvieron a reunirse para rematar y hacer una no acreditada como tal tercera parte de los "Trinidad". 

Aunque ya no eran los mismos actores, puesto que el paso del tiempo les había hecho mella, lo cierto es allí estaban. Y aunque Bud Spencer estaba mayor, ajado, en muchos momentos inexpresivos, pues ya tenía más de 60 años y ya no podía montar en caballo y lo tenía que hacer en carreta, en la película es el mismo hombre bruto y fuerte, en este caso casado y con 10 hijos. No dudaba en participar en ella puesto que la película estaba producida por  su hijo , Giuseppe Pedersoli, y escrita por el hijo de su amigo Terence (Jess Hill). Tampoco Terence era el galán de los setenta y primeros ochenta. Pero la esencia de sus gags estaban allí. Con sheriff un poco torpes que tienen como único objetivo ganar en su partida de ajedrez; el gusto por los animales , aquí enamorándose de una veterinaria con oso o víctima de un perro que siempre muerde a Terence cuando va a salvar a alguien de la horca; el ahorcamiento de Bud con rotura de la cuerda incluida o de las vallas de madera cuando él se apoya; o las ocurrencia para actuar como cazarrecompensas ... A todo ello se suma la excelente música de Pino Donaggio, el presupuesto generoso y una antológica pelea final que dura más de 10 minutos a base de mamporros y golpes de lo más variado. Todo muy común a lo habitual que hacían Mario Girotti y Carlo Pedersoli, más conocidos como Terence Hill y Bud Spencer actores que practicaban un humor muy simple casi nueve años después de su última gamberrada para reencontrarse con el “western”. 

La historia a desarrollar, una tontada. Se acerca la Navidad y Maw, la madre de un par de chicos que no son malos, pero no son buenos- Travis y Moses- y que hace tiempo que están fuera de casa, siente nostalgia por esos dos hijos totalmente ausentes. Así que le escribe a uno de ellos, al más joven, Travis (Terence Hill), que es un hábil cazarrecompensas y le pide que busque a su hermano mayor, Moses (Bud Spencer), que también se dedica a esto y que acaba de detener a un secuestrador de mujeres, Blackjack, y que se reúnan todos en su casa en Nochebuena. 

A Travis lo conocemos rápidamente. Es habilidoso pistolero, que al recibir la carta de su madre, Maw, en la que le pide que lleve a su hermano Moses y a su familia a una reunión navideña y que les entregue un tesoro desconocido que ella afirma haber heredado de su padre no duda en hacerlo.  

Moses es un cazarrecompensas, que está enojado con Maw, por dejar sueltos sus caballos robados. Además, Moses se ha convertido en el más tenaz cazarrecompensas del Oeste y anda tras los 5.000 dólares que ofrecen por la cabeza de un hombre malvado, Sam Stone. 

A éste malvado lo conocemos pues Travis, sin saber que su hermano busca la recompensa, salva a Stone de una muerte segura y tras recibir la carta de su madre, lo utiliza como anzuelo para atraer a su hermano... Moses se entera de que el fugitivo Stone y su banda están cerca, y decide trabajar junto con su hermano Travis, muy a su pesar, pues no aguanta a su hermano. 

Al mismo tiempo, Travis revela las intenciones de su madre a su cuñada Janie y a su sobrino mayor, el intrépido y amante de caballos, Moses Junior, manteniendo a Moses ajeno a la idea de que vayan toda la familia a pasar  la Navidad. 

Los dos comienzan la búsqueda de Stone y cuando se van a la mañana siguiente, la familia de Moses se dirige a la casa de Maw. 

Entretanto Travis conoce a una bella germana, la berlinesa Bridget y a su hermana, Melie. Los dos se encuentran en dificultades pues quieren abrir una clínica veterinaria y siempre están molestadas por el turbio Dodge y sus secuaces.  Moses llega de mala gana y ayuda a Travis a acabar con ellos. La mujer, Bridget, invita a los hermanos a tomar galletas y té con ella y su hermana. 

Travis  se pelea a puñetazos con Dodge y los suyos, resolviendo el problema de las dos hermanas gracias también a la ayuda de Moses, quien finalmente logra amedrentar al mayor de los secuaces de Dodge. 

Después de marcharse y montar el campamento, Travis encuentra a Stone y a su grupo, hablando de robar un banco, al día siguiente al mediodía. 

Al día siguiente, los hermanos planean una trampa para atrapar a Stone. El plan fracasa cuando entran en el momento equivocado. El sheriff y su ayudante confunden a Travis y Moses como integrante de la banda de Stone y los arrestan. Los hermanos son acusados ​​de complicidad con Stone y arrestados por el sheriff Fox  y su ayudante, amantes del ajedrez.

Una vez en la cárcel, Bridget paga la fianza de Travis para que él pueda hacerle un favor más tarde como es recuperar a su oso, un regalo del padre a las chicas. 

Pero al no haber pagado el dinero de Moses, éste es condenado a la horca a la mañana siguiente, , pero aunque acuerda con su hermano que lo libere dada su habilidad en el manejo de las armas, lo cierto es que la intervención de un can impide que consiga su objetivo. No obstante, aún así logra salvarse gracias a su tamaño; de hecho, la horca no puede soportar su peso y se derrumba, provocando daños desastrosos. 

Más tarde, los dos hermanos desarrollan un nuevo plan para resolver el problema de Bridget, pero el plan también falla y los dos son capturados nuevamente por Stone, quien los mantiene presos en el desierto. 

En este punto Travis le revela a Stone que él fue su salvador cuando fue condenado, y por ello Stone paga su deuda, dejándolos en libertad. 

Como el objetivo sigue siendo el mismo, detener a Stone,  ideado por Moses. Este un plan B funciona, pero Moses se queda dormido, Travis libera a Stone y Stone lo ata con un muñeco. Moses abandona a Travis, pero éste se deja llevar por unos indios navajos que viven cerca. 

Hablando entre ellos, Travis intenta convencer a Moses de que vaya a visitar a su madre para hacerse con un tesoro guardado por su difunto padre. Moses no cree esta historia y, persistiendo en la propuesta de Travis, se queda dormido, sin darse cuenta de que su hermano, para obtener otro favor en el futuro, libera a Stone. 

Mientras tanto, el hijo de Moisés, Moisés hijo, tiene la intención de comprar un potro como regalo de Navidad para su padre. Pero para su desgracia le compra el caballo a Stone que al escucharle que la familia tiene un tesoro marcha en dirección a la casa de Maw, dejando al niño atado en el granero. 

Después de pasar una noche en el desierto, el niño se despierta escuchando el cascabel de una serpiente que está a su lado, mordiéndole la rodilla. 

Y mientras los hermanos siguen peleándose en la ciudad aparece el pobre chaval malherido por la mordedura y con mucha fiebre. Tras ser atendidos por su padre y tío, llevan al pequeño a Briget para que salve al pequeño Moses. 

Bridget interviene y salva a Moses Junior  con un antídoto y, incluso antes de que su padre se muestre severo con él, Travis le revela a su hermano el plan que quería su madre. Moses Junior también revela que Stone se dirige al rancho de su abuela para robar el tesoro mencionado por Travis y los dos hermanos luego corren a la casa de su madre. 

Antes de irse, Bridget y Travis se besan. Los hermanos finalmente llegan a casa de Maw creyendo que Stone tiene a su madre como rehén, una vez que llegan se dan cuenta de que en realidad fue su madre quien detuvo a Stone y lo tiene como rehén en la casa. 

La familia de Moses, Travis, Bridget y Melie, comparten una cena navideña en familia. Después de la cena de Nochebuena, la velada de Navidad se ve arruinada por la llegada de una partida enorme de bandidos a los que se han sumado gente del pueblo pensando que los hermanos son dos indeseables. 

Sin embargo, el sheriff, el ayudante, Dodge y su pandilla planean matarlos, pero dejan caer sus armas cuando quedan hipnotizados por la belleza del cielo nocturno y la música celestial que cantan los chavales de Moses. 

De cualquier manera se produce una gran pelea a puñetazos entre los dos grupos, en la que la familia gana. Una de las hijas llama al evento "La pelea antes de Navidad". 

Varios bandidos que se cuelan en la casa pero la familia con la abuela y todos los niños colabora con los dos hermanos para ahuyentar a los invitados no deseados. Después de golpearlos, los arrojan por una ventana, haciéndolos caer uno a uno sobre una catapulta para luego arrojarlos y terminar colgándolos de un gran árbol ubicado frente a la casa, para ser "decorados" con todos los criminales. 

Para completar este inusual árbol de Navidad, la abuela Maw coloca un molinete de fuegos artificiales en la parte superior del árbol y lo enciende con un disparo de Travis. 

A la mañana siguiente, los dos hermanos y el ahora inofensivo Stone le preguntan a la abuela Maw sobre el tesoro, y ella les revelará que el tesoro es todo lo que los rodea, la familia. Maw revela que el tesoro está donde están sus corazones, para gran consternación de Stone. Luego les cuenta a sus hijos que tiene intención de mudarse a Denver . 

Maw se va a Denver y todos se dejan fotografiar por el fotógrafo y, en un ambiente navideño relajado, los protagonistas se despiden acabando así la película. 

Inicialmente, el regreso de la famosa pareja incluyó una adaptación de la conocida novela Don Quijote de la Mancha con Terence Hill en el papel del noble y Bud Spencer en el de Sancho Panza. El proyecto, concebido en 1993, contó con un guión de Furio y Giacomo Scarpelli y se contactó con Mario Monicelli como director, pero posteriormente el proyecto se abandonó ya que Terence Hill consideró el guion demasiado débil. 

Fue entonces el propio Hill quien sugirió como alternativa el guion de Botte di Natale, escrito por su hijo Jess, un remake del famoso género western que les hizo famosos con They Called Him Trinity o Les llamaban Trinidad. 

A pesar de las reservas iniciales, el proyecto acabó convenciendo a productores y protagonistas. La película fue realizada en colaboración entre tres países, Italia, Alemania y los Estados Unidos de América. Se eligió Nuevo México para filmar la película, dividiendo las locaciones entre: Abiquiu Lake, Bonanza Creek Ranch, Eaves Movie Ranch, Tent Rocks cerca de Cochiti Pueblo, en Valle Grande y Zia Pueblo. 

La mayor parte del reparto, como los actores Ron Carey y Fritz Sperberg, ya habían aparecido unos años antes en la serie de televisión Lucky Luke dirigida y protagonizada por Terence Hill. 

Los productores de la película fueron Giuseppe Pedersoli, en colaboración con Rialto Film, de Horst Weitland. 

El presupuesto de la película fue de 15 mil millones de liras.  En Italia la película no tuvo éxito, fue un fracaso en taquilla recaudó 742 millones de liras y volvió a estar dentro del presupuesto gracias al mercado exterior. 

Esta fue la última de las dieciséis películas protagonizadas por el dúo Bud Spencer y Terence Hill, un resurgimiento del exitoso estilo western italiano de los años sesenta y setenta y eso que Terence Hill estaba semirretirado del cine, viviendo en un rancho, intentando olvidar la trágica muerte de su hijo. 

Bud había realizado unas cuantas películas en solitario y acudía a numerosos programas de la televisión italiana, e incluso lo pudimos disfrutar en la versión española del "Qué Apostamos". A ambos les quedaba cerrar su brillantísima etapa juntos y por eso cuando Terence llamó a Bud para rodar una película a sus órdenes y volver a sus orígenes del oeste, Bud no lo dudó ni un segundo. 

Como curiosidad, decir que los personajes de Trinidad y Bambino ("El Niño") en esta tercera entrega se llaman respectivamente Travis y Moses, ya que Bud y Terence no tenían los derechos sobre los nombres originales. 

De hecho, un año después, en 1995, el director de la saga original, Enzo Barboni (EB Clucher), rodaría una tercera parte "oficial" con dos sosias modernos de nuestros héroes: "Trinidad y Bambino... tal para cual", que fue un fracaso más que estrepitoso... 

Para Fausto Fernández en Twitter- ahora X- se trataba de "La despedida o en hasta la vista, viejita ya la pareja, de Terence Hill & Bud Spencer en sus roles como pareja y como Trinidad. Vuelven también Enzo Barbieri (e hijo) y la sal (con frijoles) gruesa más de dos décadas después, . Un western con sal gruesa, risas, golpisas, eructos y pedos, anacrónico en su estreno y con ellos dos viejecitos y abrazables. Por ellos".

Por lo tanto "Botte di Natale" viene a ser el testamento final de la pareja. Y da igual que pensemos que existen momentos almibarados al irse cayéndoseles las pistolas ante la belleza de la nochebuena  y el espíritu navideño, pero lo auténtico seguía ahí: esas peleas a golpe de puño , a mamporros, esas patadas voladoras, ese esquivar y golpear, esas habichuelas, esa infantilización y ensuciamiento del western repleta de guiños a obras maestras del género y del maestro Leone: la carreta repleta de malhechores con los que cobrar la recompensa ("La muerte tenía un precio"), el salvar al ahorcado con un disparo ("El Bueno, el Feo y el Malo"). Es un intento de poner fin a una historia, a una carrera, a una pareja teniendo presente que hay que rendir homenaje a un maestro del género en su última película. Mejor esto que luchar contra el franquismo con dos años, presidente.