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martes, 25 de febrero de 2025

El otro amor



Melodrama del año 1947 firmado por el húngaro André de Toth, director que en otros géneros como el western, cine bélico e incluso el de terror, y que cuenta con dos actores que estaban en ese momento en la cúspide como Bárbara Stanwyck y David Niven, nunca parecen acompañados de Gilbert Roland, Joan Lorring y Richard Conte.


La historia se centra en una pianista de fama y prestigio internacional, Karen Duncan (Bárbara Stanwyck) -a la que vemos en la primera escena tocando en un gran auditorio-, y que es derivada por su representante a un sanatorio en Suiza para tratar una enfermedad pulmonar, ya que se encuentra  gravemente enferma de tuberculosis.

Sin saber que su enfermedad es terminal, la pianista Karen Duncan se interna en esta sanatorio en plenos Alpes Suizos bajo el cuidado del doctor Tony Stanton (David Niven), un prestigioso doctor y cuya actitud severa no le agrada a Karen. 

En principio, atiende a todos los requerimientos del Doctor y de su equipo de enfermeras. Nada más llegar recibe un ramo de flores y cuando descubre que no es para ella, las devuelve. En ese momento se entera que la anterior paciente que ocupaba su habitación ya "se ha marchado", así como el hombre que le enviaba las flores. Eso le deja perpleja tanto como el ruido de unas puertas correderas metálicas que escucha en mitad de la noche, que resultarán ser las del tanatorio de la clínica. 

Lleva una dieta estricta y es obligada a dejar de fumar. Mientras se recupera de su agotamiento y se va sintiendo mejor conoce a otra compañera de la clínica Celestine Miller (Joan Lorring ) que le habla del carácter amable pero intransigente en lo profesional del Doctor Santon. 

Un día, ella y otra paciente, Celestine Miller (Joan Lorring ), con la que le gusta estar, dado su carácter alegre y divertido, disfrutan de un día fuera de la clínica y de una noche de fiesta, a pesar del consejo de su médico. Precisamente en ella vuelve a reencontrase con un corredor de autos, Paul Clermont (Richard Conte), que reconoce a Karen con la que coincidió mientras ella llevaba el coche y tuvo un leve incidente.

Esa noche él la invita a Montecarlo . Aunque ella se siente atraída por su médico, la aparente falta de interés de Tony en todo lo que no sea su salud hace que Karen acepte la invitación de Paul. Ella juega, fuma y bebe, luego regresa al sanatorio para descubrir que Celestine ha muerto. Presa del pánico, el primer impulso de Karen es seguir las órdenes del médico de no hacer ningún esfuerzo, pero acaba desobedeciendo y se va de nuevo con Paul, poniendo en peligro su bienestar y optando por llevar una vida salvaje al lado de un jugador, ignorando el amor que le profesa su médico. 

Un día se persona en el Casino el Doctor Stanton que sabe que su paciente está allí, y le pide , primero a ella, y luego a Paul que regrese por su salud. Es en ese momento cuando paul descubre la gravedad del caso. 

Sólo en el último momento, cuando dolida por la aparente indiferencia profesional de Tony, el carácter relajado y propio de un jugador como Paul, y violentada por uno de los crupiers del casino ( Gilbert Roland), vuelve al lado de Tony, quien le propone matrimonio y observa atentamente cómo su futuro juntos pende de un hilo, un hilo que parece que se romperá de forma segura.  

El guion fue escrito por Ladislas Fodor y Harry Brown partiendo de una obra "Beyond" escrita por Erich Maria Remarque, el que fuera responsable de la obra " Sin novedad en el frente".Producido por David Lewis para la United Artists y la Metro-Goldwyn-Mayer contó con la fotografía de Víctor Milner, el montaje de Walter A. Thompson y la música de Miklós Rózsa. 

En su reseña para The New York Times , Bosley Crowther calificó la película como "un típico romance artificial sobre el desgarrador tema de Camille ". 

En el diario El Mundo se destaca que está interpretada por " Dos actores de gran nivel encabezan el reparto de este drama romántico que ha pasado por la historia del cine sin pena ni gloria, Barbara Stanwyck y David Niven. Ambos, se pusieron bajo las órdenes del director austro-húngaro André De Toth, cuyo filme más conocido es ''Los crímenes del museo de cera".  

A destacar la magistral interpretación llevada a cabo por Bárbara Stanwyck y la sofisticada música de Rózsa que es todo un lujo de este drama romántico que cuenta con un gran director como André de Toth que en "The Other love" muestra la maestría de la puesta en escena en momentos como el primer plano de Barbara Stanwyck llorando recostada en la mesa. Introduce en el mismo plano esta situación junto al diamante que representa el encuentro con el amor y el vaso de agua que mitiga los síntomas de su enfermedad y una elegante escenografía. En esta película Bárbara Stanwyck vuelve a componer un magnífico personaje de mujer fuerte y rebelde que se debate entre el amor y la supervivencia

La película refleja la lucha entre el deber y el deseo en el que la protagonista, Karen, quiere vivir intensamente, pero su enfermedad la obliga a enfrentarse a la fragilidad de la vida. Tiene las virtudes propias del cine clásico dominado por esa estética visual y elegante contando con unma fotografía en blanco y negro con un uso sofisticado de sombras y luces, típico del cine de la época en ese gran trabajo de Víctor Milner y con el tono melodramático clásico en el que están presente los sentimientos intensos, personajes atrapados por el destino y una historia romántica trágica todo ello acompañado de una grandiosa banda sonora compuesta por Miklós Rózsa.

jueves, 11 de abril de 2024

Muerte en el Nilo



Creo que en todas nuestras las casas, especialmente, en las que hay personas con una determinada edad,  que ahora ronda entre los 60 y los 45 años había libros de Agatha Christie. Desde luego en la mía lo había, y en la de mi mujer también esos libros estaban allí. Desde las obras menos conocidas, como el Espejo se rompió de parte a parte, cuya versión cinematográfica pude ver no hace mucho, hasta las más conocidas como Asesinato en el Orient Express o esta que he podido ver en la tarde  noche de hoy, Muerte en el Nilo.

Los productores John Brabourne y Richard Goodwin de EMI Films y Mersham Productions Ltd. que manejaron una cifra cercada de 8 millones de dólares de presupuesto querían repetir su éxito de Asesinato en el Orient Express. Por ello hicieron esta segunda segunda adaptación de una obra de Agatha Christie al cine contando con el guion de Anthony Shaffer. Llevados por ese éxito se quiso incluso cambiar el nombre de esta segunda adaptación queriéndolo llamar Asesinato en el Nilo, pero al final se decidió respetar el título original de la novel. 

La película contó con la música de Jacob Gade y Herb Brown, así como con la de Nino Rota, la fotografía de Jack Cardiff, el montaje de Malcolm Cooke y el vestuario de Anthony Powell. 

En este caso se trata de una del año 1978 dirigida por John Guillermin y que respondía al modelo coral y de alto pedigrí desde el punto de vista de actores y actrices que tanto gusta a aquellos que llevan a la Gran Pantalla la obra de Christie. En este caso la película contó, entre otros, con Peter Ustinov, Jane Birkin, Lois Chilles, Bette Davis, Mia Farrow George Kennedy, David Niven y Angela Lansbury, por nombrar a algunos /as, lo que vino a ser eso de un reparto estelar. Por cierto, el pasado año falleció una de las protagonistas, Birkin, y el anterior, otra, Lansbury, quedando únicamente de aquel reparto Lois Cilles, Mia Farrow, Maggie Smith y Olivia Hussey. 



La película comienza con la llegada de Linnet Ridgeway (Lois Chilles) una rica heredera en su coche a su mansión británica, donde esperan todos sus criados. Nada más bajarse del coche prefiere ver las obras que se están realizando en la casa que saludar a los criados como le dice al mayordomo principal, Barnstaple (Harry Andrews). 

Tras eso va a ver a su secretaria y amiga Jacqueline "Jackie" de Bellefort (Mia Farrow) a la que le cuenta que no ha permitido darle la libertad a su asistente personal, Louise Bourget (Jane Birkin), pues quería casarse con un egipcio que, tras investigarlo, estaba ya casado; mientras Jackie le dice que está enamorada y que se va a casar con Simon Doyle (Simon MacCorkindale), que podía contratarlo como administrador de su propiedad, pues está sin trabajo en ese momento. 



Cuando llega la rica heredera acepta contratar al prometido de su amiga Jacqueline. Poco después, Linnet y Simon se casan tras un noviazgo vertiginoso. 




Mientras pasan su luna de miel en Egipto, la abandonada Jackie los acecha y acosa continuamente. También en Egipto se encuentra el detective Hércules Poirot, quien poco a poco se entera de la situación del trío. Poirot no está solo , pues va acompañado del Coronel Race ( David Niven). 



Entre tanto vamos viendo al resto de protagonistas que son testigos de la tensión causada por Jacqueline. Entre ellas está Marie Van Schuyler (Bette Davis), una mujer mayor codiciosa de hacerse con todas las joyas que pueda, que va acompañada de su asistente personal Miss Bowers (Maggie Smith; una chica de la alta sociedad venida a menos por la ruina causada por el padre de la Ridgeway. Junto a ellas en el hotel son testigos igualmente de las desavenencias la pareja de madre e hija formada por Salome Otterbourne (Angela Lansbury) y su hija Rosalie ( Olivia Hussey). La madre es escritora de éxito de novelas de amor y erotismo y tiene pendiente una demanda de la señorita Ridgeway por difamación. 



Junto a ellas está un joven intelectual marxista de nombre James Ferguson (Jon Finch ) que considera a la rica propietaria un parásito social, el Doctor Ludwig Bessner ( Jack Warden ), que ha sido criticado públicamente por los tratamientos de sus clínicas por parte de Linett Ridgeway tras haber tenido problemas una de sus amigas, y el inversor y tío de Linnet Ridgeway, Andrew Pennington ( George Kennedy) que ha ido a Egipto cuando se ha enterado de la boda de Linnet con la intención de que le firme unos documentos que lo benefician a él. Por supuesto, también está la asistente personal de Linnet, la joven Louise Bourget (Jane Birkin), que sigue con la idea de cobrar el dinero adeudado por parte de Linnet e irse con su amante.  



Para evadirse de la presencia de Jacqueline, los Doyle fingen ir a la estación de tren de Asuán antes de dar marcha atrás para abordar un barco de vapor del Nilo, el S.S. Karnak, cuyo propietario,  Mr. Choudhury (I. S. Johar ) los recibe amablemente, precisamente lo mismo que hacen el resto de personajes ya citados y que serán los protagonistas de esta historia. 



El S.S. Karnak inicia su periplo por el Nilo. Durante una excursión en tierra al Templo de Karnak, una gran piedra es empujada desde un pilar, evitando por poco a los Doyles. 



La pareja se sorprende cuando Jackie durante una visita a Abu Simbel se une al crucero, habiendo ignorado el consejo del detective Hercule Poirot de mantenerse alejado. Jackie también revela que lleva una pequeña pistola calibre 22 y que es una gran tiradora. 

Esa noche, Jackie se enfrenta a Simon en un estado de ebriedad y le dispara en la pierna, siendo luego  escoltado a su habitación. 

A la mañana siguiente, Linnet es encontrada muerta con una herida de bala en la cabeza. La letra "J" escrita con sangre en la pared encima de su cama implica a Jackie, pero tiene una coartada sólida, ya que la señorita Bowers la sedó con morfina y la vigiló toda la noche. 

Poirot y su amigo, el coronel Race, investigan. Descubren que numerosos pasajeros tenían motivos para matar a Linnet: Louise Bourget, la doncella de Linnet, estaba amargada porque su amante rechazó una dote prometida; Andrew Pennington, el administrador estadounidense de Linnet, le estaba malversando; La señora van Schuyler, una anciana socialité estadounidense y cleptómana, quería el collar de perlas de Linnet; la enfermera de van Schuyler, la señorita Bowers, culpó al padre de Linnet por arruinar económicamente a su familia; Salome Otterbourne, una novelista romántica, estaba siendo demandada por Linnet por difamación; la hija de la señora Otterbourne, Rosalie, quería proteger a su madre de la ruina financiera; Jim Ferguson, un franco escritor comunista, odiaba a Linnet por su riqueza; y el Dr. Ludwig Bessner, un psiquiatra suizo, se enfrentó a Linnet exponiendo sus tratamientos poco ortodoxos que perjudicaban a su amiga. 

Poco después, la tripulación saca un pequeño bulto del Nilo. La pistola desaparecida está envuelta en la estola de la señora van Schuyler, que tiene un pequeño agujero de bala. También hay un pañuelo manchado de sangre y un cenicero de mármol utilizado como pesa. 

Cuando se descubre que faltan las joyas de perlas de Linnet, la Sra. van Schuyler niega habérselas llevado. Poco después, el collar se encuentra en el cuerpo de Linnet, lo que hace que Poirot deduzca que la señora van Schuyler los "devolvió". 



Mientras Poirot y Race llevan a cabo su investigación, Louise Bourget es encontrada muerta, con la garganta cortada con el bisturí del Dr. Bessner y un fragmento de un billete en la mano. Poirot deduce que vio al asesino salir de la cabaña de Linnet y la extorsionó por su silencio. 

Salomé Otterbourne afirma que vio al asesino de Louise y está a punto de contárselo a Poirot y Race cuando recibe un disparo a través de la puerta abierta de la cabina con el revólver de Pennington, que es de un calibre mayor que el que disparó a Linnet. 

Poirot reúne a todos en el salón para media hora más tarde y les revela que Simon mató a Linnet, con Jackie como su cómplice y autor intelectual del complot; habían seguido siendo amantes todo el tiempo. Jackie fingió dispararle a Simon, llamando la atención sobre sí misma y asegurándose de que Simon se quedara solo temporalmente mientras la llevaban a su cabaña. 

Después de correr al camarote de Linnet y dispararle, Simon, al regresar al salón, se pegó un tiro en la pierna, usando la estola de la Sra. Van Schuyler como silenciador. Luego reemplazó uno de los cartuchos vacíos por uno nuevo, en caso de que encontraran el arma. Envolviendo el arma en la estola, junto con un cenicero de mármol y el pañuelo supuestamente manchado de sangre, arrojó los objetos por la ventana abierta al Nilo. Luego usó otro pañuelo en su pierna ahora sangrante. Más tarde, Jackie mató a Louise, quien estaba chantajeando a Simon porque lo vio entrar a la cabaña de Linnet, luego mató a la Sra. Otterbourne, quien vio a Jackie salir de la cabaña de Louise. 

El plan era que Simon matara a Linnet, heredara su dinero y se casara con su antiguo amor en una fecha posterior. Cuando Simon afirma que Poirot no tiene pruebas, Poirot afirma que la policía puede realizar una prueba de residuos de disparo conocida como prueba de "moulage" tanto a él como a Jacqueline. 

Al darse cuenta de que los han atrapado, Jackie confiesa y abraza a Simon. Poirot de repente se da cuenta de que ha recuperado su pistola, pero no puede evitar que le dispare fatalmente a Simon y luego a ella misma. 

Anthony Shaffer escribió el guion intentando evitar las dificultades que implica llevar a Agatha Christie al cine. En primer lugar despojó a la adaptación de los tintes colonialistas que impregnaban la novela -escrita en 1937- que justificaban la existencia del Imperio Británico, pues era consciente de que en 1978, 18 años después de la celebración de la Conferencia de Bandung, cualquier ficción que subrayase la superioridad de la cultura occidental sobre otras estaría llamada a generar polémicas. En un mismo sentido, y en colaboración con el actor Jon Finch, reportó dignidad al personaje marxista de la novela (Jim Ferguson), con el cual se cebaba la autora con una gran cantidad de defectos y vicios. 

En segundo término, procedió a eliminar personajes: el italiano Richetti, la señora Allerton y su hijo Tim (algunos de cuyos rasgos se adivinan en el nuevo Ferguson), la sobrina de la señora Van Schuyler Cornelia Robson... De esta manera se reduciría el número de interrogatorios efectuados por Poirot. Ahora bien, para evitar que éstos no fueran acusados una vez más de ser personajes mecánicos introdujo (con ayuda del realizador John Guillermin y del compositor Nino Rota) elementos de tensión en ellos. 

En tercer lugar, Anthony Shaffer sabía que había que extraer interés dramático a un material de partida más bien insustancial. Si Asesinato en el Orient Express versaba sobre la culpabilidad colectiva de una sociedad, Muerte en el Nilo ofrece tres niveles de discurso.

El primero, esbozado por José María Latorre en un artículo, recae sobre el poder de la vida y que se establece desde el momento en que Poirot alza la vista a una esfinge egipcia que parece observarle. A lo largo de la película Poirot asistirá a los momentos claves de la trama. 

El segundo, aprovechando el carácter egoísta de la asesinada, Shaffer habló sobre las diferencias de la clase y las relaciones de dominación. Linnet, a lo largo de la función, calumnia a un médico alemán, el Doctor Bessner (Jack Warden) que no puede permitirse ningún escándalo relacionado con su clínica; demanda a una escritora alcoholizada Salómé Otterbourne (Angela Lansbury) por escribir una novela erótica inspirada en su figura; prohíbe a su criada Louise (Jane Birkin) dejar su empleo para reunirse con su amante egipcio... Un carácter dominante y expeditivo que heredó de su padre, que arruinó a la familia de la señorita Bowers (Maggie Smith), forzándola a servir como enfermera. Ahora bien, a pesar del esfuerzo de Shaffer en la escritura de guion, varios especialistas consideran a Muerte en el Nilo como una película de equipo. 

Así por ejemplo José María Latorre en su libro Nino Rota: la imagen de la música señalaba que el trabajo del compositor giraba sobre tres direcciones: 1) componer temas de inspiración egipcia, 2) resaltar la influencia del paisaje sobre los personajes, 3) crear un clima plagado de presagios. 

En un mismo sentido la labor fotográfica de Jack Cardiff procuraba resaltar el pasado histórico del país, primando los colores amarillos y azules, para sobrecoger a las criaturas ideadas por Christie. 

El trabajo de John Guillermin se caracterizó por cierto sentido de lo atmosférico  como los travellings que relacionan el vapor con la tierra y del detalle  a un camarero del barco se le cae una toalla al suelo y cuando la recoge la encuentra bañada en sangre. John Guillermin le encomendó expresar las vacilaciones de Poirot, reproduciendo sus dudas y sus procesos mentales con la mirada. 

Con respecto al rodaje parece ser que John Guillermin cuando iba a rodar junto a Bette Davis, la víspera de rodar con él, no pudo dormir porque sentía muchísima admiración hacia el intérprete. Al mismo tiempo, Ustinov se quedó desvelado, abrumado por compartir el encuadre con la protagonista de Eva al desnudo.



La película está rodada en Egipto, y en su mayor parte a bordo de un barco de vapor en el río Nilo. Para el rodaje de la obra cinematográfica se necesitaron un total de ocho semanas (dos meses), cuatro a bordo de ese barco de vapor, Karnak (SS Sudan), y las otras cuatro en lugares como Asuán, Abu Simbel, Luxor y El Cairo. 



También se rodó en muchos de los lugares de interés cultural de Egipto, como las grandes pirámides, la Esfinge y los templos de Abu Simbel y Karnak. 

Cabe destacar también que durante el rodaje, para no tener que soportar las temperaturas de más de 50° (registraron una máxima de 54°) cuando llegaba el mediodía, se empezaba a maquillar y peinar a los actores y actrices del reparto en plena noche de 4.00 a 6.00 de la madrugada .



Sin embargo, durante el rodaje también surgieron varios problemas, puesto que ya se hicieron reservas hoteleras para  todo el equipo de rodaje y a causa de ello los actores fueron trasladados de hotel en hotel. A veces eso ocurría incluso a diario. Además, nunca se le permitió al director John Guillermin ver esos hoteles. 

Por orden de los productores, el largometraje se le envió a Londres directamente a él una vez acabado. 

En taquilla la obra cinematográfica recaudó 14.560.000 dólares estadounidenses (equivalentes a 54 361 339 dólares de 2023), por debajo de los 25.000.000 de dólares que consiguió su predecesora Asesinato en el Orient Express, cinco años atrás y, en cuanto a la crítica, la cinta recibió unas críticas generalmente positivas. 

En la británica Empire Ian Nathan escribió que "Puede que Ustinov no sea el Poirot que tenemos en la cabeza, tras la serie de David Suchet: pero esto es puro Agatha Christie, impregnado en nostalgia y atmósfera (...)" 

En Variety se dijo que era "Una versión cinematográfica inteligente, ingeniosa, con una buena trama, bien producida y espléndidamente interpretada" 



Más duras fueron las críticas de Pauline Kael y en otros diarios neoyorkinos. Pauline Kael en las páginas de The New Yorker comentó que "Resulta fatalmente superficial en emoción, atmósfera y suspense. Pero aunque el efecto general es decepcionante, momento a momento los detalles siempre son interesantes" 

Y en las del The New York Times se escribió que era "Un aburrimiento grande, caro y plagado de estrellas, en el que un montón de talentos famosos se permiten - o más bien, se les anima - a hacer una serie de gestos camp de sus propios manierismos" 

Ya en España Fernando Morales en El País sostuvo que era una "Interesante versión de la novela de Agatha Christie, bastante fiel al original y con reparto de lo más acertado. Intriga con solera" .

Para Fausto Fernández en Twitter se trata de pura delicia criminal y bitchie. 

Y Santiago García en Leer Cine comentó que "El Poirot de Ustinov es perfecto. Carismático, divertido, recto, brillante, egocéntrico y excéntrico. Un detective digno de lo que soñó su autora y con semejante equipo alrededor devolviendo sus filosos diálogos y miradas todo es un espectáculo en sí mismo."  

La película, es un intenso thriller criminal basado en la novela de la escritora Agatha Christie y el filme obtuvo el Óscar al mejor diseño de vestuario (Anthony Powell). 



En los Globos de Oro fue candidata al premio de mejor película extranjera. Y en los BAFTA, pues la película es británica, la película fue ganadora del Premio al mejor vestuario, y candidata al premio de mejor actor (Peter Ustinov) y a la mejor actriz de reparto (Maggie Smith y Angela Lansbury). Para la National Board of Review se llevó el premio a la mejor actriz secundaria para Angela Lansbury.



viernes, 6 de octubre de 2023

A vida o a muerte



A Matter of Life and Death o como he leído Highway to Heaven es la mítica película de Michael Powell y Emeric Pressburger - aquí directores, productores y guionistas- que  el historiador de cine británico Mark Cousins considera como determinante para explicar por dónde evoluciona el cine británico de posguerra. 



Es una película del año 1946 producida con The Archers. Cuanta con la participación de David Niven y Kim Hunter, Robert Corte, Katheleen Byron - el ángel de la recepción- , un jovencísimo Richard Attenborough como joven piloto derivado, Roger Livesey como el Doctor Frak Reeves , Raymond Massey.

La película comienza con una imagen del Universo y como nosotros en el mismo somos nada, y que una historia humana es menos que nada, sin embargo nos cuenta la historia de un aviador británico Peter Carter (David Niven) que está a punto de de morir en un avión incendiado. El 2 de mayo de 1945, el líder de escuadrón Peter Carter, un piloto de la RAF, está volando un bombardero Lancaster muy dañado y en llamas sobre el Canal de la Mancha, después de una misión sobre Alemania.



Antes de morir contacta con la central y habla con la operadora norteamericana June (Kim Hunter). Carter espera morir, después de ordenar a su tripulación que se retire, sin revelarles que su propio paracaídas ha sido destruido. El único operador de radio que lo recibe es June, en una base de la USAAF en la costa de Inglaterra. 

Tras una breve conversación en la que le confiesa sus pensamientos más íntimos, casi de despedida, en la que él le pide que se ponga en contacto con su madre y con sus hermanas para decirle que las quiere en un segundo comienzan a enamorarse. 



Después de esto el aviador se despide y se lanza al vacío sin paracaídas a más de mil pies de altura. Peter debería haber muerto en ese momento, pero el conductor 71 (Marius Goring), el guía enviado para escoltarlo al Otro Mundo, lo extraña en la espesa niebla sobre el Canal de la Mancha.



La caída supone su muerte segura pero cuando vemos la playa se recupera aunque debería estar muerto. Pero tras ver sobrevolar un avión , un "mosquito" De Havilland vuela bajo, descubre, desconcertado, que todavía está vivo. Peter se encuentra con June regresando en bicicleta a su habitación después de su turno de noche y se enamoran. 



Tras eso nos enteramos que en el cielo lo están esperando. Un enviado del cielo, el conductor 71, un aristócrata francés guillotinado en la Revolución, parando el tiempo mientras se encuentra junto a June, le explica que debería estar muerto, pero él renuncia a ingresar en el cielo por haberse enamorado en el último momento de la radiotelegrafista americana, consiguiendo que su caso sea llevado al juicio apelando su muerte ante un tribunal celestial y finalmente consiguiendo unos días, tres, de prórroga para su incorporación. Mientras el conductor 71 consulta a sus superiores, Peter sigue viviendo. 



El conductor 71 le informa en otro momento que debe elegir un abogado defensor entre todas las personas que han muerto alguna vez, pero tiene dificultades para elegir uno. Mientras June recurre al Dr. Reeves para que ayude al piloto. 



Las visiones de Peter son diagnosticadas por el doctor Reeves, como un síntoma de una lesión cerebral (aracnoiditis adhesiva crónica por una conmoción cerebral leve dos años antes) y está programado para una cirugía.

Reeves muere en un accidente de motocicleta mientras intenta encontrar la ambulancia que llevará a Peter al hospital. La muerte de Reeves le permite actuar como abogado de Peter. Durante el juicio, y simultáneamente a esta situación sobrenatural, un equipo de médicos lucha en el quirófano para curar a Peter una lesión en el cerebro. 

Durante el juicio Reeves sostiene que, sin ser culpa suya, a su cliente se le dio tiempo adicional en la Tierra y que, durante ese tiempo, se enamoró y ahora tiene un compromiso terrenal que debería tener prioridad sobre el reclamo de la otra vida sobre él. 

El asunto llega a un punto crítico, en paralelo con la cirugía cerebral de Peter, ante una corte celestial; la cámara se aleja de un anfiteatro para revelar que es tan grande como una galaxia espiral. 

El fiscal es el estadounidense Abraham Farlan, que odia a los británicos por convertirlo en la primera víctima de la Guerra Revolucionaria Estadounidense. Reeves cuestiona la composición del jurado, que está formado por representantes que tienen prejuicios contra los británicos. Para ser justos, el jurado es reemplazado por una mezcla multicultural de estadounidenses modernos cuyos orígenes son tan variados como los de aquellos a quienes reemplazan.

Reeves y Farlan hacen comparaciones con la nacionalidad del otro para respaldar sus posiciones. Al final, Reeves hace que June suba al estrado (el  enviado o conductor 71 la hace quedarse dormida en el mundo real para que pueda testificar) y le demuestra que ama genuinamente a Peter diciéndole que la única forma de salvar su vida es ocupar su lugar. 

Después de lo cual sube la escalera al Otro Mundo sin dudarlo y se deja llevar, dejando atrás a Peter. La escalera se detiene abruptamente y June regresa corriendo a los brazos abiertos de Peter. Como explica triunfalmente Reeves, "... nada es más fuerte que la ley en el universo, pero en la Tierra, nada es más fuerte que el amor". 



 El jurado falla a favor de Peter. El juez muestra a Reeves y Farlan la nueva esperanza de vida otorgada al acusado; Reeves lo llama "muy generoso", y Farlan se queja en broma y luego acepta.

Luego, los dos se involucran en bromas de apoyo entre sí y contra el severo registrador jefe, quien protesta contra la violación de la ley. En el quirófano, el cirujano declara que la operación fue un éxito. 



Se filmó en D&P Studios y Denham Studios en Denham, Buckinghamshire, Inglaterra, y en locaciones de Devon y Surrey. La escena de la playa se rodó en Saunton Sands en Devon, y el pueblo que se ve en la cámara oscura era Shere en Surrey. La escena en la que Carter se lava en la playa, la primera escena filmada, donde el director de fotografía Jack Cardiff empañó la lente de la cámara con su aliento para crear la apariencia que quería. 

La película tuvo un extenso período de preproducción debido a la complejidad de la producción. Por ejemplo, la enorme escalera mecánica que une este mundo con el otro, llamada "Operación Ethel" por la firma de ingenieros que la construyó bajo los auspicios del Ayuntamiento de Londres. La producción se llevó a cabo del 2 de septiembre al 2 de diciembre de 1945. Tardó tres meses en fabricarse y costó una millonada. El ruido de la maquinaria impidió grabar la banda sonora en vivo; todas las escenas con la escalera mecánica fueron dobladas en posproducción. 



La decisión de filmar las escenas del Otro Mundo en blanco y negro, ese 'Cielo' surrealista y en blanco y negro, y con  esa escalera eterna producto de un grandioso diseño de producción, aumentó las complicaciones. Fueron filmadas en technicolor, pero no se agregó color durante la impresión, lo que dio un tono nacarado a las tomas en blanco y negro, un proceso citado en los créditos de pantalla como "Color y tinte monocromático procesados en technicolor".

Otras secuencias también presentaron desafíos, como el juego de tenis de mesa con acción detenida para el cual Hunter y Livesey fueron entrenados por los campeones Alan Brooke y Viktor Barna.



Los dos directores juegan durante todo el metraje con la fantasía y la realidad en esta extraña película de ciencia ficción romántica que pasa del color el mundo terrenal al blanco y negro celestial. 

Los Archers contaron como ayudantes de dirección con Parry Jones Jr., Paul Kelly, Laurie Knight y Pat Marsden. En la dirección artística estuvieron acompañados de Arthur Lawson, Joseph Bato, William Hutchinson, William Kellner, Terence Morgan II, Don Picton y Roger Ramsdell y en la producción de George R. Busby. 

La película fue reconocida por el Círculo de Críticos de Nueva York con un premio a la mejor película y mejor dirección. Para la crítica estamos ante una obra maestra. Más de 50 años después de su estreno, en 1999, Una cuestión de vida o muerte ocupó el puesto 20 en la lista de las 100 mejores películas británicas del British Film Institute; ocupó el puesto 90 en la encuesta The Sight and Sound Greatest Films of All Time 2012 considerada por algunos como la más autorizada del mundo, y el 78.º en 2022. 

Para la crítica es una película llena de elogios. Tras su estreno en la ciudad de Nueva York, Bosley Crowther dijo que la película realizada por Michael Powell y Emeric Pressburger era la mejor película navideña jamás realizada, y la elogió por su encanto elegante, humor inteligente y sorprendente arte visual. 

En tiempos más cercanos, por ejemplo, Roger Ebert en su web antes de fallecer nos dejó en rogerebert.com que se trata de "Una de las películas más audaces jamás hechas, por su visión grandiosa y por la manera inglesa acogedora en la que está expresada (...) La historia es magnífica e íntima (…) "

Dave Kehr en The New York Times nos dice que "Los elementos compositivos parecen haber sido escogidos con mucho cuidado (...) 'A Matter of Life and Death' está inundada de ideas". 


En su país Emma Cochrane en la revista Empire señala que ""Una película de su tiempo pero con un atractivo universal (…) " y en The Guardian Brian Dillon escribió que "Su extravagancia la hace una obra maestra (...) El elemento más seductor de la relación mágica entre cielo y Tierra es el tratamiento del color. David Parkinson en Radio Times dijo de ella que "Su franqueza política, su audacia visual y sus amaneramientos la convierten en una de las películas británicas más agradables de recordar (…) ".

Finalmente, Noel Murray defendió que "'Life And Death' muestra a Powell jugando con el cine, trasteando con fotogramas e interludios vanguardistas para crear una realidad en la pantalla más vívida que la propia vida." 



En España comenta Terenci Moix en el tercer volumen de su Gran Historia del Cine esta película surgida del tándem The Archers, que una vez realizada " A Canterbury Tale" (1944) en las postrimerías de la Segunda Guerra Mundial " A vida o muerte" , surgida una vez terminada la guerra y una vez que la inevitable propaganda se convirtió en una no menos inevitable reflexión dice de esta película que" es una incursión en la temática del más allá por medio del piloto de las fuerzas aéreas que debe enfrentarse a un tribunal celestial defendido por un médico inglés, el papel asumido por Roger Livesey, ante un fiscal estadounidense interpretado por Raymond Massey como el fiscal Abraham Farlan. Pese a lo enfático del argumento, no necesariamente creíble, la realización sorprende hoy en día por su constante tendencia a la inventiva visual y a la exacerbación del tecnicolor con la fotografía de Jack Cardiff en sentido expresivo". 




En palabras de Fausto Fernández "Aunque Orson Welles detestara el cine de Michael Powell y Emeric Pressburger pocas maravillas celestiales (en años en los que el Cielo y segundas oportunidades copó Hollywood y el resto de cinematografías) como en A vida o muerte"

Lo cierto es que después de la Segunda Guerra Mundial, surgió una notable oleada de producciones cinematográficas, como esta y It's a Wonderful Life que reflejaban el sentimiento colectivo de una población que lidiaba con la profunda pérdida de sus seres queridos durante la guerra, brindando una fuente de consuelo y consuelo a muchas personas, algo que también recalca en su documental Mark Cousins. 

Película con un diseño de producción prodigioso, llevado con el buen gusto estético y narrativo de Powell y Pressburger, que nos transforma una historia irreal en una gran historia de amor. 





viernes, 23 de noviembre de 2018

55 días en Pekín con Bronston y Nick


Beijing antes de ser Beijing era Pekin, pero desde el punto de vista cinematográfico llegó a estar a 25 kilómetros de Madrid como señalaba el NODO Noticiario nº 1037 C (Noticiario cinematográfico). España: NO-DO de  19 de noviembre de 1962. Se decía en el mismo que «La capital de China a 24 Km. de Madrid. Una gran coproducción Hispanoamericana». Se trataba de 55 días en Pekín (55 Days at Peking) una película estadounidense de 1963 producida por Samuel Bronston, dirigida por Nicholas Ray que se rodó en Las Rozas de Madrid donde el productor construyó los exteriores para rodar 55 días en Pekín, siendo los mayores de la época.

Como señalábamos en una entrada anterior la trayectoria de Nicholas Ray la dejamos aparcada en 1954 con un western diferente, alternativo y muy poético, Johnny Guitar. Pero la casualidad ha hecho que pocos días después nos acerquemos al director que para Terenci Moix había que incluirlo dentro de los autores de culto como gustaba señalar a "Cahiers du cinéma" , junto a Hoard Haws, Alfred Hitchcock  o Richard Brooks a los que habría que añadir Samuel Fuller  o Nicholas Ray del que decía el escritor catalán que era "autor de vena poética, cuya actitud de férrea independencia le incribe, por otra parte, en la raza de los grandes perdedores de Hollywood".

A pesar de su formación como arquitecto, algo que dejamos entrever en la anterior entrega, Ray llegó al cine y al teatro como ayudante de dirección, que pasó incluso por la televisión. Pero desde sus inicios se perfila como sello propio la capacidad de dotar a sus personajes de una poderosa carga lírica como ya vimos en Johnnny Guitar.

Tras el Guitar llegó la inmortal Rebelde sin causa - que merece un estudio y una visión aparte de este drama en cinco actos- y algún western más entre el año 1955 y 1956 ("Busca tu refugio y La verdadera historia de Jesse James, son prueba de ellos) que rompe con el género en ese mismo año de 1956 para desarrollar otras historias como Bigger Than Life , Party Girls o Wind across the Everglades o Los dientes del diablo (realizadas entre 1958 y 1960).  En esto que llegó Samuel Bronston.


Bronston nacido en el Imperio Ruso, hoy sería Moldavo, era - eso dicen- sobrino de León Trotski que emigró a Francia y estudió en La Sorbona.Trabajó para la división francesa de Metro-Goldwyn-Mayer en París y llegó a Hollywood poco antes de iniciarse la Segunda Guerra Mundial para convertirse en ejecutivo de la productora Columbia. 

Bronston que había creado su propia compañía de producción en 1943, la Samuel Bronston Productions, y ese mismo año producía su primera película, Jack London (con Michael O'Shea y Susan Hayward), apostaría por un género, el de los filmes épicos, muchos de ellos rodados en España. Para sus rodajes españoles adquirió en 1959 los Estudios Chamartín. 

Fue Bronston el que vio en Ray un director de "culto" a diferencia de otros productores norteamericanos y quien le propuso rodar en sus estadios madrileños. En 1961 lo había llamado para rodar una de sus típicas producciones colosales: Rey de Reyes ( Kings of kings). 

Nicholas Ray tenía 48 años cuando llegó a Madrid para rodar Rey de reyes. El productor Samuel Bronston le había ofrecido la película a John Ford, que declinó el encargo. Ray quería hacer una historia sobre la pasión de Cristo, así que Bronston le llamó y le ofreció un contrato de más de tres mil dólares semanales. A finales de 1959, Ray y su segunda mujer, la bailarina Betty Utey, alquilaron una casa en La Moraleja, muy cerca de donde vivía Ava Gardner.

El Ray que llegó a la Moraleja  tenía tres adicciones: el alcohol, las anfetaminas y el juego con las tres vino cuando llegó en 1963 con el fin de rodar 55 días en Pekín. Después del rodaje, Ray se fue a vivir a Italia y juró que nunca volvería a trabajar con Bronston. 

El productor le convenció para rodar 55 días en Pekín después de que David Lean, su primera opción, rechazara la oferta. Cuando Ray volvió a Madrid, en otoño de 1961, se encontró con una producción cerrada, en la que apenas pudo intervenir, y un guion inacabado en el que metió mano todo el mundo. El rodaje comenzó en julio de 1962. 

Lo cierto es que ni una película ni otra estuvieron bajo control de Nicholas Ray sino que se convirtieron en típicos monumentos de productor. Siguiendo con el director comentaré que Ray se pasó los siguientes 16 años buscando levantar proyectos que no llegaron a cuajar a causa de la desconfianza de la industria con este director. 

Tras este penoso exilio europeo, consiguió un puesto de profesor de cine en la Harpour College de Binhamton; gracias a la colaboración de sus alumnos , pudo realizar en 1976 un interesante proyecto de cine libre, que quedaría inacabado: "You can´t go Home again . No obstante, un cáncer y , al parecer, su avanzado estado de alcoholismo, precipitaron su final, aunque dejó uno de los episodios más estremecedores de la historia del cine en Lightning over water (Relámpago sobre el agua) en su último año de vida. Era 1979. 

Pero estamos en el año 1963 y en el rodaje de 55 Days at Peking. Para entonces Nicholas Ray , cuando con el apoyo de Andrew Marton (acreditado como director de la segunda unidad ) y Guy Green (sin acreditar) bajo la supervisión de Samuel Bronston que controla todo por medio de su productora Samuel Bronston Productions y que casi desde el principio contó con el apoyo en la distribución de la Allied Artists Pictures y de The Rank Organisation (1963) para el mercado británico. La película que contaba con un presupuesto de $17,000,000 partían del guión escrito por un habitual de Ray, Philip Yordan , que contará a su vez con otros colaboradores como Bernard Gordon , Ben Barzman y Robert Hamer . Todos partían de la obra 55 Days at Peking de Noel Gerson que describía la revuelta boxer que tuvo lugar en China desde 1898 hasta 1900 con especial protagonismo al sitio al que se vieron sometidas, por los bóxers, las embajadas de las potencias extranjeras en 1900.

La partitura musical fue compuesta por uno de los grandes de la época , Dimitri Tiomkin que compuso el tema "So Little Time" con letras de Paul Francis Webster . La fotografía fue labor de Jack Hildyard rodada en Technirama y Technicolor , mientras que la labor de montaje fue de Robert Lawrence y el vestuario de Veniero Colasanti y John Moore. 

Al ser una obra de Bronston en ella intervendrían algunos de los más importantes actores y actrices del momento. De entre ellos destacan Charlton Heston como el Mayor del Ejército estadounidense Matt Lewis (basado en el personaje real de John Twiggs Myers ), junto a Ava Gardner como la baronesa Natasha Ivanoff y David Niven como Sir Arthur Robertson (basado en Sir Claude MacDonald ). 

Junto a estos pesos pesados aparecen Flora Robson como la Emperatriz viuda Tzu Hsi, John Ireland como el Sargento Harry, Leo Genn como el General Jung-Lu, Harry Andrews como el padre de Bearn. Junto a ellos aparecen Robert Helpmann como el Príncipe Tuan, Juzo Itami como el Coronel Shiba, Kurt Kasznar como el barón Sergei Ivanoff, Philippe Leroy como Julliard, Paul Lukas como el Dr. Steinfeldt, Lynne Sue Moon como Teresa, Elizabeth Sellars como Lady Sarah Robertson, la mujer del embajador, Massimo Serato como Menotti Garibaldi, Jacques Sernas como Mayor Bobrinski, Jerome Thor como el capitán Andy Marshall, Geoffrey Bayldon como Smythe, Joseph Furst como Capitán Hanselman, Walter Gotell como Capitán Hoffman, Alfred Lynch como Gerald (sin acreditar), Alfredo Mayo como el Embajador español, Martin Miller como Hugo Bergmann, José Nieto como embajador italiano, Eric Pohlmann como Baron von Meck, Aram Stephan como Gaumaire, Robert Urquhart como el capitán Hanley, Fernando Sancho como el arrebatado embajador belga (basado en Maurice Joostens ) , Michael Chow como Chiang (sin acreditar), Nicholas Ray como el embajador de los Estados Unidos (basado en Edwin H. Conger ) (sin acreditar) y Yuen Siu Tien . 

Como he señalado Nicholas Ray desempeña el papel secundario como jefe de la misión diplomática estadounidense en China . Esta película es también la primera aparición conocida de la futura estrella de cine de artes marciales Yuen Siu Tien . El director de cine japonés Juzo Itami , acreditado en la película como "Ichizo Itami" , aparece como el Coronel Goro Shiba . 

La historia nos avisa que estamos en China, en el verano de 1900, la inanición es generalizada en China, afectando a más de 100 millones de campesinos. Cerca de mil extranjeros de varios países occidentales son mal visto por una población que ve como explotan sus riquezas y que viven al margen de la sociedad china dentro del barrio diplomático en sus distintas legaciones de Pekín que vamos viendo como interpretan sus himnos y levantan sus banderas. 

Desde las mismas van buscando el control de la nación debilitada. La emperatriz es consciente de la debilidad imperial y de como un movimiento nacionalista conocidos como los "boxers" que se oponen a los occidentales y su religión cristiana y se planean expulsarlos. La agitación en China se agrava a medida que las sociedades secretas Boxer obtienen una aprobación tácita por parte de la emperatriz viuda Cixi ( Flora Robson ). 

Con 13 de las 18 provincias de China forzadas a concesiones territoriales por esos poderes coloniales , la frustración por bandera frente a la invasión extranjera se desborda cuando la Emperatriz alienta a los Boxers a atacar a todos los extranjeros en Pekín y el resto de China. 

La máximo representación del poder occidental es asumida por el embajador británico en Pekín, Sir Arthur Robertson (David Niven , basado en el personaje real, Sir Claude MacDonald ). 

Por su parte, la emperatriz viuda última representante de la dinastía manchú Tsu Hai (Flora Robson) nombra a un nacionalista, el príncipe Tuan (Robert Helpmann), ministro de Asuntos exteriores que decide apoyar la rebelión frente a la posición de su anterior ministro el General Jung-Lu (Leo Genn). 

Mientras la corte china conspira contra los occidentales, tiene lugar la llegada a la ciudad imperial de una compañía de marines de los Estados Unidos, al mando del mayor Matt Lewis (Charlton Heston), que llega a Pekín con la misión de evacuar la embajada estadounidense . Antes de entrar en el barrio diplomático ven lo mál que está la situación cuando presencia el martirio de un sacerdote por parte de los boxers. 

Uno de los hombres de Lewis dispara, el Sargento Harry (John Ireland) dispara contra un boxer, por lo que la llegada no puede ser más tensa. 

Al entrar en un hotel Lewis conoce a la ciudadana rusa, la baronesa Natasha Ivanoff (Ava Gardner) que discute con el hermano de su difunto esposo que le ruega que salga y se marche a Rusia. Se trata del barón Sergei Ivanoff (Kurt Kasznar) que está enamorado de su cuñada. Pero ella se resiste y le pide a Lewis que si no la importa compartir. Evidentemente acepta la compañía femenina. 

Después de la llegada el embajador británico, Sir Arthur Robinson (David Niven), agradece a Lewis su intervención de ayuda a su compatriota, pero le pide encarecidamente que se quede y eso hace que todos los demás embajadores se queden también, al saber que una columna de socorro de 2 000 soldados se halla en camino. 

El embajador se mueve entre el deber profesional y el personal puesto que su mujer, Lady Sarah Robertson (Elizabeth Sellars) le pide que vuelvan a Gran Bretaña, un país desconocido para sus dos hijos. De cualquier manera ella está preparando una fiesta para todas las legaciones que tendrá lugar esa noche. 

La fiesta tiene lugar. A la misma asiste una espectacular Natasha junto a Lewis . Durante la misma se persona el príncipe Tuan (Robert Helpmann) y pide la salida inmediata de todos los extranjeros, pero la respuesta cortante por parte de Lewis da lugar a un incidente diplomático que culmina con un asesinato. 

Cuando la emperatriz aprueba el asesinato del embajador alemán (20 de junio) . Lewis que ha visto que el asesinato ha sido ordenado por el ministro de AA.EE chino va junto al embajador británico a denunciarlo. 

En la entrevista con la emperatriz ella "sugiere" que los extranjeros se vayan. Los dos extranjeros salen de la Ciudad Prohibida organizándose un casi linchamiento que acaba con la intervención del ejército extranjero protegiendo a los suyos. 

Casi de inmediato se produce un violento asedio al distrito de las legaciones extranjeras de Pekín . Las embajadas extranjeras de Pekín están atrapadas por el terror, ya que los boxer se disponen a matar a los cristianos en una fiebre nacionalista antioccidental . 

Dentro de un recinto amurallado, el embajador inglés se une a los miembros de otras delegaciones en un desesperado intento por resistir el asedio. El mayor Lewis, puesto al mando de las fuerzas militares extranjeras, organiza la defensa del barrio de las legaciones extranjeras con los 500 hombres de que dispone. 

Cuando el ataque se produce, 6 000 bóxers se lanzan al asalto y sólo la disciplina, la profesionalidad y la superioridad armamentística logran rechazar el ataque, comenzando así un cruento asedio. La emperatriz viuda (Flora Robson) con el apoyo del príncipe Tuan (Robert Helpmann), ministro de Asuntos exteriores y decide apoyar la rebelión, ordena al ejército regular chino, que ataque a la columna de socorro, frenando con esto el avance del almirante británico Seymour. 

Después de escuchar que la fuerza ha sido rechazada por las fuerzas chinas, el mayor Lewis y Sir Arthur logran destruir un depósito de municiones chino. 

Mientras, los asediados rechazan un ataque tras otro, ofreciendo una dura resistencia, pero se ven obligados a replegarse cada vez más, presionados por la superioridad numérica de los asaltantes, y porque a las milicias bóxers se les ha unido ahora el ejército regular chino. 

Entretanto, el comandante Lewis inicia una relación con la baronesa rusa Natalia Ivanoff (Ava Gardner). Se deja entrever que la baronesa Natasha Ivanoff ( Ava Gardner ), una aristócrata rusa, tuvo un romance con un general chino, causando que su esposo ruso se suicidara. El ministro imperial ruso, que es el cuñado de Natasha, ha revocado su visa en un intento por recuperar un collar valioso. 

Aunque la baronesa intenta salir de Pekín cuando comienza el asedio. Repudiada por la sociedad y acosada por su cuñado el barón Sergei Ivanoff (Kurt Kasznar), que ha decidido quedarse para ayudar, impresionada por el dolor y las heridas de los soldados, al doctor Steinfeldt (Paul Lukas) como ayudante. Vemos como ella regresa con el comandante Lewis y se integra entre los voluntarios en el hospital de campaña que es golpeado por el asedio y se está quedando sin suministros. 

La situación se torna insostenible, faltan medicinas y alimentos para los heridos. Mientras los defensores extranjeros conservan alimentos y agua, mientras tratan de salvar a los niños hambrientos, la Emperatriz continúa conspirando con los Boxers mediante el suministro de ayuda de sus tropas chinas. 

La baronesa Natalia consigue una tregua y sale a buscar medicinas. Para ayudar a los defensores, la baronesa intercambia su valioso collar por suministros médicos y alimentos, pero es herida de bala en un brazo. 

El mayor Lewis que, previamente ha intentado salir a las afueras de Pekin para contactar con la columna de los países extranjeros que pretende socorrer a las legaciones diplomáticas, no lo consigue al topar en las vías con una mina y regresa también herido. Nada más llegar se entera de la situación crítica de la baronesa, pero , además, la situación se torna desesperada. La baronesa Natalia muere. 

Los defensores se preparan para ofrecer una última resistencia, pero la columna del almirante Seymour logra en el último minuto abrirse paso a través del ejército chino y el 14 de agosto alcanza el barrio de las delegaciones extranjeras, rescatándolas tras 55 días de duro asedio y obligando a la emperatriz a rendirse y plegarse a las exigencias de las potencias extranjeras. 

La Alianza de las Ocho Naciones termina por frenar la rebelión. Después de la batalla de Pekín , levantan el sitio de las legaciones extranjeras. El mayor Lewis abandona Pekín con los soldados que le quedan, y se lleva a la hija de uno de los militares americanos fallecida en los primeros días de combate . 

La película termina prefigurando la desaparición de la dinastía Qing , gobernantes de China durante los dos siglos y medio anteriores. 

Se trata de una superproducción en el mejor estilo de Hollywood inspirada por Samuel Bronston. Filmada en Las Rozas de Madrid y utilizando más de 500 extras españoles (roceños en su mayoría), y asiáticos por 150 pesetas más un bocadillo por jornada. También se rodó en Valencia, Las Matas, en los Samuel Bronston Studios en Madrid. 

Debido al fracaso comercial de la película y otras empresas de Bronston, el área ahora es un complejo residencial en Las Matas . Se requirieron 4000 extras, incluidos los chinos traídos de restaurantes y lavanderías en toda Europa ya que no había suficientes chinos disponibles en España para las escenas de masas. La red de casting en 1962 llegó hasta Londres, Lyon y Marsella, por lo que el resultado fue que muchos restaurantes chinos en esas ciudades cerraron durante el verano de 1962 durante la filmación porque el personal del restaurante, que a menudo incluía a los dueños del restaurante, fue contratado por la película. La producción creció tan limitada por los extras y el equipo que tomaron prestados de Lawrence de Arabia (1962), que se filmó simultáneamente en Almería y Sevilla. 

Para este momento, Nicholas Ray era un individuo torturado. Con un salario muy alto por parte del productor Samuel Bronston Ray tenía la sospecha de que asumir el proyecto, un filme épico, significaría su final como director y que nunca volvería a dirigir otra película. 

La producción fue problemática casi desde el principio. Tuvo problemas financieros, hubo conflictos entre el reparto, y el director Nicholas Ray discutió tan violentamente con el productor Samuel Bronston que eventualmente abandonó el escenario y abandonó el proyecto. La premonición de Ray resultó ser correcta cuando colapsó en el set por el abuso de alcohol y estupefacientes a mitad de una sesión agotado por la dureza del rodaje y las tensiones con Bronston y el equipo, Ray se vino abajo a principios de septiembre, víctima de una crisis coronaria, y fue ingresado en el Hospital Angloamericano, que atendía a los militares de Torrejón. 

El intimismo de Ray chocaba con un enfoque de acción por parte de Bronston. Todo ello generó que quien acabara la película fuese Andrew Marton, un director de segundas unidades, al no poder reanudar el trabajo (la película fue terminada por Andrew Marton y Guy Green), nunca recibió otra asignación de dirección. 

Charlton Heston no le consideraba el director adecuado. En su diario recuerda una frase tremenda de su amigo Bill Blowitz: "Tiene talento, Chuck, pero he jugado al póker con él durante años y es un perdedor".Heston llamó a Guy Green (y Bronston a Andrew Marton) para acabar la película. 

Cuando Ray comprendió que no iba a volver al plató, decidió dar un giro a su vida y compró un local que estaba en María de Molina esquina Cartagena, junto a las Torres Blancas. Allí montó un club que bautizó como Nickas, un local de jazz y rock aunque también podía leerse como Nick Ass en un rasgo de humor autopunitivo. 

Ray abandonó Madrid y se fue a vivir a la isla de Sylt, al norte de Alemania. En los últimos meses de su vida, colaboró ​​con Wim Wenders , en la citada película de 1979 Lightning Over Water, también conocida como Nick's Film / Nick's Movie , que registró sus últimos momentos. 

Según cuenta Charlton Heston en sus memorias (In the Arena), tal derrumbamiento vino precipitado por una agitada velada en el chalé que ocupaba Nicholas Ray en Las Matas. En la misma, Ava Gardner reprochó duramente al director su actitud profesional. Charlton Heston, tras la marcha de Guy Green por requerimientos de contrato, se encargó de dirigir las escenas que faltaban, según confirma Heston en su autobiografía. Charlton Heston declaró más tarde que la relación de trabajo entre él y Ava Gardner fue muy mala: afirmó que era muy difícil trabajar con Gardner y se comportó de manera poco profesional durante el rodaje. 

En contraste, Heston dijo que disfrutaba mucho trabajar con David Niven . Heston volvería a trabajar con Gardner, en la película Terremoto , una película de la Universal del año 1974 .Según Charlton Heston, el personaje de Ava Gardner fue asesinado para que los productores y el director no tuvieran que aguantarla más. 

Charlton Heston recordó más tarde que durante la filmación su chófer no estaba siendo pagado por la compañía de producción. Heston se enfrentó dos veces a uno de los productores acerca de esto y dos veces recibió una demostración muy elaborada y extravagante de indignación por parte del productor que gritaba por teléfono a otra persona, pero el chófer todavía no había pagado por su trabajo. Esto molestó tanto a Heston que él mismo pagó personalmente al chófer, y cuando se enfrentó al productor por ello, el productor entregó el dinero suficiente para reembolsar a Heston. 

55 Days at Peking se filmó en Technicolor y Technirama, que involucró el uso horizontal de una película de 35 milímetros, lo que resultó en un formato de película impresa de 70 milímetros.     

Varios trajes para la Corte Real China (la Emperatriz, el Príncipe Tuan, etc.) eran auténticos de la corte real de Tzu Hsi. Fueron prestados por una ilustre familia florentina (que deseaba permanecer en el anonimato) pero pudieron rescatarlos del colapso de la dinastía justo después de la rebelión de los boxers. 

Dong Kingman quien pintó las acuarelas para los títulos y también hizo una aparición sin acreditar en la película. 

Los actores españoles Alfredo Mayo, Conchita Montes, José Nieto y Fernando Sancho, aparecen en papeles secundarios. El solista Agustín Cánovas (armónica), español, participó en la banda sonora de la película. 

El personaje de Charlton Heston, el comandante Matt Lewis, se basó libremente en el oficial de la vida real a cargo de la guardia marina en la Legación de los Estados Unidos, luego el capitán, más tarde el teniente general, John Twiggs Myers, (1871-1952). Myers estaba en la vanguardia de algunos de los combates más duros en las legaciones asediadas, heridos durante los combates en el Tartar Wall. Myers también más tarde comandó las fuerzas del Cuerpo de Marines en Tánger durante el Incidente de Pedicaris, y como tal fue retratado como el Capitán Jerome por Steve Kanaly en la película "El viento y el león".

Todavía es posible caminar por el área de Beijing, que era la ubicación real del Sitio de las Legaciones de Pekín en 1900, y reconocer los sitios y la distribución de las calles representados con admirable precisión por los conjuntos construidos en España para los '55 Días en Pekín ' . El antiguo barrio de legación se encuentra al este de la Plaza de Tiananmen, limita al norte con Changan Avenue y al sur con Qianmen Street. Uno de estos sitios importantes es la puerta de la antigua legación británica en Zhengyi Road, con un aspecto notable como lo hizo en las fotos tomadas en 1900. Gran parte del área ha sido ocupada durante muchos años por agencias del gobierno chino. La mayoría de los edificios patrimoniales restantes del antiguo barrio de la legación son reconstrucciones después del levantamiento de los boxers. El potencial turístico de la zona ha sido poco explotado. La oficina de correos de la antigua legación francesa es el vestíbulo del hotel Dongjiaominxiang. El sitio de la antigua Legación de los Estados Unidos ha sido renovado para restaurantes de categoría, bares y lugares para eventos. 

El coronel japonés Shiba, interpretado por Jûzô Itami, es el único personaje principal entre los representados en las legaciones asediadas que tiene el nombre real de un participante clave en los eventos históricos reales. Shiba Goro (1860-1945), entonces con el rango de coronel, fue agregado militar en la Legación japonesa. La vida real, el Coronel Shiba, emerge como un verdadero héroe y el líder militar más admirado dentro de las legaciones de los diarios y memorias contemporáneos, incluidos autores ingleses y estadounidenses. 

En sus diarios, Charlton Heston comenta que el conjunto era tan grande, que recomendó al productor Samuel Bronston que debería dejar que Orson Welles lo usara para filmar un thriller de espías simultáneamente. 

Aparentemente hubo partes del set que nunca fueron usadas durante el rodaje. Samuel Bronston construyó un set que representaba el Pekín de principios de siglo en Madrid a un costo de 900,000 dólares. 

Al parecer, el productor Samuel Bronston había comenzado a construir sets para su Caída del Imperio Romano en 1961, y su estrella propuesta, Charlton Heston, visitó la construcción. A su llegada, Heston dijo que estaría más emocionado en una épica de la Revolución Boxer, por lo que los sets romanos fueron demolidos y se comenzó a trabajar en la construcción de un nuevo backlot de Pekín en las afueras de Madrid. 

Sobre lo que ahora son terrenos ocupados por un polígono industrial y una urbanización, se erigía la Ciudad Prohibida de Pekín, por ejemplo. Enormes decorados de escayola y cartón piedra, que reproducían los edificios y calles de la capital china, cubrían el paisaje de la sierra madrileña en 1963.  
La película tuvo su extremo el 29 de mayo de 1963 y fue la vigésima película más taquillera de 1963 . Consiguió en taquilla unos $ 10,000,000 

Obtuvo dos nominaciones al Oscar, a la Mejor banda sonora, canción y fue galardonada con el premio Laurel de Oro 1964 a la mejor canción (Dimitri Tiomkin compositor entre otras de"Solo ante el peligro" y Paul Francis Webster); y al mejor drama de acción. 

En cuanto a las críticas Fernando Morales en El País dice de ella que se trata de una "Magnífica aventura dirigida por un Ray que día a día iba cambiando el guión, lo que, paradójicamente, no alteró el resultado final de la historia. Un clásico del cine de aventuras". 

En ese mismo diario, Miguel Ángel Palomo escribía que "Otra de las maravillosas superproducciones de Bronston (...) toda una delicia de reparto"-

En ABC se destaca que es una "Adaptación de la novela homónima de S. Edwards que supuso la última película del director Nicholas Ray dentro del seno de la industria estadounidense. Aún así, ni siquiera llegó a terminarla, ya que fue sustituido durante el rodaje por Andrew Marton ("El ataque duró siete días") a causa de sus desavenencias y problemas personales con el productor, Samuel Bronston ("Rey de reyes", "La caída del imperio romano"). 

Recuerdo haber visto la película hace muchísimos años la recordaba como una película que combinaba la acción a raudales , con la espectacularidad y un buena historia. Ahora que la he visto por segunda vez me ha transmitido menos, pero reconozco el auténtico carácter narrativo y el sentido épico de la historia. Veo en ella con más peso a Bronston que a Nicholas Ray.  De este veo la primera hora de la película siendo más espectacular tras iniciarse la revolución. 

En cuanto a los acontecimientos históricos que se reflejan en la película son los propios de lo que se describe como imperialismo , el colonialismo y el nacionalismo de fines del siglo XIX, y refleja las actitudes de los años sesenta ante estas cuestiones, en lugar de las del período de la Rebelión Boxer. Se abordan los conflictos entre el nacionalismo chino , japonés y europeo describiendo actitudes propias de la época sobre las relaciones raciales. 

La mayoría de los papeles chinos protagonistas, incluyendo la Emperatriz viuda y su Primer Ministro, son interpretados por los artistas blancos. Los personajes japoneses en la legación extranjera, sin embargo, son interpretados por actores asiáticos, aunque sus papeles son menores.

El resentimiento de la Corte Imperial de China por tener que aceptar la presencia de poderes extranjeros en China se refleja en el personaje del Príncipe Tuan (interpretado por el bailarín de ballet australiano Robert Helpmann ), quien asesora a la Emperatriz Viuda (la actriz británica Flora Robson ) para apoyar a los "patriotas" rebeldes de los boxers que buscan acabar con los extranjeros. En oposición a esta postura agresiva está el general Ronglu (actor británico Leo Genn ). 

La película comienza con exhibiciones de nacionalismo en el barrio de la Legación Extranjera, con cada nación levantando su propia bandera, mientras toca su himno nacional. La cámara se acerca a dos viejos hombres de Pekín que comen en una calle concurrida de chinos y en ella escuchamos una conversación en la que uno de los intervinientes con respecto a la música señala que "Diferentes naciones que dicen lo mismo al mismo tiempo, '¡Queremos a China!'" 

Cuando el asedio ha terminado en derrota para los boxeadores, la Emperatriz se ve en el trono del Dragón, en apuros y sin sus ropas de estado: "La dinastía ha terminado", se repite varias veces.

Javier Sanz en Historias de la Historia nos relata que "En junio de 1900, después de varios meses de creciente violencia contra la presencia extranjera y el asesinato de varios misioneros, los boxers (“boxeadores”, llamados así por los ingleses en referencia al ritual de artes marciales que practicaban) convencidos de que eran invulnerables a las armas extranjeras, se congregaron en Pekín al grito de “exterminar a los extranjeros“. 

Obligaron a los extranjeros y a los cristianos chinos a buscar refugio tras las murallas del Barrio de las Delegaciones donde estaban situadas las embajadas extranjeras. La emperatriz Ts’eu-Hi parecía dubitativa, pero al final decidió usar a los bóxers como instrumento para destruir toda influencia extranjera en China y asegurar su propio poder político frente a los funcionarios con ideas reformadoras. Tras el asesinato del embajador alemán, los boxers cercaron el barrio. 

Unos 500 soldados con armas ligeras y un viejo cañón al que se apodó como el “Cañón Internacional” debido a que su caña era británica, la cureña italiana, los proyectiles rusos y los artilleros a cargo de su manejo estadounidenses. 

Aguantaron 55 días hasta que fueron liberados por las tropas de la Alianza de las ocho naciones suscrita por Alemania, Austria-Hungría, Estados Unidos, Francia, Reino de Italia, Japón, Reino Unido y el Imperio ruso. Este sería a grandes rasgos el hecho histórico que recrea la película con algunas licencias artísticas como la de que circulase por allí una baronesa rusa (interpretada por una espectacular Ava Gardner) o el protagonismo de un Mayor del Ejército de los EEUU (Charlton Heston) en la defensa de las murallas. 

Sí tuvo protagonismo, en la película y en la realidad, el ministro británico para China, Claude Maxwell MacDonald (David Niven). Durante la escena de apertura, donde se muestran las Legaciones y sus banderas, la cámara permanece en la bandera española durante unos segundos. Dado que la legación o los diplomáticos españoles no se mencionan en la película, algunos han comentado que la bandera solo se muestra, ya que la película se filmó en España durante el régimen de Franco. 

Si bien esta explicación probablemente tiene algo de verdad, de hecho hubo una legación española y personal diplomático en Pekín durante el sitio. Sin embargo, al igual que las legaciones holandesas y belgas, no tenían infantes de marina y jugaban un papel menor en el asedio. Esta es la razón por la que se hace referencia a "once potencias extranjeras", pero solo se nombran ocho naciones. 

Para entonces el embajador español en Pekin era Bernardo J. Cólogan y Cólogan (interpretado aquí por Alfredo Mayo) que apenas tiene algún plano más y una frase en la película. Es más, parece ser que esta referencia a Bernardo Cólogan y el plano de la compañía de infantes españoles que se ven al final de la película cuando llegan las tropas de la Alianza (este último detalle es otra licencia artística porque España no formaba parte de la Alianza), son un pequeño agradecimiento del productor Samuel Bronston por haberse rodado en España (Las Rozas – Madrid) y por los cientos de extras que participaron en ella. 

Aunque España, tras el desastre del 98, no estaba en condiciones de mandar tropas al exterior ni para florituras, la labor de Bernardo Cólogan se ha ninguneado por la película y, lo que es peor, por la historia (algo muy propio de este país). Habría que recordar que el embajador español era el decano del cuerpo diplomático acreditado en Pekín. 

Gracias a sus buenas relaciones con la emperatriz Ts’eu-Hi tenía acceso a la Ciudad Prohibida imperial; acceso negado a los embajadores de naciones tan poderosas como Francia, Reino Unido o Estados Unidos. Y tal fue su influencia, que el diplomático español fue el personaje clave en la redacción del Tratado de Xinchou (1901) (también denominado Protocolo Bóxer) y el primero en firmarlo. En dicho tratado, firmado en la embajada española por la emperatriz y los representantes de las potencias extranjeras, China reconocía su culpa en la rebelión y sus consecuencias, admitiendo pagar compensaciones a la vez que establecer nuevos acuerdos con las potencias internacionales. Una muestra de las buenas relaciones de Bernardo Cólogan con la emperatriz son los leones que se encuentran en la entrada de la actual embajada de España en Pekín, un regalo al diplomático español tras la firma del Protocolo Bóxer. 

También decir que , en China, mientras trabajaba como ingeniero de minas profesional, el futuro presidente de los Estados Unidos, Herbert Hoover y su esposa eran civiles bajo asedio en el recinto de las legaciones extranjeras. La futura primera dama, Louise "Lou" Henry Hoover, recogió metralla de la artillería Boxer que se exhibe en la Biblioteca Presidencial en West Branch, Iowa. Los Hoovers aprendieron el chino mandarín mientras estaban en China y lo usaron en la Casa Blanca cuando no querían ser entendidos. 

A tres millas de distancia del asedio simultáneo al barrio diplomático , los Boxers y soldados chinos hicieron otro en la Catedral Norte de Pekín. Defendido por solo 25 marines franceses y 15 marines italianos, el obispo católico Pierre-Marie-Alphonse Favier (1837-1905) resistió 56 días contra el francotirador, el bombardeo y la minería, perdiendo 10 de sus marines muertos y 500 de su congregación china. Hay suficiente material en el sitio de la catedral para una película por derecho propio. 

Eso en cuanto a la Historia, en cuanto a Bronston decir que contribuyó decisivamente al lanzamiento de España como localización de filmaciones de Hollywood, en competencia con Italia, basándose en los bajos costes de producción por la relación entre la peseta y el dólar americano, la buena cualificación de los técnicos españoles, y sobre todo el buen clima y la variedad paisajística del país, ideales para el rodaje en exteriores sin grandes desplazamientos. 

Sin embargo, al año siguiente, en 1964 se truncó una carrera, que había parecido imparable y que se había iniciado con su primera película en España, John Paul Jones o El capitán Jones, dirigida por John Farrow , en 1957. 

Se estima que Bronston gastó al menos un promedio de 10 millones de dólares procedentes de Dupont en cada una de sus películas. Pero antes de que se consumara la ruptura con el magnate, Sam había comprado los estudios Chamartín, a través de la sociedad Bronston España, SA, con capital de su socio latinoamericano, Jaime Prades. 

La compra costó alrededor de 80 millones, según cree recordar el abogado José Mario Armero, incluyendo en la operación la construcción del plató grande, necesario para montar La caída del imperio romano.

Una borrascosa reunión de abogados de Dupont y Bronston en Nueva York decidió el futuro del productor en 1964: los negativos y la propiedad de las películas pasaron íntegramente a Dupont. Bronston buscaba combinar el éxito comercial y el superar el colosalismo de Cecil B. De Mille. 

El coste de construcción de sus estudios y el fracaso comercial de La caída del Imperio romano sumieron a Samuel Bronston en tales problemas económicos que tuvo que declararse en bancarrota en Estados Unidos. En aquellos momentos la empresa Samuel Bronston Productions debía unos 5,6 millones de dólares (cifra enorme) a Pierre S. du Pont, Pierre Dupont III, de la Dupont de Nemours.; y por si fuera poco, el productor tenía una segunda empresa, Bronston Distributors, Inc. que debía a la Paramount otros 6,75 millones. 

En 1966, Bronston respondió escuetamente a los requerimientos judiciales sobre sus cuentas bancarias en Suiza; lo que no evitó que después se le descubriese una cuenta personal en Ginebra. Bronston fue acusado de perjurio y el proceso judicial se prolongó hasta 1973, cuando se falló a favor de él. 

En 1984 se publicaba en Madrid , en concreto, en El País que "Los estudios Bronston, un complejo de chales y platós que ocupan los antiguos pabellones de Instalaciones Cinematográficas Chamartín, van a ser recuperados para el cine español tras 12 años de clausura y deterioro". El Banco Exterior cuyo Presidente era Francisco Fernández-Ordóñez, fue la entidad que embargó los estudios al mítico Samuel Bronston tras la quiebra de sus actividades en España, y la responsable de la custodia de los platós y chalés que formaban del complejo cinematográfico. Sobre los mismos se rodó La noche más hermosa de Gutiérrez Aragón o la serie de Santa Teresa. 

Los estudios subsistieron hasta 1971, hipotecando los edificios de los estudios al Banco Exterior y alquilando los servicios a TVE usados para la serie de la santa abulense. 

Una situación incómoda para la dirección del Banco, que, según explita Teddy Villalba, presionó directamente al ministro Sánchez Bella para que TVE dejara de rodar en ellos. La improductividad de los estudios precipitó el embargo y la subasta pública de los bienes de los que "Se llevaron hasta la central eléctrica". 

Los estudios Bronston, antes Chamartín y ahora Luis Buñuel, situados cerca de Alcobendas (Madrid) fueron subastados. 

Bronston el hombre que quiso hacer su propio Hollywood, repartido entre Chamartín (interiores) y Las Matas (exteriores), un imperio cinematográfico que con el tiempo deslumbrara y enterrara al de Los Ángeles falleció 20 años más tarde en 1994 en la californiana Sacramento a los 85 años de edad a causa de una neumonía, tras sufrir durante veinte años la enfermedad de Alzheimer. Fue enterrado en el municipio madrileño de Las Rozas de Madrid, en los que en su momento fue Pekin, hoy Beijing.