Creo que hay una generación que todavía no ha dado las gracias a una entidad editorial como fue la Editorial Bruguera. Esta fue creada en 1910 como El Gato Negro por Juan Bruguera Teixidó y que para 1940 se convirtió en la Bruguera. Siguiendo el ejemplo de TBO, aparecida sólo cuatro años antes, en 1917, Bruguera creó en junio de 1921 el semanario Pulgarcito, revista subtitulada "Periódico infantil de cuentos, historietas, aventuras y entretenimientos", cuyo gran éxito hizo prosperar la editorial. Desde 1947, una vez superadas las dificultades de la posguerra, el semanario Pulgarcito se publicó regularmente y la editorial aumentó sus beneficios diversificando sus productos. con las noveles del oeste que leía mi abuelo de Don Marcial Lafuente o con los cuadernillos de nuestros superhéroes hispanos - Capitán Trueno y Jabato- . Eran los años 60 ; para entonces, Bruguera era una de las editoriales de tebeos más importantes de España con tendencia a la expansión al mercado hispano.
En algunas de estas páginas de este blog he reconocido que fui lector tanto de cómics como de tebeos. De los segundos, algo típicamente español , aparte de los vinculados con el guionista Víctor Mora Pujadas llamense Capitán Trueno y Jabato, hay otros muchos como Vázquez - Manuel Vázquez Gallego y sus creaciones emblemáticas tales como Las hermanas Gilda (1949), La familia Cebolleta (1951) y Anacleto, agente secreto (1965), el gran Francisco Ibáñez con su inmortal Mortaledo y Filemón , o el inolvidable José Escobar Saliente responsable de Carpanta o de Zipi y Zape. Todos tienen el denominador en común de haber publicado en la Bruguera.
Centrándonos en los protagonistas que hemos ido a ver, Zipi y Zape, decir que es una historieta humorística creada y desarrollada por el autor español José Escobar a partir de 194.Aparecieron de forma oficial en el número 58 del tebeo "Pulgarcito", aunque Escobar ya había publicado historietas similares uno o dos años antes.
En 1971, Zipi -el rubio- y Zape - el moreno- consiguió sus propias revistas: La homónima "Zipi y Zape", de carácter semanal, y el mensual "Super Zipi y Zape". Zipi y Zape fue una revista juvenil creada por la Editorial Bruguera en 1972 y dirigida por Miguel Martín Monforte, quien fue sustituido en 1975 por Mercedes Blanco Abelaira.
Hubo otras dos revistas de Bruguera asociadas a la serie Zipi y Zape: "Super Zipi y Zape" (1972-1983) y "Zipi y Zape Especial" (1978-1986). En los años ochenta, Escobar se vio obligado a abandonar sus personajes ante el declive económico de Bruguera que fue retomada por Ediciones B. Para 1994 pudieron seguir los personajes , pero no ya de la mano de Escobar.
Ya en octubre de 2013 y para conmemorar el día del cine fuimos a ver Zipi y Zape y el club de la canica, película que contaba con Oskar Santos en la dirección y en el guión, en este caso escrito conjuntamente con Jorge Lara, por supuesto, basándose en el comic de José Escobar. La película está producida por Zeta Cinema, Mod Producciones, Antena 3 Films, Kowalski Films y participan igualmente Euskal Telebista y Movistar +. La inversión alcanzó los 6 000 000 de euros, que acabaron siendo 6.080.000. Al igual que la anterior la banda sonora fue obra del mismo equipo dirigido por Fernando Velázquez, no así la fotografía que en este caso corresponde a Daniel Sosa Segura y el montaje de Carolina Martínez Urbina
El reparto, cambia con respecto a la anterior entrega, contando con Teo Planell como Zipi, Toni Gómez como Zape, Elena Anaya como Señorita Pam,
Iria Castellano como Flequi, Máximo Pastor como Maqui, Ana Blanco de Córdova como Pipi, Fermí Reixach como Jaime, Jorge Bosch como Don Pantuflo Zapatilla el Padre, Carolina Lapausa como Doña Jaimita la Madre, Goizalde Núñez como Sor Enriqueta y Juan Codina como Salomón.
Llegan las navidades y Zipi y Zape la vuelven a liar. Ya que no han recibido los regalos esperados ellos se autoregalan lo que quieren. Entre los objetos unas vengalas que prenden el árbol de Navidad y un enorme incendio. De allí pasan a la prensa que no sólo condena la actitud de los niños, sino la negligente educación dada por los padres.
Esta vez la travesura es tan grande que son castigados sin vacaciones y obligados a acompañar a sus padres a lo que parece ser un aburrido viaje en barco. Para su sorpresa, el destino es una espectacular y remota isla. Allí Don Pantuflo Zapatilla ha de presentar en borrador de su novela a su editor que , parece ser vive en el pueblo de esa remota isla. Pero el mapa que le hbían aportado par llegar a l entrevista, parece erróneo y , finalmente, padres e hijos llegan a una mansión que resulta ser una casa de acogida de niños. Sin embargo, una terrible tormenta les obliga a refugiarse en la casa de acogida ue además es la mansión de la divertida señorita Pam, un lugar en que viven niños sin familia y que disfrutan de un paraíso sin reglas.
Ayudados por Pipi, Maqui y Flequi, los hermanos descubren que la repentina desaparición de sus padres en medio de la noche guarda relación con el secreto que encierran la misteriosa isla y sus extraños habitantes
(En construcción)
Según ha declarado Oskar Santos a blog de cine en una entrevista dada a Mikel Zorrilla , el director declara que "a mí me apetecía hacer una película de aventuras. Esa era la primera razón, pero además era porque a mí la parte costumbrista del tebeo (golpes, huidas,...) , que funciona muy bien en el tebeo, en una película no me gusta. Son películas donde al final es todo un poco repetición de gags y golpes, como que a nivel de trama da muy poco juego, y a mí me parecía que el espíritu que tienen Zipi y Zape de niños traviesos de alguna manera me recordaban a Bart Simpson y me recordaban a esos capítulos de ‘Los Simpson’ donde cogen a Bart y lo meten en una aventura que lleva a una cosa y lleva a otra y lleva a otra. Me vino todo eso a la cabeza y con toda esa mezcla más todas mis referencias del cine de los ochenta con el que crecí o la literatura que leía, que se ve mucho más en esta película.
También Oskar Santos comenta que para la historia "Estábamos ideando Jorge Lara y yo la historia y entonces me vino a la cabeza el cómic, porque teníamos ya a Peter Pan en la historia, sabíamos que la villana iba a guiarse mucho por el personaje de Peter Pan, y nos faltaba algo más ahí. Teníamos toda la trama de los padres y los hijos, que era la primera idea que teníamos. Lo teníamos antes incluso de que nos propusieran hacer una segunda parte, porque tiene que ver con el prólogo que no pudimos rodar en la primera. De repente me vino a la cabeza el cómic de Alan Moore de ‘La liga de los hombres extraordinarios’, que de una manera magistral utilizaba a todos estos personajes para reunirlos y yo me imaginé a Zipi y Zape llegando a una casa con un montón de gente extraña y empiezan a recordarte a Jekyll y Hyde, Sherlock Holmes y tal. Para nosotros entrar en ese mundo fue la idea perfecta para poder imaginar todo lo que crearon esos grandísimos escritores.
Cuando llamamos a Juan Pedro de Gaspar, diseñador de producción de la primera y de la segunda, le digo, ¿Qué tal con Julio Verne, qué tal con ’20.000 leguas de viaje submarino’, te apetece un viaje en el Nautilus? Me responde ¿qué tienes en mente? Y yo digo “Vas a flipar”. O con Juanma Nogales, el supervisor de efectos especiales, que es otro crack, tú vas a su centro de trabajo y su oficina está colonizada por ‘Regreso al futuro? Él cuando lee el guion y ve todo eso… para él es un sueño.
Tanto él como Elena Amaya declaran que no querían hacer una película sólo para niños. Partían de la pregunta para qué sirve un padre. Pues desgraciadamente un padre sirve para muchas cosas, pero sirve para educar. Nosotros decíamos que el padre era el timón y la madre la brújula. Ambos te guían en ese camino de la vida. El camino tienes que hacerlo tú, pero de alguna manera tienen que cumplir esa función.
La película se rodó en parte en Hungría, en el Lago Balaton. Fueron dos semanas de rodaje, combatiendo contra los mosquitos, el calor y la humedad. Allí era donde estaba el castillo.
Sobre la participación de Elena Anaya, fue Rosa Morales, nuestra directora de casting, la que dijo Elena Anaya. Yo la conocía y Fernando Bovaira, nuestro productor, también la conocía y nos pareció ideal, pero no sabíamos si querría.Pues yo creo que lo que ha hecho es arriesgarse y demostrar a todo el mundo que es una todoterreno, que ella puede hacer lo que quiera. Yo sabía que iba a poner la película en otro nivel, y que le iba a dar toda su magia al personaje. Ella declaro que no tuvo muchas dudas tras leer el guión.
Javier Ocaña en el Diario El País nos dice que "Lo peor de la película es que no es Zipi y Zape. Ni en sus formas ni en sus textos (...) Expuesto el espinoso asunto, seamos muy claros: 'Zipi y Zape en la isla del capitán' es una estupenda película de aventuras"
Francisco Marinero que escribe en el Diario El Mundo afirma que es "Una diversión con poca gracia, poca acción y poco espectáculo (...) "
Por su parte, Beatriz Martínez en el El Periódico de Barcelona dice que se trata de "Una producción impecable, cuidada hasta el más mínimo detalle, exuberante en inventiva visual, entre el regusto 'vintage' y ochentero (...) Entretenimiento y diversión sin complejos (...))"
Antonio Weinrichter del Diario ABC sostiene que la película "Resuelve de forma satisfactoria el reto de una gran producción de efectos especiales (...) tiene poco sentido quejarse de la poca fidelidad al original; es sólo que uno se pregunta un poco perplejo qué imaginario posmoderno le estamos proponiendo a nuestros infantes"
Yago García en una de las más prestigiosas revistas de cine españolas, Cinemanía nos dice que "Se apoya en una Elena Anaya exquisita (...) Una historia con gancho, una estética atrayente. (...) "
Pere Vall en la otra, Fotogramas nos dice que "Tiene personajes impagables (...), algunos pasajes grandilocuentes e hinchados, y un lema clarísimo: la aventura siempre es la aventura (...) "
Para Mikel Zorrilla en blog de cine "Los responsables de ‘Zipi y Zape y la isla del capitán’ hayan optado por una aventura más ambiciosa en todos los frentes, desde lo puramente argumental hasta lo visual. En definitiva, ‘Zipi y Zape y la isla del capitán’ es una aventura aceptable pese a no llegar al nivel de su predecesora, en parte porque su mayor ambición se traduce en una película mucho más desequilibrada, que brillan con gran intensidad de forma puntual, pero que en otros momentos cae incluso por debajo de lo mediocre.
Oskar Santos tres años después vuelve a hacer bastante bien su trabajo , pues hace una película blanca, familiar, para niños pero que consigue que los padres no sufran una tarde de tortura. Es todo lo contrario. Bien elaborada la historia, con personajes divertidos asumidos por un plantel de jóvenes actores que hacen bien su trabajo, así como una fantástica cuarentona, Elena Anaya y con una Goizalde Núñez (Sor Enriqueta) disparatada.
La película cuenta con unos buenos efectos especiales, muy apropiados en una película de aventuras y el argumento no está mal, aunque recuerda desde el principio a la obra anterior de El club de la canica. En este sentido parece que Oskar Santos remata la secuela con un merecido homenaje a los padres, a los suyos y a los nuestros. Y es que concretamente sobre la relación paterno-filial se centra esta entretenida cinta de aventura con muchas referencias a la literatura de finales del siglo XIX que pivota sobre H. G. Wells, Julio Verne o Sir Arthur Conan Doyle. Es sin duda un puente entre nuestra generación y los más jóvenes.
Esta vez la travesura es tan grande que son castigados sin vacaciones y obligados a acompañar a sus padres a lo que parece ser un aburrido viaje en barco. Para su sorpresa, el destino es una espectacular y remota isla. Allí Don Pantuflo Zapatilla ha de presentar en borrador de su novela a su editor que , parece ser vive en el pueblo de esa remota isla. Pero el mapa que le hbían aportado par llegar a l entrevista, parece erróneo y , finalmente, padres e hijos llegan a una mansión que resulta ser una casa de acogida de niños. Sin embargo, una terrible tormenta les obliga a refugiarse en la casa de acogida ue además es la mansión de la divertida señorita Pam, un lugar en que viven niños sin familia y que disfrutan de un paraíso sin reglas.
Ayudados por Pipi, Maqui y Flequi, los hermanos descubren que la repentina desaparición de sus padres en medio de la noche guarda relación con el secreto que encierran la misteriosa isla y sus extraños habitantes
(En construcción)
Según ha declarado Oskar Santos a blog de cine en una entrevista dada a Mikel Zorrilla , el director declara que "a mí me apetecía hacer una película de aventuras. Esa era la primera razón, pero además era porque a mí la parte costumbrista del tebeo (golpes, huidas,...) , que funciona muy bien en el tebeo, en una película no me gusta. Son películas donde al final es todo un poco repetición de gags y golpes, como que a nivel de trama da muy poco juego, y a mí me parecía que el espíritu que tienen Zipi y Zape de niños traviesos de alguna manera me recordaban a Bart Simpson y me recordaban a esos capítulos de ‘Los Simpson’ donde cogen a Bart y lo meten en una aventura que lleva a una cosa y lleva a otra y lleva a otra. Me vino todo eso a la cabeza y con toda esa mezcla más todas mis referencias del cine de los ochenta con el que crecí o la literatura que leía, que se ve mucho más en esta película.
También Oskar Santos comenta que para la historia "Estábamos ideando Jorge Lara y yo la historia y entonces me vino a la cabeza el cómic, porque teníamos ya a Peter Pan en la historia, sabíamos que la villana iba a guiarse mucho por el personaje de Peter Pan, y nos faltaba algo más ahí. Teníamos toda la trama de los padres y los hijos, que era la primera idea que teníamos. Lo teníamos antes incluso de que nos propusieran hacer una segunda parte, porque tiene que ver con el prólogo que no pudimos rodar en la primera. De repente me vino a la cabeza el cómic de Alan Moore de ‘La liga de los hombres extraordinarios’, que de una manera magistral utilizaba a todos estos personajes para reunirlos y yo me imaginé a Zipi y Zape llegando a una casa con un montón de gente extraña y empiezan a recordarte a Jekyll y Hyde, Sherlock Holmes y tal. Para nosotros entrar en ese mundo fue la idea perfecta para poder imaginar todo lo que crearon esos grandísimos escritores.
Cuando llamamos a Juan Pedro de Gaspar, diseñador de producción de la primera y de la segunda, le digo, ¿Qué tal con Julio Verne, qué tal con ’20.000 leguas de viaje submarino’, te apetece un viaje en el Nautilus? Me responde ¿qué tienes en mente? Y yo digo “Vas a flipar”. O con Juanma Nogales, el supervisor de efectos especiales, que es otro crack, tú vas a su centro de trabajo y su oficina está colonizada por ‘Regreso al futuro? Él cuando lee el guion y ve todo eso… para él es un sueño.
Tanto él como Elena Amaya declaran que no querían hacer una película sólo para niños. Partían de la pregunta para qué sirve un padre. Pues desgraciadamente un padre sirve para muchas cosas, pero sirve para educar. Nosotros decíamos que el padre era el timón y la madre la brújula. Ambos te guían en ese camino de la vida. El camino tienes que hacerlo tú, pero de alguna manera tienen que cumplir esa función.
La película se rodó en parte en Hungría, en el Lago Balaton. Fueron dos semanas de rodaje, combatiendo contra los mosquitos, el calor y la humedad. Allí era donde estaba el castillo.
Sobre la participación de Elena Anaya, fue Rosa Morales, nuestra directora de casting, la que dijo Elena Anaya. Yo la conocía y Fernando Bovaira, nuestro productor, también la conocía y nos pareció ideal, pero no sabíamos si querría.Pues yo creo que lo que ha hecho es arriesgarse y demostrar a todo el mundo que es una todoterreno, que ella puede hacer lo que quiera. Yo sabía que iba a poner la película en otro nivel, y que le iba a dar toda su magia al personaje. Ella declaro que no tuvo muchas dudas tras leer el guión.
Javier Ocaña en el Diario El País nos dice que "Lo peor de la película es que no es Zipi y Zape. Ni en sus formas ni en sus textos (...) Expuesto el espinoso asunto, seamos muy claros: 'Zipi y Zape en la isla del capitán' es una estupenda película de aventuras"
Francisco Marinero que escribe en el Diario El Mundo afirma que es "Una diversión con poca gracia, poca acción y poco espectáculo (...) "
Por su parte, Beatriz Martínez en el El Periódico de Barcelona dice que se trata de "Una producción impecable, cuidada hasta el más mínimo detalle, exuberante en inventiva visual, entre el regusto 'vintage' y ochentero (...) Entretenimiento y diversión sin complejos (...))"
Antonio Weinrichter del Diario ABC sostiene que la película "Resuelve de forma satisfactoria el reto de una gran producción de efectos especiales (...) tiene poco sentido quejarse de la poca fidelidad al original; es sólo que uno se pregunta un poco perplejo qué imaginario posmoderno le estamos proponiendo a nuestros infantes"
Yago García en una de las más prestigiosas revistas de cine españolas, Cinemanía nos dice que "Se apoya en una Elena Anaya exquisita (...) Una historia con gancho, una estética atrayente. (...) "
Pere Vall en la otra, Fotogramas nos dice que "Tiene personajes impagables (...), algunos pasajes grandilocuentes e hinchados, y un lema clarísimo: la aventura siempre es la aventura (...) "
Para Mikel Zorrilla en blog de cine "Los responsables de ‘Zipi y Zape y la isla del capitán’ hayan optado por una aventura más ambiciosa en todos los frentes, desde lo puramente argumental hasta lo visual. En definitiva, ‘Zipi y Zape y la isla del capitán’ es una aventura aceptable pese a no llegar al nivel de su predecesora, en parte porque su mayor ambición se traduce en una película mucho más desequilibrada, que brillan con gran intensidad de forma puntual, pero que en otros momentos cae incluso por debajo de lo mediocre.
Oskar Santos tres años después vuelve a hacer bastante bien su trabajo , pues hace una película blanca, familiar, para niños pero que consigue que los padres no sufran una tarde de tortura. Es todo lo contrario. Bien elaborada la historia, con personajes divertidos asumidos por un plantel de jóvenes actores que hacen bien su trabajo, así como una fantástica cuarentona, Elena Anaya y con una Goizalde Núñez (Sor Enriqueta) disparatada.
La película cuenta con unos buenos efectos especiales, muy apropiados en una película de aventuras y el argumento no está mal, aunque recuerda desde el principio a la obra anterior de El club de la canica. En este sentido parece que Oskar Santos remata la secuela con un merecido homenaje a los padres, a los suyos y a los nuestros. Y es que concretamente sobre la relación paterno-filial se centra esta entretenida cinta de aventura con muchas referencias a la literatura de finales del siglo XIX que pivota sobre H. G. Wells, Julio Verne o Sir Arthur Conan Doyle. Es sin duda un puente entre nuestra generación y los más jóvenes.
Me ha encantado Zipi y Zape! la recomiendo
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