lunes, 13 de abril de 2015

Funcionarios en el Ministerio


Una gran sorpresa. Eso ha sido para mí esta serie española que , de alguna manera, se acerca al espíritu que tanto encanto tiene para mí como es el del Doctor Who. La verdad que esta serie de ciencia ficción, El ministerio del tiempo, fue creada por Pablo Olivares y Javier Olivares y producida por Onza Partners y Cliffhanger para TVE. Lo llamativo , ante todo, es que este Ministerio sí funciona. Qué poco se parece al Ministerio o , en mi caso, a la Consejería de Educación.
Los productores ejecutivos que idearon este aformatunado ingenio fueron Javier Olivares, Alicia Yubero y María Roy , mientras que los directores de los distintos capítulos han sido , entre otros, Marc Vigil, Jorge Dorado y Abigail Schaaff, siempre coordinados por el director creativo Javier Olivares. 
El guión de esta original serie ha salido de las cabezas pensantes de José Ramón Fernández, Paco López Barrio, Javier Olivares, Pablo Olivares y Anaïs Schaaff. La música es labor de Darío González Valderrama y la fotografía de Unax Mendia, Isaac Vila. 

La serie , en sus principales papeles, está protagonizada por Aura Garrido como Amelia Folch, Rodolfo Sancho como Julián Martínez, Nacho Fresneda como Alonso de Entrerríos, Cayetana Guillén Cuervo como Irene Larra, Juan Gea como Ernesto Jiménez y Jaime Blanch como Salvador Martí. A estas se unen como elenco habitual Francesca Piñón que es la secretaria Angustias y Natalia Millán la malvada Lola Mendieta 

Se estrenó el 24 de febrero de 2015 en La 1, y , desde el primer momento, causó sensación por esa mezcla de humor, fantasía, encanto naïf que tiene, pues no olvidemos que su argumento gira en torno a los viajes a través del tiempo. 

La historia no puede ser ni más absurda ni más encantadora y se apunta sus principales características en el episodio piloto o inicial: El tiempo es el que es. El Ministerio del Tiempo es una institución gubernamental, autónoma y secreta, que depende directamente de Presidencia de Gobierno. Se trata de un ministerio que depende directamente de la Presidencia de Gobierno español y únicamente conocido por reyes, presidentes y un número muy exclusivo de personas saben de él, así como sus funcionarios. El paso hacia otras épocas se realiza a través de puertas vigiladas por las Patrullas del Ministerio. Su objetivo es detectar e impedir que cualquier intruso del pasado llegue a nuestro presente -o viceversa- con el fin de utilizar la Historia para su beneficio. Para ello las Patrullas tendrán que viajar al pasado y evitar que lo logren. 

En dicho ministerio trabajan muchas personas de diversas épocas. Las últimas personas reclutadas por el ministerio son Alonso de Entrerríos (Nacho Fresneda) –un soldado de los Tercios de Flandes condenado a muerte y salvado por el ministerio-, Amelia Folch (Aura Garrido) -una de las primeras universitarias de España- y Julián Martínez (Rodolfo Sancho) -enfermero del SAMUR del 2015-. Su jefe es el subsecretario de Operaciones del ministerio del tiempo Salvador Martí (Jaime Blanch) que cuenta con el apoyo de Ernesto (Juan Gea) e Irene (Cayetana Guillén Cuervo). 

Todo comienza cuando Julián Martínez, un enfermero del Samur deprimido por la muerte de su mujer que, durante un incendio, descubre a unas personas vestidas a la usanza napoleónica. El valor y su escaso apego a su propia vida por salvar las de los demás son sus mayores cualidades. Está traumatizado por la muerte de su esposa en un accidente de tráfico tres años atrás, pero mientras auxilia resulta herido, aunque se sorprende ante lo visto. En su convalecencia es contratado por el Ministerio del Tiempo. En paralelo descubrimos quienes serán sus compañeros. 
Entre los mismos está una estudiante de finales del siglo XIX, Amelia Folch procedente de una familia burguesa y catalana acomodada, es una de las primeras mujeres en acudir a la Universidad de Barcelona. Se trata de una chica inteligente, con memoria fotográfica y trabajadora; .y el soldado del siglo XVI.
El tercer protagonista es Alonso de Entrerríos un hombre de honor, un experto tirador y estratega y que se pone al mando de la situación cuando se requiere la fuerza. Alonso de Entrerrios y su estupefacción ante los cambios que han tenido lugar con el tiempo . Fue condenado a muerte por agredir a un superior y salvado por el Ministerio para que trabaje para ellos. 
Tras ser reclutados tendrán una entrevista con Salvador Martí Subsecretario de Misiones Especiales. Tras describir su nueva situación, Amalia es nombrada el cerebro del comando que ha de viajar hasta 1808 para impedir que los franceses maten a Juan Martín al Empecinado antes de que éste organice la guerrilla. Tras pasar por la puerta por la que se accede al pasado tendrán contacto con los agentes franceses que vio Julián Martínez que tienen el encargo de poner fin al Empecinado. 
En esa estrategia aparece igualmente la aparentemente malvada Lola Mendieta (Natalia Millán) ex-agente del Ministerio que decidió fingir su propia muerte para enriquecerse gracias a facilitar información sobre las puertas del tiempo a terceros. 

El segundo episodio de estos ocho fue Tiempo de gloria. En el mismo el encargo consiste en ir a la Lisboa del siglo XVI y ponerse en contacto con Gil Pérez, prestigioso agente del ministerio durante el reinado de Felipe II, ya que éste descubre que escritor Félix Lope de Vega (interpretado por Víctor Clavijo), alistado en la Armada Invencible, no viaja en el barco que históricamente le correspondió , el San Juan, uno de los pocos barcos que regresó del desastre. En su lugar, viaja en el San Esteban, donde con toda seguridad encontrará la muerte. Félix Lope de Vega. 
Julián, Amelia y Alonso tendrán que viajar a la Lisboa de 1588 para lograr que Lope embarque en el San Juan, aunque la historia se complica al aparecer por sorpresa el hijo de Alonso que , igualmente quiere embarcar, y sobre todo la personalidad galante y arrolladora de Lope de Vega que embeleza a Amelia. Finalmente, consigue el doble objetivo de embarcar a Lope de Vega y al hijo de Alonso en el San Juan. . 

Cómo se reescribe el tiempo es el tercer capítulo. Se desarrolla durante la guerra civil española y la inmediata postguerra. En la historia la exagente del ministerio, Lola Mendieta, vende a los nazis el secreto de las puertas del tiempo. El sádico líder de las SS, Heinrich Himmler, descubre que hay una puerta del tiempo en el monasterio de Montserrat y, aprovechando la reunión entre Franco y Hitler en Hendaya, viaja hasta el monasterio para tomar la puerta y reescribir la historia. 
La misión de Julián, Alonso y Amelia es evitar que Himmler se haga con la puerta cosa que consiguen no sin complicaciones. Aquí conocemos con más detalle a Angustias (Francesca Piñón), la secretaria , una persona atenta siempre a todo, su seña de identidad es el humor. Los recortes que ha sufrido en el sueldo por la actual crisis económica le hacen echar de menos su verdadera época de principios del siglo XX. 

En el cuarto episodio Una negociación a tiempo conocemos algo de la personalidad de Ernesto Jiménez (Juan Gea), ese funcionario serio, solitario y perfeccionista, siempre preocupado por la vida de sus reclutados en cada misión. No quiere hablar de su pasado ni cuál es su verdadera identidad, pero que descubrimos a lo largo del capítulo. 
Por lo pronto nos enteramos que El Ministerio del Tiempo fue creado por Isabel la Católica en 1492 gracias a la obtención del libro de las puertas, un libro que le regaló el rabino Abraham Leví a cambio de protección para él y para su familia. La reina prometió protegerle, pero el cruel inquisidor Tomás de Torquemada lo mandó a la hoguera a espaldas de Isabel. 
El problema surge cuando el abogado de los descendientes del rabino descubre documentos referidos a que la reina no movió un dedo para salvar al rabino y exige una enorme indemnización al ministerio a cambio de su silencio. Por ello, contraviniendo las propias normas del ministerio, Salvador manda a Julián, Amelia y Alonso a 1492 para salvar al rabino de la hoguera, pero hay un problema: la puerta para acceder a 1492 está en un bucle temporal. Solo disponen de un día para salvar al rabino y por ende al ministerio. Tras una difícil intervención descubrimos que Ernesto es el hermano de Tomás de Torquemada. 

Cualquier tiempo pasado es el quinto episodio. Se centra en los ochenta. En 1981, durante el gobierno de Leopoldo Calvo-Sotelo, el Guernica de Pablo Picasso regresó a España desde el MoMA de Nueva York. Pero desde ese año llegan informes al ministerio que dicen que alguien está maniobrando para que el Guernica se quede en Estados Unidos. Salvador manda a Julián, Amelia y Alonso a dos misiones: en primer lugar deben viajar a 1899 para conseguir la firma de Picasso y a la Guerra Civil Española para falsificar el recibo del encargo, y luego deben viajar a 1981 para lograr que el cuadro regrese a España. 
Mientras tanto Julián quiere conocer a su padre en un contexto que tanto le marcó: el de los ochenta y para ello va a un concierto: el de Leño. Sin embargo, descubre por ejemplo que su padre tiene una amante, lo que genera un malestar inmenso en Julián que interviene para impedir que la aventura de su padre con la chica llegue a buen término. 
De la misma manera vamos descubriendo a Irene Larra (Cayetana Guillén Cuervo) experta en Recursos Humanos del Ministerio, nacida en 1930 y ha decido que, en esta segunda oportunidad que le ha ofrecido la vida, ella marcará sus propias reglas, especialmente en el plano sexual, pues ella es lesbiana. Aquí es divertida la veneración que Velázquez (Julián Villagrán) tiene sobre la capacidad artística de Picasso 

En el sexto conocemos a Lázaro de Tormes, y lleva por título Tiempo de pícaros. Durante unas excavaciones arqueológicas en Salamanca, un arqueólogo encuentra en un recinto subterráneo algo imposible: un móvil. 
Por su parte, el ministerio encuentra una puerta que da a 1520 por la que un empresario corrupto ha escapado de la justicia. Salvador envía a Alonso, Amelia y Julián a 1520 para detener al prófugo y allí se encuentran con un inesperado habitante: el Lazarillo de Tormes. Pero durante la misión, el Lazarillo es capturado y condenado a muerte, por lo que el trío debe además salvar la vida del Lazarillo. 
Mientras tanto, Irene interroga a Paul Walcott, un norteamericano que parece querer extorsionar al Ministerio. Es capturado por el ministerio y encerrado en Huesca en 1053. 
Al dejar a Walcott visita a su antiguo jefe, Armando Leiva, otrora eficaz y poderosísimo y hoy encerrado por saltarse las normas. 

Tiempo de venganza es el título de séptimo episodio. El contexto en el que se desarrolla es el siglo XIX. En 1843, Isabel II es declarada reina de España con trece años y, al año siguiente, hace una visita oficial al ministerio del Tiempo en la época. Pero el ex agente del ministerio Armando Leiva, profundamente resentido con el ministerio, viaja a 1844 , acompañado de otros agentes que le son absolutamente fieles, para asesinar a la reina. 
Entre los planes de Leiva se incluye el que la madre de Isabel, María Cristina de Borbón, culpe al ministerio del atentado y lo cierre. Salvador decide mandar a Ernesto, a Alonso y a Amelia al siglo XIX para detener Leiva pero los agentes y el propio Salvador son capturados, por lo que el ministerio depende de Irene, cesada por haber ayudado a Leiva a escapar, y de Julián, que está disfrutando de la compañía de su esposa contraviniendo evidentemente las normas del ministerio. La intervención de Angustias, así como el aclarar quien fue el que delató a Armando: la misma Irene es clave para poner fin al complot. 

El octavo y último capítulo es La leyenda del tiempo. La clave de este capítulo está en la aparición de una tableta pintada por Salvador Dalí en el cartel de una representación de "Don Juan Tenorio" realizada en la Residencia de Estudiantes en 1924 y en la que participan Federico García Lorca, Salvador Dalí y Luis Buñuel. Julián, Amelia y Alonso deben viajar a la Residencia de Estudiantes, donde conocerán al escritor Federico García Lorca (Ángel Ruiz), el pintor Salvador Dalí y el cineasta Luis Buñuel. 
Pero pronto descubren que todo es una trampa de alguien que conoce muy bien el ministerio y a ellos mismos, pues empiezan a recibir fotografías de sus vidas en el pasado y en el futuro. Y es entonces cuando la patrulla se empieza a plantear una pregunta: ¿por qué salvar a los protagonistas de la historia de España si no pueden salvar a sus propios seres queridos? Mientras que Alonso parafrasea el Tenorio para enfrentarse a sus enemigos y para disfrute del personal. Y hasta aquí esta primera temporada.

Olivares ha definido El Ministerio del Tiempo como «una serie pop» y con mucha Fantasía ya que la fantasía es cualquier narración que incorpora elementos sobrenaturales sin una explicación científica, y de eso no hay mucho en El Ministerio del Tiempo. ¿Cómo funcionan las puertas? Ni idea, pero funcionan. ¿Cómo funcionan el wifi o los teléfonos móviles en las distintas épocas de la historia? Cualquiera sabe, pero a los personajes no parece intrigarles. ¿Cómo es posible que unas puertas estén en barcos, otras en confesionarios, otras en monasterios, unas sean fijas y otras avancen en el discurrir del tiempo? La apuesta de los Olivares tiene mucho más que ver con la aventura y la diversión que con la verosimilitud científica. Las puertas que custodia esta institución conducen al pasado y permiten regresar de él, pero no llevan al futuro. Se nos aclara en el primer capítulo de la serie, cuando Salvador revela a Julián la naturaleza de las puertas del tiempo. El segundo pregunta entonces si se puede viajar al futuro y el subsecretario responde que no, aportando como explicación que «el tiempo es el que es». 

El 24 de marzo de 2015, TVE confirmó en el FesTVal de Murcia que la serie contaría con una segunda temporada y apenas un mes más tarde, es decir, en este mismo mes de abril se supo como señala Arancha Serrano en 20 minutos que la serie, producción de Onza Partners, Cliffhanger y TVE, ha despertado un enorme interés en el Festival Internacional de Televisión MipTV, que supone uno de los mayores y más importantes mercados de compraventa audiovisual del mundo. 
En la muestra Fresh TV de Cannes, donde se han exhibido las mejores novedades de la pequeña pantalla, la serie ha gustado. "Íbamos con muchas expectativas y saber que iban a incluirlo en la muestra Fresh ha sido un espaldarazo importante", ha explicado Gonzalo Sagardía, director general de la productora Onza Partners. "Eso significa la serie ha sido elegida entre los 15 mejores proyectos de ficción del mundo de los pasados seis meses". 
Tener una adaptación en el mercado americano es la mayor aspiración de la productora y parece que ha habido interés tanto en EE UU y Francia, que se han mostrado especialmente receptivos. "En unos pocos días hemos tenido entre 30 y 40 reuniones, ya tenemos algunas propuestas y en dos o tres semanas podemos tener algo cerrado para Francia y Estados Unidos", ha revelado Sagardía. 
En concreto, Onza se encuentra negociando los derechos de adaptación con agentes que trabajan en los estudios Fox, que ha mostrado un gran interés por hacer una versión propia. Respecto a Francia, la cadena TF1 ha sido la más dispuesta a crear su propio ministerio. También se han mantenido contacto con canales de otros países como Italia y Alemania. También despertado el interés de los compradores en la compra de derechos de emisión, para la difusión del producto tal cual, en la que los países latinoamericanos son el principal mercado. 

Lo cierto es que las críticas profesionales han sido , en general, muy positivas. Federico Marín Bellón del Diario ABC ha dicho de ella que "No es ninguna superproducción pero lo parece (...) los guiones suman un costumbrismo, también suave, aliñado con incontables detalles de humor. La risa llega sin buscarla". Por su parte, Alberto Rey del Diario El Mundo afirma que "'El Ministerio del tiempo' es entretenida, divertida, original y valiente. Y sobre todo es inteligente y trata al espectador como si también lo fuera.". Por último, Ferran Monegal del diario El Periódico señala que es "Apasionante (...) La idea roza lo genial (...) El panorama es suculento. Puede dar de sí una barbaridad." 

La calidad de los personajes y de los intérpretes es dispar. A mis hijos le encanta Alonso de Entrerríos con su ingenua sorpresa ante las maravillas del futuro se ha ganado el beneplácito de la audiencia a lo que se suma la estupenda interpretación de Nacho Fresneda. Sin embargo, las actuaciones de sus dos compañeros son más planas. Por un lado, Aura Garrido en la piel de la decimonónica Amelia Folch y Julián Martínez, posiblemente el personaje más desdibujado pese a que, supuestamente, es el hilo conductor de la serie nuestro representante en el tiempo en la serie.

Natalia Marcos, por su parte, en su blog de Quinta Temporada explica el Por qué 'El Ministerio del Tiempo' ya es una de las series del año, afirmando que Un estupendo capítulo final puso el colofón a la primera entrega de una ficción televisiva que debería estar en todas las listas de las mejores series del año. Entre esas virtudes Nataia destaca el Riesgo y originalidad, el Humor, guiños y referencias. Visibles en detalles como la mención a Curro Jiménez hasta Terminator, pasando por Rosendo o ese Velázquez con aires de grandeza (más que justificados, por otra parte...). 
Según pasaron los capítulos, el drama, la acción y las aventuras fueron ganando más peso, pero de vez en cuando se colaban esos guiños de complicidad que cuentan con la inteligencia y los conocimientos de los espectadores. Igualmente entre los puntales destaca la Conexión con la generación Twitter, por el su carácter didáctico, la búsqueda del Retrato de personajes históricos, el acierto por encontrar personajes protagonistas interesantes, además de los secundarios o episódicos, la gran factura técnica y las diferentes estructuras narrativas. Y , sobre todo, por haber resuelto el gran misterio sobre Jordi Hurtado. 

En definitiva, estamos ante una buena serie , entretenida, efectivamente didáctica, ligera en planteamientos y , como dije antes, naïf. A lo mejor la novedad, lo verdaderamente inverosímil, lo más maravilloso de la serie es que un ministerio español funcione bien. 

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