Con el subtítulo de bosques sombríos y días de embrujo, la directora y guionista canadiense Kier La Janisse nos presenta un documental que nos lleva por Gran Bretaña Estados Unidos y finalmente el resto del mundo para descubrir este subgénero del terror popular donde el terror se asocia al mundo rural a la tradición a la edad media la violencia, al disfrute.
El viaje alrededor de Horror Folk comienza con su contextualización. La Gran Bretaña en crisis que elevó a Margareth Thacher. La crisis social y moral del thacherismo quedará reflejaba en estas películas e incluso en series como The Doctor Who ya que presentan un viaje entre lo viejo y lo nuevo, un pasado que irremediablemente se ha perdido y el futuro incierto. Un mundo rural que no quiere perder sus raíces, incluso las que le vincula al mundo pagano, ajeno a la moral cristiana. Por eso en el Folk Horror aparecen brujas o sacerdotes que son jefes de una comunidad con una concepción del mundo natural, mágico, ateológico.
Vemos fragmentos de películas clásicas como el hombre de mimbre pero también paseamos por la obra llevada al cine de Stephen King así como las aportaciones que nos llegan desde Australia, Brasil e Israel pasando por la Unión soviética y otros países como los del sudeste asiático no han sido ajenos a este género.
Y es que este subgénero de películas de terror fue muy popular gusta de utilizar elementos del folclore para invocar miedo y aprensión. Los elementos típicos incluyen un entorno rural, aislamiento y temas de superstición, religión popular, paganismo, sacrificio y los aspectos oscuros de la naturaleza. Este tipo de subgénero de terror popular generalmente se enfoca en las creencias y acciones de las personas en lugar de lo sobrenatural, y a menudo se trata de ingenuos forasteros que se enfrentan a estos. Las películas británicas Blood on Satan's Claw (1971), The Wicker Man (1973) y Witchfinder General (1968) se consideran pioneras del género, mientras que Midsommar del año 2019 reavivó el interés en el terror popular.
El término horror popular fue utilizado en 1970 en la revista de cine Kine Weekly por el crítico Rod Cooper describiendo el rodaje de The Devil's Touch; una película que más tarde pasaría a llamarse The Blood on Satan's Claw. El director de The Blood on Satan's Claw, Piers Haggard, adoptó la frase para describir su película en una entrevista retrospectiva de 2004 para la revista Fangoria. En la entrevista, Haggard señala cómo su película contrasta con las películas de terror góticas populares en la década anterior:"Crecí en una granja y es natural para mí usar el campo como símbolo o como imagen. Como esta era una historia sobre personas sujetas a supersticiones sobre vivir en el bosque, la poesía oscura de eso me atrajo. Estaba tratando de hacer una película de terror popular, supongo. No uno cursi. Realmente no me gustaba el estilo cursi de Hammer, realmente no era para mí".
El término fue popularizado más tarde por el escritor y actor Mark Gatiss en su serie documental de la BBC de 2010 A History of Horror (Episodio 2, "Home Counties Horror") en la que citó tres películas británicas: The Blood on Satan's Claw (Piers Haggard, 1971), Witchfinder General (Michael Reeves, 1968) y The Wicker Man (Robin Hardy, 1973), como obras que definen el género tal y como destacó Adam Scovell del British Film Institute.
Las tres tienen poco en común excepto su tono nihilista y su entorno rural, y destaca su "énfasis en el paisaje que posteriormente aísla a sus comunidades e individuos".
Matthew Sweet, en su documental Archive on 4 Black Aquarius, considera que el movimiento de contracultura de fines de la década de 1960 condujo a lo que él llama una "segunda gran ola de ocultismo pop" que invadió la cultura popular, con muchas obras de cine y televisión que contenían elementos de folklore , ocultismo y rituales. Buen documental , inicialmente dividido en dos entregas, que para verlo de corrido me ha parecido muy largo. Es del año 2021.
No hay comentarios:
Publicar un comentario